Percy Jackson a Rick Riordan, así como de cualquier otro elemento de cualquier otra obra, creación que aparezca, créditos a quien corresponda.

—Pensamientos—

—Hablando—

—{Otro Idioma}—

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—... y gracias a mi liderazgo, hemos tenido otro año...—

Molestia y aburrimiento era lo que sentían todos los presentes en salón del Consejo Olímpico, durante la reunión de solsticio de invierno.

Reunión a la cual asistían los miembros del campamento mestizo, algunos dioses menores, el centauro entrenador de héroes y los mismos miembros del consejo, pero la mayoría trataban de que no se notara su molestia o aburrimiento, si no que pareciera que estaban prestando atención al discurso del hijo menor de Kronos y Rhea, Zeus el dios del rayo y rey del Olimpo

O al menos los semidioses, el entrenador de los mismos y los dioses menores presentes, mientras que Poseidón y Hades habían renunciado a prestar atención desde que inicio la reunión, con el hijo mayor de Kronos trabajando con una... especie de Tablet con la que se mantenía al corriente con los deberes del Inframundo, Poseidón por su parte estaba creando pequeñas figuras hechas de agua para evitar quedarse dormido.

Deméter intercalaba entre mirar a su hija Perséfone con una sonrisa y fulminando a Hades, quien la ignoraba. Hestia atendiendo el fuego en el centro de la sala, Hera mantenía una mirada y apariencia con altivez.

Hefesto jugueteaba discretamente con sus manos, construyendo pequeños aparatos, Ares sen entretenía afilando unos cuchillos, Artemisa tenía una mirada aburrida al igual que Dionisio, quien estaba cabeceando ligeramente debido al aburrimiento que lo estaba llevando el reino de Morfeo, Afrodita estaba mirando un espejo de mano cualquier nano imperfección que solo ella podía ver en su rostro, Apolo y Hermes estaban hablando con señas discretas para que Zeus no los notara, mientras planeaban alguna forma de entretenerse terminando la reunión.

Solo Atenea mantenía una apariencia regia, a pesar del aburrimiento y molestia que también sentía.

Sin embargo, los semidioses a pesar de sus mejores intentos de mantenerse atentos y concentrados en el discurso de Zeus que llevaba casi una hora, su TDHA no les estaba ayudando y los tenía casi en su límite, especialmente los semidioses no reconocidos por sus progenitores divinos o más resentidos con los dioses.

—...como mi gobierno nuevamente a demostrado...—

—Ya cállate— pensaba Poseidón, aunque no tenía deseos de comenzar otra discusión con su hermano menor, pero sin saber que muchos otros pensaban lo mismo, deseando que algo pasara y terminara con el discurso de Zeus

Si tan solo él y los demás no lo hubieran deseado, ya que tan solo unos momentos después diferentes destellos de luz surgieron en la sala, destellos que llevaron a los no inmortales a cubrirse los ojos por reflejo.

Mientras que varios de los dioses presentes se tensaban, ya que nadie se atrevía a interrumpir a Zeus, no sin una buena razón... a menos que fueran unos molestos Hades y/o Poseidón

Y lo primero no había ocurrido en varios cientos de años.

—¡Madre!— exclamaron sorprendidos varios de los hijos de Kronos al reconocer a una de las deidades femeninas que aparecieron, siendo la Titanidad de la fertilidad, maternidad, protección, del consuelo, la bendición y la tranquilidad, Rhea la antigua reina de los Titanes.

—¡Se atreven a invadir! — gritó Zeus atronadoramente, al reconocer a cierta pareja de Titanes que eran sus tíos, mientras ignoraba a muchos de los que aparecieron; pero la pareja de titanes que solo lo miraron sin estar impresionados, de hecho, parecían entre decepcionados y aburridos al verlo durante unos momentos antes de mirar a Hera.

—¡¿Qué demonios?!—

—¿Dónde estamos?—

—¡¿Dónde estoy?!—

—¿Qué está pasando?—

Varios individuos con playeras moradas, así como otros individuos con ropa común y corriente dijeron al ver donde estaban, con muchos de los últimos quedándose mudos al ver lo que parecían gigantes frente a ellos.

—¡Los dioses!— Aunque varios de los individuos con vestimentas moradas exclamaron tras un momento de reconocimiento o pensamiento sobre donde estaban, justo antes de inclinarse ante los inmortales.

—Pero que...— esa y otras exclamaciones parecidas fueran dadas por casi todos los demás dioses, además de palidecer al ver a varios miembros de la legión romana.

—Hay no— dijo Poseidón con algo de lamento, al reconocer a sus suegros, antes percatarse que Tritón y otros de sus hijos inmortales también estaban presentes, pero cuando sintió otra esencia del mar, tormentas y terremotos, aunque pequeña entre los individuos que apareció junto a los semidioses.

Así que el rey de Atlantis volteo a ver a donde estaban los campistas griegos donde reconoció a cierta mujer castaña de ojos azules, que estaba junto a chico de 12 años de ojos verde mar, ambos estando junto a varios individuos algunos adultos y otros de la edad del chico.

Lo único que Poseidón pudo hacer ante la sorpresa, fue palidecer un momento antes estar atento a cualquier reacción de sus hermanos.

Pero entonces un par de gritos atrajo la atención de los reyes del inframundo, mar, y el Olimpo, junto con otros.

—¡Thalía!— gritaron un rubio de 19 años de ojos azules y una chica rubia de 12 años de ojos grises.

Zeus estaba sorprendido al igual que otros al ver a su hija mestiza, a la cual había convertido en árbol años atrás, y ahora estaba sorprendida por el lugar en el que estaba, así como ver la apariencia actual de los dos rubios junto a ella, mientras ignoraba su propia apariencia física.

Hades adquirió una expresión molesta al reconocer a la chica pelinegra de ojos azules junto a los dos rubios, antes de percatarse de otro rubio de ojos azules de 11 años con los romanos, para entonces mirar a Zeus.

Al menos hasta que pudo percibir su propia esencia entre los mestizos, a los cuales miro y palideció aún más de lo que ya era su piel, al reconocer a un niño junto a una chica, ambos pelinegros de ojos oscuros.

...

...

...

No hace falta decir el caos en la sala del consejo Olímpico podría convertirse en una catástrofe en cualquier momento, pero entonces la hoguera en el centro de la sala creció de manera drástica e inesperada que incluso la propia Hestia se apartó rápidamente.

Solo para que unos segundos después de la misma hoguera una especie de esfera que parecía contener galaxias dentro de salió del gigantesco fuego.

Muchos estaban tensos y listos para ante una posible pelea, pero seguían confundidos, ya que nadie sabía que estaba pasando, cuando la esfera voló a gran velocidad hacia Zeus, quien se apartó del camino.

La esfera pasó su trono y se convirtió en una especie de pantalla de cine detrás de los tronos, pero no se detuvo ahí, los propios tronos de los dioses empezaron a encogerse, al igual que todas las deidades hasta quedar en un tamaño humano

Incredulidad y negación era lo que sentían los dioses al no poder creer que algo los cambiara de tamaño contra su voluntad, solo Oceanus, su esposa y Rhea se mantenían atentos a la pantalla que apareció ya que podían sentir un poder que no habían sentido en miles de años.

—¡¿Quién se atreve?...— empezó a decir Zeus, solo para ser cortado por sus dos hermanos

—¡Basta, Zeus!— exclamaron los hermanos mayores del rey del Olimpo, ya que cada uno tenía sus propias preocupaciones.

Y antes de que Zeus o alguien más pudiera decir algo, la proyección se ilumino y sonido empezó a surgir de la misma.

Pero para mayor confusión de todos, un hombre mayor con la barba y cabello blanco, vestido como Santa Claus apareció, bebiendo un vaso de alguna bebida alcohólica en un bar.

—¡¿Hermes esto es obra tuya?!— Zeus exclamo molesto ante lo 'ridículo' que todo se volvió al ver a un mortal vestido de Santa Claus, el mito en el que creen los mortales.

—Padre, juró por el Estigio que no tengo nada que ver— dijo el mensajero del Olimpo ante la mirada de su padre, y el sonido de un trueno se puedo escuchar, el cual hizo saltar a varios.

Solo que Oceanus y su esposa miraban incrédulos al más hijo más joven de Rhea, ¿No podía sentir el poder que emanaba de esa proyección? Era la pregunta que tenían los titanes del mar, pero entonces Zeus los volteo a ver y ambos rodaron los ojos al darse cuenta de lo que pensaba el dios del rayo.

—No tenemos idea de que está pasando y no buscamos derrocar al Olimpo, lo juro por Chaos— una sensación de poder se pudo sentir en la sala y aquellos que conocían el juramento dicho por el Titán, siendo las deidades presentes quienes palidecieron drásticamente, sin embargo fue suficiente para que Zeus dejara de sospechar de Oceanus y su esposa, pero el impacto de presenciar el juramento permaneció.

—No piensas manejar así, ¿o sí?— dijo la encargada del establecimiento al Santa Claus

—Dirijo un poco, pero los renos hacen la mayor parte del trabajo— respondió el anciano, haciendo reír a otros en el bar que también estaban disfrazados de Santa Claus, y un poco a la encargada de la barra

—Quirón, ¿Qué está pasando?— preguntaron varios campistas griegos al viejo centauro, ya que estaban entro los más confundidos de todos los presente

—No lo sé— respondió el centauro estando tan confundido como sus estudiantes

—Este es mi cuarto año, como Santa Claus, ¿y tú?— preguntó otro de los hombres en el bar al otro Santa

—Yo fui quien empezó esto— respondió el cuestionado con una sonrisa, haciendo pensar a los demás que estaba bromeando

Solo para que la imagen cambiara para mostrar a santa y sus renos volando sobre una ciudad, imagen que dejo con la boca abierta los espectadores

—¡Oh vamos!, ¿Es en serio?!— se quejaron en voz muy baja algunos los mestizos y legados ante la completa ignorancia de los que estaba pasando, así como incredulidad ante lo que sucedía

—¡Llego la navidad!— se escuchó el gritó de un hombre mientras la pantalla mostraba una gran mansión, antes de cambiar para mostrar a una versión mayor de Charles Beckendorf, el hijo de Hefesto para sorpresa de los campistas griegos y otros, conduciendo un auto.

Solo algunos de los más observadores podían darse cuenta de que el aparente Charles adulto carecía del desarrollo muscular que tenía el chico que trabajaba en la fragua del campamento griego, en cambio la contraparte mayor tenía la constitución de una persona normal y corriente

Pero también vieron a una Selina adulta en el asiento de copiloto, ambos adultos, mientras en el asiento trasero había una niña que se parecía a Selina.

Ahora algunos dioses y mestizos que estaban al corriente del mundo divino pensaban que estaban viendo el futuro, estando entre estos Charles y Selina quienes se sentían avergonzados de lo les esperaba en el futuro.

Pero como la situación era tan confusa nadie les hizo burlas, con excepción de un par de hijos de Hermes tratando de aligerar el pensado ambiente que persistía.

La pantalla cambio para mostrar a la niña festejando que era navidad, antes de mostrar el interior de la casa, la cual estaba adornada para la época, antes de cambiar para mostrar que era de noche y le daban un regalo

—Decidimos que podríamos darte un regalo por adelantado— dijo la contraparte de Charles, mientras él y la de Selina estaban sentados con su hija que ya se estaba acostada

—¿Qué es?— dijo la niña mientras desenvolvía el regalo, solo para descubrir que era un walkie talkie

—Una línea directa con Santa Claus—

Quirón se había acercado a ciertos individuos, dándose cuenta con tan solo ver sus confusos y asustados rostros, que eran ignorantes del mundo divino y el propio linaje algunos tenían.

—¡¿Podre hablar con Santa?!— preguntó la niña emocionada

—Muy bien fiesteros— Se escucho una voz muy familiar para los mestizos griegos, mientras la imagen mostraba rostros de varios de ellos, solo que mayores que eran los trabajadores de la casa/mansión, como Alabaster, Ethan, antes de mostrar a una versión como de 30 años de Luke Castellan —Bienvenidos a su peor Navidad—

La contraparte del hijo de Hermes iba acompañada de más individuos armados, que estaban por entrar a la fuerza a la casa

Luke y sus hombres mataron a los guardias de la mansión, así como a otros trabajadores, ara entonces tomar a las contrapartes de Frank y Hazel, así como su hija, junto con otros trabajadores, como rehenes.

Inmediatamente algunas miradas fueron lanzadas a los campistas griegos, quienes estaban muy sorprendidos ante lo que estaban viendo. Sorpresa, molestia, enojo, incredulidad y varias más emociones sentían los presentes en la sala, pero la confusión seguía perdurando en todos.

Hermes hizo una mueca, pensando que en el futuro su hijo sería aun más rencoroso con él, pero terminaría desquitándose con sus compañeros mestizos

—Tiene 300 millones de dólares en su personal caja fuerte— dijo la contraparte de Luke a la familia, antes de que la imagen cambiara para mostrar dicha caja fuerte, que era más una bóveda subterránea siendo abierta frente a Castellan y dos de su gente — Eso es lo que quiero para navidad— dijo la contraparte de Luke con codicia

—Hombre típico— gruño Artemisa y algunas de sus cazadoras, las cuales también habían aparecido, y casi le preguntan por permiso para disparar a Castellan, pero se lo pensaron mejor ya que no era el momento.

Por su parte la hija de Zeus, Thalía Grace, junto con la hija de Atenea, Annabeth Chase, miraban incrédulas a Luke Castellan.

Pero entonces la imagen cambio para mostrar lo que parecía ser un polvo dorado entrando por la chimenea antes de juntarse y que el Santa Claus que vieron en un inicio apareciera, quien se dispuso a entregar los regalos que traía, seguido de comer las galletas y la leche que le dejaron

—¿Ustedes también vieron eso?— preguntaron algunos mestizos a sus compañeros semidioses.

—Sí—

Uno de los hombres de Castellan entro al cuarto donde estaba Santa y le apunto con una metralleta

—No quiero problemas— dijo Santa alzando las manos y caminaba lentamente a la chimenea —No quiero problemas, así que subiré por esa chimenea—

Algunos se pellizcaban o tallaban los ojos, ya que seguían sin saber que estaba pasando y lo ridículo de la situación, al menos los que no habían asumido que estaban viendo alguna clase de futuro como era Zeus, que estaba lanzando miradas a Apolo.

En la proyección el hombre lo golpeo con la culata de la pistola, pero no hizo mucho, iba a golpearlo de nuevo cuando Santa atrapo el arma y se puso derecho, demostrando toda su altura, antes de golpear al hombre armado

—¿Quién es?— preguntó molesto Luke a la familia, mientras la contraparte de Selina sostenía a su hija, antes de que la imagen cambiar para mostrar a los hombres atacando a Santa

Como uno de estos que tras perder su pistola saco un cuchillo he intento apuñalar a Santa, quien uso su saco, con la mano del criminal entrando en este y apuñalando algo, sonriendo saco el cuchillo creyendo que apuñalo al hombre vestido de Santa solo para ver con sorpresa y confusión que era un regalo lo que su cuchillo apuñalo.

Ante lo ocurrido, algunos de los dioses empezaron a poner más atención como eran Hades y Hécate, quienes se dieron cuenta de que podían percibir a los individuos en la pantalla y que había algo extraño en el hombre vestido como Santa Claus, así como el saco impregnado de magia.

—Santa estas ahí— dijo la niña por la Walkie-talkie que le dieron esperando que Santa responda, sin que nadie la viera

Imagen que demostraba la inocencia de la niña, pero era de esperarse por lo joven que era

La imagen entonces cambio para mostrar a Santa en un salón de juegos, donde estaba tomando las bolas de una mesa de billar y metiéndolas en una de las medias para regalos, la cual uso para golpear a los criminales con fuerza fuera de lo normal.

Algunos hicieron una mueca cuando Santa le rompió la mano con las bolas de billar a uno de los hombres, seguido de golpearlo en la cara con fuerza y luego arrojar a otro de los hombres por la habitación

—Mamá, ¿estoy soñando?— preguntó el chico de ojos verde mar a su madre, creyendo que estaba dormido y todo era un sueño

—No Percy, no lo estas— respondió la fémina Sally Jackson, mientras al mismo tiempo pensaba en cómo explicar a su hijo lo que era, ya que el gato estaba fuera de la bolsa y aún no había encontrado una forma de explicarle a su hijo que era hijo de un dios.

—Mi papá me dijo que estarías muy ocupado esta noche— la niña seguía hablando por el Walkie-talkie mientras Santa seguía luchando con el criminal, a quien le clavo la estrella del árbol de navidad en el ojo derecho y rápidamente la conecto a la luz, y matándolo

—¡Sí!— Exclamo Ares ante la violencia, obteniendo algunas miradas, pero la atención de todos paso al mensajero del Olimpo cuando este hablo

—¿Alguien más no entiende que esta pasando?— fue Hermes quien lo dijo volteando a ver a todos los demás, y unos pocos empezaron a levantar lentamente la mano, lo que le dio valor a los demás —Bien, no soy solo yo—

—Me llamo Trudy Beckendorf— dijo la niña, mientras Santa sacaba una especie de pergamino mágico donde aparecía su nombre y todo lo que dijo por el walkie-talkie —¿Vas a ayudarnos, Santa?—

—Sí, Trudy— respondió Santa a Trudy

—¡¿Santa?!— Exclamó la niña sorprendida y emocionada que Santa le respondiera

—Estas en mi lista de niños buenos—

—¿Santa es real?— algunos se preguntaban con voz hueca ante lo visto a pesar de toda la confusión.

Mientras la pantalla cambiaba para mostrar a Santa acercarse a otro de los criminales para ahorcarlo usando uno de los adornos de navidad como soga.

Entonces la pantalla cambio para mostrar al Santa tratando con los criminales que estaban con la contraparte de Castellan, ya sea en el techo, en el patio de la casa, en las habitaciones, derribandolos por separado.

Considerando que varios de los individuos mostrados en la proyección eran de los semidioses más resentidos del campamento griego, con la mayoría estando al tanto del contacto de Luke Castellan con Kronos; contrapartes que estaban siendo asesinados por el propio Santa Claus, ocasiono que algunos empezaran a pensar que habían perdido la cabeza o que lo que estaban viendo era alguna forma bizarra de los dioses de mantenerlos leales al Olimpo

—Hora de unas felices palizas— dijo Santa mientras esperaba en un oscuro cobertizo con un mazo a varios de los hombres armados, antes de mostrar que los derrotaba, ya sea con el maso, apuñalándolos con los dulces de navidad en la cara o en cuello, aprovechado la oscuridad del cobertizo, antes de que la imagen cambiara de nuevo a una habitación de la casa

—No creo que vuelva a ver la navidad de la misma manera— dijeron algunos sin querer, como eran Trystan McLean que fue escuchado por su hija, con ambos estando aún muy confundidos, que no notaban que determinado centauro se acercaba a ellos.

—¿Quién rayos eres tú?— preguntó la contraparte de Luke a Santa, que estaba amarrado con las luces de navidad a una silla, pero entonces se sacudió para caer cerca de la chimenea de la casa y desaparecer en una especie de polvo mágico que escapo por la chimenea, ante la vista de todos

—Jefe, ¿Qué tal si es el verdadero?— dijo una de la mujeres que estaban con Castellan con una voz casi histérica, mujer que se parecía a una de las campistas griegas.

—Santa... no... existe— dijo la contraparte de Castellan como si tratara de negar a aceptar el cómo escapo Santa

—Están en mi lista de mal portados— se escuchó la voz de Santa, mientras la pantalla cambiaba regularmente entre como eliminaba a cada uno de los criminales, que para el dios Ares era de su agrado como lo hacía Santa Claus.

Pero ciertos mestizos griegos se asustaron cuando se mostro a Santa leyendo el pergamino mágico que tenía, en cual pasaron los nombre de todos los que estaban dispuestos a unirse a Kronos. Y su reacción no pasó desapercibida para algunos dioses.

—¡Esto es por portarse mal!— dijo Santa mientras se le mostraba en el patio quitando el seguro a una granada y metérsela en los pantalones a uno de los hombres de Castellan,

—Y ¿qué les paso a los que se portan mal?— preguntó Trudy a Santa

—Les doy carbón— respondió santa, seguido de la imagen cambiando para mostrarlo corriendo mientras se alejaba del hombre al que le metió la granada, quien desesperado trataba de sacarla de sus pantalones

—Eso no es darles carbón— dijo Jason Grace que estaba entre los romanos.

—Tengo que verlo— Santa se detuvo, dejando ver a los espectadores los moretones y un poco de sangre en él, antes de que se volteara para ver al hombre explotar

—Creo en ti Santa— se escuchó la voz de la niña antes de mostrar que estaba con Santa quien al parecer la rescató

La pantalla cambio por última vez para mostrar a Santa en techo dirigiéndose a la chimenea, solo para pisar heces de reno

—¿Quién lo hizo?, ¿Prancer?— cuestiono Santa a los renos —Qué falta de profesionalismo—

Ante la apariencia de Santa en ese momento final en la pantalla, les parecía a todos que era justo antes de que la navidad se fuera al caos, dejando a muchos con una percepción diferente de esta, además de estar incredulos.

—...—

—...—

—...—

—Ahora veo porque les gusta la Navidad— dijo Kymopoleia que había disfrutado todo lo visto, ganándose diversas miradas de los demás

Muchos estaban por decir algo, ya sea sobre el comentario de la hija de los reyes de Atlantis, sobre que ninguno entendía que estaba pasando, sobre el aparente futuro que vieron, de la aparición de diversos individuos en la sala del Consejo Olímpico, el que los aspectos griego y romano de los dioses no estén luchando entre sí, y varias cosas más; pero la proyección cambio para mostrar otra cosa.

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