La caja.
Pov Gally:
Me quedé un rato con Jane. Fue muy gracioso cuando Clint quiso pincharla con la aguja y ella se puso a llorar, aunque odio verla llorar. En ese momento apretó mi mano muy fuerte. Luego me quedé un rato cuidándola, hasta que se durmió. Quería quedarme más ahí, pero tenía que preparar la cita en la que le propondría que fuera mi novia.
Ahora estoy recogiendo flores, no soy muy bueno para combinar, solo tomo unas pares de cada clase. Quiero hacerle una sorpresa pero no sé qué pueda ser. Ya le hice una cena, y tiene que ser algo diferente, algo muy especial, único, algo solo para ella.
Le pedí ayuda a Newt, me dijo que la cena le gustaría, pero no se le ocurría otra cosa, entonces pensaría más ideas y luego me las diría.
Luego fui con Sarten, y me puso a cortar tomates.
Entonces pensé.
-¿Sarten, y si le construyo una casa en el bosque?
Sarten comienza a reír estrepitosamente.
—¿Qué? ¿Es mala idea? —le pregunto serio.
—Estás tan, tan enamorado, Galileo —dice sonriendo.
—No me digas así, solo Jane puede decirme así.
Él comienza a reír más fuerte. No sé qué demonios le pasa hoy.
—¿Tienes una idea o no? Quiero tener todo listo para esta noche.
—Ah, así que será de noche —dice levantando y bajando las cejas de forma burlona.
—Ay, mejor iré a preguntarle a Ben.
Digo y empiezo a caminar. Escucho que Sarten me reclama por los tomates, pero esa no es mi responsabilidad, mi novia sí.
Me siento en un árbol y paso las manos para mi cara, frustrado. Y en ese momento veo a la caja, ya sé qué haré.
✨✨✨
—¿Saldrá hoy, Jeff?
—Gally, por séptima vez, sí lo hará, cuando despierte. De hecho, deberíamos examinar por qué duerme tanto.
—Es así, dormilona, déjala en paz, Jeff.
—Per... —dice Jeff, pero Sarten lo interrumpe.
—Ni te gastes, está completamente loco desde que la novata llegó. ¿No viste que se baña? Mira, ya no tiene tierra en la cara.
Me toma la cara y yo lo quito.
—¿Saldrá ahora?
Jeff suspira y mira para arriba.
—Por Dios, necesito tener una paciencia especial contigo, Gally. Si tanto lo deseas, ve a despertarle y sácala de aquí, y vete tú también.
Sarten río. Yo fui a buscar a Jane.
Toco la puerta suavemente, para no asustarla, luego entro. Está dormida, tiene la boca abierta y babea, paro aún así está hermosa.
No sé si despertarla o no. Entonces solo me siento al lado de su cama, que despierte cuando quiera. Estoy tan relajado que empiezo a tener sueño. Y luego solo me duermo.
✨✨✨
—Gally, Gally, ¡despierta! —susurra una voz suave, mientras acaricia mi mejilla.
—Jane —digo y sonrío.
Ella me sonríe también.
—¿Te quedaste todo el día aquí conmigo?
—Eh... No, tuve que hacer unas cosas, pero vine a buscarte y..., al parecer me quedé dormido también.
Ella ríe.
—Y... ¿Cómo dormiste, linda?
Se ruboriza al escuchar eso.
—Muy bien, ya estoy como nueva.
—Que bueno, pero Jeff me ha dicho que te faltan muchas vitaminas, y eso es por no comer. Así que a partir de ahora comerás bien, todas las comidas, no te saltearás nada, ¿okey?
—Lo que usted diga, señor. Haré todo lo que tú digas porque eres un larcho miertero muy lindo, muy, muy, muy lindo —dice y se tapa la cara porque le dió pena.
Me acerco a ella y tomo sus muñecas para sacárselas de la cara.
—¿Qué dices? ¿Qué soy qué? —le pregunto jugando.
—Gally... Me haces sonrojar, estás muy cerca.
—No me importa, dime, ¿soy qué?
—Eres lindo, tan lindo, amor.
Al instante la beso, Dios, es tan adictiva. ¿Cómo se supone que siga mi vida, que vaya al trabajo, que duerma en otro lugar, si solo quiero estar con ella?
Nos separamos tratando de recuperar el aire, pero nuestros rostros siguen muy juntos.
—Te tengo una sorpresa.
—¿Si? ¿Qué, Gally?
—No me digas Gally, eres mi esposa, no puedes decirme solo Gally.
Ella río. Luego me agarró la cara y comenzó a darme besos por todos lados, esta chica está loca.
—¿Y cómo puedo llamarte, esposo mío?
—Así está bien, esposo mío, o mi amor, o el papá de mis hijos, o lindo, o bebé, o...
—Entendí, esposo mío, entendí. ¿Y tu cómo me dirás?
—Pues lo mismo pero en mujer, ya sabés...
Ella solo río negando con la cabeza.
—Claro, amor, entendí, entiendo todo lo que dices. ¿Cuándo me darás mi sorpresa?
—Luego, cuando salgamos de aquí. Espera, ¿Qué es esto? ¿Mi pulsera?
Veo que ella tiene la pulsera que compartíamos, y que perdí cuando fui al bosque.
—Es la pulsera, la habías tirado y yo la tomé.
—No, no la tiré, se me perdió. La busqué horas y horas, de saber que la tenías tú no hubiese caminado tanto en la oscuridad buscando. Dámela.
Ella quita la mano.
—¿Volverás a perderla?
—Claro que no, cariño. Lo prometo.
—Bien —dice, luego se saca la pulsera.
Toma mi mano delicadamente y ata el hilo con cinco nudos.
—Listo, ya no la perderás.
—Gracias, linda. ¿Vamos a ver tu sorpresa?
—Claro, pero primero quiero bañarme, ¿está bien?
—Sí, yo te llevo.
✨✨✨
Estoy esperando a que Jane salga de bañarse, se está tardando mucho. Yo me bañé y me cambié también, pero tardé como cinco minutos.
Luego sale. Está bellísima. Tiene un vestido rojo, ajustado, el cabello mojado, con unas leves ondas, y un labial rojo. Mi corazón empieza a latir muy fuerte. Pensé que no iba a ponerme así, pero estoy muy nervioso.
✨✨✨
Pov Jane:
—Me vestí así porque te ví de traje, entonces no podía ponerme pijama —digo y me río.
Pero Gally está serio, parece muy nervioso.
—Estás hermosa, cariño.
—Gracias, tú también lo estás. Ya dime qué haremos, por favor, no puedo esperar más...
Él se acerca lentamente, pasa su mano por mi cabello.
—Te llevaré ahora, tranquila.
Toma mi mano y empezamos a caminar.
Noto que sus manos sudan un poco. No sé cómo calmarlo.
—¿Te costó mucho preparar todo?
—Eh, no. Ben me ayudó un poco, y quedó bien, bueno... eso creo.
—Que bueno, amor.
Cuando digo eso siento que él se relaja un poco, y sonríe.
Llegamos, aunque no sé a dónde.
—Aquí es.
—Okey, pero, no veo nada, cariño.
—Ya verás.
Él se corre y abre la puerta de metal, no sabía que estábamos cerca de la caja.
Luego enciende unas luces, son como las de navidad, y las paredes fueron tapadas con sábanas, parece otro lugar, es hermoso. También hay frazadas y almohadas en el suelo, y cosas que no llego a ver.
(Imaginen algo así)
—Dios, Gally. Es hermoso.
Él me mira en forma reprobatoria.
—Lo siento, digo, amor mío.
—Así está mejor.
Toma mi mano y me ayuda a bajar. Luego me pide que me siente. Yo me acuesto y me tapo.
Por las rejas podemos ver las estrellas.
—¿Qu-quieres jugo?
—Cielo, no estés nervioso. Ya sé para qué me trajiste aquí y ya sabes que te diré que sí. Además, el lugar es perfecto, y tú estás perfecto también, muy guapo. Ven, acuéstate conmigo.
—No, todavía no —suspira —. Mira, Jane. Quiero decirte algo.
—¿Está todo bien?
—Sí, es solo que...
Saca una pequeña caja de su bolsillo. Se queda mirándola. No entiendo nada.
—Ey, cariño, tranquilo, me estás asustando. Solo respira...
Agarro su mano, está sudando mucho.
—Bien, empezaré. Eres la chica más linda que conozco, y bueno, no conozco otras chicas, pero estoy seguro de que ninguna igualaría tu belleza. Eres tan... buena, bonita, usas unas minifaldas que me vuelven loco, tú eres completamente todo lo que quiero. Y no sé si algún día saldremos de aquí, o no, pero no me importa mientras esté contigo, y no quiero perder un segundo más. Jane, cariño, ¿Quieres ser mí novia?
Muero de ternura al escuchar eso, y estoy tan emocionada que casi estoy temblando.
Él abre la caja y tiene un anillo de plata, sencillo, prolijo y muy bonito.
—Bien... No me lo esperaba pe...
—Era una estupidez —dice, y se pone la mano en la cabeza frustrado —. No debí hacer esto.
—No, no cariño. Está bien, sí quiero, claro que quiero.
Le extiendo mi mano para que me ponga el anillo. Él me mira dubitativo.
—¿Si quieres? Porque si no quieres está bien...
—Gally, definitivamente quiero ser tu novia, y luego tu esposa, y luego que tengamos bebés, todo, lo quiero todo.
Él sonríe y me pone el anillo.
—Bueno, quería que fuera como una boda, pero no puede ser una boda de verdad, porque no pude conseguirte un vestido blanco, ni un cura, aunque Ben se ofreció pero...
Yo reí.
—Es perfecto, ahora eres mi novio. ¿Sabes qué significa eso?
—¿Qué significa, querida?
—Número uno, que podré mandondonearte. Número dos, que no le hablarás a otras chicas, está prohibidícimo. Tercero, que podré besarte cuando yo quiera.
—Sí, amor. Todo eso. Desde ahora será así, haré todo lo que mi novia quiera.
Yo me río y me da un beso.
Luego comemos, y hablamos de cosas al azar, me cuenta de cuando Chuck vino y mojó sus pantalones porque estaba asustado, entre otras cosas.
Más tarde nos dió sueño, entonces nos acostamos, el me abrazó por la espalda.
—Nuestra primera noche durmiendo juntos, esposo mío.
—Descansa, princesa. Te amo.
—Te amo.
Nos quedamos profundamente dormidos, con el clima perfecto, en un lugar hermoso, y con mi chico. Definitivamente soy afortunada.
✨✨✨
Holis, volví, ahora sí voy a actualizar seguido.
Bien, necesito una opinión, hace mucho no escribía, ¿quedó bien?, tengo miedo de que dé cringe. La verdad me costó bastante escribir de nuevo. Si es muy raro o lo que sea, díganmelo, y trataré de cambiarle cosas.
Espero que les haya gustado el capítulo, que tengan buenas noches✨✨✨
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top