Capítulo 22

Los rayos de sol se asomaron por la ventana directo a su cara así que la pelinegra se removió tratando de opacar la luz, pero era imposible. Estiró su mano aún media dormida, pero se extrañó a no sentir a su acompañante así que se levantó de un respingón. Su mirada viajó por toda la habitación, pero no había nadie hasta que la puerta del baño fue abierta y de el apareció Jack con una toalla en su cintura, dejando ver su pecho bien formado y gotitas de agua que recorrían su abdomen en ese momento a la pelinegra empezó a darle un poco de sed.
Sus mejillas se sonrojaron cuando fue cachada comiéndose con la mirada al rubio y el mensionado sonrió con arrogancia.
- dura más una foto sabías- dijo de forma prepotente y ella rodó los ojos.
- eres un arrogante de mierda- contestó la chica mientras se levantaba de la cama y colocaba una de sus batas de dormir para luego dirigirse hacia la cocina a preparar el desayuno.

10 minutos después Jack apareció en la cocina ya vestido con su smoking y su pantalón de vestir que resaltaban ese cuerpo indescifrable.

En el desayuno ninguno mensiono ninguna palabra, pero cuando el rubio estaba apunto de irse Sabana lo besó y él no dudó en corresponderle, pero en ese momento la puerta principal fue abierta y los dos se separaron como si estuvieran haciendo alguna travesura.

Los dos se quedaron inmoviles a la atenta mirada de la rubia insoportable que parecía estar sorprendida.

De los tres el que primero reaccionó fue Jack.
- eh me tengo que ir- dijo él dejando un casto beso en la boca de la pelinegra y sonriendo de medio lado a la rubia que tenía el ceño fruncido.

Jack desapareció dejando a las dos chicas solas y Hannah miró a la pelinegra con una ceja alzada dándole un porte intimidante.
- te desapareces por dos semanas sin dar aviso a nadie y ahora llego a tu departamento y me encuentro con esta sorpresa- dijo la rubia mientras colocaba sus manos en la cintura como si se tratara de una mamá regañando a su hijo. - Tienes mucho que explicar Sabana Williams- dijo señalandola y la pelinegra rodó los ojos.

Jack llegó a la oficina con una sonrisa socorrona, todo estaba saliendo como él quería y Sabana Williams estaba cayendo a sus pies de manera muy fácil.
En la oficina se encontraba Tyler con el ceño fruncido y levantó su mirada al notar la presencia del rubio. El castaño hizo un saludo con la cabeza.
- todo está saliendo como quiero- dijo sonriendo con malicia el rubio.
- Sabana Williams ya está en mis manos- añadió Jack y su mejor amigo negó con la cabeza.
- Jack hasta cuando vas a seguir con esa estupidez- dijo fastidiado el castaño.
- no me vengas con eso Tyler- dijo rodando los ojos el rubio. - esa mujer se lo merece- prosiguió Jack y su amigo negó con la cabeza.
- en serio crees que ella lo merece- dijo Tyler enojado. - me parece que estás siendo demasiado infantil- prosiguió el castaño. - ni si quiera la conoces bien- añadió Tyler y el rubio lo fulminó con la mirada.
-claro que la conozco- dijo furioso con su mejor amigo. - esa mujer fue mi compañera en el instituto- agregó chocando su puño en la mesa. - esa mujer es una víbora sin sentimientos que no le importa pasar por encima de los demás para salirse con la suya- dijo apretando su mandíbula.
- sabés que Jack que hayas sido su compañero no te hace conocerla- dijo enojado el castaño. - las apariencias engañan- dijo Tyler. - aveces las personas muestran una cara al mundo, pero eso no significa que sea su verdadera cara- agregó el castaño. -yo no pienso volver ayudarte con nada que tenga que ver con Sabana- dijo Tyler. - no pienso poner en riesgo mi relación con mi princesa por culpa de un capricho tuyo con querer hacer sufrir a su mejor amiga- dijo el castaño mirando seriamente al rubio. - espero Jack que cuando te arrepientas no sea demasiado tarde- agregó su mejor amigo y después salió de la oficina topandose con una castaña ingnorandola.

Jack estaba furioso con su mejor amigo y en ese momento no quería ver a nadie, pero ese día estaba de mala suerte al notar otra presencia en su oficina con sonrisa maliciosa.
-hola muñeco- dijo la castaña alzando una ceja.
-¿Qué haces aquí? No estoy de ánimos para atenderte- dijo de mala manera el rubio.
- bajale dos rayitas a tu rabia muñeco- dijo la castaña sentándose en unas de la silla cruzándose de piernas. - así que me has cambiado por una simple venganza- dijo Ashley con malicia y él tensó la mandíbula.
- escuchaste la conversación- dijo furioso y ella lo miró divertida. - no voy a permitir que intervengas en mi camino- añadió Jack y ella rodó los ojos.
- y no has pensado que puedo ser una gran aliada para tú vengaza muñeco- dijo la castaña sonríendo con picardía.
- no necesito tu ayuda ahora lárgate de mi oficina- ordenó y ella se levantó para retirarse, pero antes de salir lo volvió a ver.
- muñeco vas a saber de mí te lo juro- dijo y después salió de la oficina con una sonrisa maliciosa mientras sacaba la pequeña grabadora que tenía en su falda. Esa era su próxima arma para recuperar a Jack, pero ahora solo movería sus cartas en silencio y con ese pensamiento Ashley subió a su auto.

Les quiere Yarlin 💜

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top