—¿Tienes novia? o, um, ¿novio? —Wow. Y te preguntas por qué no tienes novio. Off emitió un sonido de asfixia antes de empezar a toser

violentamente en su mano, con la cara enrojecida.

—Diablos. —Gun miró alrededor de la habitación, agarró la botella de

agua de la mesita de noche, torció la tapa y se la dio a Off, con los ojos fijos en la garganta de Off mientras se tragaba el líquido. Limpiándose la boca, Off devolvió la botella a Gun, quien la tapó y la devolvió a la mesita de noche.

—Lo siento. —Porque las preguntas incómodas no eran suficientes, ahora estaba tratando de matarlo.

—No, está bien, —jadeó Off. Se quedó sin aliento—. No hay nadie.

—Bueno, eso no ayudó—. Pero si tuviera a alguien, —dijo Off, recogiendo los pedazos de la caja de su tableta, con el ceño fruncido— sería un hombre. ¿Va a ser un problema?

Gun le parpadeó.

—¿Por qué sería un problema? Soy gay.

—¿Qué? Espera un segundo. —Off se volvió hacia él.

—Recuerdo que hablé con tu padre y él me dijo que tenías una novia.

Las cejas de Gun se levantaron cerca de la línea del pelo. Bueno, eso

era nuevo para él.

—¿Cuándo fue eso?

—Um, 2002, creo.

¿Off recordó una conversación que tuvo en 2002? Gun no podía

recordar lo que desayunaba. Oh, espera. Ahora se acordaba.

—Amigo, era un niñito. Sarah me invitó a su fiesta de

cumpleaños y declaró que yo era su novio. La primera película de spider-Man se estrenó en los cines el mismo día de la fiesta, así que a menos que ella fuera un tipo vestido con lycra azul y roja, no me interesaba. Estoy bastante seguro de que lo pensó cuando me pidió que la besara y le presenté a mi mascota tarántula, Spidey. No se llevaban bien.

Off lo miró fijamente antes de soltar una carcajada que hacía que Gun

sonriera como un tonto. El tipo tenía una gran risa, y una sonrisa aún mejor. Gun no pudo evitar estar atraído. Todos los pensamientos ridículos que intentaban formarse en su molesto cerebro tenían que parar. Dios, Off era tan, tan guapo. Un suspiro se le escapó antes de que pudiera detenerlo, y Gun se congeló mientras la risa de Off se desvanecía, esos intensos ojos azules se concentraban en él. Afortunadamente, Off no se dirigió a Gun comportándose como un colegial con un primer enamoramiento. Off ni siquiera insinuó que sabía lo que Gun estaba pensando. En vez de eso, se ocupó de volver a armar la caja de la lápida.

—¿Quieres hablar conmigo sobre lo que pasó allá afuera?

Maldición. Por un momento, Gun había estado tan perdido en Off,

que se había olvidado por completo de dónde estaba y qué iba a hacer aquí, lo que a su vez le hizo pensar en lo que pasaría si no terminaba este proyecto y lo que pasaría después. ¿Qué le pasaría cuando todo esto terminara y Off se fuera a casa? ¿De verdad iban a dejar que Gun se fuera? Prometieron que lo harían, pero eso fue como dejar una gacela bebé con un león que acababa de comer. Claro, el león podría ignorarlo mientras tenía la barriga llena, pero en el momento en que volviera a tener hambre, ¡pum! Se acabó la gacela

bebé. Bien, necesitaba dejar de ser tan morboso—. ¿Gun? ¿Qué pasa? —Gun se puso de pie de un salto y comenzó a caminar, sus dedos golpeando, golpeando, golpeando, golpeando su pierna.

—Todo está mal. Todo este lugar está mal. Ni siquiera puedo oírme pensar. El ruido constante, la gente, la charla, los gritos. Sé que me compraste unos auriculares y te lo agradezco, pero eso no cambia el hecho de que estén ahí. Sé que están ahí, mirándome, hablando de mí, todos tan enojados y frustrados. No es que lo esté haciendo a propósito. Quiero trabajar en ello. Me aterroriza, pero sé que tengo que hacerlo o ni siquiera quiero pensar en lo que pasará si no lo hago, pero no puedo chasquear los dedos y hacer que suceda. No funciona de esa manera. Yo les dije eso. Les dije que sería difícil para mí si no estuviera en mi propio entorno. Sé que ese tipo de cosas no le importan a la mayoría de la gente, pero la mayoría de la gente no está en el lodo como yo. Sólo la están rodeando, observándola. Yo soy el que tiene que estar ahí, en la oscuridad, con los monstruos. —Estaba divagando como un lunático, pero no podía parar—. Nunca quise esto. Se suponía que esto no iba a pasar, pero ahora no tengo elección, y si no lo hago, quién sabe lo que le harán a mi padre. Quiero decir que ya lo están forzando a retirarse por mi culpa.

Off estaba de pie, con las manos sobre los hombros de Gun,

deteniendo su paso.

—Espera. ¿Están forzando a tu padre a retirarse?

—Sí, su castigo por mantenerme "escondido", como si fuera de ellos

o algo así. Mi padre nunca iba a hablarles de mí. Me había estado preparando para esto desde que era niño, siempre diciéndome que tuviera cuidado, que no dejara rastros en Internet, y yo tuve cuidado, pero pusieron una trampa y caí en ella.

—¿Cómo?

—Soy un ingeniero de software independiente. Me da la libertad de

trabajar desde casa y no tener que.... gente. Cada vez que conseguía un trabajo para diseñar algo para alguien, tenía mucho cuidado. Sólo hice lo que me pidieron que hiciera, nada exagerado o loco que llamara la atención. Fue difícil. Tan duro. Algunos de estos programas necesitaban tantas mejoras que tuve que recrear todo en mi ordenador de la manera correcta para poder sacarlo de mi sistema. Odiaba no poder darles algo mucho mejor de lo que me pidieron, pero sabía que no podía hacer nada más que algunas actualizaciones menores, nada que ningún otro ingeniero de software decente no pudiera hacer.

Diseñar videojuegos es mi hobby. Son videojuegos, ¿verdad? Pensé

que era seguro. Formé parte de un foro de diseño de juegos, donde los miembros se ayudaron entre sí durante las distintas etapas de diseño y programación. No era como si alguien fuera a preguntar cómo entrar en el Pentágono o algo así. Escondí mi identidad. Fui cuidadoso, o eso creí. Había un tipo en el foro con el que hablaba todo el tiempo. Lo conocía desde que se lanzó el foro cuando estaba en el MIT (instituto de tecnología de Massachusetts). Un día me envió un mensaje en privado, rogándome ayuda, entrando en pánico porque su hermana estaba en peligro. Ni siquiera sabía que tenía una hermana. Nunca habló de ella, pero luego nadie hablaba de sus vidas reales en el foro. De todos modos, dijo que un tipo estaba acosando a su hermana, pero que la policía no se tomaba en serio sus afirmaciones. Ella estaba empezando a asustarse, temiendo por su vida, pero nadie podía hacer nada porque este tipo era un pez gordo en su compañía y no había evidencia porque alguien seguía borrando los mensajes que le estaba enviando desde los servidores de la compañía. Me preguntó si conocía a alguien que pudiera entrar en los servidores y encontrar los mensajes que este tipo estaba enviando. Sonaba bastante sencillo. Entra, sale. —Gun empezó a caminar de nuevo.

—Sabía que no debería haberlo hecho, pero estaba tan asustado por

su hermana. Pensé en mi hermana, ¿y si estuviera en la misma situación? Le dije que lo intentaría—. Gun se frotó los ojos. —Fui tan estúpido. Tan descuidado. Debería haberlo sabido cuando choqué con el primer cortafuegos. La seguridad de la compañía no era como la de una compañía promedio, y esa debería haber sido mi primera señal de alarma, pero me dije a mí mismo que probablemente era una institución financiera o algo similar.

Seguí escarbando más y más profundo. Algo estaba muy mal, y luego

encontré información que no debería haber estado allí. Codificación

avanzada y referenciación de información de las operaciones

gubernamentales. Cuando me di cuenta de lo que había encontrado, supe que era demasiado tarde.

—El tipo con el que habías estado hablando no había sido tu amigo.

Gun agitó la cabeza. —Cerré mi portátil y estaba a punto de dejar el

Starbucks en el que estaba, cuando un montón de trajes entraron y me pidieron que viniera con ellos. —Gun parpadeó la humedad de sus ojos— Nunca había estado tan asustado en toda mi vida. Quiero decir, paso la mayor parte de mis días detrás de una pantalla de ordenador, tratando de no llamar la atención sobre mí mismo. Mezclarme con una multitud nunca ha sido un problema para mí. Nadie me da una segunda mirada, ¿pero en línea? He estado cubriendo mis huellas durante años, sabiendo que si no tenía cuidado... En ese momento, supe que la había cagado. Habían estado tirando la red durante años, esperando para pescar su ballena blanca, y finalmente lo hicieron. Trataron de hacer que sonara como si yo debiera estar orgulloso. Nadie más había llegado al centro de su laberinto, excepto yo. Estaría haciendo que mi padre se sintiera orgulloso, protegiendo a mi país, usando mis dones para el bien común, luchando contra los terroristas,

atrapando a los malos antes de que lastimen a gente inocente. Uno de ellos me miró a los ojos y me dijo que podía ser un verdadero superhéroe. Idiota condescendiente.

Maldiciendo en voz baja, Off envolvió su brazo alrededor de los

hombros de Gun, acercándolo. Gun cerró los ojos cuando se dio cuenta de que no había retrocedido ante el toque de Off, ni una sola vez. Había algo en Off que hacía que Gun se sintiera cómodo en su propia piel. No tenía que fingir ser algo que no era alrededor de Off, no tenía que poner un frente valiente. Gun quería girarse y enterrar su cara contra el pecho del hombre, inhalar más de su olor, el suavizante de telas y cualquier gel de ducha de madera que Off usara. Su cuerpo estaba caliente, y Gun quería más. Como si sintiera sus pensamientos, Off se alejó. Gun no podía culparlo. ¿Quién

quería enfrentarse a un naufragio como él? El alto mantenimiento no

empezó a cubrirlo. Hábitos alimenticios extraños, rarezas de salud, rareza general, necesidad, ansiedad social y necesidad constante de vigilancia... Sí, era un buen partido.

—No quiero terminar como Codey Cat.

—¿Quién?

—Este codificador que conocí en la red oscura hace unos años. Fueron apodados Codey Cat porque quienquiera que fuera siempre se resbalaba en una pequeña cara de gato codificado. De todos modos, eran buenos. Como mis niveles de bien. Solíamos chatear y tratar de codificarnos mejor el uno al otro. Entonces un día, desaparecieron. El rumor era que de alguna manera habían sido capturados por los espías. Pasaba todo el tiempo. No quiero terminar como Codey Cat.

—Gun.

Demasiado temeroso de lo que Off iba a decir, tal vez Off estaba teniendo dudas sobre estar aquí, o que Gun tenía que aguantarse y seguir adelante, Gun le pegó una sonrisa en la cara y rápidamente habló.

—¿Sabes qué? No hay problema. Estoy bien. Estoy bien. Los nervios de la madrugada, ¿sabes? Gracias por escucharme. Estoy listo para irme.

—Gun, tú no... —La preocupación genuina en la hermosa cara de Off era demasiado, y Gun se giró sobre sus talones y se fue de la habitación antes de que Off pudiera detenerlo.

—De verdad. Ahora estoy mejor. Vamos a trabajar, ¿eh? —Haría este maldito proyecto a si lo matara. No fue justo para Off. No pidió que lo metieran en el lío que era la vida de Gun. Tan pronto como terminara, desaparecería por un tiempo en caso de que Norrapat y sus superiores tuvieran alguna idea de mantenerlo. Off volvería a su vida, y Gun olvidaría esos ojos azules. No importaba que Off lo mirara como nadie en su vida lo había hecho. Apegarse no era una opción. No a menos que quisiera que le rompieran el corazón. No. A partir de este momento, se concentraría en el trabajo y nada más.

—Gun, espera un segundo —Gun se dio la vuelta, su corazón casi se le sale del pecho para lanzarse a Off cuando éste le regaló una bolsa de galletas de pez dorado, con una cálida sonrisa en la cara—. En caso de que necesites un bocadillo.

Estaba tan condenado.

🔥 𝕭𝖑-𝖋𝖎𝖈𝖘