-- ¡Buenos días!, .... ¿Cómo amaneció el paciente? _Pregunto tranquilamente la enfermera, mientras se acercaba a la cama.

-- ¡Buenos días! _ Fue lo único que Rei contesto.

La licenciada, extrañada observo a la menor, porque le había contestado el saludo nerviosamente, pero no le dio mas importancia; prefiero ignorar el hecho y seguir con su trabajo.

Pero conforme, estaba haciendo los chequeos de rutina, la enfermera se había dado cuenta que las lecturas de las maquilas revelaban un cambio en Nicolas.

Así que un poco alarmada por eso, se fue hacia el doctor, para avisarle.

Pero antes de salir de la habitación, le dijo a Rei, que lo mejor era que se retire, ya que su padre iría a ver al paciente.

La morocha acepto, y cuando la enfermera ya no estaba en la habitación se despidió de su novio, prometiéndole volver más tarde.

Muy alegre y sonriendo, Nicolas despidió a su novia.

En Nerima, unas nerviosas Shampoo y Akane; iban hacia la casa de la persona que podría ayudar a Serena.

Salieron muy temprano de su casa, con la excusa que irían al mercado a comprar algunas cosas para la despensa.

La abuela, al escuchar su respuesta tan solo pidió que no se olvidaran de traer más carne, huevo y mucha aceituna.

Aceptando las órdenes se fueron, caminaron unos minutos y luego ambas jóvenes habían llegado hasta la casa de la persona que les iba a ayudar.

La estructura de esta, era de diseño tradicional, y muy amplia.

Todo lo contrario, a la pequeña, pero moderna construcción en donde vivían actualmente con la abuela.

-- ¿Crees qué este ahí? _ Pregunto nerviosa Akane.

-- Pues, .... Según lo que me dijo cuando llame, si, él está ahí dentro _ Dijo Shampoo.

-- Shampoo, .... ¿Es normal que tenga miedo?

-- No eres la unica que se siente así.

-- Mejor, vámonos, .... ¡Sí!

-- ¡Sabes muy bien que no podemos hacer eso!, .... ¡Y si estamos aquí, es para ayudar a Serena!

-- Es verdad, .... Pero porque mejor, no venidos otro día, ¡Sí!, .... Pero esta vez con los chicos.

-- Akane se muy bien, que tienes miedo, .... Pero no podemos irnos ahora, y venir otro día con los chicos.

-- ¿Por qué?

-- Porque, primero, .... Decidimos ayudar a Serena, sin que los chicos sepan, .... Segundo, porque nadie más que nosotras conocemos el secreto de la abuela y él, .... Tercero y último, quedamos para hoy día, y ya estamos acá.

Akane que ya no sabia como hacer cambiar de opinión a su amiga no dijo más.

-- Vez, que no era difícil aceptar mis palabras, .... En fin, .... Vamos, hay que acabar con esto pronto.

La pelimorada, que veía la reticencia de su amiga, solo se apresuro en tocar la puerta.

Espero unos breves segundos, cuando una joven mucama abrió la puerta.

-- ¡Buenos días!, .... Estamos buscando al _ Shampoo no acabo de hablar, ya que la joven les abrió la puerta y les indico que pasaran a dentro.

-- ¡Esto me da miedo! _ Susurro Akane.

-- ¡Ya basta!, .... Lo mejor es que te tranquilices.

Akane, solo asintió, mientras su rostro reflejaba mucho miedo.

Cuando entraron, ambas chicas, se dieron cuenta que el piso había un camino empedrado, en el que la joven mucama caminaba.

Sin más, siguieron a la joven, y conforme caminaban observaban el pequeño estanque rodeado de piedras que había al medio del patio, también vieron muchos bonsáis, como un pequeño jardín de rosas, algunos árboles frutales y sakuras (cerezos).

-- ¡Vaya!, .... ¿De verdad que la abuela rechazo esto? _ Pregunto asombrada Shampoo.

-- ¡Según lo que investigamos si!, .... Pero, ¿Por qué lo hizo? _ Pregunto desconcertada Akane.

-- Por que a pesar que nos amábamos, .... Cologne siempre impuso en primer lugar su familia _ Fue la respuesta sorpresiva de un hombre.

Akane y Shampoo, muy asustadas por la respuesta, voltearon hacia donde habían escuchado la voz.

Y descubrieron que se trataba, de un hombre de avanzada edad, que estaba vestido con un modesto yukata, pero que se notaba que era de una tela muy fina y cara.

-- ¡Buenos días! _ Dijeron ambas jóvenes, muy nerviosas.

-- Buenos días, también a ustedes, .... ¿Tu debes ser Shampoo?, ¿Verdad?, .... ¿Y tú Akane? _ Hablo el señor, señalando a las chicas cuando decía sus nombres.

-- Si _ Respondieron las jóvenes simplemente.

-- Bueno niñas, .... Creo que lo mejor, será que pasemos adentro, .... Aquí hace mucho frio _ Dijo el viejito, indicándoles el camino que debían de seguir.

Las chicas, siguieron al mayor en completo silencio, pero observando todo a su alrededor.

Vieron que la casa, estaba mayormente edificada con maderas talladas, y que los únicos adornos que había en las paredes de esta, eran pinturas antiguas de paisajes, festivales y hasta de retratos.

De pronto cuando llegaron a lo que parecía ser un salón de té, observaron una magnifica pintura de una hermosa mujer siendo abrazada por un joven muy apuesto.

En la pintura, se podía apreciar la mirada de felicidad y amor puro, que ambos jóvenes transmitían.

-- ¡Es hermosa!, ¿Verdad? _ Pregunto de pronto el mayor al darse cuenta como miraban el cuadro Akane y Shampoo.

-- ¡Disculpe!, .... No queríamos incomodarlo _ Respondió Akane.

-- No lo hicieron, más al contrario me alegra que alguien más a parte de mi y los que trabajamos acá, .... Contemplen aquella pintura _ Dijo el mayor.

-- ¿Quiénes son?, .... ¿Son sus antepasados? _ Pregunto Shampoo.

El mayor, sonrió alegremente, ante la inocente pregunta de la pelimorada y simplemente contestó que aun no era momento de contarles esa historia.

Las jóvenes, observaron muy desconcertadas al señor del elegante yukata, y fue que prefirieron cambiar de tema.

El mayor acepto tal propuesta, y fue cuando la joven que les había atendido antes, llego ante ellos con una tetera y algunas tazas.

Y para sopresa de las jovenes, la mucama sirvio elegantemente las tazas de té.

-- ¡Con su permiso!, ¡Que lo disfruten usted y sus visitas mi señor! _ Dijo la joven, antes de partir.

El mayor, asintió para luego coger entre sus manos la taza de té.

-- ¿Para qué quieren ese trabajo? _ Pregunto directo el señor.

-- ¡Bueno Señor!, .... ¡Digamos que!, .... ¡Es un asunto muy delicado! _ Hablo muy nerviosa Shampoo.

-- Happosai _ Dijo de pronto el señor, después de tomar su té.

-- ¿Eh? _ Fue lo único que dijeron ambas chicas.

-- ¡Mi nombre es Happosai!, .... Y deseo que me digan así, en vez de Señor, .... Ya que por lo que a mi respecta, no me considero tan viejo _ Dijo el mayor.

Las jóvenes asintieron en silencio mientras lo veían, y decidieron entonces llamarlo así.

-- ¡Bueno Happosai!, .... Lo que le pediremos, es un favor, .... Pero no se preocupe que le pagaremos por eso, .... Solo que ese favor no es para nosotras, .... Sino para otra persona _ Dijo Shampoo un poco nerviosa.

-- Es verdad, .... Esa persona, necesita urgente de su ayuda, .... Paso por muchas cosas negativas, y aunque suene feo, .... Le falta pasar muchas cosas más _ Expuso Akane, ante la mirada analítica de Happosai.

-- ¡Muy bien!, .... ¡Las escucho! _ Dijo pacientemente el mayor.

Las menores se miraron muy nerviosas, ya que jamás imaginaron que deberían de contar la historia de su amiga tan pronto.

-- ¡Bien lo haremos! _ Respondieron en una sola voz, ambas chicas, luego de meditarlo unos segundos.

Y así fue que Shampoo, y Akane, comenzaron a retarle todo lo que sabían y sobretodo lo que habían vivido con Serena.

Happosai, que había vivido muchos años, se indigno y sin querer rompió la taza que tenia en sus manos, cuando termino de escuchar la historia de Serena.

Las chicas muy asustadas por lo que había pasado, lo observaron muy nerviosas; ya que por un instante pensaron que el mayor, se negaría a ayudarles.

Pero en cambio, Happosai saco un pañuelo que lo tenía guardado dentro de su ropa, y se vendo la mano.

-- ¿Dónde está la niña? _ Pregunto Happosai, luego de vendarse la mano.

-- ¡En nuestra casa!, .... La abuela Cologne, así lo dispuso _ Hablo Akane.

-- Bien, muy bien, .... Mi amada Cologne, siempre fue de gran corazón _ Hablo muy risueño el mayor.

-- Si, .... Desde que la vio, no la deja sola _ Hablo Shampoo, esta vez.

El mayor asintió en silencio, luego observo a ambas jóvenes, y sin decir nada se retiró del salón.

Akane y Shampoo; que habían visto como se iba, se miraron extrañadas por la retirada del mayor.

-- ¿Hicimos algo malo? _ Pregunto Akane, desconcertada,

-- No, que yo sepa _ Respondió Shampoo de igual manera, mirando la dirección que había partido el mayor.

-- ¡Entonces!, ¿Qué paso?

-- No lo sé, .... Te juro que esta vez no lo sé.

Estuvieron así en silencio, unos segundos; cuando apareció nuevamente Happosai, y se sentó en el mismo lugar que hace unos instantes.

-- ¡Disculpen mi partida niñas, pero era necesario! _ Dijo Happosai.

-- No se preocupe _ Dijeron ambas chicas, al mismo tiempo.

-- ¡Bueno!, .... ¡Primero, necesito 02 fotografías, de la niña! _ Dijo Happosai

-- ¿Ah?, ¿Por qué? _ Pregunto Akane.

-- Simple, .... Necesito una foto, de como esta ahora, y como estará después de su cambio de look _ Dijo el mayor.

-- ¡Es verdad! _ Dijo Shampoo, dándole la razón.

-- ¡Espere!, .... ¿Acaso significa que usted aceptara el trabajo? _ Pregunto Akane.

-- Si, .... Acepto ayudarles con ese favor, .... Y por el pago ni se preocupen, porque es lo menos que necesito ahora _ Dijo Happosai.

-- ¡Gracias!, ¡Gracias!, ¡Gracias!, .... No sabe cuanto se lo agradecemos, en verdad Serena necesita mucho esa documentación falsa, para librarse de los fantasmas de su pasado y tener una vida, pero también para que pueda empezar a salir adelante ella sola _ Dijo Shampoo, emocionada.

El mayor, sonrió ante las reacciones de las jóvenes, pero luego su mirada se percato de un pequeño detalle, que antes no lo había notado.

-- ¡También les sugiero, que acaben su té!, .... Ya que sería una descortesía que no lo sé lo tomaran, con lo bueno que esta _ Dijo esta vez sonriendo, Happosai.

Las chicas se rieron ante esto último, y decidieron tomar el té.

-- ¡Bien!, .... Les sugiero que la niña, se tiña el cabello de negro, y se lo corte; .... Así nadie la reconocerá tan fácil _ Dijo Happosai.

-- ¡Es una buena idea! _ Dijo muy emocionada Shampoo, que era apoyada por Akane.

Estuvieron hablando por varios minutos, en donde Happosai, les preguntaba sobre la abuela Cologne.

Y mientras ellas estaban ahí, en la casa de la abuela Cologne, los gritos se comenzaron a hacer presente.

Ya que Ranma en compañía de Mousse, como era habitual todas las mañanas, se comunicaban a gritos.

-- ¡Silencio!, ¿Acaso esta casa es un manicomio? _ Enojada, por la bulla, la abuela les llamó la atención.

-- Lo sentimos abuela _ Dijeron ambos jóvenes al mismo tiempo.

-- ¡Hm!, .... Siempre me dicen lo mismo, y siempre lo hacen, .... ¡Ranma!, .... ¿Ya está el desayuno?

-- Si abuela, .... Ya hasta lo serví para todos.

-- Bien, muy bien, .... ¡Mousse!, .... ¿Botaste la basura y fuiste al correo a dejar los sobres que te encargue ayer?

-- ¡Eh!, .... ¡Bueno!, ¡Pensaba hacerlo después del desayuno, abuela!

-- ¡Insensato!, .... Anda ahora mismo y has lo que te ordene de una buena vez.

-- Si abuela.

Y sin decir más, Mousse tuvo que cumplir con las órdenes.

Luego se giró hacia Ranma, y este al verse observado por la mayor, se sintió un poco nervioso y hasta intimidado.

-- ¿Sucede algo, abuela?

-- ¿Qué se traen?

-- ¿Eh?, ¡No entiendo su pregunta!

-- ¡Hm!, .... ¿Seguro que no sabes nada?, o ¿Simplemente las estas encubriendo para no enterarme de sus planes?

-- ¡Abuela!, ¿De qué está hablando?

La mayor, lo observo unos momentos, y comprobó por los gestos de sorpresa de reflejaba el joven, que no sabia nada de lo que su nieta y su amiga, estaban haciendo.

-- ¡Ranma!, .... Si llegas a saber algo, me lo dirás de inmediato, .... ¿De acuerdo?

-- ¿Abuela?, ¿Qué es lo que está pasando?

-- ¡Creo que las niñas, intentan ayudar a Serena!, ¡Y quiero saber de que forma lo quieren hacer!

El pelilargo, observo muy sorprendido a la abuela, preguntándose que como era posible que sea haya dado cuenta, y el junto con Mousse, que son sus novios, no sospechen de las intenciones de sus novias.

-- ¡Se lo que te preguntas!, .... Pero no te olvides, que el "Diablo Sabe más por Viejo, que por Diablo".

-- ¿Cómo se dio cuenta?

La abuela, lo observó sonriendo y luego se dirigió hacia la cocina.

Ranma, que quería respuestas, la siguió.

-- ¡Despierta a Serena, y dile que ya está el desayuno listo!

-- ¡Pero!, .... ¿No me dirá, como se enteró?

La abuela solo sonrió y le dio la espalda, dando así por finalizada la conversación.

Desilusionado por no haber obtenido nada, se marcho hacia la habitación de la rubia, para darle el mensaje.

Toco un par de veces, antes de que le contestaran.

-- ¡Serena!, .... ¿Puedo pasar?

-- ¡Un momento!, .... ¡Estoy cambiándome!

-- ¡No te preocupes Serena, yo espero!

-- ¡Bien, ya puedes pasar!

-- ¡Wow, Serena!, .... Estas super linda, en verdad la ropa tradicional antigua que la abuela te presto, te queda muy bien.

-- ¡Gracias Ranma!, .... ¡Pero no tienes que mentirme!

-- ¡Hey!, Jamás mentiría con algo así, .... De verdad que esa ropa, por más antigua y vieja que sea, .... Te queda super bien, .... Hace resaltar mucho tu belleza natural.

La menor, al recibir aquel sincero alago, sus mejillas se comenzaron a teñir de carmín.

Ranma, al observar que la joven estaba bajando la cabeza por lo avergonzada que estaba con sus ultimas palabras, se aclaro la garganta para llamar nuevamente su atención.

-- ¡El desayuno ya esta listo!, .... ¡Así que linda Princesita!, .... ¿Me hace el honor de acompañarla?

Serena al ver como su amigo, estira su mano como si pidiera permiso, se rio en silencio y le siguió en juego.

Fueron caminando así, entre bromas y risas hasta la cocina.

En donde les esperaba, la abuela para así ingerir el desayuno todos juntos.

-- ¿Y Mousse?, ¿Por qué no está aquí? _ Pregunto la rubia.

-- Porque esta haciendo unos encargos que se olvidó de hacerlo más temprano _ Respondió la abuela, antes de tomar su té.

-- ¿Ah?, ¿Demorara mucho? _Pregunto Serena.

-- ¿Por qué lo preguntas? _ Dijo Ranma, antes de coger un rollo de huevo.

-- ¡Bueno quería que me ayudara con algo!

-- ¿Con qué? _ Preguntaron al mismo tiempo, la abuela y Ranma.

-- ¡La verdad, quería emprender un negocio de joyas de fantasía! _ Hablo Serena.

La abuela y Ranma, se observaron unos segundos, antes de pasar lo que tenían sus bocas.

-- ¡Serena, mi niña!, ¿Por qué pensaste en las joyas de fantasía? _ Pregunto la abuela.

-- ¡Hey abuela!, .... ¡Las joyas de fantasía son una buena idea!, .... ¡Serena, si deseas yo también te puedo ayudar a fabricarlas, Mousse no es el único con el talento para hacerlas!, .... ¡Y no es por presumir, pero yo le enseñe a Mousse, lo que sabe! _ Dijo Ranma muy alegre.

-- Bueno abuela, lo pensé como una forma de ganar dinero, .... Además, como dijo Ranma, esas joyas son una buena idea, ya que aparte de que será un ingreso para mí, también lo será como una distracción _ Hablo Serena

Cologne, al escucharla, sonrió de forma sincera.

Ranma, en cambio abrazo de forma efusiva a la menor.

A lo que causo, el enrojecimiento en las mejillas de Serena.

-- ¡Bueno!, .... ¡Si ya estas decidida a ello!, Solo nos queda apoyarte mi niña, .... Pero eso sí, no deseo que te sobrecargues mucho _ Dijo Colgne.

-- ¡Si, Serena!, .... Tienes que cuidarte, mucho; .... Ya que ahora no solo estamos hablando de ti, sino también del bebé _ Hablo Ranma, mientras señalaba su vientre.

La rubia, asintió en silencio sonriendo.

Luego prefirieron seguir con su desayuno.

Y cuando estaban a mitad, llego un sudado Mousse.

Se sentó al lado de Ranma, y prosiguió a ingerir sus alimentos de forma rápida.

Luego de unos minutos, ya acabado sus alimentos, Serena comenzó a recoger los servicios, para luego llevarlos a la cocina y luego limpiarlos.

Los jóvenes se fueron hacia su habitación, ya que estaban un poco cansados, por lo que habían trabajado el día anterior en el Cabaret.

Ya que su idea era entrar al local como meseros desde un inicio.

Pero sus planes se vieron frustrados, debido a que no tenían experiencia y por ello habían empezado a trabajar como apoyo en la limpieza y ayudarlos con la movilización de las grandes cajas y cargas.

Serena que sabían muy bien que el ingreso que obtendría por la fabricación de las joyas de fantasía, no iba a ser muchas.

Pensaba en conseguir otro trabajo, aunque sea de limpieza o cualquier cosa, con tal de que la ayude a sobrellevar los gastos de su maternidad y sobretodo una buena vida para su bebé.

La abuela, que sabía muy bien cuál era la preocupación de la menor.

Pensó por unos momentos en pedir ayuda a un viejo conocido, ya que sabia muy bien por experiencia propia, que aquella persona, era muy bueno con lo que hacía.

Y si le contaba lo que pasaba, estaba segura que Happosai, lo entendería y ayudaría a Serena sin ninguna objeción.

Así que, sin pensarlo más tiempo, se acercó a Serena que ya había acabado de limpiar la mesa y había dejado también todos los servicios limpios.

-- ¡Serena!, ¡Mi niña!, .... Puedes venir un momento conmigo a la sala.

-- ¡Si abuela!, ¿Sucede algo malo?

-- No, claro que no, .... No es nada de eso, .... Es solo que quiero decirte, o más bien comentarte una idea que tuve.

-- ¿Así?, .... ¿Y que clase de idea se le ocurrió abuela?

-- Primero, siéntate y luego te digo la idea que se me ocurrió, .... ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, No me mires así, que no es nada malo.

-- ¡Hm!, ¡OK!

-- Ja, Ja, Ja, .... Sabes Serena, desde el momento en que te conocí, sentí una gran conexión contigo, .... Y es por eso que deseo ayudarte lo más pueda, pero .... ¡Espera un momento, déjame terminar y luego hablas!, .... Bueno como decía, .... Te quiero mucho Serena y en verdad que te deseo toda la felicidad que en este mundo pueda existir, .... Además, te voy a apoyar en todas y cada una de las decisiones que tu tomes.

La adolescente muy emocionada por las palabras recientes de la mayor, se llevo ambas manos al rostro, para que así Cologne no vea lo que aquellas tiernas palabras habían causado en ella.

-- ¡Todo va estar bien!, ¡No te preocupes!

-- ¿Cómo puede decirme eso?, .... ¡Si ahorita no se como hacer con los gastos que se vendrá más adelante!

-- ¡Si te digo que tengo una solución!, ¿Me creerías?

-- ¿A qué se refiere?

-- Yo sé que es en contra de la ley, pero es la única manera que por el momento encontré para ayudarte.

-- ¿Abuela que cosa me quiere decir con eso?

-- No tengas miedo, que no te pediría nada que tu no estes dispuesta a hacer, y más aún que no lo soportarías.

Serena observo muy desconfiada a la mayor.

-- Conozco a alguien, que puede hacer unos documentos falsos, para ti.

-- ¿Qué?, ¿Qué está diciendo?

-- Lo que entendiste, .... Que te puedo ayudar, con falsificar tus documentos, así aumentaremos tu edad y podrás trabajar, .... ¿Qué dices?

-- ¿De verdad?, .... No es ninguna mentira, ni una broma de mal gusto.

-- ¿Por qué te haría algo como eso?

Serena medito sus palabras y sonrió luego.

-- Por tu sonrisa, deduzco que estás de acuerdo, ¿Verdad?

-- Si, y mucho.

Pero cuando la abuela iba a hablar, fue que llamaron a la puerta, y entonces Cologne le indico a Serena que vaya a su habitación y no salga de ahí hasta que le indicara lo contrario.

Cologne espero a que la rubia este bien protegida, y fue hacia la puerta para ver de quien se trataba y que era lo que quería.

-- ¡Hola mi linda Coly!, ¿Hace tiempo que no nos vemos?, ¿Verdad? _ Lo dijo con una voz muy alegre y sonriendo.

-- ¡Happy!, ¿Tú?, ¿Aquí?, .... ¿Cómo llegaste? _ Pregunto desconcertada la abuela.

-- ¡Estoy bien gracias!, .... Y según veo, tu estas mucho más guapa que antes.

La mayor se sonrojo por el cumplido.

-- ¿Este?, .... ¿Crees que podemos pasar a tu sala?, .... ¿Para hablar cómodamente ahí?

-- ¿Eh?

Happosai, le indico con su dedo la sala, y fue cuando Cologne comprendió lo que quería decirle.

Así que, sonriendo de forma avergonzada, le abrió la puerta en su totalidad, y le permitió entrar.

Happosai, solo sonrió.

-- Ponte cómodo Happy.

-- Gracias Coly, .... Sabes, Tu casa sigue siendo igual a como la recuerdo.

-- Pues, intente mantenerla igual.

-- Ya veo.

-- Dime Happy, ¿A qué se debe tu visita?

-- Siempre tan directa, por eso era que nos traías a todos locos.

-- Happy, .... No te desvíes del tema y solo responde.

-- Vale, Vale; .... Te lo diré, .... Pero deja de mirarme así, como lo estas haciendo, .... Bien, vine aquí a buscar a la chica.

-- ¿Qué?, ¿De qué chica estás hablando?

-- Ya se todo Coly, .... Y vine aquí, para hablar personalmente con la niña y decirle algunas cosas que la pueden ayudar.

Cologne que no entendía que pasaba, lo observo en silencio por varios segundos, en donde Happosai, no le quedo de otra que contarle, lo que habían hecho Akane y Shampoo, horas antes.

-- ¿De verdad?, .... Happy, ¿De verdad lo harás? _ Pregunto muy alegre Cologne.

-- Si, .... Porque sé muy bien, las razones que te impulsaron a ayudar a esa niña.

-- ¡Hay Happy!, .... Sabes, yo pensaba ir a verte también en estos días.

-- ¿Así?, ¿Y eso por qué?, .... ¡Claro si se puede saber!

-- Pensaba pedirte lo mismo que mis niñas te han pedido, .... ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, .... ¡Que ironía de la vida!

-- Si, Coly, ¡Que irónico!

Luego de haberse puesto de acuerdo con respecto a Serena, la abuela y Happosai, quedaron que lo mejor era decirle aquella buena noticia a Serena, en la tarde.

Ya que ahí todos estarían presentes, y sería más fácil celebrarlo también.

Hola dostys, bueno qui les traigo el 2° cap de esta maratón, espero que les guste.

Gracias por su apoyo, son los mejores.

Muchas vibras positivas y abrazos de conejitos.