Los superheroes miraron todo el lugar, como había terminado todo después de aquel suceso con el vecino de su amada, había quedado un desastre, sangre esparcida por todo el lugar, unas que otras partes del cuerpo del sujeto se encontraban en una pequeña mesa mientras un pequeño foco alumbraba todo.

Sonrieron.

Estaban felices después de todo, no había otra piedra más que estorbara en su camino, todo resultó tal y como ellos lo planearon.

Su amada, su pequeña niña, nunca vio las verdaderas intenciones detrás de ese hombre, siempre tan inocente.

Según ellos, él hombre de quien se habían deshecho y vecino de su Jazmín. Planeaba separarla de ellos, quería que ya no la volvieran a ver, planeaba violarla y ponerle unos cuantos bastardos en su pequeña panza, hacerla su esposa y alejarla para siempre de ellos.

Claramente no fue así, él solo quería lo mejor para ella, pero bueno, el bien nunca gana y menos en un mundo como este.

Bien, hay que deshacernos de lo que queda de ese bastardo. Brujita, ¿Nos harías el favor? - Tony Stark habló mientras señalaba la cabeza y los brazos que se encontraban en la mesita.

Wanda asintió, y con un movimiento de dedos hizo que las partes del cuerpo se esfumaran.

Wow, ella sí que es poderosa ¿no lo creen?

Por otro lado, Jazmín se encontraba despierta después de haber tenido un pequeño ataque de ansiedad, estaba deseosa de morder algo o golpear a alguien.

Su pequeña perrita chilló cuando la vio de esa manera, no le gustaba cuando su mejor amiga se encontraba en esa condición, agachó sus orejas y la observó.

Jazmín estaba haciéndose de manera rápida un café para calmar su ataque, no se encontraba para nada bien y ella lo sabía. Lágrima tras otra empezaron a salir de sus ojos, no le gustaba sentirse así, se sentía como si fuera un pájaro enjaulado el cual no puede volar, se sentía aprisionada.

Kiara ladro, ladro lo más que pudo para hacerle saber a su amiga que ella no estaba sola, que ahí estaba ella, su mejor amiga.

Lo siento Kiara, no me gusta que me veas en esta condición, pero sabes que no puedo controlarlo - se tallo de manera brusca sus ojos quitándose las lágrimas de una vez.

De la nada, se escuchó como alguien tocó la puerta del apartamento.

Rápidamente Jazmín miró el reloj.

3:45am

Era muy tarde o muy temprano para tener visitas. Hizo una mueca.

De manera sigilosa se acercó a la puerta y observó por el pequeño agujero quién era la persona que llegó a su casa de sorpresa.

Vaya, si que se sorprendió al ver a los vengadores parados ahí con unas sonrisas, sonrió feliz de verlos, necesitaba algo de compañía humana a su lado.

¿Qué hacen por aquí a estas horas de la madrugada? - Preguntó Jazmín mientras señalaba el reloj que se encontraba en la pared de su sala.

Perdón por molestar pequeña, pero queríamos verte - habló esta vez Steve Rogers mientras ponía una mano detrás de su nuca, claramente estaba nervioso.

Pero Natasha rápidamente se dio cuenta de que algo no andaba bien en la luz de su vida, vio como sus ojos estaban hinchados como si hubiera llorado, luego dirigió su mirada a los brazos de esta misma y nuevamente vio como estos sangraban, Jazmín se había lastimado con alguna cuchilla o con sus propias uñas sus brazos.

¿Qué te pasó cariño? ¿Estás bien? ¿Quieres que un médico te revise? - hizo presencia rápidamente alertando a los demás que observaron la situación y al percatarse de lo que pasaba entraron en pánico.

Su niña estaba lastimada, estaba herida y su ojos estaban rojos, y no estuvieron para ella en su momento.

¿Qué? ¿De qué habl...? - Miró su brazo y cayó en cuenta de la situación, maldijo en su interior, ¿cómo se había olvidado del estado tan deplorable en la que se encontraba?

Rápidamente todos entraron a su casa sin permiso, Wanda rápidamente agarró su brazo y lo curó, ¿cómo? quién sabe, pero lo curó.

Deberrías tener más cuidado Jazz, no sé qué harríamos si algo más grave te sucediera - su característico acento marcado se dio a relucir con un tono de nervios.

Sí, perdón por eso, tendré más cuidado la próxima vez - murmuró con su cabeza gacha impidiéndoles a sus acompañantes que vieran su cara toda roja de la vergüenza que sentía.

Otra vez había quedado como una tonta delante de ellos, había quedado como una enferma mental que busca atención con cortes en sus brazos.

Y aunque no era del todo mentira, ella se sentía mal por eso, no le gustaba que la vieran en ese estado tan patético.

Unas lágrimas amenazaron con salir pero ella no las dejó, debía ser fuerte por una vez y demostrar que no era débil.

De la nada, sintió como le levantaban su carita.

No te avergüences, princesa, aquí estamos nosotros quienes te aman en todas tus facetas - Bruce Banner hizo acto de presencia por primera vez en todo el rato.

Jazmín se sorprendió ante aquellas palabras, ¿la amaban? ¿en realidad la amaban?

No dijo nada, estaba impactada después de eso, se le hacía raro que la amaran en tan poco tiempo de haberla conocido. Y fue ahí donde le pasó algo por la cabeza, ¿y si ellos eran...?

¡NO! eso sería ridículo totalmente ridículo.

Bueno, no hablemos de eso y menos ahora que estás así, mejor enfoquemonos en tratar de despejar un poco tu mente de aquellos malos pensamientos ¿si? - mencionó Peter Parker y con un poco de nervios encendió la tele y puso unas caricaturas.

Bien, empecemos con la misión "Alegrar a la niña" - volvió a hablar la araña y empezó a sacar algunas cosas.

Después de todo, nunca es tarde para alegrar a la persona que amaba...

Tres días después...

Punto de vista Jazmín.

Habían pasado tres días desde que los vengadores habían venido de sorpresa a mi casa a las 3 de la madrugada, y exactamente se cumplían 3 días desde que no veía a mi vecino/amigo José.

Mmm eso es un poco sospechoso.

Él no sale casi nunca de su casa y cuando lo hace me avisa. No tiene familia, era hijo único al igual que sus padres, por lo tanto tampoco tiene tíos. Sus abuelos habían fallecido hace dos años después de que a los dos señores les dio un infarto en el corazón.

Sus padres también estaban muertos por lo que sencillamente ya no tenía a nadie más que a mí, ni siquiera una novia o algo, nada.

Stephen Strange me convenció de no informarle a la policía de su desaparición, que ellos mismos se encargarían de investigar a donde se había ido, después de todo ellos tenían alta tecnología y magia.

Claro que les hice caso, confío en ellos y sé que lo encontrarán.

Pero...

Jazmín, pequeña, ¿estás por aquí? - me asusté al escuchar la voz de mi brujita, sonreí feliz de saber que ella estaba aquí.

Sí, aquí estoy, en la habitación - grité mientras me arreglaba un poco mi cabello.

Oh, aquí estás, vine a decirte algo que segurro te alegrará un poco, es sobre tu amigo José - mencionó con una pequeña sonrisa en su rostro. La miré impaciente.

¿Ah sí? ¿qué es? ¿ya saben su paradero? - salté en mi lugar feliz, por fin buenas noticias.

Aún mejor, haré que te olvides de él para siempre princesa, lo hago por nosotros - observé como una pequeña luz escarlata se empezaba a formar en su mano izquierda.

Me asusté, pero ya no pude hacer nada, con una gran velocidad se acercó a mí y de ahí ya no supe más...

Y así, lo recuerdos de José se desvanecieron como espuma en el aire.

Perdóname mi niña, solo queremos lo mejor para ti...

hola, volví, perdón por tanto tiempo sin actualizar :(((