Miró su alrededor, una cabaña moderna estaba frente a ella, todo parecía tan tranquilo, lo único que amortiguaba el silencio que se había apoderado del lugar, era el silbido de los grillos y algunos animales. El rubio bajó del auto encaminandose a la cabaña dejándola sóla y nisiquiera se digno en abrirle la puerta, pero claro ya sabía la falta de caballerosidad de Jack Miller. Bajó del auto admirando todo el lugar, apesar de la oscuridad de la noche pudo ver lo hermoso que era el jardín que presidía en el lugar. No sabía exactamente dónde se encontraba, pero suponía que era cerca de algún bosque, por la continuidad de los árboles que rondaban la cabaña.

Se encaminó a ésta abrazándose a sí misma por el frío de la noche. Ingresó y quedó boca abierta al ver la elegancia del lugar, la chimenea estaba encendida brindando calor y no dudó en acercase. Luego de un rato sin saber nada de Jack empezó a inspeccionar la cabaña. Todo era hermoso el living era acogedor con dos sofás pequeños y en medio un grande de color plata, después la pequeña cocina era de un tono blanco con gris dándole un aspecto elegante y lujoso. Miró hacia las escaleras en espiral que surgían a un segundo piso, pero en ellas apareció un silueta.

Bajando con elegancia y porte estaba el rubio que había cambiado ese traje azul marino de gala colocándose un pantalón de chándal y una sudadera blanca que marcaba ese cuerpo de Dios griego. Ella lo miró embobada y él sonrió con arrogancia.
-¿Para qué me trajiste aquí?- preguntó saliendo de su trance la pelinegra que se maldijo por ser tan tonta y mirarlo como si fuera una chiquilla de 15 años.
-¿no te gusta?- preguntó alzando una ceja de forma interrogativa, pero ella pudo sentir la burla en sus palabras y eso la frustraba.
- no estoy para juegos Miller ¿Por qué diablos me secuestraste?- dijo de manera irritada por culpa del cavernícola que tenía al frente.
- yo no te secuestre- dijo él encongiendose de hombros y ella soltó una carcajada irónica.
-¿no? acaso llevar a una persona a la fuerza sin su consentimiento a una cabaña lejos de la ciudad no es un secuestro- dijo frustrada y él la miró con diversión y con una sonrisa socarrona.
- no te lo tomes tan mal preciosa, piensa que son unas lindas vacaciones- dijo el rubio sentándose en el sofá enorme.
-¿vacaciones?- preguntó confundida y él asintió.
- ¿acaso tú piensas quedarte aquí más de una noche?- preguntó señalando la cabaña y Jack volvió asentir.
- estás loco, por si no sabes yo tengo trabajo- dijo ella enojada con ese gilipollas.
- de eso no debes preocuparte, soy amigo de tu jefe y descubrí que nunca tomas tus vacaciones así que le pedí que te concediera dos semanas- dijo de lo más tranquilo y la rabia empezó apoderarse de la pelinegra.
-Cómo te atreves a meterte en mi vida y tomar decisiones que no te conciernen- gritó Sabana molesta y el rubio tensó la mandíbula.
- deberías agradecerme estoy pensando en tu salud ¿quién puede trabajar y trabajar sin descansar? solamente una loca como tú- levantó la voz el chico con su semblaje serio y escuartizarlo con sus propias manos estaba sonando le muy tentador a la pelinegra.
- no tienes ningún derecho de tomar decisiones por mi- dijo fastidiada la chica con su sangre hirviendole - no eres absolutamente nada mío para meterte en lo que no te importa- prosiguió controlando un poco la ira que estaba apoderándose de su cuerpo - escuchame muy bien Jack no te permitiré que manipules mi vida a tu antojo, por qué no soy una muñeca de trapo que puedas doblegar- siguió con su discurso -, y está vez te pasaste por qué voy hacerte la vida imposible y créeme puedo ser muy irritante cuando me lo propongo- añadió para finalizar y los músculos del rubio estaban completamente tensos.
- de eso no tengo duda, pero no te preocupes Sabana yo también puedo jugar así que la guerra ha comenzado preciosa- dijo con su mandíbula tensa y ella lo fulminó con la mirada - tu habitación es la segunda del primer pasillo- susurró en el oído de la pelinegra y una corriente extraña recorrió todo el cuerpo de la chica mientras sentía la frustración adueñarse de sus moléculas.

Ok ésto se prendió .

Les quiere Yarlin 💜