—¿Me perdonas?— preguntó el rubio cuando se separaron.
—Si, pero con una condición— contestó ella sonriendo con cinismo.
—¿Cuál?— preguntó él frunciendo el ceño.
— Acércate — dijo ella haciendo una seña con el dedo, así que cuando sus rostros estaban rosandose ella lo miró. — Bésame— continuó Sabana y él no lo dudo ni un segundo, porqué sus labios empezaron de nuevo esa danza entre sí.

— Sí es niña quiero que se llame Susan— dijo él acariciendole el abdomen a Sabana.
—No, me gusta más Melanie— dijo ella y él negó.
—Mariana— continuó Jack.
—No, Scarlett— dijo la pelinegra. —, Y sí es niño Luca— añadió.
—No, debe llamarse Jack junior— dijo él sonríendo divertido.
— Jamás, no se llamará así— agregó ella.
—¿Por qué no? Sería el más guapo y tendría el mejor nombre de todos— dijo con arrogancia el rubio, causándole gracia a la pelinegra.
—Eres un egocéntrico— dijo ella mientras lo empujaba con su mano no enyesada.
— Sabés hermosa, ese niño será el más afortunado por tenerte como mamá— dijo él acariciendo el vientre y ella sonrió dulcemente.
—No estoy tan segura Jack, tengo miedo de no serlo— añadió ella acariciando su vientre.
—No te preocupes por eso amor, serás una excelente mamá, estoy seguro de eso— agregó Jack y ella lo miró con una sonrisa.
—,y tú serás un gran papá— dijo ella acariciando la mejilla del rubio.

Sabana se quedó dormida, así que velo sus sueños. Estaba feliz, su amor, su florecilla lo había perdonado y está vez no volvería a equivocarse. Lo daría todo por su familia, su prometida y su hijo.

Cada día era mejor, las cosas con Sabana estaban mejor , cada día compartía con ella que ya estaba deseosa de salir de ese hospital.
—Buenas tardes— dijo una voz masculina entrando a la habitación.
—Oficial Coleman ¿Alguna novedad?— preguntó la pelinegra al policía.
— Así es señorita Williams ¿Conoce a éste hombre?— preguntó el policía y ella frunzo el ceño ¡Claro que lo conocía!.
—Por supuesto que sí, estudiamos juntos en la universidad— contestó ella. —¿Pero eso qué tiene que ver con la investigación?— preguntó la pelinegra confundida. Y por un lado Jack también estaba confundido, aunque nunca le haya caído bien ese hombre, era muy extraño que lo sacarán a reducir en ese momento.
—En éste momento está siendo buscado por la policía, tenemos pruebas que Franco O'Connor es el culpable de su accidente— avisó el policía y en ese momento Sabana entró en shock. Eso no podía ser ¿Por qué Franco haría algo así? Se preguntaba así misma. —Tenemos cámaras de seguridad donde se nota que el trabajo sucio lo hizo ese hombre— añadió el oficial y ella empezó a sentir pánico ¿Cómo fue capaz de algo así? Y ¿Por qué?.

Jack sentía la sangre hervir, ese miserable intentó matar a su florecilla, pero él se encargaría que pase toda su maldita vida en la cárcel, ese abogaducho de cuarta pagará muy caro haber intentado matar a la mujer de su vida.

El policía se retiró de la habitación y Sabana estaba perdida en sus pensamientos.
—Mi amor, lo van a encontrar y no podrá hacerte más daño— dijo él acariciendole el cabello.
—No es eso Jack, es qué aún no entiendo por qué me hizo eso, se suponía que éramos amigos, colegas, no entiendo por qué intentó matarme— dijo ella aún perdida de la realidad.
Él la abrazó, y en sus brazos ella se sentía protegida, se sentía en paz.
—Nunca me dejes— dijo ella en su pecho.
—Nunca lo haría mí amor— contestó él abrazándola con fuerza.

—Pero que bonito es el amor— dijo una voz varonil entrando a la habitación. Sabana al escucharla se tensó inmediatamente y Jack frunzo el ceño al no reconocer a la persona que había entrado a la habitación.
—Espero y me hayas extrañado mí querida hija— añadió el desconocido con sonrisa retorcida.

Sorpresa! No me odien 😔 ahora que se avecina. Estamos a tres capítulos para que finalice Obsesión. ¿Qué opinan al respecto sobre la llegada del ser más despreciable de ésta novela?...

Les quiere Yarlin 💜