Descargo de responsabilidad: Percy Jackson pertenece a Rick Riordan, así como cualquier otro elemento de cualquier otra obra, creación que aparezca, créditos a quien corresponda.

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—Pensamientos—

—Hablando—

Las partes referentes a los que es 'proyectado':

Lo que se dice en la proyección o si es referente a un fic, del cual tenga permiso de usar.

Lo que los personajes de PJ están viendo y escuchando

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Las explicaciones comenzarán en el capítulo 4.

El siguiente capitulo tiene referencias a fanfics, así como pequeños vistazos a ideas que tuve, pero no creo hacer.

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—Hora de unas felices palizas—

Mientras casi todos los presentes en el Olimpo estaban viendo con gran atención la proyección detrás de donde estaban los tronos de los miembros del consejo Olímpico, que mostraba a Santa Claus luchando contra los criminales que aprisionaron a la familia por el dinero que tenía.

Oceanus, junto con su esposa Tethys, estaban atentos al poder que emanaba la proyección y a pesar del que hubieran pasado milenios desde que sintieron un poder igual, reconocieron que era el poder de los primordiales. Y eso solo les daba preguntas, ya que desde antes de que el propio Urano fuera destronado, uno que otro primordial se había retirado del mundo mortal, prefiriendo estar en sus propios reinos o habían entrado en un sueño profundo.

Y durante el reinado de Kronos, así como en los primeros siglos del reinado de Zeus, se hizo común que el resto de los primordiales hicieran lo mismo.

¿Por qué despertaron?, ¿Por qué intervenían ahora?, ¿Qué querían mostrarles?, eran algunas de las preguntas que tenía el mayor de los titanes y su esposa. Por lo que ambos titanes estaban atentos a sentir la presencia de cada individuo que los rodeaba, del Olimpo y más, tratando de encontrar a los primordiales.

Sin embargo, eso los llevo a darse cuenta de la existencia de los hijos de sus sobrinos, por lo que desviaron por un breve momento su mirada a los hijos de Hades, Zeus, así como al de Poseidón.

Solo que los dos dioses hermanos mayores de Zeus se dieron cuenta de que sus tíos miraban a sus respectivos hijos, por lo que sostuvieron discretamente la mirada con el dúo titan.

Pero los titanes del mar les dirigieron miradas nada impresionadas a sus dos sobrinos, ninguno de los dos culparía a los niños por las acciones o pecados de sus padres, después de todo habían tenido a Kronos como hermano y a Urano como padre. Incluso si uno de los semidioses era prueba de la infidelidad de Poseidón a su hija.

En cambio le dieron una mirada molesta a Poseidón, al mismo tiempo que para sorpresa de los hijos de Rhea, el más viejo de los Titanes discretamente manipulo su poder para cubrir a los hijos de Hades y Poseidón, ya que eran los que estaban en más peligro, después de todo Hades había sido el más sensato y justo de los 3 hermanos, sin mencionar que se llevaba mejor con Poseidón que con Zeus, mientras que el rey de Atlantis se había relajado a lo largo de los siglos, mientras que Zeus mostraba más rasgos de Kronos.

Por su parte tanto Hades como Poseidón, al percatarse de la existencia de sus respectivos sobrinos con las acciones de su tío, discretamente acordaron una tregua... por ahora.

Sin embargo, mientras Oceanus ponía ese velo en los 3 semidioses para esconderlos de la vista, oídos u otros sentidos de casi todos los demás, incluso si los tenían justo enfrente, los titanes del mar sintieron nuevamente el poder de los primordiales, por lo que dirigieron su atención hacia donde estaban los mestizos y vieron aparecer a otras deidades y mestizos, algunos que eran hijos de Poseidón, pero que deberían estar muertos, junto con otro que se la pasaba en el mediterráneo, detrás de todo el público, pero estando totalmente confundidos y sorprendidos.

—¿Qué es lo que quieren?— pensaban el par de titanes, al no entender las acciones de los primordiales, antes de que un grito atrajera su atención.

—¡POSEIDÓN!— gritó enojado Zeus, pero antes de que pudiera discutir con su hermano, su esposa le gritó

—¡ZEUS!...— y el grito enojado de Hera, junto con reclamos que le siguieron atrajo la atención de ambos titanes

—Su matrimonio, no le hizo ningún bien— comento Tethys a su marido

—Esta actuando como solía hacerlo antes de vivir con nosotros— comento el mayor de los titanes al ver que su sobrina actuaba igual a cuando llego su reino junto con Rhea para refugiarse durante la primer guerra titán.

Aunque también era el inicio de confirmaciones sobre todas las historias que habían escuchado sobre Hera, ya que no se habían visto en miles de años.

Pero ¿porque estaba enojada la diosa del matrimonio?...

La razón era que la proyección, que algunos asumían que les estaban mostrando el futuro, mostraba a una mujer pelinegra de gran belleza que parecía tener 25 años, y tenía los mismos ojos que el dios del rayo, además de que ahora todas las deidades podían sentir la esencia de una semidiosa hija de Zeus más poderosa que cualquiera de los presentes.

Mientras que la razón del gritó de Zeus era que al igual que con la mujer en pantalla, toda deidad podía sentir la esencia de un semidiós hijo de Poseidón, más fuerte que cualquiera de los presentes, pero menor a la de la mujer en la pantalla, mientras se mostraba a dicho varón de espaldas a la pantalla.

Esencia que Oceanus, Tethys y el propio Poseidón reconocieron como la del niño de ojos verde mar junto a la mujer de cabello castaño y ojos azules entre los presentes.

Solo que mucho mayor, lo cual parecía ser porque el joven en la pantalla parecía tener 17 o 18 años.

—Soy Diana de Themyscira. Hija de...— escucharon a la mujer hablar, pero fue interrumpida por el pelinegro frente a ella

—Espera, espera, déjame adivinar. Hija de Zeus, ¿verdad?— la voz del varón se escuchaba parecida a la de Poseidón, solo que más joven y jovial

Muchos se sorprendieron de la existencia de otra hija de Zeus, con Jason y Thalía estando entre los más sorprendidos mientras se encontraban en lados opuestos de la sala, ignorantes de la presencia del otro, aunque el primero había escuchado el nombre de la segunda cuando gritaron su nombre los dos rubios a lado de ella.

—Debí esperarlo— dijo Hades con un gruñido ante la visión de la existencia de otra hija de Zeus, al menos hasta que para su confusión podía ver el alma de la mujer en la proyección, que parecía alternar entre casi un siglo a milenios de edad.

—¡Otra vez, Zeus!, ¡OTRA VEZ!— reclamaba una molesta Hera

—No tengo ninguna hija— respondió Zeus, defendiéndose de las acusaciones de su esposa, mientras se refería a la mujer en pantalla, sin darse cuenta que en la forma en que lo decía su hija mortal se sentía herida.

—Así es, ¿Cómo lo supiste?— respondió la mujer después de un momento de sorpresa

—Conocí a una hija de Zeus, se parece un poco a ti, especialmente los ojos. Además, lo más probable era que fueras su hija, con lo prostituto que es, sin ofender— dijo el varón, sorprendiendo a la fémina por la forma de referirse al rey del Olimpo

—No se equivoca— diversos individuos dijeron, algunos en voz baja, y otros lo dijeron sin problemas como en caso de un fastidiado Hades

—¡POSEIDÓN!— reclamo el menor de los hijos de Kronos a su hermano, al reaccionar nuevamente al sentir la esencia del mar en el pelinegro en pantalla

—¡No tienes derecho a reclamarme nada!— respondió el rey de Atlantis —tienes dos hijos aquí presentes

—¿Dos hijos?— muchos mestizos no pudieron evitar soltar ante la noticia, y trataban de ubicar cual era el que desconocían, como era el caso de Jason y Thalía que desde sus lugares con sus respectivos campamentos trataban de saber quién era el otro.

—¡Tu hijo es una amenaza!—

—¡Es más probable que lo sean tus hijos a uno de los míos!—

—Tal vez deberían prestar más atención a esta... advertencia, antes de hacer algo— intervino Oceanus, evitando que Zeus ordenara la búsqueda del semidiós del mar a los demás presentes.

Aunque el dios del rayo fulmino con la mirada al mayor de los titanes, al menos hasta que pensó en las palabras dichas, que terminaron por hacerle asumir que estaban viendo alguna advertencia que probarían que su opinión sobre los hijos de su hermano eran veraces.

Por su parte el resto de los presentes estaban pensando en las implicaciones de la existencia de más hijos de los 3 grandes, ignorantes de la presencia de estos, gracias a las acciones del titan de los océanos.

Lo que era una suerte ya que la madre del chico de ojos verdes le estaba explicando que era en realidad, por lo que ahora al saber lo que era, su propia esencia estaba empezando a crecer, aunque por un momento ella también tuvo problemas para percatarse de donde estaba su hijo, a pesar de estar a su lado.

Mientras que los otros dioses de Atlantis miraban a su respectivo rey, especialmente Tritón y su madre Anfítrite, en los que se podía notar algo de molestia o fastidio, pero no al nivel de Hera, que nuevamente seguía reclamando a Zeus.

Quien a su vez discutía con Poseidón, lo que se convirtió rápidamente en una discusión, pero la mayoría de los presentes trataban de no atraer la atención, y así no involucrarse.

¡CLAP!

Un potente aplauso dado por Oceanus, atrajo la atención de todos los demás, mientras el propio titán extendía un brazo hacia la proyección para que todos vieran que la imagen cambio

Que para total sorpresa de todos los grecorromanos, ya sean dioses, semidioses o mortales, veían lo que parecía a una versión de Poseidón de 19 o 20 años, solo que, sin las bermudas o la camisa hawaiana, en cambio usaría cualquier mortal de edad similar. Mientras caminaba hacia el trono en el Olimpo del rey de Atlantis, y viéndolo crecer hasta la altura 'normal' de un dios para sentarse en el trono.

Todo bajo la atenta e incrédula mirada de contrapartes de los miembros del consejo Olímpico, solo que, para sorpresa de los espectadores, tanto el otro Hades, como la otra Hestia estaban sentados en tronos que no había en la sala del consejo.

—Mamá— le dijo Percy a su madre, al estar sorprendido de que el joven adulto en pantalla pareciera una versión mayor de él mismo, aunque al mismo tiempo se daba cuenta del parecido con el hombre con camisa hawaiana.

—También lo veo Percy— le respondió su madre

—¿Qué?—

Todos escucharon la pregunta echa por el ojiverde en pantalla, quien parecía confundido de que las contrapartes de los dioses miembros del consejo junto con Hades y Hestia lo miraban.

—¡¿Qué crees que estás haciendo aquí, semidiós?!—

Todos escucharon la voz de Zeus en la proyección mientras sonidos de una tormenta eléctrica sonaban, que a muchos y a otros pocos solo los haría rodar los ojos de algunos ante el dramatismo del rey del Olimpo, sí la situación fuera otra. Pero para sorpresa de todos el pelinegro de ojos verdes en la proyección, no parecía afectado por ello.

—¿Eh? ¿Acaso mi padre no les dijo nada?—

—Obviamente no estaríamos preguntándote qué haces aquí en caso de saberlo...—

—...—

—¿Y bien?, ¿No piensas respondernos, muchacho?—

Todos escucharon al varón responder con otra pregunta, seguido de la respuesta de la contraparte de Atenea, antes de que la otra Artemisa cuestionara al varón.

—Geez...Solo estoy reemplazando a mi padre mientras él, Lady Anfitrite, Tritón y mis hermanas se toman unas vacaciones—

—¡¿QUÉ?!— fue la exclamación más común entre los todos los espectadores, claro había variaciones más ofensivas

—¡¿Qué clase de locura es esta?!— exclamo Tritón, quien en un principió pensaba que el semidiós en la protección trataba de usurpar a su padre, al ver que no era consumido por el poder que fluía desde el trono de Poseidón.

Mientras que el resto de los Atlantes están confundidos y curiosos sobre que el semidiós en pantalla no estuviera muerto por sentarse en el trono, así como en lo que dijo sobre unas vacaciones.

—¿Seguro que no eres tú?—

—Iba a preguntarte lo mismo Apolo— dijo el dios de los mensajeros.

—¡¿Eso es posible?!— tanto campistas griegos como romanos cuestionaron a sus respectivos entrenadores, aunque algo de histeria, celos, incredulidad y/o sorpresa podía reconocerse en sus voces. Pero con los griegos cuando trataron de preguntarlo se dieron cuenta de que su entrenador no estaba con ellos, debido a que estaba explicando a otros individuos traídos al Olimpo parte de la situación actual.

Pero algo de caos descendió entre los espectadores, que no se dieron cuenta de que las contrapartes del consejo olímpico terminaban igual, al menos hasta que escucharon al semidiós en pantalla golpear el suelo con la punta inferior del tridente.

El sonido del tridente golpeando el suelo resonó en el Olimpo y todos pudieron jurar por un momento que no veían al fastidiado semidiós sentado en el trono, sino a su padre.

—¿Podemos fingir nada más que soy mi padre para terminar con esta reunión? Tengo todo un reino que cuidar por si no están enterados—

—¡No!, ¡Y antes quiero que expliques el por qué mi hermano no vendrá más, Perseo Jackson!—

—Creo que ya lo expliqué, tío. Él, su esposa, Tritón y mis hermanas decidieron tomarse un año sabático. A mí simplemente me dieron este puesto de manera temporal para evitar que sus deberes queden sin cumplir—

Todos tenían las bocas abiertas, hasta Oceanus y su esposa ante el descaro del semidiós en la proyección, a quien no parecía importarle mostrarle respeto a Zeus, o por lo menos prestarle atención, al verlo dejarse caer contra el trono de Poseidón.

Sin mencionar que, en la opinión de muchos, encontraban absurdo que las versiones futuras de los dioses atlantes decidieran tomarse una año sabático, y dejando a un semidiós a cargo de sus deberes.

Aunque otros hacían nota mental del nombre del semidiós, mientras el mismísimo Percy Jackson, miraba totalmente sorprendido a su yo 'futuro', al igual que su madre, y un sátiro que estaba entre los campistas griegos, fuera de la vista del chico de ojos verde mar.

—Veo muy difícil que mi hermano haya hecho tales acciones. Incluso si su excusa es pasar tiempo en familia—

Todos estaban de acuerdo con lo que dijo la contraparte de Deméter, solo para sorprenderse con lo que dijo el otro Ares

—¡Bah!, ¿¡A quién le importa eso!?, ¡Si el mocoso está aquí, entonces significa que puedo pelear contra él todas las veces que desee! —

Ares, así como muchos estaban sorprendidos y confundidos sobre el interés de la 'versión futura' del dios de la guerra en luchar con el semidiós del mar

—Emh..sí, respecto a eso...—

—¿Qué? —

—No voy a tener tanto tiempo como para perder mis descansos contigo. De hecho, tengo una lista de mi padre que debo cumplir durante un año— decía el chico mientras veían que sacaba lo que parecía una hoja de papel escrita por ambos lados

Nuevamente bocas abiertas, así como ojos abiertos por la incredulidad de la actitud del joven adulto en la pantalla, hacia los dioses, específicamente el que considera pelear con Ares una pérdida de tiempo. Junto con lo escrito en la hoja de papel

Hoja que al ser leída en voz alta o al menos una parte, genero risas, reacciones de enojo y más a las contrapartes del consejo.

—Golpear a Zeus cuando sea un idiota. Tratar de no dormir cuando Atenea hable. Vigilar a Hermes para que no te robe. Ser paciente con Deméter...—

Pero para los espectadores solo causo más incredulidad, ante los consejos del futuro rey del mar a su hijo, especialmente el primer consejo. Lo que obviamente causo que casi todos miraran al rey del mar quien miraba con una mayor incredulidad la proyección, ante los consejos de su futuro yo a su hijo.

—Mataré a ese Barba de percebe cuando regrese...—

—Sabes que no soy él, ¿cierto?—

Nuevamente los espectadores en el Olimpo, escucharon a la contraparte de Atenea, así como la repuesta entre apática y sarcástica del semidiós, cuando la diosa se le quedo viendo y que para sorpresa de los presentes la contraparte de la diosa solo le gruño.

Muchos estaban por decir algo cuando vieron que la proyección parecía recorrer imagines rápidamente, como si se tratara de un video, antes de reanudarse y mostrar a Dionisio siendo golpeado con pescado en la cara

—¿Cómo hiciste eso?—

—Mi padre me bendijo para cumplir este trabajo—

—No, no estoy soñando— un semidiós entre los presentes dijo tras pellizcarse, al creer que despertaría de los que sea que está ocurriendo en el Olimpo

Mientras todos los demás seguían mirando incrédulos las acciones del semidiós, y que el otro Dionisio dejara pasar lo que hizo.

Casi todos se preguntaban como era que los dioses no lo habían matado. Aunque ahora tenían la respuesta como era capaz el semidios de crecer hasta la altura 'normal' de los dioses y sentarse en el trono.

Al menos hasta que vieron que el otro consejo Olímpico decencia al caos por una discusión, mientras el semidiose se recostaba contra el trono del dios de los mares, con total desgana y resignación, mientras decía:

—Este año será muy, muy largo—

Ninguno de los campistas, ya sean griegos o romanos, así como cazadores y deidades, era capaz de entender como era posible que hubiera un semidios como el que mostraba la proyección, que fuera capaz de actuar así y que los dioses no lo maten, que el propio padre del semidios junto con otros dioses lo dejen a cargo de sus propios dominios para tomarse un descanso.

Pero también una combinación de celos, sorpresa, envidia y más sentimientos surgían en los semidioses, especialmente en los griegos que no habían sido reconocidos en el campamento por sus respectivos padres divinos.

Por otro lado los romanos se preguntaban que tan importante o respetado debía ser ese hijo del mar como para que los dioses pasaran por alto su descaro y su falta de respeto, lo que ocasiono que opiniones muy divididas entre la legión, algunos opinaban (en voz baja) que era un peligro al hijo del mar, otros que debería ser parte de la legión, otros se preguntaban como era que logro que los dioses lo consideraran 'digno' de hacerse cargo de sus respectivos deberes durante un año y como podrían lograr lo mismo, y varias opiniones más.

Todo mientras nunca se les paso por la cabeza si el semidiós era griego o romano, además de olvidar un momento las creencias de que un hijo del mar era un mal presagio.

Mientras otros, especialmente Dionisio o Zeus se preguntaban que era lo que estaban pensando sus versiones futuras como para permitir la actitud y falta de respeto del semidiós.

Pero tuvieron que dejar de lado pensamientos u opiniones cuando la proyección cambio para mostrar, nuevamente al semidiós, todavía vestido con ropa común de los mortales mientras estaba parado frente a otro varón pelinegro, que parecía tener la misma edad, pero era de piel pálida, así como un poco más fornido y una o dos pulgadas más alto, pero a diferencia del hijo del mar, este usaba lo que parecía una especie de vestimenta griega de color negra y roja.

Varón que tenía un ojo rojo y otro verde bosque, además de que de alguna manera sus pies estaban en llamas y no parecía afectarle o importarle.

Muchas féminas presentes veían a los dos con gran atención mientras se miraban fijamente, dándose cuenta de que ambos varones era muy atractivos, especialmente el que tenía ojos de diferente color, que incluso Afrodita lo miraba y desnudaba descaradamente con los ojos.

Artemisa se dio cuentas de las acciones de la amante de Ares, por lo que resoplo con molestia ante la típica actitud de Afrodita.

—Entonces... ¿eres hijo de Hades?—

—Sí, soy Zagreus ¿y tú?—

—Soy Percy Jackson, hijo de Poseidón—

—¡HADES!— gritó atronadoramente Zeus, al igual que Deméter, solo que con menos fuerza

—Primero, como dijo nuestro hermano, no tienes derecho a reclamar nada. Y segundo, no tengo un hijo llamado Zagreus— respondió Hades con una voz que envió horribles escalofríos a casi todos los demás

—¡Aún!— fue lo primero que se le ocurrió decir al menor de los 3 hermanos

—Madre, está bien— dijo Perséfone para enojo de su progenitora, antes de enviarle una mirada a su marido de que hablarían luego

Zeus estaba por discutir con su hermano mayor, mientras Artemisa murmuraba en voz muy baja— Hombre típicos— ante el aparente hecho de que su padre y sus tíos no puedan mantener su palabra de no procrear más semidioses, cuando la proyección cambio, solo que también había bloqueado a los dioses de cualquier sensación u observación del alma de los individuos en ella, después de que sintieron la esencia del Inframundo en el pálido pelinegro, que curiosamente tenía varias facciones del rostro parecidas al otro.

Pero lo que ahora mostro la proyección era a Percy Jackson, quien ahora parecía estar entre sus 30s y sus 40s, rodeado de diversos campistas griegos y romanos, en algún claro de algún bosque nevado.

Y los mestizos estaban tirados en el suelo heridos, con feos moretones, algunos sangrando, con la nariz rota, se sostenían la quijada, se retorcían de dolor, etc. Todo mientras el hijo del mar estaba parado sin un solo rasguño o moretón.

Con los dioses sintiendo nuevamente la esencia de los individuos que mostraba la proyección, reconociendo algunos con la esencia de Nike, de Atenea, de Ares, Némesis, etc.

—¡Lo ves¡, ¡Es una amenaza al Olimpo!— exclamo Zeus a Poseidón, quien se pellizco el puente de la nariz

—¡Por Chaos!, no sabemos que esta pasando, así que cállate— respondió el rey de Atlantis con molestia

Mientras Hestia y Rhea veían con tristeza al rey del Olimpo.

Aunque, Zeus estaba por decir algo más cuando el semidiós en pantalla hablo

—Terminaron con esta tontería de derribar el Olimpo—

—¿Qué?—

—¿Qué dijo?—

—¿Escuche bien?—

—¡¿QUÉ?!—

Esas y más exclamaciones fueron dichas por varios de los presentes, mientras Luke, junto con todos a los que se había acercado para unirse a Kronos, se tensaron o palidecieron ligeramente, solo unos pocos de ellos veían con atención a los mestizos heridos en la pantalla, pero no reconocían a ninguno, además de que notaban que sus vestimentas fuera de las playeras naranjas y moradas, no les eran conocidas.

—¡¿Quién se atreve...?!—

—¡Si te callas, tal vez lo sepamos!— se quejó Hades ante el dramatismo y actitud de su hermano menor, aunque se dio cuenta de que el hombre de ojos verdes en la proyección tenía un alma con algunos siglos de edad.

Oceanus, junto con su esposa por su parte las reacciones de los dioses, pensando que el tiempo no les había hecho ningún bien a algunos de ellos, ya que a sus ojos se habían vuelto inmaduros e insensatos. Esperaban estar equivocados o que el resto no actuaran así.

—¿Por qué?— pregunto uno de los mestizos heridos

—¿Por qué, qué?—

—¿Por qué... los apoyas?... Ellos te desterraron— dijo el mestizo entre respiraciones dolorosas a Jackson

—Desterrarme... ¿siguen contando esa historia?... Niño no me desterraron, yo me largué. Los dioses solo me declararon como desterrado unos 30 años después, para no perder la cara—

Nadie se esperaba la respuesta dada y muchos dioses estaban por declararlo mentiroso, cuando volvió a hablar

—¿De verdad saben lo que significaría la caída de los dioses?, ¿Como los afectaría, a ustedes los semidioses?... Es obvio que no— decía el adulto a los jóvenes, con varios viéndose confundidos sobre a que se refería y otros solo estaban molestos — No son los primeros en intentarlo y dudo que sean los últimos. Algunos han tenido razones más que justificables, pero otros... sus razones han sido estúpidas —

Entre más hablaba la versión adulta de Percy Jackson, más sorprendía a todos.

Luke junto con otros como Alabaster, no estaban nada tranquilos ante lo que escuchaban, de que al parecer no tendrían éxito. Con algunos dioses menores compartiendo la misma sensación.

Otros por su parte como los McLean, dos chicas que tenían ascendencia latina al igual que un niño de 10 años aproximadamente, una mujer que junto a su hijo que tenían ascendencia china y varios más seguían estando muy confundidos, ante todo, a pesar de que Quirón había tratado de explicarles a algunos de ellos.

Por su parte Zeus, junto con Hera (que por el momento había dejado de lado su enojo con su marido) y otros estaban furiosos de que los semidioses se atrevieran a traicionarlos.

—Y el simple hecho de que crean que Kronos sería un mejor rey que el cara de trueno, me dice lo ingenuos que son, lo manipulables, ignorantes o que simplemente no les importa...—

Un silencio inundo la sala del consejo, ante la mención de que algunos semidioses intentarían ayudar al destronado rey de los Titanes, haciendo que individuos como Luke Castellan se volvieran más preocupados y nerviosos de ser descubiertos, por lo que empezaron a pensar en maneras de escapar.

Sorprendentemente Zeus, no reclamo nada con respecto al hijo de Poseidón, en cambio estaba tratando de identificar a los semidioses en la proyección y ver si alguno estaba presente, así como determinar que deidades eran sus padres.

Para fortuna de los hijos de Hades y el de Poseidón, el velo de Oceanus seguía cubriéndolos.

—Realmente no tienen la más mínima idea de lo que hay en el mundo. Y solo hablo de este mundo para empezar—

Algunos encontraron algo peculiares las últimas palabras del hijo de Poseidón, especialmente a los dioses que terminaron por pensar que tal vez sabía sobre los otros panteones del planeta, lo que preocupo a varios de los dioses.

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Las referencias de este capítulo son al fic de "Año Sabático" y "El dios de los Héroes

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