El salón de la clase 1A estaban vacía con sólo un rubio cenizo en su pupitre mirando por la ventana como si fuera lo más interesante del mundo.

Miraba como chicos de diferentes cursos salían junto a sus amigos o solos y, ahí lo vio.

-Izuku...

Junto a Uraraka, Iida y Todoroki sonriendo como siempre hacia con ellos.

Pero le dolió más, ver como Todoroki cogía la mano de Izuku y él otro no hacía nada.

Se levanto de su pupitre y apretó su camisa con la mano en el lugar del corazón.

-¿por que duele tanto?...JODER!!- pego una patada a su pupitre

-duele...duele mucho...

-Baku...¿gou?- la voz de su amigo Kirishima lo alertó. Paro de hacer lo que hacía y volvió a su estado normal_o lo intento_.

-¿Que haces aquí? - pregunto con el típico tono en el que se le conocía.

-eso tendría que preguntartelo yo, ya acabaron las clases ¿sabes?- le contesto extrañado.

-Ch...solo se me olvidó algo ya me iba- cogió su mochila y camino pasando al lado del pelirrojo.

-Bakugou.

-¿Qué quieres ahora?- se dio la vuelta viendo una sonrisa triste en el rostro de su amigo

-no hace falta fingir Bakugou.- se acerco a él

Katsuki se tenso.

-¿de que...?

-el amor tiene dos caras y una de ellas es dolorosa.- Puso sus dos manos en los hombros de Bakugou que lo miraba- duele guardarte todo esto tu solo ¿no es así?

Katsuki dejo caer su mochila y miraba sorprendido y aguantando sus lágrimas al pelirrojo.

-llora si quieres, no hay nadie así que... nadie más que yo verá al gran Katsuki Bakugou llorar ¿si?- sonrió amablemente.

Y como casi todas las noches hacia, lloro siendo abrazado por su mejor amigo.

Lloro por el dolor que ahora sabe en donde se encuentra y por qué.

Lloro por no tener a Izuku a su lado.

Lloro por sentirse culpable de todo lo que hizo.

Lloro por ser un estúpido y cabezota de personalidad explosiva.

Y lloro por tener a un gran amigo.

- gracias... Kirishima.-

Ahora se oían pequeños sollozos por parte de él y una cara sorprendida por parte de Eijirou.

La sorpresa por aquella palabra que dijo el rubio se le fue de inmediato y sonrió_ahora_ más feliz.

-no hay de que...bro.

Y Katsuki se sintió más ligero pero, aquel dolor en el corazón no se iba, todavía no.