•Años Después•

Luego de ese episodio un poco preocupante para todos, las voces y esos desmayos se terminaron, no fue necesario que siguiera leyendo ese libro que la señorita Avocet me había traído, quería olvidarme por completo de todo.
Todos nos encontrábamos mejor, aún que para Emma fue algo difícil, ya que nos llegaron nuevas noticias de Abe contándonos que se había casado y que tenía una nueva familia, todos apoyamos mucho a Emma para que esté bien, incluso Enoch, él estaba un poco molesto por lo que hizo Abe. Y nosotros dos no hemos avanzado en casi nada, él se mantiene ocupado con sus cosas o está con las chicas ayudándolas en sus tareas diarias, no es que me moleste, pero me había ilusionado pensando en que ambos íbamos a admitir cuanto nos queríamos pero no fue así, seguimos siendo amigos...o eso creo.

-Nerea! Nerea! -Horace llegó hacia mí un poco entusiasmado-.

-Que sucede Horace? -Le pregunte confusa-.

-Puedes guardar un secreto? -Asentí- alguien vendrá -Lo mire más confusa- muy pronto, lo he soñado...por favor no le digas a nadie, se que sabes guardar muy bien los secretos -Asentí-.

-Y quien es? -Iba a responderme pero la señorita Peregrine nos llamó a todos- vamos es hora de irnos.

Todos estábamos preparados para ir al bucle de la señorita Avocet, era el cumpleaños de otro niño peculiar que estaba en su hogar, Miller, y nos invitó ya que nunca salíamos de nuestro bucle, la señorita Peregrine ya tenía todo calculado, hasta el tiempo que podíamos quedarnos y más.

-Recuerden comportarse y ante mi primer llamado los quiero a todos juntos para volver, está bien? -Pregunto ella y todos asentimos-.

Tome de las manos a los gemelos y seguimos a la señorita Peregrine, todos se veian emocionados realmente.
Al llegar al bucle de la señorita Avocet, unos dos niños, niña y niño, vinieron corriendo hacia nosotros.

-Señorita Avocet, los invitados están aquí! -Grito la niña con una sonrisa-.

-Bienvenidos, Señorita Peregrine, niños -Sonreímos- ella es Lexi, y él Evans -Los niños nos saludaron- por favor sientanse como en casa -Dijo la señorita Avocet- reunelos a todos -Le dijo a Evans y él asintió-.

Los demás comenzaron aparecer y realmente me sentí incómoda, ellos se veían más normales que nosotros.

-Bien niños -Dijo la señorita Avocet- les presentaré a nuestros invitados, ya conocen a la señorita Peregrine, ella es Claire -Los miro algo tímida- ella es Bronwyn -Los saludo con su mano- él es Millard -Se quita su sombrero en forma de saludo- ellos son los gemelos -Dieron un tierno gruñido los dos- ella es Fiona, él es Horace -Ambos sonrieron- ella es Olive -Estaba algo sonrojada- él es Hugh -Dijo un "hola" para todos- ella es Emma -Se veía contenta- Ella es Nerea -Los mire algo tímida y con una sonrisa- y él es Enoch -Estaba serio y con los brazos cruzados-.

-Señorita Avocet podemos presentarnos nosotros? -Pregunto otra niña y la señorita acepto- hola mi nombre es Luisa, él es Ronny -Un niño nos sonrio- él es su hermano Chester -El otro niño también nos sonrio- ella es Sara -Una chica nos miro algo tímida- él es Derek -El chico solo nos dió una sonrisa corta- ella es Sofía -Una niña nos dió una gran sonrisa- ella es Julieth y él es su hermano Miller -La niña miro a su hermano mayor contenta- y bueno ya conocen a Lexi y a Evans, bienvenidos a nuestro hogar -Dijo Luisa muy feliz-.

-Espero que se sientan cómodos -Dijo la señorita Avocet- es hora de que la fiesta comience -Los niños se acercaron para invitarnos a jugar-.

Todos los niños se fueron a jugar, nosotros cuatro comenzamos a recorrer el lugar.

-Esto es detestable -Dijo Enoch molesto-.

-No seas así, nos han recibido de una buena manera -Dijo Olive-.

-Sí además, recuerda lo que dijo la señorita Peregrine, que debíamos de comportarnos -Dijo Emma-.

-No me agradan de todos modos -Dijo Enoch a lo que rodee los ojos-.

-Ya sabemos que nadie te agrada, pero por lo menos intenta ser respetuoso y algo amigable con ellos, no los hagas sentir mal -Dije y él gruñó-.

-Entonces que no se me acerquen -Lo mire de mala manera-.

-Ahora el insoportable eres tú -Dije algo molesta y me aleje de ellos-.

-Nerea cielo, podrías dejar esta caja con algunas decoraciones a dentro por favor? -Me pregunto la señorita Avocet y asentí-.

Entre a la casa y dejé la caja en la sala, iba a salir otra vez pero una voz me detuvo.

-Nerea verdad? -Voltee y encontré a Miller-.

-Así es, feliz cumpleaños por cierto -Sonreí tímidamente-.

-Gracias, está mañana me enteré de que lo era, ya que Luisa realizó un calendario y hoy sería 16 de abril -Dijo él con una sonrisa-.

-Eso es bueno, por lo menos sabes qué día es, no como yo, para mí siempre será 03 de septiembre de 1943 -Me encogí de hombros-.

-Sí quieres puedo pedirle a Luisa uno de sus tantos calendarios y te doy uno -Asentí- ven, quisiera mostrarte algo -Ambos caminamos por un pasillo y oí risas- chicos recuerdan a Nerea? -Estaban Sara y Derek en una habitación muy bonita-.

-Hola Nerea, es un gusto conocerte -Dijo Sara muy contenta-.

-Que tal Nerea -Derek estrecho su mano-.

-Espero que te estés sintiendo cómoda en este lugar -Dijo Sara- y cuéntanos un poco de tí, cual es tu peculiaridad?

-Sara, no la incomodes -Dijo Derek-.

-Tranquilo, mi peculiaridad es el agua -Dije algo tímida y les mostré una de mis manos e hice que gotas aparecieran en ellas-.

-Eso es grandioso -Dijo Miller admirando las gotas de agua-.

-Y sus peculiaridades? -Pregunte y ellos sonrieron-.

-Puedo crear mariposas -Dijo Sara y cerró su mano para luego abrirla dejando ver una hermosa mariposa posada en su mano-.

-Puedo multiplicarme -Dijo Miller y de pronto aparecieron cinco personas como él-.

-Puedo congelar lo que sea -Dijo Derek y soplo haciendo que una mesa se congelara-.

-Olive controla el fuego -Dijo y él sonrio ampliamente-.

Mantuvimos una agradable conversación los cuatro, hasta que alguien nos interrumpe.

-Nerea -Voltee y ví a Enoch muy serio-.

-Enoch no es así? -Derek le extendió la mano pero Enoch solo lo miro y luego volvió su vista a mí-.

-Que haces aquí? Te estaba buscando -Se cruzó de brazos-.

-Lo sentimos, estábamos conociéndonos -Dijo Sara un poco apenada-.

-Así es, hablábamos de nuestras peculiaridades -Dijo Miller-.

-Con que hablando de las peculiaridades -Lo ví pensativo y eso no me agradó- quieren que les muestre mi peculiaridad?

-Enoch, no...-Intente detenerlo-.

-Tranquila Nerea, se que les fascinará -Dijo Enoch con una sonrisa burlona-.