VII-The Witch

Ú̶r̶s̶u̶l̶a̶ ̶

ⓗⓞⓡⓐⓢ ⓐⓝⓣⓔⓢ

  Camino por mi casa y observo los cuadros de mis hijas, mis preciosas hijas, Morgana y Atlanta, ambas pelirrojas como su padre, su desgraciado padre.

  Morgana siempre fue una niña obediente, al contrario de Atlanta que disfrutaba desobedecerme, su padre le dejó la empresa familiar "El Océano " y en vez de casarse con alguien que pudiera ayudar a crecer su fortuna se casó con ese tal Tiberio y parió siete monstruitos, uno ellos el peor de todos, con cara angelical, y un gran parecido a mi Atlanta consiguió que mi querida hija muriera y así se quedaron con la empresa, pero me voy a vengar, voy a acabar con ellos y El Océano será mío.

—Jetsem y Flotsem. —Llamo a mis nietos preferidos, ellos odian tanto a su prima como yo.

—¿Qué desea abuela? —Pregunta Jetsem, tan perfecto como siempre.

—¿Recuerdan que había conseguido intervenir los teléfonos de las montruitas? —Mis nietos asienten. —Pues descubrí una forma dr empezar el plan para recuperar el Océano.

—Cuentenos abuela. —Flotsem separa una silla para que me siente.

—Ariel está enamorada. —Comienzo y ellos sonríen. —Y si también heredó de su madre su forma de amar seguro que está enamorada a lo bestia.—Mis niños sonríen. —Quiero que la traigan a mi, para ayudarla con su chico, que da la casualidad conozco dónde vive.

—No entiendo. —Habla Jetsem. —¿La vas a ayudar? ¿Ya no quieres que sufra?

—Al contrario ¿Han oído el dicho, la oscuridad es más oscura antes del amanecer? —Ambos asienten. —Pues haremos que funcione en sentido contrario, La luz es más brillante antes de la oscuridad.

—Comienzo a entender. —Habla Flotsem. —Vamos a hacerla feliz para después arrebatar toda esa felicidad.

—Estará tan cerca de su amor y no lo podrá tomar, pero será feliz, y cuando esté cerca de tomarlo, lo perderá frente a sus ojos. —Río.

—¿Lo mataremos? —Pregunta Jetsem.

—No, porque moriría amándola a ella. —Sonrío. —Buscaremos a alguien que se lo quite. —Sonrío, creo que tengo un plan solo necesito saber como conseguir que Erick se olvide de Ariel con solo ver a Vanessa. —Búsquenla.

A̷r̷i̷e̷l̷ ̷F̷i̷s̷h̷e̷r̷

  Tomo y mi auto y junto a mis primos conduzco hacia casa de mi abuela.

   La casa de mi abuela es tenebrosa, está llena de cuadros de mi madre y tía, solo de ellas ni del abuelo, ni de sus nietos, parece que la abuela quería mucho a sus hijas.

—¿Abuela? —La llamo cuando mis primos desaparecen de mi campo de visión, su casa es todo lo contrario a la mía, mientras la mía es moderna y luminosa, la de ella es oscura y tenebrosa.

—Pasa hija mía. —Está sentada en un sillón de espaladas a mi y frente al fuego, trago grueso y camino hacia ella. —No espíes por los rincones no es cortes. Voy a pensar que no tienes modales.

—Los primos me dijeron que quería retomar nuestra relación. —Me siento en el sillón junto al suyo llenándome de valor,debo tener valor es mi abuela ¿Que me podría hacer?

Se me queda mirando un buen rato, la entiendo seguro que es porque me parezco a mi madre y eso la descoloca, la entiendo y coloco mi mano sobre la suya pero ella la aparta.

—Tienes razón. —Espeta. —Quiero volver a recuperar nuestra relación. —Sonríe pero hay algo en su sonrisa que no termina de encajar. —Pero primero, cuéntamelo... —La miro sin saber que decir. —Lo que hace que tus ojos no brillen, lo que te entristece.

—Es que me he enamorado. —Le digo y ella me mira fijamente, necesita que se lo cuente. —Me escape a la playa y vi a un chico, el era tan guapo, tan perfecto que lo quise. —Ella asiente, parece que de verdad le gusta mi historia. —Estaban celebrando algo , y se montaron en un yate, de la nada el cielo rugió y hubo una tormenta. —Mi abuela me mira con atención. —Lo que sentí por ese extraño fue tan fuerte que no podía dejarlo morir, y mr adentré en el mar, y lo salvé. —Sonrió. —Salve varias vidas. —Ella asiente. —Scuttle, una marinero amigo me ayudó a descubrir quien era. —Erick McFisher, es el único heredero de James McFisher, y pronto será dueño de la empresa The Kingdom.

—Claro que conozco a ese chico. —Mi abuela sonríe cómplice. —Es un partidazo. —Asiento, aunque el dinero es en lo ultimo que pienso. —¿Te reconocería, si te volviera a ver? —Pregunta.

—Lo dudo, cuando lo saqué del agua estaba semi inconsciente y luego me fui antes de que despertara. —Digo algo triste, pero mi abuela parece un gato que se comió un canario —A lo mucho habrá  oído mi voz. —Su expresión cambia.

—Y tu voz que después que la oyes es imposible de olvidar. —Masculla.

—¿Qué dijiste? —Pregunto, creo que entendí mal.

—Mira pequeña, yo puedo ayudarte a que lo conozcas  —Abro los ojos ¿enserio? —Pero hay un problema el odia a la persona que lo rescató.

¿Qué? ¿Porqué lo haría?

—Pero si quieres arriesgarte a conocerlo puedo darte un par de ideas. —Mi corazón comienza a latir muy deprisa. —Puedes hacerte pasar por muda, así el no te reconocerá. —Asiento, mi padre me enseño lengua de señas—Esa es una isla privada, así que cuando te dejemos allí, tendrá que haber una buena excusa para conseguir que te quedes.

—Podemos decir que el marinero se equivocó de isla. —Propongo odio mentir pero soy capaz de todo para estar con mi chico de ojos océanicos. —Le haré saber que no volverían por mi hasta dentro de tres semanas.

—Me parece bien que pongas una fecha límite, porque el chico es un mujeriego y seguro se aburre de ti, sin contar la grandísma mentira que le estás diciendo o bueno haciendo. —Mi sonrisa se desvanece, tiene razón. —Pero bueno, levanta esos ánimos, que por lo menos conocerlo lo vas a hacer. —Vuelvo a sonreír ya este plan no me parece tan buena idea, pero algo es algo. —Tranquila si se enamora de ti, las mentiras se olvidan. ¡Todo sea por el amor!

  —Está bien, lo haré. —Me lleno de seguridad, tengo tres semanas para enamorarlo.

—Mañana mismo te vas para la isla.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top