DE ROSAS Y LÁGRIMAS

❝Eras mi corona, ahora estoy en exilio. Creo que he visto esta película antes, así que me voy por la puerta lateral❞

TW: abuso, suicidio, depresión, bullying, ansiedad.

Ella cierra los ojos mientras siente el aire golpear su rostro y mover su cabello, nunca supe que el aire aquí arriba era tan puro, pensaba y pensaba mientras miraba a la chica, que era relativamente joven, moverse sobre su lugar mientras esperaba que la gravedad hiciera su trabajo de echarla al vacío, pero cuando iba a saltar del edificio algo se lo impidió y fue la rosa que sujetaba en su mano, se le quedó mirando un rato largo antes de apartarse de la orilla para comenzar a llorar sobre la flor. Tal vez las personas deberían de ser menos crueles, mostrarse como son en realidad, porque yo no entiendo como un ser humano puede hacerle tanto daño a otro, ya sea con simples palabras o acciones, ¡el mundo estaba en un completo desastre! Pero en vez de apoyarse mutuamente, solo se estaban destrozando más entre sí.

Y lo sé muy bien, he estado aquí desde que la tierra era solo un pedazo deforme de roca, desde que el primer hombre caminó por la tierra fértil, conozco a cada uno de ellos desde el principio de los tiempos, pero aún me causa curiosidad por qué se matan cada día con pequeños gestos, porque las armas no siempre suelen ser objetos contundentes.

Se preguntarán quien soy y que hago aquí, soy la Muerte, es un placer. Hoy seré yo quien los acompañe en su velada, aunque por lo que la mayoría dice de mí no tengo la mejor reputación les pido igual y encarecidamente que no teman, ya que sólo vengo a contarles una historia.

La historia de los seres más curiosos que he visitado alguna vez, los humanos, pero por ahora no me centraré en lo que ellos construyeron hasta llegar a destruirse entre sí, no, no hablaré de esa clase de arma. Hablaré de uno mucho peor, las palabras. He visto muchas cosas en mis largos años, pero créanme, es hasta para mi confuso el actuar de algunos. Muchas traicionan a otras personas que creían en ellos y fueron heridos por esa razón, otros sufren el peor de los males —según por mí— que es caer enamorado, oh el amor, es la cosa más hermosa que existe, lo que lo vuelve malo son los dueños de ese sentimiento. Aún recuerdo las épocas donde eso se apreciaba, era puro, en cambio ahora... bueno, deja mucho que desear.

Se los digo yo, que he estado enamorado de la vida durante años hasta hoy en día. Es un sentimiento bastante lindo, si es correspondido, y el amor no es una basura como todos dicen, son las personas que dan mil vueltas y como lo usan con el otro una basura. A veces me dan muchas ganas de bajar y golpear a cada uno de ellos, porque tienen la posibilidad pero son tan estúpidos para arriesgarse y así es como terminan perdiendo. Pero me considero alguien empático, incluso siento el dolor de alguien a quien he observado por un tiempo y es lo que estoy sintiendo con la chica de la rosa.

Era muy joven para sentirse de esa forma y querer darme su vida, pero tenía muchas razones porque es lo que pasa cuando estás solo, cuando no tienes a alguien para contarle todo lo que te aqueja y sí hay, no demuestran el interés necesario que uno necesita para sobrevivir. A veces es lo único que uno quiere para sentirse bien, tal vez unas palabras bonitas, un abrazo, una mirada o una simple sonrisa, pequeñas acciones que dan vida, todo y cuando sea sincero. Todos, sí, todos han cometido errores, nadie está a salvo de eso, pero el secreto está en como sobrellevar eso, ¿vas a reaccionar mal? ¿vas a reaccionar bien? ¿lo vas a dejar pasar? Porqué todos son egoístas al menos una vez en su vida y cuando la segunda persona comete al menos un mínimo, pequeñísimo error, la otra ya hace el escándalo de su corta vida. Cariño, ¿dejarás pasar todo lo que has construido solo por eso? Ser egoísta en cierto punto es bueno, pero a veces lo mejor es pensar como se estará sintiendo la otra persona.

Y como me distraigo, me desvíe del tema.

La rosa y las lágrimas se mezclaron gracias al viento, ella estaba sola, ella estaba sufriendo, ella quería terminar con ese dolor. Pero no era lo suficientemente valiente para lanzarse o dejar más cicatrices en su piel, quería vivir pero no de esta forma. Su madre le había dicho que pronto encontraría más amigos, que encontraría también una persona que la amara, que solo tenía que esperar.

Ella no quería esperar.

Ella ya tenía eso, ya tenía amigos, ya tenía a alguien a quien ella amaba mucho.

Pero observen.

Sola quedó.

Nunca supo si fue real, si las palabras que le dijeron eran sinceras, nunca lo supo. Ella no quería esperar eso cuando los necesitaba ahora, pero nadie nunca apareció, ¿así de irrelevante era? ¿tan molesta e innecesaria? ¿hacía falta llegar a este punto? Y a todo les respondo que no. Ninguna persona, por más conocimientos, dinero u fama que tenga es menos necesaria que la otra, todos tienen un por que de haber nacido.

Las personas deben dejar vivir a los demás, dejar de ser tan prejuiciosos porque pueden causar justamente esto, la chica miró el cielo como una búsqueda divina de que alguien aparezca... pero nadie lo hizo. Se odiaba a si misma porque le importaba algo que solo a ella le afectaba, estaba destrozada, estaba muriendo lentamente sin que nadie se de cuenta.

Hay que retroceder hace tres meses cuando todo se desmoronó, si, lleva tres largos meses así y las rosas de su patio fueron testigos de eso. Podría considerar que tenía una vida bastante buena, era bastante extraño ver algo así por lo que me quedé observandola esperando que siga así. Muchos piensan que la muerte es alguien a quien deben temer incluso aborrecer, la verdad que tienen un concepto erróneo de mi ya que nunca he conducido a la muerte a alguien sano, son las personas mismas quiénes lo hacen y yo solo los conduzco hacia lo que sería su nueva morada. Así que, yo que no me gustaba la idea de matarle a una persona, no entendí mucho menos cuando esas personas se lo hicieron a ella. Estaba tranquila, en su cuarto en el segundo piso, recostada en su cama mientras movía rápidamente sus dedos sobre la pantalla de su teléfono, sonriendo porque del otro lado alguien posiblemente le estaba diciendo cosas bonitas pero luego de cinco minutos esa sonrisa desapareció y su postura relajada paso a una tensa, me alerté.

Sus dedos seguían moviéndose, incluso me atrevería a decir que con más rapidez, a veces miraba la pantalla con expresión ambigua tal vez pensando en que responder y así siguió hasta que dieron las nueve en punto de la noche cuando soltó el teléfono porque sus manos comenzaron a temblar. Me acerqué lentamente hasta llegar a su lado, se había congelado en su lugar mientras le estaba recorriendo el temblor, sin apartar su vista del aparato. Me había encariñado con ella, y como también soy curioso alargue el cuello para ver lo que ella veía con tanto dolor.

Es tu culpa.

Básicamente no decía eso pero con la experiencia que llevo descifrando el lenguaje humano supe que si le culpaba de X razón y creo que ella también lo supo. Y luego de eso, ella se apagó, nunca supe la razón, ella nunca habló con nadie, incluso apagó su teléfono y se dedicó a regar las flores del patio donde la escuchaba llorar igualmente. Esos días mi amada vida me había visitado y ella se preocupó inclusive peor cuando vio a la muchacha de esa forma, recuerdo muy bien lo que me dijo.

¿Porque hago todo el esfuerzo de que los años con vida de una persona sea grandiosa y brillante para que otros vengan a apagarla?

Y no pude responderle, porque era una respuesta que yo tampoco lo sabía. Ya que la vida era brillante y siempre carismática, en cambio yo era lo contrario pero nunca la apagaría, porque así la amo. Sigo buscando una respuesta adecuada para decirle, ya que con todo el caos del mundo mi amada se estaba sintiendo culpable y no quiero que los humanos la apaguen.

En esos tres meses, la muchacha prendió de vuelta su teléfono con la esperanza de que alguien se haya preocupado por ella, pero el buzón estaba vacío. Nunca la había visto de esa forma, tan destrozada, así que cortó una rosa en medio del llanto y fue hasta la ciudad donde aquí estabamos, en la cima de un edificio.

¿Porqué la rosa? Esa respuesta si me la sé, la hermosa flor roja le recordaba a alguien, ya que también había curioseando y había visto que estaba haciendo un poema de amor con la rosa como protagonista, ella se describía como la flor y que se entregaba totalmente a la otra.

Como un río fluye
con certeza hacia el mar,
cariño, así vamos tú y yo,
algunas cosas estaban destinadas ocurrir.
Toma mi mano,
toma también mi vida entera,
porque no puedo evitar enamorarme de ti.

Era su canción favorita, era su flor favorita, era su persona favorita... pero como siempre nunca supe que fue lo pasó, no me juzguen, se supone que no debo involucrarme en todo esto, pero luego de tantos años eso se vuelve un poco difícil. Y no quería que ella muriera, no por personas que no la merecen, el mundo era grande, su vida aún iba a ser larga, y aunque no sea la persona más fuerte que haya conocido, aquí estaba, acariciando la rosa como si no tuviera espinas. Mientras yo la miraba y escuchaba los latidos rápidos de su corazón.

— Tranquila, pequeña, todo va a mejorar —le dije aún igual si nunca podría oírme.

La puerta se abrió de golpe y un chico joven, que la había estado mirando desde abajo y se alertó, salió de él. Le había preguntado si todo estaba bien, ella lo miró con las lágrimas manchando sus mejillas, alguien todavía se preocupaba por ella incluso igual si era un extraño. Y después de tanto vi como una pequeña parte de ella volvió a brillar, era la esperanza, ella asintió en silencio pero él no le creyó y se acercó lentamente. Ella pensó, ¿porqué este extraño se interesa en mi? Y yo sonreí ya que no sería un extraño en un tiempo no tan lejano.

Él la levantó, ya que estaba en el suelo, y la llevó consigo, porque en verdad se preocupaba y ella lo apreció sin soltar la rosa. Nunca la soltaría. Bajé con ellos y luego miré a mi amada vida que estaba sentada sobre el pasto del lugar, estaba sonriendo y yo negué, ella trajo al chico que le salvó la vida a la chica de la cual me encariñé. La vida me hizo un lugar en donde me senté, ambos miramos a los jóvenes irse.

— Lo hiciste bien —murmuró ella.

Mi enseñanza de hoy es, nunca hieras a una persona, nunca pienses que no eres suficiente ya que vales más de lo que te imaginas. No te enojes o pelees con alguien por alguna cosa insignificante, nunca sabrás cuando será tu último día, tal vez no puedas arrepentirte, acepta una disculpa, di lo que sientes, tal vez esa persona siente lo mismo, dilo, antes de que la pierdas, nunca dejes escapar a alguien. No tengas miedo de arriesgarte, en eso está la ganancia, y más que nada vive, ¿porqué que es la vida sin peligros, aventuras, un poquito de muerte y sobre todo amor? Que no te interese lo que otros digan de ti, es tu vida, tú ama a quien desees, tu vístete como quieres.

Tú debes vivir arriesgandote, créanme, las mejores cosas y personas te las ganas así.

Tomenlo como un consejo de su amigo la Muerte.

FIN.