Se removió de la cama y sonrió al sentir un brazo cruzar su cintura, su cabeza descansaba en el pecho de Jack  mientras su brazo la rodeaba. Su nariz empezó a jugar con la barbilla del rubio y él se removió con una sonrisa maliciosa.
-me gusta despertar de ésta manera- dijo él con su voz ronca y adormilada y ella sonrió mientras cruzabas sus piernas quedando en una posición prohibida. -me estás torturando florecilla- agregó él con su sonrisa pervertida.
- debo ir a darme un baño- dijo ella tratando de levantarse, pero las manos del rubio no se lo permitieron.
-no, no, no y no primero mi desayuno favorito- dijo Jack y se dió la vuelta dejando a la pelinegra debajo de su cuerpo.

Después de una seción de sexo en la cama y después en la ducha, los dos bajaron a la cocina mientras Sabana preparaba el desayuno, Jack admiraba esas piernas estiradas que sobresalían en esa falda tubo.
- Tostadas, tocino y huevo- dijo ella acercándose con una sonrisa. - ¿cafe o zumo?- preguntó dejando al plato frente a él.
-zumo está bien- contestó él y ella asintió sacando el zumo de la nevera y servirle un vaso. La pelinegra se sentó frente a Jack que se disgustaba con su desayuno.
- sabe rico- dijo el rubio y ella sonrió.
- sirve tener una amiga chef- dijo ella riéndose contagiandolo a él.
- me gusta como sonríes- dijo él acariciendo la mejilla de la pelinegra mientras miles de sensaciones invadían su corazón, alejó la mano tratando de olvidar eso que esa pequeña florecilla lo hacía sentir por qué no era bueno para su venganza y no quería dar el brazo a torcer.
-sabes Jack me gusta pasar tiempo contigo- dijo ella ganándose la curiosidad del rubio. - tengo miedo- aceptó la pelinegra y él frunzo el ceño.
-¿Por qué?- preguntó él acorralandola a ella entre la encimera y su cuerpo.
- temo enamorarme de ti- confesó la chica y él tragó duró. - mi vida no ha sido fácil y tengo miedo que todo ésto sea un sueño del cuál pronto voy a despertar- prosiguió ella y él solo estaba serio prestando atención. -, y sé que no podría soportar otro golpe más por qué eso me destruiría para siempre- añadió ella y él se tensó, eso era lo que él quería destruirla, pero por qué le dolía verla tan vulnerable, por qué sentía que su pecho se encongia con verla así y por qué su corazón latía al tenerla tan cerca que lo único que quería era protegerla, por qué razón sentía que debía protegerla si su único motivo para estar en ese lugar era destruirla.
- florecilla déjame demostrarte que no tienes nada que temer- dijo él, pero su pecho dolía por qué sabía que era mentira, que él buscaba su destrucción. Ella sonrió con dulzura al escucharlo, solo esperaba que esas palabras fueran ciertas por qué estaba empezando a confiar ciegamente en él, en ese hombre que llegó a su vida para hacerla sentir querida y deseada.

Se despidieron y cada uno se refugió en su trabajo tratando de olvidar al otro, pero les hacía muy díficil sacar al otro de la cabeza.

Jack miró su teléfono y no tenía nada de la florecilla, ni un mensaje, ni una llamada y no sabía por qué estaba tan pendiente de todo lo que rigiera a ella.
Sabana trataba de contenerse a no mandarle nada ya que no quería parecer una intensa, pero en su boca se formó una sonrisa al ver su teléfono brillar con un mensaje.

"te extraño 😚 mi florecilla" ella sintió su corazón latir a mil por hora.
"yo también 😍" contestó y suspiró profundamente mientras las supuestas mariposas revoloteaban en su estómago.

Tyler entró a su departamento mientras soltaba su corbata.
- hola bebe- dijo la rubia y él frunzo el ceño no esperaba que su princesa estuviera en su departamento.
-hola amor- saludó y después beso a Hannah como amaba a esa mujer.
- te preparé la cena- dijo la rubia y en ese momento sus ojos brillaron, ya había dicho que amaba a esa mujer bueno ahora lo volvía a repetir.
- sabés me encanta la pareja que hacen Jack y Sabana- dijo la rubia y él se tensó. - por qué no salimos los cuatro sería estupendo- dijo Hannah y él tragó saliva, sabía del plan de Jack y no estaba para nada de acuerdo con su mejor amigo, pero temía decirle la verdad a la rubia por qué era obvio que ella se lo diría a su mejor amiga además seguramente lo odiaría por ayudarle a Jack, por otro lado estaba ese rubio insoportable, si él hablaba estaría traicionando a su mejor amigo así que lo mejor era quedarse callado, talvez Jack pronto notaría su error y todo estaría bien y normal.
-me parece bien- contestó él y la rubia sonrió de oreja a oreja mientras un delicioso platillo aparecía en su visión preparado por ella para su novio.

Bueno Jack por favor no nos rompas el corazón 💔💔💔.

Les quiere Yarlin 💜