Las respiraciones agitadas era lo único que sonaba. Jack la miró y de nuevo se apoderó de su boca.

Las piernas de la pelinegra rodearon la cintura del rubio aún entre besos. Las manos de Jack estaban en el trasero de Sabana que disfrutaba de esas sensaciones que por momentos la asustaban.
- pequeña, eres hermosa- susurró Jack en sus labios y adueñándose de su boca otra vez se encaminó hacia las escaleras subiendolas con mucho cuidado mientras ese sabor a fresa invadía sus paladar.

Abrió la puerta con una patada y lanzó en la cama con mucho cuidado a la pelinegra que estaba hipnotizada.

Él se sacó su camisa dejando al descubierto ese cuerpo escultural y se colocó arriba de la pelinegra adueñándose de su boca, se separaron por falta de oxígeno.

El rubio se apoderó del cuello de Sabana mientras ella se estremecía de placer. Las manos de Jack recorrían las piernas de la pelinegra sintiendo esa piel suave.  Se levantó sacando la camisa que Sabana llevaba puesta dejando al descubierto sus pechos ya que no traía nada por debajo.

Su boca se apoderó de uno de los pechos mordiendo y chupando el peson de la pelinegra, mientras ella se retorcía de placer, la boca del rubio viajó hasta el otro pecho haciendo el mismo procedimiento.
-Jack- jadeó la pelinegra y él sonrió.
-¿Qué pasó princesa?- preguntó con perversión, mientras ella solo tenía los ojos cerrados y sus mejillas rojas.
-no me tortures- dijo ella y él bajó sus manos hasta el centro de la pelinegra pasando su mano por esa parte sencible en medio de las piernas mientras ella solo gemía de placer.

Jack bajó las bragas de Sabana dejándola completamente desnuda y mojada lista para él.

Ingresó uno de sus dedos torturando un poco más a la pelinegra que se retorcía de pasión en la cama.

Sacó su dedo de esa parte tan vulnerable y sacó su pantalón junto con su boxer además que abrió el látex colocándose el condón y así acercándose de nuevo a la chica. Su gran erección y la hizo suya otra vez.

Sabana se removió cuando la luz de la ventana estaba molestándola, pero le llamó la atención un brazo que recorría toda su cintura e imágenes de la noche anterior empezaron a invadir a su mente. Se sonrojó un poco avergonzada.

Trato de safarse, pero lo único que logró fue que Jack la pegará aún más a él, dejándole al descubierto esa erección que chocaba con su espalda y en ese momento recordó que estaban completamente desnudos bajo las sabanas.

Trató otra vez de salir de sus brazos, pero la única repuesta que recibió fue un gruñido.
- quédate quedita princesa aún es temprano- susurró esa voz ronca y adormilada en su oído y un calor invadió todo su cuerpo sonrojandola completamente.
-Jack- dijo ella tratando de salirse, pero él se removió.
-no te muevas Sabana sigue durmiendo- dijo apretándola aún más como si nunca quisiera soltarla.
- debemos levantarnos- dijo ella y él bufó mientras retiró su brazo.

Ella con un poco de vergüenza se levantó envuelta en la cobija y Jack levantó una de sus cejas.

Y él sin un poquito de pudor se levantó detrás de ella completamente desnudo arrebatándole la cobija.
-pequeña tú cuerpo ya lo conozco como la palma de mi mano así que no debes cubrirte para mí- dijo dejando un casto beso en la frente de la pelinegra que estaba completamente sonrojada y después el rubio se dirigió a la puerta desapareciendo por ella.

Sabana suspiró aliviada y se encaminó al baño. Se miró en el espejo y sus mejillas sonrojadas relataban en su blanca piel y la vergüenza volvió apoderarse de la chica que aún no sabía que era lo que tenía ese hombre que estaba adueñándose de su cabeza y por más que ella lo negará también estaba adueñándose de su corazón.

Una figura por el espejo la hizo sobresaltarse y Jack estaba detrás de ella con una sonrisa arrogante.
- tranquila fiera- dijo él divertido y ella solo no tenía el valor para mirarlo de nuevo a la cara.

Sus ojos se toparon con esos azules con pizca de malicia en ellos y con esa mirada estaba torturandola.
- sabes mi florecilla con espinas, eres la mujer más hermosa que existe y quisiera hacerte mía cada vez que pueda- dijo él acercándose a ella mientras la acorralaba y ella cerró sus ojos mientras su cuerpo empezaba a encenderse con la cercanía de ese hombre que estaba volviéndose su obsesión.

Bueno espero les guste el capítulo.

Les quiere Yarlin 💜