☆彡PLAYLIST

Persecussion of the Masses—1172 (Shiro Sagisu).

Through My Blood (Hiroyuki Sawano).

The Rebel Path (P.T Adamczyk).

Skulls & Trombones (Two Steps From Hell).

Thoughts of Home (John Williams). 

The Painful Way (Darren Korb).

☆彡 NOMBRE

Shigeru suele ir simplemente por su apellido, cuando no lo están llamando Jefe o ボス. No tiene apodos, y muy pocas personas son lo suficientemente cercanas como para justificar el que lo traten por su nombre de pila. La última vez que lo llamaron Shigeru, fue el maldito bastardo de su padre antes de que lo matara a cuchillazos en el pecho.

☆彡EDAD

Nació hace veintisiete años atrás, un frío 20 de Noviembre en un prestigioso hospital en Tokyo. Rin Katori ya se había consolidado como un magnate del crimen organizado, y tenía a su disposición una mafia digna de competir con la yakuza.

☆彡APARIENCIA

De pie en unos imponentes 1.90cm y con 100kg de casi pura masa muscular, Shigeru es sin duda alguna una figura para sorprenderse. Es difícil decidir si es su porte o la forma en la que se mueve por el mundo, lo que le otorga un aire de poder y una invaluable herramienta de intimidación. 

Empezando desde abajo, Shigeru cuenta con piernas largas y ligeramente desproporcionadas al resto de su cuerpo, un poco más elongadas de lo que deberían haber sido. Su torso es fornido y trabajado, al igual que sus brazos, pero su fenotipo sigue siendo más bien atlético; se parece más a un corredor olímpico que a un levantador de pesas o un rugbista. Esto no significa que carezca de fuerza, por supuesto, o que su musculatura esté menos trabajada; simplemente tiene fibras diferentes, y ha entrenado con otros objetivos en mente.

Su cuello es grueso, llegando a encontrarse con una mandíbula definida que finaliza en un mentón fuerte y proyectado. Los labios delgados y los ojos enmarcados por pobladas pestañas contrastan con su nariz recta y sus cejas bajas, que balancean lo femenino con lo tradicionalmente masculino en sus facciones. El cabello de Shigeru es de un rubio casi platinado, que se condice con sus pestañas claras y sus cejas delgadas, al igual que con su piel blanca y pareja. 

Shigeru es un hombre que se preocupa por su apariencia, y como tal posee varios sets de korean skincare que son la verdadera razón de por qué su cutis es tan parejo y radiante. Sin embargo, ningún suero ni loción jamás podrá quitarle las sombras que danzan en sus ojos grises, ni la multitud de cicatrices que oculta su ropa. Las más destacables las ha tapado con algunos tatuajes en sus brazos que se extienden hacia sus escápulas y a su espalda; posee un full sleeve en el brazo derecho, conformado por intrincadas figuras de tinta negra. Su brazo izquierdo, la mano no dominante, solo tiene un half sleeve en el bicep. Las manos de Shigeru, grandes pero principalmente bien cuidadas, también tienen varias cicatrices a lo largo de los dedos y cruzando el dorso de su mano, recordatorios de las muchas veces que se quebró los huesos hasta que estos le salieron por la piel. 

Tiene una larga cicatriz blanquecina en el cuadricep izquierdo, de la cirugía de una vez que se quebró el fémur. 

☆彡PERSONALIDAD

Expuesto desde pequeño a la violencia y al peligro, la personalidad de Shigeru no es nada menos que patológica. Perfeccionista al extremo de dejar proyectos incompletos porque no salen como él quiere, es un maniático del control, y le gusta que todo se haga a su manera; quizás porque desde muy joven se sintió responsable de todo, de sus hermanos, de las reacciones desmedidas de su padre, que la presión deformó su personalidad en una determinada dirección. Sin embargo, está acostumbrado a trabajar bajo estrés, a aguantar el peso de las expectativas de sus socios, e incluso de algunos de sus hombres; además, tiene un muy intenso sentido de la lealtad, y no es propenso al engaño ni a la falta de transparencia.

Es un hombre controlado, de personalidad impertérrita hasta el punto de que expresar emoción no es lo suyo. Suele tener una mirada calculadora, casi ilegible. Y cuando tiene cualquier otra apariencia puesta encima, es o porque está indignado y tiene ganas de matar a alguien, o porque está muy cansado.

El nivel de autoexigencia de Shigeru está fuera de las medidas. Siempre lo estuvo, porque al ser el hijo mayor de Rin era el heredero natural de la fortuna y el poder; y porque todos sus hermanos que no cumplían con las expectativas, acabaron muertos. De los cinco hermanos menores que tenía, le queda solo uno, Izuki, un loco desenfrenado que tiene que estar manejando todo el tiempo para que no deje la cagada. Donde Shigeru es cuadrado y perfeccionista, un hombre de planificación y de meditación, Izuki tiene un carácter errático y violento, impulsivo hasta la médula; ambos poseen la misma esencia destructiva y manipuladora, pero la expresan de formas diferentes.

Si bien Shigeru fue el único hijo "victorioso" en la prueba de supervivencia que siempre fue vivir bajo el mismo techo que Rin, tiene un intenso odio hacia sí mismo; se siente responsable de las muertes de sus hermanos, de no haber podido protegerlos, a excepción de Izuki que es un producto directo de Shigeru. Siempre lo incitó a que fuese como es ahora, esperando que si se parecía a Rin, podría salvarlo del cruel destino de los demás hijos Katori. Por eso hasta el presente se sigue sintiendo responsable de él, y no tiene los cojones para pegarle un balazo y deshacerse del problema que supone su complejo hermano.

Como era de esperarse, heredó parte del sadismo de su padre. Se siente dueño del mundo, un rasgo profundamente narcisista, y no cree que existe alguna consecuencia que no pueda saltarse; hace lo que quiere con quien quiere, y no suele tener mucho límite a la hora de vengarse o de deshacerse de aquellos que representan un estorbo. Pero mientras te mantengas lejos de sus objetivos y fuera de su camino, no debería haber problema.

Es ambicioso, probablemente porque su único propósito de vida es crecer y volverse más rico, más poderoso. Nunca pensó más allá de eso, y está perfectamente cómodo con ser un multi millonario y un hombre esencialmente imparable.

☆彡OCUPACIÓN

Desde que asesinó a su padre en un arrebato de furia, Shigeru es el nuevo Jefe de la mafia que su padre construyó. Cuenta con suficientes coimas para no necesitar un trabajo de tapadera, pero lava dinero en varios strip clubs, prostíbulos, bares y por medio de una enorme empresa de servicios de limpieza que posee. 

☆彡GUSTOS, DISGUSTOS Y EXTRAS

—Es un maniático del orden y la limpieza, por eso le queda como anillo al dedo el tener una empresa dedicada al deep cleaning de casas, autos, alfombras, lo que sea. Tiene una puerta giratoria de amas de llaves en su mansión, porque rara vez encuentra una que cumpla con sus ridículos estándares y exigencias, así que las vive despidiendo.

—Se golpeó la cabeza muy fuerte una vez en una pelea con su hermano menor, y como consecuencia quedó con una falla en el reflejo de acomodación de sus pupilas. Frente a la luz muy intensa, la de su ojo derecho se contrae con la normalidad, pero la izquierda siempre queda ligeramente dilatada.

—Detesta ir al hospital. Cuenta con un médico personal, pero incluso a él lo llama muy de vez en cuando. No le agrada que lo toquen, aunque sea para revisarle algo.

—Tiene Daddy issues. Muy profundos. Pero no va a ir a terapia. Le enseñaron que eso era para mamones, y no piensa cambiar de opinión.

—Le pone bastante el BDSM, pero en su vida diaria no es un hombre violento y sus dejes de sadismo los reserva para sus enemigos principalmente.

—Detesta las bebidas carbonatadas, le caen mal al estómago sin falta. Shigeru se queda feliz con su tacita de té y de vez en cuando, de café.

—Tiene una predilección por los dulces, por sobre las comidas saladas. Pero la sopa de miso y el butijaru son sus platos favoritos por lejos, aunque sea porque Rin las detestaba y Shigeru busca todos los días como seguir cargándose a su padre; incluso con este enterrado seis metros bajo tierra.

—Adora los aromas, especialmente los cítricos. Incluso, su característica favorita de  la última novia que tuvo era el perfume que usaba. Todo el resto le chupaba un huevo. Pero esto significa también que es muy sensible a ellos, y como consecuencia a veces tiene dolores de cabeza por malos olores o por fragancias muy intensas y persistentes.

—Tiene dos perros Irish Wolfhound, Vlad y Mina. Ambos nombres son del famosísimo libro de Bram Stoker, porque le hizo gracia ponerle nombres de una novela de vampiros; porque bueno, se supone que son enemigos de los lobos y son una raza criada precisamente para matarlos. Claro que es tan alto, que hasta esas bestias se ven de tamaño normal a su lado.

—Sus películas favoritas son Donnie Darko, Bladerunner 2049, toda la saga de Star Wars (menos las secuelas) y no tiene idea de por qué. Ah, y su placer culposo es Orgullo y Prejuicio, pero si alguien lo descubriera viéndola en Netflix lo mata para eliminar evidencias.

—No le gustan las pistolas ni las armas de fuego. Le parecen desordenadas y poco refinadas, dejan todo sucio y es poco prolijo. Prefiere ocupar otros métodos para eliminar personas cuando puede hacerlo él, como por ejemplo por venenos, toxinas, o a veces de manera un poco más... brutal. Como por asfixia. Prefiere las armas blancas, sin duda, pero tampoco las usa mucho, más que nada para su protección y para amenazar eventualmente; la vez que asesinó a su padre fue una excepción. Pero bueno, cuando manda sicarios, le da igual como lo hagan mientras que hagan el trabajo bien.

—Tiene un simulador de formula 1 en su casa, y es su principal pasatiempo junto con tocar el violín. Cuando no está trabajando, de fiesta o revisando que todo vaya bien en sus diversos... negocios, está haciendo una de esas dos cosas.

—Su compositor favorito es Dmitri Shostakovich. Pero Satie es un close second.

—Le gusta leer y pensar, de hecho ha leído varios libros de filosofía, un tema que le interesa mucho; algo irónico considerando que es de moralidad muy dudosa.

☆彡PODER, HABILIDADES Y DEBILIDADES.

La técnica de jutsu de Shigeru está muy mal desarrollada. Nunca investigó al respecto ni encontró alguien que pudiese enseñarle a canalizarla mejor, y a medida que los años fueron pasando y él fue acumulando más energía maldita, más difícil se le hizo. Ahora, rara vez puede utilizarla, y suele ser por medio de objetos que llega a inyectar con su energía frente a un estrés muy potente, o una emoción muy intensa; estos suelen ser objetos que pueden comportarse como látigos, permitiéndole alcanzar enemigos a mayor distancia pero limitando su rango de movimiento en combate más cercano. Estamos hablando de algo tan burdo como su corbata o su cinturón, pero una vez tuvo que conformarse con el cordón de uno de sus zapatos.

Como consecuencia del mal uso de su energía, que es esencialmente cada vez que la utiliza, Shigeru se disocia completamente de la realidad. Quizás es una respuesta frente al trauma, o es simplemente un síntoma de un espíritu muy cansado, pero durante un par de días funciona en piloto automático; y cuando despierta de su "transe", no recuerda nada de lo que hizo, como si otra persona se hubiese apoderado de su cuerpo.

Una de las condiciones que deben cumplirse para que Shigeru pueda utilizar su energía maldita, es que sea en un lugar muy iluminado. Es casi una mala broma en realidad, porque la luz muy intensa le genera un dolor punzante en su ojo izquierdo que no responde frente al reflejo natural de adaptación, y es recién entonces que puede atacar.

Como claramente no es muy ducho en canalizar su energía maldita, Shigeru se apoya mucho más en técnicas de combate más tradicionales. Es un muy buen espadachín, habiendo entrenado desde pequeño en el manejo de la katana, y cuenta con un extenso conocimiento de karate y aikido. Pero en realidad, cuando el momento lo consume, simplemente se lanza al ataque y deja que su cuerpo se mueva por sí solo; usualmente, le funciona.

Su debilidad más obvia es su tamaño. Se mueve más lento por ser tan alto, y su centro de gravedad está muy abajo en su cuerpo, lo que le permite a oponentes con otras habilidades eliminarlo con facilidad. Además, le cuesta pasar desapercibido.

Claro que todo eso vale bien poco considerando que suele ir con varios de sus hombres a todos lados, armados hasta los dientes, y que rara vez baja la guardia.