Zenda
-Epílogo-
La presentación de Zenda en Midgard
Sentada sobre el muro de uno de los balcones del palacio, unos ojos heterocromáticos observaban directamente hacia el puente Bifröst en espera de alguna actividad que indicara la llegada de sus padres, pero nada pasaba. Sus pies colgando desde su posición hacia el vacío, suspiro meneándolos y después volvió a mirar hacia delante buscando algo en el lugar, con la mirada perdida en el cielo viendo las aves volar frente a ella.
Desde ese lugar se podía apreciar por completo el reino entero de Asgard, su abuelo siempre la subía a su hombros cuando era más pequeña y la hacía observarlo todo, todo lo que ella debería cuidar y proteger cuando creciera.
El viento corrió algo fuerte y su cabello largo fue ondeado obligándola a desviar la mirada hacia abajo y por esa acción logró ver a su amigo, sonrió al encontrarlo, por un momento considero bajar de ahí para hablar con él en lo que esperaba, pero en eso frente a ella el puente Bifröst dio indicios de funcionar girando levemente la cúpula y el alfiler al final, como si Heimdall supiera que pronto alguien volvería.
Sonrió amplio "Llegaron" pensó emocionada.
Sonriendo se levanto sobre el balcón donde antes reposaba, se giro para quedar de espaldas al vació con su mirada hacia dentro del lugar que quedaba a sus espaldas anteriormente, miro hacia atrás vio el suelo lejano y después sonrió decidida. Cerró los ojos y se dejó caer.
Al castaño con luces que estaba hablando con otros guardias antes de entrar a su entrenamiento casi le da un infarto al ver como su amiga caía sin parecer detenerse, trago grueso cuando vio como ella casi llegaba al final sin hace nada, pero justo antes de golpear el suelo desapareció desvaneciéndose frente a él y los demás guardias del lugar. Un vacío en el suelo había sido creado y este se la tragó.
Dentro de la cúpula dorada, una joven cayó de rodillas justo tras Heimdall, se levantó de inmediato aparentando que nada había pasado, se arregló el cabello y la ropa, pero antes de que ella hablara, la voz de Heimdall se le adelanto.
-Buenos días princesa, ¿otra vez tratando de romper el suelo con tus huesos?
-Buenos días Heimdall y jaja, no eres gracioso -se sobó las rodillas y después caminó hasta quedar a un lado de él- ¿Me viste?
-Claro que la vi, también vi el golpe que te metiste -volteo a verla y ella en respuesta frunció el ceño.
-No me dolió -respondió encogiéndose de hombros- Solo fue un mal cálculo -habló- ¿Son ellos verdad? -él asintió- No les digas que estoy aquí -corrió y se paró a un lado de la entrada de los otros mundos hacia el Bifröst, recargada en la pared de la cúpula, sonriendo maliciosa, fuera de la vista de quién entrara.
Heimdall solo sonrió de lado, divertido siempre por las ocurrencias de la princesa, pero tampoco demostrándolo, siendo tan serio como siempre, volviendo su vista al frente giro la espada e hizo el Bifröst funcionar. El sonido característico le erizó la piel a la chica, sonrió sabiendo que pronto llegarían. Dos voces muy conocidas por ella se hicieron escuchar. Sonrió.
-Tony, solo a él se le ocurren esas cosas -negaba Thor levemente riendo y abrazando a Loki con su brazo mientras terminaban de llegar.
-Es muy divertido y complicado lidiar con él -afirmo igualmente sonriendo- Pobre de Steve, Stark nunca deja de sorprender -volteo a ver Heimdall- Hola Heimdall.
-Buenos días príncipes saludo Heimdall inclinando un poco la cabeza.
-Buenos días -saludo el rubio también.
Loki se quedó callado, miro fijo al frente, sonrió y se giró justo antes de que una figura más pequeña que ellos saltara sobre Thor, Loki esquivó a su hija, pero su esposo no tuvo la misma suerte.
-¡Aaaah! -grito la chica saltando sobre su padre.
-¡Ouch! -le pequeña había prácticamente tacleado al rubio tumbándolo y mandándolo al suelo del lugar- ¡Zenda! -se quejó el mayor- ¡¿Loki porque nunca me avisaste de esta cosa?! -hablo teniendo a su hija sobre de el.
-Yo no tengo la culpa de que siempre te confíes al llegar -dijo pasando de largo.
-Hola padre -dijo sentándose sobre el estómago del rubio, sonriendo ampliamente.
-Hola pequeña -habló besando su mejilla, parándose y cargándola para levantarla fácilmente- ¿Ya desayunaste?
-Ya, leche con frutilla -sonrió.
-Hola bebé -Loki quién había vuelto de dejar las cosas que traía en las manos en un sitio del lugar se acercó a ellos.
-Hola madre -Zenda abrazó a Loki para darle un beso en la mejilla- ¿Cómo les fue? ¿Fueron a Midgard?
-Si, surgió algo y tuvimos que ir, solo fueron una de las máquinas de Stark las que se salieron de control otra vez, pero nada grave, por eso volvimos rápido.
-Oh, que bueno, llegaron justo para la hora de la comida, ¿vamos?
-Vamos -habló Thor agarrando a Loki de la mano y cargando a Zenda como costal de papas.
-¡Padre! -se quejó.
-Thor baja a la niña.
-Oh amor, vamos -rio sin bajarla- Ni pesa nada.
-Gracias -terminó de quejarse Zenda.
-Ya vámonos -habló el pelinegro- Nos vemos Heimdall, gracias.
-Adiós Heimdall -dijeron Thor y su hija al unísono.
Actualmente habían pasado 15 años desde que la princesa de Asgard había nacido, 15 años en los que habían ocurrido innumerables cosas. Principalmente, era que los príncipes, estaban muy ocupados últimamente, más desde un pequeño incidente dónde el martillo Mjölnir de Thor se vio involucrado, para ser rápidos con los sucesos, el martillo se cayó por accidente siendo tragado por el Bifröst y aterrizando en Midgard, dónde inmediatamente los padres de la chica tuvieron que ir por él, pero algo los detuvo al ver la situación en ese momento de ese lugar, quedándose un tiempo en Midgard, que en realidad fueron tan solo unos días que no llegó ni a la semana, pero si estuvieron lejos de ella y de su pueblo.
Ahora gracias a esos acontecimientos, ellos tenían un grupo de aliados en ese mundo y se podría decir que Asgard entero también, pero por ello cada que les pedían ayuda iban, como el día de hoy. Fue relativamente temprano cuando salieron rumbo a ese mundo. Zenda tenía entendido que eran un grupo de guerreros muy poderosos los que yacían en ese lugar, pero no los conocía, no aún, puesto sus padres parecían no querer llevarla a Midgard pronto aunque ya le hubieran prometido el llevarla muchas veces, pero nunca se daba una ocasión "ideal" según ellos para que fuera, incluso ya había desistido de preguntar cuando iría, porque siempre decían lo mismo: "Si irás mi amor, pero luego".
En sí, la relación con sus padres era muy buena, así como ellos pasaban mucho tiempo fuera, también pasaban mucho tiempo dentro de Asgard, aunque si bien estaban ocupados, ella siempre podía estar con ellos y estos respondían mimándola, abrazándola y besándola. Algunas ocasiones solo iba su padre y su madre se quedaba con ella y aprovechaban para entrenar y mejorar sus habilidades. El tiempo pasaba lento desde que su amigo entró de lleno a los entrenamientos de la guardia, ahora era "un guardia en entrenamiento", uno muy joven y si bien el dijo mucho tiempo antes que sería su guardia, él actualmente tenía otros deberes y entrenamientos diarios, por eso no se veían tan seguido, incluso en algunas ocasiones él se iba con los demás guardias para sus entrenamientos. Pero ella cada que podía lo iba a ver entrenar.
-Ah estaba delicioso -dijo Thor recargándose en el respaldo de la silla.
-Tienes comida en la barba -Loki se acercó a limpiar con una servilleta la mejilla del rubio, que ahora tenía una ligera pero muy sexy barba que lo hacía ver más atractivo a los ojos de todos, más ante su esposo- Dioses ustedes se parecen tanto -sonrió viendo como Zenda también se limpiaba rápidamente para que su madre no la viera.
-Gracias amor.
-Zenda.
La chica con su ultimo bocado de comida en la boca elevó la mirada para ver a Loki quién le había llamado.
-Mande madre.
-¿Quieres ir mañana a Midgard? -habló de la nada Loki y la chica con un plato de comida frente a ella, ya habían pasado un par de horas y ya era la hora de la comida.
-¿Qué? -se atragantó- ¿E-Es broma? Dime que no por favor, ¿no lo es verdad? -habló muy rápido posando las manos sobre la mesa y mirando a su madre quién habló y luego viendo a su padre quién sonreía por verla.
Thor rio ante la reacción divertida de su hija, era cierto que Zenda había heredado equitativamente rasgos característicos de los dos, pero cuando se trataba de actuar y reaccionar era más con la forma divertida de Thor, por otro lado cuando se enojaba, que eso era muy raro, terminaba actuando fría como su madre en algunas ocasiones, aunque también por naturaleza ella era un tanto calculadora y persuasiva.
-No, no es broma, pero si no quieres ir... -habló volviendo su mirada al plato.
-¿Bromeas? ¡Claro que si! ¡Claro que quiero ir madre! -respondió logrando tragar su bocado y hablar emocionada. Incluso las cocineras se rieron por la reacción tan energética mientras dejaban los vasos con jugos de frutas y agua simple.
-Bien, entonces iremos mañana, pasaremos más o menos una semana ahí, ¿te parece?
-Estupendo -dijo terminando de comer rápidamente y levantando su plato, no le gustaba dejarle todo a las cocineras, camino hasta quedar entre sus padres quienes seguían sentados- Gracias -se arrodillo y entrelazó sus brazos con los de sus padres- En verdad gracias -sonrió contenta- Iré a contarle a Narfi.
-Llévale algo de comer -le propuso su madre.
-¡Si! -entró a la cocina con los platos y los deposito en el fregadero- Hola Valka, ¿podrías darme un poco para llevar? -pregunto a la cocinera.
-¿Es para el joven Narfi?
Sonrió- Si es para Narfi.
-Oh para ese muchacho, ¿Cómo a estado? Tienen días que no viene a comer al palacio.
-Está bien ayer fui con él, pero tiene mucho entrenamiento y son seguidos, por eso come entre ellos, tampoco a comido bien con mi tío.
-Cierto, al joven Fandral si lo he visto aquí más que a él.
-Si.
-Princesa -habló una chica- Quisiera pedirle un favor -sus mejillas se sonrojaron y Zenda ladeo la cabeza.
-Claro dime.
-¿Podría llevarle esto al joven Narfi? -era una nueva cocinera que tenía más o menos la edad de Zenda, era 2 años mayor que ella exactamente- Mostró lo que traía entre sus manos, era una postre hecho de leche con moras, Zenda sabía que es postre en específico no le gustaba a Narfi, sonrió.
-Creí que sería para mi -habló tiernamente tocando la mano de la chica quién se sonrojó aun más.
-N-No pero si quiere puedo hacerle uno a ust...
Soltó a reír- No te preocupes Dagny, está bien yo se lo entregaré.
-Muchas gracias princesa y no se preocupe, no tome nada de la cocina, de hecho lo preparé en mi propio hogar -sonrió.
-Oh si -negó con la mano- No te preocupes por eso -mencionó.
Últimamente había visto que esa chica iba en ocasiones a ver entrenar a Narfi y él le sonreía de vez en cuando, no le molestaba pero de cierta manera le ¿intrigaba?
La joven fue tirada de la oreja bruscamente por su madre, Valka- Deja de ser imprudente Dagny -soltó su oreja- Lo siento mucho princesa no tiene que...
-No es nada Valka -afirmó- De todas formas tengo que ir con él ahora, yo se lo llevó -ante esas palabras la chica más grande que ella le sonrió. Zenda tomó lo que ella le daba para llevarle a Narfi- Muchas gracias por la comida de hoy, estuvo deliciosa -dijo para todas las cocineras del lugar -miro a la chica- Se lo entregaré tranquila.
Se despidió saliendo de la cocina para llegar junto a sus padres, beso las mejillas de sus padres y se dispuso a salir- Me voy, le diré a Narfi si quiere venir a cenar, al tío Fandral también.
-Claro, diles.
-Nuestra hija es hermosa -dijo el rubio viendo como Zenda salía del lugar.
-Lo es -afirmó Loki- Se parece a ti -sonrió viéndolo.
-No quiero a nadie cerca de mi hija en milenios.
Loki rio- ¿No deberías preocuparte por que en Midgard existen dos personitas que quieren conocerla pronto?
-Que bueno que siempre que vamos llevo mi martillo -burló y Loki lo pateo por debajo de la mesa.
Los guerreros y los guardias tenían campos separados, no se dividían entre si eran de hombres o mujeres, si no más bien por el distinto entrenamiento que se les daba, el de los guardias era de cierto modo más estricto y consecutivo que el de los guerreros.
Zenda llegó y se sentó cerca de la sombra de un árbol que estaba ahí, dónde a veces iban las chicas o los chicos a ver entrenar a sus amigos o parejas pero esa vez estaba vacío el lugar.
Observo lo que restaba del entrenamiento, pronto termino y un castaño luces se acercó a ella.
-¿Esperaste mucho? -se agacho para tomar la parte de atrás de su cabeza y depositar un tierno beso en la frente de la chica.
-No, sabes que me gusta verte entrenar.
-¿Cómo lo hago? -Zenda se levanto.
-Muy bien -sonrió.
La princesa tenía además de todas las habilidades por excelencia de ser Asgardiana y Jotun, ciertamente era un híbrido entre las dos razas, por decirlo vulgarmente; una cruza, poseía una increíble cantidad de fuerza, resistencia, velocidad y agilidad dotada de sus genes, también estos habían derivados distintos rasgos característicos combinados que no eran para nada de una raza u otra.
Podía a parte de transportarse fácilmente "cuando lo aprendiera correctamente" también había desarrollado unos extraños látigos que podía usar a voluntad, estos salían de su espalda, parecían colas, pero eran delgadas, rápidas y de color rojo brillante, a pesar de la apariencia de estos látigos, fácilmente podrían mantener una columna pesada en pie. Su vista era incluso más aguda que la de su madre, su fuerza conforme fuera creciendo, posiblemente sobrepasaría a la de su padre, la magia de plano la sabía, pero casi no la utilizaba, utilizaba ésta solamente cuando quería ocultarse, cambiar de apariencia a voluntad y otras cosas, pero hechizos en sí, no sabía, podía usarla para mover objetos o alterar la apariencia de algunos, las ilusiones de ella duraban más y eran más sólidas que las de su abuela, la experta Diosa y Hechicera Frigga.
De su abuelo había heredado la pasión por lo lobos, tenía uno llamado Fenrir, un lobo de pelaje totalmente negro y ojos rojos brillantes de tamaño descomunal, bueno actualmente ya era casi del tamaño de un caballo adulto y este seguía creciendo sin aparentar detenerse en algún momento. Esto fue regalo de su abuelo cuando ella cumplió 4 años, en ese momento el lobo era un cachorro de tamaño diminuto, ahora seguía siendo un cachorro pero ya más grande que ella.
-Te traje esto -le entregó las porciones de comida bien envueltas.
-Gracias.
-Y Dagny te manda esto -mostró el postre.
-¿Dagny? -rio- Es de... ¿leche con moras? -arqueo una ceja- Bueno me queda claro efectivamente es de alguien más que no seas tu porque... sabes que no me gusta.
-Si, pero se me hizo grosero el decirle eso.
-No, esta bien, después le daré las gracias y le diré.
-También vine a verte y a contarte algo.
-¿Algo? -ambos llegaron hasta dónde estaba la armería de los guardias, entraron y el castaño comenzaba a quitarse la armadura y despojarse de todo lo que trajera puesto para poder darse un baño y después salir de ahí rumbo a su hogar a descansar por el resto de la tarde. Todos los que entrenaban hacían eso- Sabes... me das miedo cuando pones esa cara. No sé si es algo bueno para ti o para mi o solo piensas que es bueno cuando en realidad no lo es.
-Que malo eres, además... ¿qué cara? -dijo haciendo una cara de total diversión y alegría.
-Esa que tienes ahora -rodó los ojos y observó como más reclutas entraban al lugar -Espérame afuera -comenzaron a entrar más jóvenes, las mujeres que también entrenaban para guardias, se dirigían a otro lugar para hacer lo mismo, ducharse y retirarse- Debo cambiarme.
-Si -se sentó en una de las bancas.
-Fuera -dijo moviendo la cabeza mientras los demás veían.
-Vamos Narfi, ya te he visto desnudo antes -rodó los ojos haciendo muecas y aguantando una risita imitando lo que antes hizo el otro.
-Si claro, a mi si, pero a ellos no -refiriéndose a los demás presentes que entraban- Así que salte y espérame, no tardo, me quitaré esto y me bañaré llegando a casa -la empujó hacia afuera ya sin la mitad de la armadura puesta. Pero Zenda volvió su apariencia masculina.
-¿Así puedo quedarme?
Los demás presentes se sonrojaron, aun en apariencia masculina Zenda seguía siendo muy atractiva. Narfi también quiso sonrojarse pero lo reprimió y la empujó de nuevo.
-¡Por supuesto que no! Espera afuera -la corrió viendo como los demás guardias querían comerla con la mirada, ¿no les importaba que fuera su princesa?
-¡Apestas! -grito saliendo del lugar- ¡Deberías bañarte aquí y también en tu casa, mi Tío podría morir si te huele!
-¡Espérame afuera! -grito de regreso caminando nuevamente hacia dentro del lugar a terminar de cambiarse.
-¿Cómo puedes estar en tus sentidos cerca de ella? -pregunto Acke uno de los amigos de Narfi que estaba con el abdomen descubierto viendo como aquel heterocromático salía del lugar.
-Nos conocemos desde pequeños -se encogió de hombros.
-Si pero es tan linda.
-Lindo -dijo otro de nombre Kaj.
-Linda o lindo lo que sea, es una cosa preciosa.
-Esa cosa es tu princesa, además de ser una Diosa con unos padres que te asesinarían sin tentarse un poco el corazón si llegases a hacerle algo -sonrió muy cerca de su cara- ¿Entendido?
-¿No quieres incluirte en la matanza? -burló otro amigo de él.
-¿Porque no? -tragaron duro y se dispusieron a cambiarse.
Una vez termino de cambiarse y terminó de hablar con sus amigos dentro de la guardia, salió para volverse a encontrar con Zenda, que seguía con apariencia masculina, ella solía tomar esa forma cuando quería entrar a los entrenamientos junto a su amigo, pero con el tiempo obviamente todos los del escuadrón del castaño se dieron cuenta de quién era realmente, pero no le importaba, así por lo menos podía hacerse alguna que otra broma a él y ellos de vez en cuando.
Narfi ahora de 19 años, había sido constante en su entrenamiento con respecto a convertirse en guardia real, había diferentes tipos de guardias en Asgard, si bien había muchos que acompañaban de tipo escuadrón para las guerras pasadas, los que se quedaban cerca del reino eran los mejores, pues estos tenían mayor rigor y disciplina, además de mayor poder de combate para así por lo menos proteger el reino y a su reyes, a esto quería aspirar el castaño, a ser tan fiel al reino y a la pequeña princesa. Ahora estaba en camino a terminar una parte de sus entrenamiento, además de entrenaba extra algunas veces con el mismo Dios Thor, pero también el jugaba o peleaba con Zenda para que ella en dado caso de necesitarlo, conociera como se movía él y estar en sincronía absoluta.
Vio a Zenda sentada de rodillas sobre el pasto del lugar, miraba el cielo, casi siempre hacía eso, le gustaba el color y sentir el viento en sus mejillas y melena. La observó, ella portaba un tipo short hasta la mitad de los muslos color negro pegado a la piel, de su cintura nacía una tipo falta que llegaba un poco más abajo que su short pero era de una tela transparente, el abdomen descubierto tapando solo su pecho con la playera que solo tenía una manga que le cubría un brazo entero hasta su muñeca, su cabello lo llevaba largo hasta el final de los omóplatos, amarrado en una media cola.
El castaño se acercó sigilosamente por detrás y después la atrapo por la cintura delgada y tiro de ella hacia su pecho, terminando en levantarla por completo del suelo dejándola de pie.
-¡Me asustaste! -dijo luchando por soltarse del agarre.
-Se supone que tienes que sentir el peligro venir.
-Tu no eres peligro, mi radar dice eso -se enderezó.
-¿Porque sigues así?
-Me gusta como me veo así -dijo agachándose en el suelo de nuevo- ¿Y a ti?
-Siempre me gustas Bombón -dijo sonriendo y sentándose a un lado de ella.
Se recostó en las piernas del soldado y cambiando su apariencia. Su cabello creció más sin desatar el moño en el que estaba, su ropa no cambio, solo su figura, porque aunque ella cambiara a una forma masculina, seguía teniendo la cintura delgada y el cuerpo esbelto, solo que un poco más marcado, su rostro por otra parte parecía más andrógino y su pecho estaba plano a diferencia de cuando esta en su forma femenina- Que lindo -cerró los ojos.
Narfi comenzó a acariciar su largo cabello- ¿No que apestaba?
-Es cierto, pero lo soporto porque te quiero -sonrió- Iré a Midgard mañana, volveré en una semana -soltó con los ojos cerrados.
-¿Qué? ¿En verdad?
-Si, ¿puedes creerlo? Mis padres dijeron que nos iremos mañana y estaremos una semana ahí -abrió sus ojos, la pupila se afiló y miró fijamente a Narfi desde abajo.
-Que bien por ti Zenda, sé que querías ir a Midgard desde hace mucho -la miro a los ojos.
-Pero sabes... también tengo un poco de miedo.
Narfi ladeo la cabeza- ¿Porque? -le acaricio el cabello.
-Nunca he utilizado el Bifröst -frunció el ceño- Ni cuando fui con mis tías a Vanaheim, mi tía Sigyn abrió un portal y por ahí fuimos, ¿recuerdas?
-Si, en ese caso creo que soy yo quién ha viajado más por el Bifröst que tu, pero no es difícil, créeme. Solo no te sueltes de la mano de los príncipes.
-No lo haré.
-¿Sabes que hizo de comer hoy mi Tío?
-Ni idea.
-Algo envenenado -burló Zenda comenzando a caminar por la orilla de una barda, Narfi bajó los escalones quedando ella arriba y él abajo.
-Que mala, te pareces al príncipe Thor, siempre se burla de él, pero te aseguro que ya mejoró con su sazón.
-Si lo sé, solo bromeaba, ya he comido los postres que hace, esos son muy buenos.
Ambos iban en camino a la casa el castaño, ya habían pasado años desde que había sido adoptado por el guerrero y mejor amigo de los padres de Zenda, ahora su relación era mucho más fuerte que antes. Ahora era más Padre e Hijo, incluso Fandral se había hecho más responsable desde que lo acogió por completo.
Llegaron a la casa y antes de abrir la puerta, Fandral la abrió haciendo que Narfi se fuera de boca contra el suelo, pero Fandral le puso una mano en el pecho regresándolo a su lugar.
-¡Padre! ¡Casi me mato!
-No seas quejón niño, ni si quiera te golpeaste.
-¿Porque abriste así la puerta?
-Porque vi que venía contigo mi linda sobrinita -dijo Fandral acercándose a Zenda y abrazándola fuertemente- ¿Cómo estás Zenda?
-Bien Tío Fandral. ¿y tu? -sonrió aceptando el abrazo.
-Bien bien, que bueno que estés aquí, hice un nuevo postre de durazno, ¿quieres comer un poco?
Zenda prácticamente paso hasta el comedor y se sentó- ¡Claro!
-Y se supone que yo soy tu hijo -quejó Narfi riendo y entrando también, después Fandral cerrando la puerta.
Por si no sabían, debe pasar una gran cantidad de años para que la apariencia de los Asgardianos comience a alterarse y estos comiencen a envejecer, esto es más fuerte en los Dioses, por ello cuando Fandral comience a parecer más grande con el tiempo, esos años ni siquiera le harán efecto a Loki, Thor ni a Sigyn. Explicando sencillamente, jamás aparentaran tener la edad que tienen en realidad, no aparentarán más de 30 años humanos o veintitantos. Lastimosamente, a los Asgardianos comunes sin ser Dioses, si les llegará el tiempo más rápido.
-Esta muy bueno Tío -dijo terminándose el plato con varios postrecillos.
-Comes demasiado y no engordas -burló Narfi.
-Esa es la mejor parte -rio- Por cierto ¿quieren ir a cenar con nosotros?
-Estaría bien -habló Fandral, él y Zenda voltearon a ver a Narfi.
-Claro sonrió.
Después de comer el postre que Fandral, Zenda espero a que el castaño se duchara y cambiara, ahora la casa de Fandral era mucho más grande, debido a que aquel joven de 19 años ya era más grande y debía tener su propio espacio, se construyó más terreno. Zenda esperaba en la habitación del castaño.
Narfi salió del baño con el cabello mojado que le llegaba hasta abajo de las orejas tapándole la visión, con un pantalón y una playera puestos.
-¿Qué te paso aquí? -dijo tomando su brazo, ahora con la playera sin mangas que Narfi tenía puesta, podía ver claramente un hematoma grande y cortadas leves en los brazos.
-Hubo combate, me tocó contra Váli y bueno... -se sentó junto a ella en la cama.
-Váli... -murmuró Zenda- No me cae -pasó su mano por el color morado del brazo de este y comenzó a sanarlo con su magia- ¿Le ganaste por lo menos?
-Obvio si, ¿por quién me tomas? Ouch... -se quejó porque Zenda apretó un poco.
-Perdón -rio- Bueno me doy por bien servida si le ganaste, además, se me hace raro que tu tengas moretones o algo, nunca los tienes.
-Nunca que no sea con Váli -se encogió de hombros.
-Que se enfrente a mi a ver como termina -dijo haciendo puño su mano.
-No creo que eso sea buena idea...
-¿Por qué no?
-Porque matarías a alguien que protegerá al reino.
-Pues mejor, así se verá que no es apto para esto -afirmo y Narfi rio, las heridas sanaron y lo morado en su piel se quitó.
-Gracias Zenda.
-De nada -formó una sonrisa en su rostro.
-¿Zenda? -Fandral abrió la puerta de la habitación de Narfi.
-Mande.
-Fenrir está pisando todas las flores del jardín -dijo haciendo gestos hacia afuera de la ventana.
Zenda y Narfi vieron por le ventana como un lobo estaba afuera acostado sobre todas las flores.
-Ay Fenrir -habló mientras salió corriendo y Narfi tras ella- Fenrir levántate -pidió al animal quién al verla, la lamio por completo con su larga lengua.
-Que asco -murmuró Narfi tras ella.
Zenda lo miro entre cerrando los ojos- Fenrir -el lobo elevó las orejas aun sin moverse- Dale un beso a Narfi -sonrió mostrando un poco sus colmillos y el lobo se levantó y fue tras Narfi para darle un lengüetazo en todo el rostro, pero por el tamaño del animal, termino babeándolo por completo igual que a ella- Buen chico mi niño.
-¡Que mala eres acabo de bañarme! Fenrir no, déjame Fenrir -el lobo se entretuvo tumbando al chico en el suelo y Zenda se centro en las flores aplastadas.
-Lo siento -se arrodillo y enterró las manos en la tierra, cerro sus ojos y pronto las flores comenzaron a cobrar vida y llenarse de fulgor como antes, ahora incluso había capullos nuevos- Listo -se levanto y vio como Fenrir seguía lamiendo a Narfi- Ya es suficiente Fenrir.
-Gracias -dijo levantándose.
-Creo que mejor me voy ya -lo observó y después lo abrazó- Vuelvo en una semana -habló rompiendo el abrazo.
-Cuídate mucho, ¿si? -tomó sus manos.
-Lo haré, te traeré algo de Midgard, ¿que quieres?
-Dudo que haya algo que quiera más que a ti, así que quiero que vuelvas pronto y con bien -sonrió mirándola a los ojos sin soltar sus manos.
-Bien, solo serán unos días y cuando vuelva... -se acercó más a él sonriéndole pícaramente con sus ojos de serpiente heterocromáticos, habló muy cerca de su oído parándose un poco de puntas por la altura de Narfi- Quiero que tengamos una carrera -mencionó con la voz más suave que pudo ejercer, la piel se le erizo y el rubor le bajó tan pronto le subió al joven soldado.
-Porque poner esa voz, arruinas el momento -rio dándole un beso en la mejilla a la chica- Te veo en una semana.
Zenda se subió al lomo de Fenrir quién se agachó para esta acción- Nos vemos -acaricio al lobo indicándole avanzar- Vamos Fenrir -comenzó a alejarse.
-¡Y por favor no hagas lo que hiciste ahora con los Midgardianos! -gritó y Zenda al escucharlo hizo que su mascota apresurara el paso.
-¡No prometo nada! -soltó a reír.
-Cuídate... princesa -murmuró viéndola irse.
-¿Porque no solo admites que la amas? -Narfi pego un brinco del tamaño del mundo.
-¡Dioses! ¿Qué haces aquí padre? -empujó un poco a Fandral por asustarlo.
-Nada -se encogió de hombros- Solo sentí mucha tensión de parte tuya.
-¿Tensión? -frunció el ceño- Deliras padre -camino dentro de la casa nuevamente.
-Si supieras todo lo que la princesa Sigyn y Sif sufrieron porque Sif no se decidía... -habló Fandral y Narfi lo miró- No estarías haciendo esto.
-Padre -reprochó Narfi.
Fandral tomó los hombros de su hijo.
-Solo no te tardes -sonrió- No demasiado -besó su frente- Ahora ayúdame con esto -mostro un desastre de herramientas en el suelo.
-Gracias -murmuro refiriéndose al consejo de su padre.
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Sus ojos se iluminaron al ver como el Bifröst comenzaba a funcionar, sintió una brisa que rosaba sus mejillas y todo su cuerpo, seguido de eso, un tirón fue lo que Zenda sintió, cerró sus ojos por un momento al sentir una fuerza que la jala dentro del Bifröst, pero como le dijo su madre, abrió los ojos. Parpadeo un par de veces fijando su vista al frente, luego a los lados, atrás y hacia abajo, era como ir en un túnel de colores y sentía como descendía hacia su destino.
-Increíble -murmuró viendo hacia abajo observando como sus pies no tocaban absolutamente nada, pero seguía firme. Sonrió.
Thor y Loki se miraron sonriendo por ver la ilusión en el rostro de su pequeña, les gustaba mucho cuando lograban ver esa asombrosa expresión en el rostro de su hija.
Zenda sintió como sus pies comenzaron a tocar algo hasta quedar plantada en lo que parecía era el suelo. El Bifröst desapareció dejándole percatarse de dónde había llegado, elevó su rostro lentamente, lo primero que vio fue una estructura algo extraña pero le llamó la atención de inmediato. No eran estructuras doradas y plateadas como a las que estaba acostumbrada. En cambio parecía ser concreto y metal, con cristales, muchos cristales.
Miro a su alrededor y se percató había gente saliendo y entrando del lugar que estaba frente a ellos, todos con trajes muy diferentes y divertidos, cubrían mucho sus pieles, casi todos cargaban con cajas.
-¿Quiénes son sus amigos? -preguntó buscando a algunos soldados o guerreros, pues es lo que ella esperaba ver.
-¡Hola! -se escuchó un grito y los tres Dioses voltearon- ¡Thor! ¡Loki! -un hombre se acercaba a ellos con un traje extraño quitándose un casco.
-Steve -saludo Thor soltando la mano de su hija y ella frunció el ceño viendo como se alejaba para abrazar al desconocido.
-¿Porque no nos dijeron que volverían hoy? -sonrió y miro tras él hacia Loki- Bienvenidos -sonrió y entonces se percato de la chica a un lado de Loki- ¿Ella es? -comenzó a caminar hacia Loki y Zenda- ¿Es su hija? -asintieron- Es muy hermosa -Thor sonrió orgullo ante esas palabras.
-Lo sé -dijo fanfarrón y Loki giro los ojos divertido- Se parece a Loki -sonrió.
-Se parece a ambos.
-Hola Rogers -saludó Loki y miro a Zenda- Saluda hija.
Zenda estaba de pie frente al desconocido que respondía al nombre de Steve al parecer, lo observó detenidamente, analizándolo con cuidado. Se percato que era casi de la misma altura que su padre, tan solo uno o dos centímetros más bajo que él, era rubio y sus ojos también eran azules, solo que de un tono un poco diferente al del Dios. Observó su traje, parecía musculoso también, en su espalda llevaba algo circular, un escudo al parecer.
Extendió su mano- Soy Zenda -se presentó.
Steve tomó la mano de la chica- Soy Steve, Steve Rogers amigo de tus padres -sonrió y recibió una sonrisa de vuelta de parte de Zenda, al tomar su mano sintió que era un hombre con un gran corazón y fuertes decisiones, nada malo había dentro de él- Un gusto conocerte por fin linda.
-Un gusto -le sonrió entrecerrando sus ojos un poco.
-Que hermosos ojos tienes pequeña -alagó Steve y Zenda se sonrojó.
-G-Gracias -desvió la mirada.
Un auto llegó y Zenda se sorprendió, su madre con magia le había mostrado los recuerdos que tenía de las cosas que veía en Midgard y por eso es que sabía que era un auto, además de haberlos visto por libros de la creación e invención de artefactos en Midgard.
Observó como desde dentro del coche se dejaba ver otro hombre más, un castaño con ropa formal y elegante.
-Él es Tony -dijo el rubio todavía cerca de Zenda- Mi esposo -terminó por decir y caminó hasta el auto.
El hombre bajó del auto y se acercó al rubio, era un poco más bajo que él por lo que tuvo que pararse de puntas para lograr darle un beso en los labios al más alto.
Zenda inclinó su cabeza hacia un lado y vio como en la mano del castaño un anillo parecido a los de sus padres brillaba, buscó uno en la mano del rubio, pero traía guantes ocultado sus dedos.
-Tony -se quejó Steve tomando su cintura y alejándolo un poquito pues el castaño alargó mucho el pequeño beso.
-¿Qué? -sonrió pícaro, Zenda volteo a ver a su madre viendo que esa misma sonrisa ponía él cuando quería molestar a su padre, "se parecen" pensó- Oh Thor, Loki. Que bueno verlos, apenas ayer se fueron creí que pasaría por lo menos una semana para que volvieran... -volteo para verla a ella- ¿Es su hija? -preguntó incrédulo, se acercó y de igual manera que lo hizo Steve, la saludó- Me llamo Tony, un placer niña.
-Zenda -sonrió saludando.
-Espero que no les moleste que hayamos vuelto tan pronto y sin avisar -habló Thor.
-Ustedes nunca avisan -movió su mano- Pero no, claro que no es molestia, saben que pueden venir cuando quieran -se encogió de hombros- Solo que ahora iré a la escuela por Harley y Peter.
-Si quieres voy yo -dijo Steve- Además no nos quedaremos aquí, estamos mudando las cosas de la torre al completo -explicó- Pero Bruce y Natasha se fueron por un mes a distraerse y Clint se fue con sus hijos y su esposa a la granja, Wanda y Visión desaparecieron yéndose también.
-En conclusión nos abandonaron -suspiró Tony- Por eso planeábamos irnos a Malibú, ¿quieren irse allá también?
-Si no es molestia -dijo Loki- Quiero que Zenda conozca Midgard.
-Y que mejor lugar para conocer primero que mi casa -sonrió el castaño- Y quién más para mostrarte la casa y los alrededores que Peter y Harley.
-¿Quienes?
-Son sus hijos, tienen tu edad, bueno son un año mayor que tu.
-Oh.
-Iré por ellos entonces -dijo Steve tomando las llaves del auto.
-Capitán -habló Tony y el rubio lo miro- Cámbiate primero -rodó los ojos pues Steve seguía con el traje del Capitán América.
-Cierto, le devolvió las llaves al castaño y entró seguidos de los tres Dioses y su esposo.
Entraron al lugar, habían muchas personas entrando y saliendo, todos saludaban a sus padres y a la otra pareja, a ella se le quedaban viendo, no sabía si era porque nunca la habían visto o porque usaba la ropa que habitualmente usaba en Asgard.
Subieron a un cubo, que su padre le dijo era un elevador, servía para llevar a las personas de un piso a otro, algo así como los transportes de hierro que había con propulsión en las torres del palacio hacia las salas de armas externas en Asgard.
Las puertas se abrieron, tan pronto salieron subieron unas escaleras, vio como el otro piso al que entraron era más como una casa, tenía sillas diferentes a las de Asgard, había sillones que le gustaron, una vez dentro había más escaleras, que según le dijeron antes de ir a la cocina era dónde se encontraban las habitaciones.
-Bien, cuéntame -dijo el castaño mirando a Zenda.
-¿Qué?
-¿Qué poder tienes? Tus padres nunca nos dijeron.
-Justo quería preguntar lo mismo de ti -sonrió- Mis padres dijeron que eres como un hombre de metal, pero eres de carne y hueso.
-Claro que soy de carne y hueso -soltó a reír- Creí que le habían explicado más sobre nosotros, son malos los dos -miro a los Dioses mayores.
-Quería que tu mismo le explicaras Stark, tu tecnología y todo eso -habló Loki sentándose en un sofá junto a Thor, Steve se había ido a cambiar para ir por los chicos.
-Bien pues yo no tengo poderes -mencionó y Zenda no se lo creyó, o bueno no del todo.
-Pero eres parte de los Vengadores, ¿así se hacen llamar no?
-Claro, soy parte de ellos, pero no tengo poderes, es más, somos cuatro que somos simples mortales -rio.
Zenda miró a sus padres y Thor asintió.
-En realidad Tony no tiene poder alguno, más que su tecnología que incluso con eso me dio una paliza el día que nos conocimos -explicó Thor.
-Y Loki le dio otra a Steve -dijo Tony.
-Solo era Ojo por ojo, además no nos conocíamos bien -se justificó Loki- Después te contaremos como fue que nos conocimos bien -le dijo a Zenda que se acercó a ellos sentándose en otro sofá.
-Simplificando -habló Tony- Yo no tengo poderes pero si habilidades, aunque se podría decir que mi poder es la inteligencia, mi dinero y con lo que puedo hacer gracias a él, por eso puedo construir armas y mis armaduras, por eso lo de hombre de metal, así me llamó Thor cuando nos vimos por primera vez.
-¿Y qué eso que tienes en el pecho? -preguntó la chica curiosa.
-Oh es un reactor que utilizo para alimentar mis armaduras y me mantiene con vi... -la miró y después a la pareja- ¿Cómo lo...? -su reactor estaba totalmente cubierto por su ropa, no había manera de que se viera.
-Puede sentir el flujo de energías -explicó Loki.
-Perdón -se disculpó Zenda.
-Si no importa -dijo Tony- Bueno, prosigo. Mostró un aparato que proyectó cinco imágenes de personas diferentes. Apuntó a la mujer de cabello pelirrojo y corto. Ella es Natasha, es una mujer fuerte y peligrosa, es una espía igual que Clint -lo señaló- Los dos sin poderes, solo habilidades increíbles cada uno. Bruce en cambio sufrió un accidente que le provocó un desarrollo de poderes, se convierte en un ser verde con gran fuerza y mal temperamento. Visión es un androide que fue creado, el si tiene poderes por la gema en su frente -Zenda se le quedó viendo fijamente, sentía que ya había visto esa cosa en algún lugar- Y esa misma gema le dio poderes a Wanda -la señaló- Ella puede controlar la mente de los demás, hacer que vean lo que ella quiera por un periodo de tiempo y cosas de bruja -dijo riéndose- Él es Sam, tampoco tiene poderes, pero si un traje y habilidades y por último, Steve, él si tiene poderes gracias aun Suero que se le inyectó hace mucho tiempo.
-Él vivió más tiempo que todos los humanos... ¿porque?
-Dormí por algunos años mientras estaba congelado en el hielo -Steve venía bajando las escaleras ya cambiado con ropa de civil- Físicamente tengo una edad, pero debería tener otra, todo es gracias a las habilidades que me dio el suero que está en mi sistema -aclaró acercándose a Tony- Gracias al suero pude llegar hasta este tiempo y vivir con él -besó su mejilla y Zenda sonrió, eran felices.
-Bien, ahora si, ¿seguro que quieres ir tu por los chicos?
-Si, sabes, pensaba que Zenda querría ir conmigo, volveremos aquí y después nos iremos todos a casa.
-¿Quieres ir con él? -preguntó Thor.
-Amm..., siento que me veré... diferente -susurró.
-Entonces cámbiate antes amor, pero solo si quieres ir.
-Bien, si quiero -sonrió.
-Bueno -Loki se levantó y condujo a Zenda hasta llegar a la que sería la habitación de ella de ahora en adelante cada que viniera.
-Oye mira -Thor ya cambiado con lo que parecía una pijama, con un pants gris y una playera azul marino suelta caminó hasta llegar al librero- Tony mandó a poner muchos libros, léelos, si algo tienen en común Tony y Loki es que tienen buen gusto por la lectura, además de dos esposos guapísimos.
-Jaja, ya vete Thor -Loki lo jaló y empujó fuera de la habitación- Ayúdale a Steve y Tony a guardar las cosas para irnos.
-Esta bien -dijo y salió.
-Esta ropa es extraña madre.
-Lo sé, pero te acostumbrarás, ¿ninguna te gusta?
-Esta -tomó un Crop Top de color negro apretado, solo cubría su busto y tenía mangas pegadas que llegaban hasta antes de sus muñecas, tomó un pantalón de mezclilla como le dijo Loki, no era rasgado, era simple pero llegaba antes de sus tobillos- ¿Quién escogió esta ropa?
-Supongo que Tony, Steve te hubiera conseguido camisetas y ropa más tapada. Toma estos -sacó unos tenis, ¿te quedan?
Se los probó- Aprietan -Loki con magia los arregló.
-¿Mejor?
-Mejor -sonrió.
-Ya está lista -habló Loki bajando las escaleras junto a su hija.
-Mi amor, te ves hermosa, muy humana -rio.
-Ustedes se ven humanos sin serlo -reprochó Tony.
-¿Nos vamos Zenda?
-Si.
-Toma esto Tony le entregó una pulsera delgada con una luz azul que salía del centro.
-¿Qué es? -se le colocó en y se abrochó sola.
-Un comunicador, para que no te sientas insegura de no hablar con tus padres si sientes que tardan un poco.
-Gracias.
El auto se detuvo y Zenda frunció el ceño, habían parado frente a otro edificio el cual estaba silencioso, pero no por mucho, de pronto un sonido estruendoso la asustó y alertó.
-¿Qué es ese sonido?
-Tranquila -ella iba del lado del copiloto y veía por la ventana como varias personas comenzaban a salir, pero no personas cualquiera, eran jóvenes con mochilas a cuestas- Es la campana -abrió la puerta del auto- Vamos.
-¿Entraremos?
-Si, tengo que entregar esto -eran unos papeles que llevaba en una carpeta- Los profesores querían el permiso firmado de los dos.
-¿Permiso para que? -abrió la puerta y bajó, caminó tras Steve.
-Un viaje que se hará en la escuela, es un viaje escolar, los llevan a conocer lugares históricos y así -explicó- Supongo que después les pedirán un reporte de los lugares que visitaron -sonrió- No te separes de mi Zenda.
Asintió y caminó tras él hasta caminar a su lado. Varios se le quedaban viendo, varias chicas le daban una mirada de envidia y enojo, escuchaba lo que decían y ella fruncía cada vez más e ceño.
-"¿Es una nueva estudiante?"
-"Por Dios, ¿ya viste con quién viene?"
-"¿Es Steve Rogers?"
-"¿Será prima de los Rogers Stark?"
Siguió caminando sin prestar atención a los comentarios y llegaron hasta un lugar en dónde se veían dos chicos sentados frente a una mesa y un señor del lado contrario.
-Espérame aquí Zenda, ya vuelvo -Zenda se sentó en una de las sillas del corredor y observó como Steve entraba al lugar y veía que los dos chicos que le daban la espalda lo saludaron afectuosamente y Steve les revolvió el cabello a ambos.
Miro a los lados y habían varios chicos y chicas que la miraban, unos bien, otros mal, pero la miraban, las miradas siempre la han incomodado. No se encorvaba, se quedaba derecha firmemente sentada ahora con la vista al frente, claro, hasta que llegó un chico de cabello negro y tes oscura que le pasó el brazo por el hombro y la acercó pegándola a su cuerpo. ¿no lo había sentido venir?
-Hola preciosa -el chico se había sentado a su lado- ¿Vienes a inscribirte?
-No -se jaló sin lastimarlo, pero obvio no se logró soltar, sus padres le dijeron que los humanos eran relativamente frágiles, por ello debería controlar su fuerza con ellos.
-¿Enserio? Es una lástima, yo creí que si -miro al frente- ¿Vienes con Peter?
Frunció el ceño- ¿Quién?
-Es que escuché que llegaste acompañada de Steve Rogers, él es el papá de estos dos chicos -apuntó hacia dentro del lugar dónde estaban los dos jóvenes- ¿Eres su prima o algo así? Wow tus ojos...
-¿Qué tienen?
-Son... de diferente color -se le quedó viendo y Zenda le puso la mano en la cara empujándolo y tirándolo de la silla- Oye -Zenda se rio.
-Lo siento -la puerta se abrió y Steve salió primero seguido de los jóvenes.
-¿Cómo estás Flash? -habló Steve y el mencionado rápidamente se colocó de pie.
-H-Hola, señor Capitán, digo... -movió su cabeza- Señor América, no yo quiero decir...
-Hasta luego Flash -dijo el rubio y le indico con la cabeza a los tres chicos que lo siguieran.
-Adiós Peter -habló correctamente esta vez -tomó la muñeca de Zenda- Ey, ¿nos volveremos a ver? -jaló su mano.
-La verdad espero que no -elevó una ceja y se soltó del agarre caminando tras los dos muchachos.
Peter fue el primero en hablar- ¿Pops quién es ella?
-¿Estaba perdida? -preguntó Harley, ya era raro de por si ver que Steve Rogers se paseara por los pasillos de su escuela y ahora más el que estuviera acompañado de una chica de su edad.
-Es la hija de Thor y Loki -dijo caminando hacia la salida.
-Oh... -dijeron ambos sin prestar atención en un principio, pero pronto se quedaron estáticos- ¡¿Qué?! -voltearon a verla, justo en la entrada de la escuela.
-Hola -sonrió de lado- Soy Zenda.
-Soy Peter le sonrió ampliamente.
-Yo soy Harley -dijo el otro volteando de reojo él parecía más tranquilo.
-Un gusto -dijo la chica y otra vez observó como todos se le quedaban viendo, pero ahora no solo al rubio y a ella, si no a los cuatro- ¿No pueden disimular? -murmuró por lo bajo.
-Suban -dijo Steve- Vamos al complejo y luego a la casa.
-Si -dijeron los tres.
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-Entonces... ¿tu también vuelas? -preguntó Peter en la parte de atrás del auto -Steve rio viendo hacia la calle, Harley también parecí curioso por ese hecho, Zenda se acomodó en el asiento del copiloto para ver a los hermanos desde su lugar.
-No -rio- No vuelo.
-¿Tienes magia?
-Tengo magia, si, pero no sé hechizos como mi madre -fruncieron el ceño.
-Pero hacer magia -dijo Harley- ¿Qué puedes hacer?
-Mover objetos, transportarme de un lugar a otro y también a otros de un lugar a otro, creo que ya entendieron el concepto, aunque no soy tan buena todavía, sigo entrenando.
-Genial -dijeron ambos.
-Con el tiempo serás igual de grandiosa que tus padres Zenda -habló Steve volteando a verla ligeramente sin dejar de ver por completo al frente.
-Gracias Steve.
Llegaron a la casa de los Rogers Stark y se dispusieron a comer, estuvieron un rato en la sala los siete. Unas horas más tarde decidieron que Zenda podría inscribirse como un tipo de estudiante de intercambio y podría estar una semana asistiendo a la escuela, además solo serían unas cuantas clases ya que las vacaciones estaban por comenzar y los alumnos solo se dedicaban a dejar arreglada la escuela para ahorrarle molestias a los trabajadores de limpieza por las vacaciones.
-¿Pero esta bien que ella vaya? -fue Tony el que habló- Digo... si ella va a la escuela bueno, serían otras cosas totalmente diferentes a las que ella está acostumbrada.
-No te preocupes papá -dijo Harley- No están dando clases al 100%, además si no lo sabe se lo podemos decir.
-Sé casi todo sobre la cultura de Midgard -expresó Zenda- En Asgard te enseñan todos los idiomas y dialectos de todo tipo de raza, debes aprenderlos en el... bueno ustedes le dicen jardín.
-¿En el jardín?
-Wow que cosas son ustedes para hablar y aprender a esa edad.
Thor y Loki rieron.
-El tiempo de escuela el desarrollo de las habilidades intelectuales en Asgard avanzan más rápido que aquí, es un sistema diferente por obvias razones, pero les aseguramos que ella sabrá hasta quienes fueron sus gobernantes.
-Presidentes -corrigió Steve.
-Eso -repitió Thor- Bueno la cosa es que si quieres, puedes ir -miro a Zenda y ella miró a Loki.
-Solo si quieres amor, sino, puedes quedarte aquí y ver los alrededores.
-Sinceramente... siento que no hay mucho que ver por aquí...
-Eso me ofende muchísimo -dijo Tony tocándose el pecho- Ok, asunto superado -rio y contagio a los demás.
-Me refiero a que en una semana no creo conocer más que una pequeña parte de Midgard.
-Dile Tierra, porque podrá salirte eso y sabrían que no eres natal de aquí -habló Loki.
-¿No pueden saber que no soy de aquí? Digo... nos vieron llegar desde el Bifröst y hacer runas en el suelo.
-Si bueno la cuestión es...
Thor y Loki se dieron a la tarea de explicarle a Zenda que era peligroso mostrarse como realmente era ahí en la Tierra, le dijeron que una cosa era que supieran que ellos existieran y otra muy diferente que supieran que ella existiera. Actualmente había un registro de personas con habilidades extraordinarias que habitaban la Tierra, pero obviamente no todos lo hacían, si bien debían, no lo hacían por su propia voluntad algunos y otras por miedo.
-Además Tony ya hace mucho por ocultar cosas del gobierno para que nos protejan como para darle problemas si te sales de control.
-¿Salirme de control? Padre -se quejó Zenda.
-Es la verdad querida, no podemos arriesgarnos a que sepan de ti, no más de lo que deberían.
-¿Ustedes están dentro de esos documentos? -los miró a todos.
-Si -contestaron los cuatro adultos y los hermanos se miraron entre ellos.
-Bien, no haré nada y mantendré mis poderes a raya.
-Y no hay necesidad de que salves a alguien -dijo Loki- Si ves -miro a los hermanos- Si ven -corrigió- A alguien en peligro esperen a los policías o por nosotros en dado caso.
-¿Y si es muy grabe...? -preguntó Peter.
-No es no, Peter -dijo Tony serio viendo a sus dos hijos.
Una libreta era ojeada de lado a lado por la chica en la habitación de Peter, los tres jóvenes estaban ahí.
-Había visto la escritura Midgardiana antes en libros, pero no había visto una tan bonita y clara -dijo observando detalladamente las hojas de la libreta.
-Son mis notas de biología -dijo Peter- Y gracias -bufó.
-¿Porque estás molesto?
-Está enojado porque no lo dejan hacer lo que quiere -explicó Harley sentado con un libro en las manos y un aparato en la mesa, estaba sentado en el suelo igual que Zenda frente a él al otro extremo de la mesa baja.
-Cállate Harley, tu también te molestaste no digas que no -soltó su celular y ese iba a caer pero Zenda lo atrapó en sus manos antes de que cayera al suelo- Gracias.
-Por nada.
-No digo que no me molestara, eso que... ya sabes que no debemos hacerlo de nuevo, nuestros padres se enojaron y se preocuparon mucho la última vez.
-¿Porque? ¿Qué hicieron? -cuestionó Zenda y Peter se sentó en la cama.
-¿Recuerdas que nuestros padres explicaron sobre que había personas que no se registraban voluntariamente en el registro de super-humanos? - preguntó Harley y asintió.
-Pues esas personas son forzadas a hacerlo, los obligan amenazándolos para hacerlo, teniendo que revelar su identidad a toso el mundo cuando sea el caso -dijo Peter esta vez- No es bonito.
-Claro que no ocupan a todos para formar héroes o así, solo los hacen registrarse para mantenerlos vigilados, para mantener un control de cuantos son y saber como detenerlos si es el caso.
-Supongo que aquellos que no lo hacen es porque no quieren... ¿exhibirse? Comprendo si no lo quieren hacer -frunció el ceño- ¿Tony también está registrado? ¿Los demás miembros que son completamente humanos también?
-Si, porque no es que sean humanos o no, son aquellos con un poder para destruir a aquellos más fuertes o débiles.
-Ósea que su gobierno les tiene miedo a esas personas y por eso los quiere tener contados.
-Exacto.
-Pero yo no estoy registrado -habló Peter y Zenda se sorprendió.
-Ninguno de los dos lo está -habló Harley ahora.
-¿Tienen poderes también?
La miraron y después Harley miro a Peter, éste se puso de pie y de un salto llegó al techo sosteniéndose solo con los dedos del firmamento.
-Increíble -dijo Zenda viéndolo desde arriba y después volteando a ver a Harley en espera de algo.
-O no, yo soy normal, yo no tengo poderes de ese tipo.
-¿Entonces que haces? -preguntó viéndolo, Peter seguía colgado.
-Por así decirlo... soy como nuestro Papá y Peter como Pops, ellos tienen fuerza y habilidades sobrehumanas y Papá y yo la inteligencia y la tecnología para crear cosas increíbles.
-Resumiendo, ¿tu también usas tecnología?
-Así es -sonrió y Peter se bajó soltándose.
-Oh... y sus padres... ¿saben?
-Claro, por eso nos prohíben intervenir cada vez que ocurre algo y estamos cerca, aunque podamos evitar que mucha gente salga lastimada, no nos dejan.
-Comprendo como se siente -dejó salir una media sonrisa.
-¿Te pasa lo mismo?
-En cierto modo si, quiero decir... todos en el reino me quieren y me protegen mucho, incluyo las personas del pueblo -miro el suelo- Pero quisiera que me dejaran hacer algo por mi misma más tiempo, siempre me la paso entrenando y estudiando, mis padres van y vienen, los amo no digo que no... pero quisiera que me dieran más confianza para soltarme, él único que me deja a veces es mi abuelo, y Narfi siempre me acompaña en mis travesuras cuando puede.
-¿Quién es Narfi?
-Un amigo -sonrió- Bueno somos como primos, pero lo considero como hermano.
-Aww -dijo Peter riendo y contagiando a Harley y a Zenda.
-Pero bueno, en "resumen" dirías tu -dijo riendo Harley- Peter por obligación moral se tuvo que registrar pero no lo hizo.
-¿Eso no trae consecuencias?
-Solo si me atrapan, además... ya se han corrido rumores de que hay un chico araña por ahí.
-¿Chico araña?
-Le pico una araña mutante -dijo riendo a carcajadas Harley- Deberías haberlo visto cuando le pasó eso, llegó casi llorando a mi habitación, ese día yo no fui a la escuela porque me había intoxicado comiendo demás y cuando llegó casi desmayándose dijo "Harley voy a poner huevos de araña, una araña me pico y me duele" -soltó a reír pues imitó de forma chistosa a su hermano y los otros dos rieron con él- Después fuimos con Pops, le habló a la Doctora Cho y ella nos dijo que le diéramos una medicina, creímos que le dejaría de dar comezón, pero lo que no sabíamos es que esa pequeña arañita...
-Era radiactiva o algo al parecer, de dónde salió quién sabe, pero la araña se murió, yo sigo vivo y obtuve todos los poderes de una araña -finalizó.
-¿Pones huevos? -abrió mucho los ojos y Harley soltó el libro divertido por la expresión de la chica.
-Claro que no Zenda, te pareces a Ned -inclinó su cabeza hacia un lado viéndolo- Es un amigo, solo él sabe mi secreto así que ¡shhh!. De esto ni nuestros padres saben -rio.
-Oye, viendo bien tus ojos y tu comportamiento y el habito de mover así la cabeza -dijo Harley- Pareces un cachorro de algún perrito.
-Cierto, tus pupilas son diferentes -dijo Peter acercándosele y una vez consiente de su cercanía se alejó de un brinco sonrojado y su hermano rio y Zenda solo le dejó una media sonrisa en su rostro- Lo-Lo siento.
-Descuida -dijo- Pero si, aunque no es lo único que es diferente -mostró su brazo y pequeñas marcas comenzaron a aparecer en su cuerpo- Si fuera como mi madre en la parte de el aspecto Jotun sería algo así -se levantó y su apariencia comenzó a disolverse de a poco dejando a la vista una piel azul, sus ojos aun con heterocromía y dejando ver un atuendo que hizo sonrojar demasiado a los hermanos frente a ella.
Los hermanos tragaron saliva al ver más el cuerpo y la apariencia de la chica, si bien no todos lo días podías ver a alguien cambiar de apariencia así, estaban acostumbrados a ver a Bruce transformarse en Hulk. Él era verde.
En el transcurso de la charla en la habitación de Peter, Zenda les sugirió que porque no ocultaban su identidad para que así el registro no hiciera efecto si los llegasen a ver, ya saben rebeldes unidos, jamás serán vencidos. Peter le explicó que de hecho se había construido un traje a medias para poder hacer las pequeñas apariciones de antes, en el caso de Harley era diferente, si alguien veía que otra persona tenía acceso a tecnología como la armadura de Ironman, que relativamente eran sumamente similares, traería problemas a su padre, por ello es que solo le informaba a Peter dónde, como y cuando ayudar, claro que eso lo habían dejado hace meses por el temor de sus padres a perderlos si los atrapaban.
A la mañana siguiente, tuvieron que volver al complejo, Tony fue quien llevó a los tres a la escuela ese día, porque Steve y Thor habían quedado de ir a patrullar juntos, claro sin los ostentosos trajes y Loki iría más tarde con Tony a acompañarlo a una reunión que habría en el complejo esa misma tarde en el horario de clases de sus hijos. Además Tony era quien hablaría con el director para hacerle ver que la chica se quedaría solo unos días, que posiblemente volvería otro par de veces, pero que la aceptara. No hizo falta sobornarlo ni nada por el estilo, dado que era el gran Tony Stark quien le pedía ese favor al director y él por el gran respeto y admiración que le tenía al hombre castaño le dio acceso indefinido a la chica para pode ir y venir en los planteles los días y a las horas que quisiera, había mentido diciendo que era una prima que vendría ocasionalmente pero que no quería perderse nada en tiempo de estudios.
-Bien -Tony besó la mejilla de sus hijos y se le quedó viendo a Zenda quién agachó un poco la cabeza ante eso y ella sintió como también se le fue depositado un tenue beso en su mejilla, sorprendida elevó la mirada y contempló como Tony comenzaba a caminar alejándose de ellos, moviendo la mano se despidió- Nos vemos a la salida, se cuidan niños.
Zenda encontraba a los amigos de sus padres un tanto simpáticos, extraños y de gran corazón, más esta pareja, de alguna manera ellos la hacían sentir bien, aun le faltaba conocer a los demás, pero por como hablaban de ellos, suponía serían agradables.
-Vamos -dijo Harley caminando al frente, Zenda camino a su lado y Peter del otro extremo haciendo a Zenda quedar en el medio- Primero pasaremos a dejar esto -mostró unos libros que tenía en sus manos- No los necesitaremos y los ponemos en los casilleros.
Zenda frunció el ceño. A diferencia de ellos ella no llevaba mochila alguna, Peter no llevaba nada en las manos, mientras estaban los tres parados frente a los casilleros Zenda podía sentir como se le quedaban viendo, ya no sabía si era por ella o realmente era por ellos.
-¿Siempre son así? -murmuró, Harley no volteó siguió metiendo sus cosas el casillero.
-¿Qué cosa?
-Incomodan -afirmó viendo de reojo a los chicos del lugar.
-Ah si no te preocupes, solo les atrae lo nuevo y más el hecho de que alguien "nuevo" venga y esté alado de la pareja de estudiantes más destacados -habló una voz que hizo a Zenda dar un ligero salto, cierto, no podía sentir a los humanos venir porque no los consideraba amenazas, justo lo que pasó con Narfi.
-Ned -saludó Peter- Hola hermano.
-Hola -miro a Zenda- Hola lindura.
-No Ned, mejor no lo intentes -rio Peter.
-Me llamo Ned -sonrió y Zenda también lo hizo.
-Zenda -respondió tomando la mano que le extendió el contrario.
Ned la miro de pies a cabeza, observándola detenidamente- Wow, ¿que tienes en los ojos? ¿usas lentes de contacto? ¿Ya vieron sus ojos? son como los de mi gat... -Harley cerró de golpe el casillero y los tres voltearon a verlo, Peter le tapó la boca al chico de complexión robusta y lo empujó por un pasillo para evitar que nadie los escuchara.
-Primero ni se te ocurra tratar de ligarla, sus padres de matarían, segundo, por piedad no lo hagas.
-Por cierto -se quitó la mano de Peter de la boca y miro otra vez a Zenda- Que bonito nombre, ¿no eres de aquí verdad? ¿oye enserio tus padre me matarán si me hago tu amigo?
-Mi madre tal vez no, mi padre probablemente.
-¿Son policías? ¿Son mafiosos? ¿Quién es ella por cierto? -miro a los hermanos.
-Se llama Zenda como ya te dijo, y no, no es de aquí -dijo Peter.
-Es hija de Thor y Loki -explicaba Harley.
-¿Los... Loki y Thor que todo mundo conoce? -preguntó Ned tragando saliva.
-Esos meros -dijo Peter.
-Haciéndolo sencillo, es una Diosa -dijo sonriendo al ver como Ned trataba de procesar toda la información recibida.
-Carajo -murmuró- Chica, eres linda, pero valoro mi vida por eso ni te volveré a rozar la mano, adoro mis manos, no quiero que me las corten.
-Nadie te las va a cortar -rio Zenda- Espero -murmuró pero Ned la escuchó claramente- Por cierto, ¿que no escucharon que mis padres me advirtieron de no decirle nada a nadie?
-Tranquila, él es de confianza, es de quién te hablamos que sabía el secreto de Peter y mio.
-Oh cierto -asintió recordando.
Las clases pasaron rápido, como lo habían supuesto, no hubo clases en sí, más bien solo fue juego y risas mientras algunos arreglaban ahora solo estaban colocando algunos clavos en las paredes para poder colgar algunas mantas para tapar los artículos deportivos y los trofeos.
-¿Te ayudo? -preguntó Zenda a Ned que batallaba para poder atinarle al clavo y no al martillo.
-Seguro -le entregó el martillo a la chica y ella tomó el clavo firmemente frente a la marca de intento de Ned, haciendo un poco de fuerza con su mano, logró clavar casi del todo el clavo en la pared dejando a unos chicos y a Ned atónitos y entonces reaccionó avergonzándose porque se supone no mostrara nada de su naturaleza.
-Vaya Ned, una niña te humillo -comenzaron a burlarlo y eso la alivió pues prácticamente no le prestaron atención al hecho de que ella con solo su fuerza fue capaz de traspasar un clavo en la pared.
-Se está tardando más de lo que pensaba -habló por lo bajo Loki.
-Odio estas reuniones -murmuró Tony viendo su reloj dispuesto a levantarse pero entonces por palabras de ese momento por parte de las personas presentes, sabía que no debía levantarse e irse como si nada sin antes atender esos asuntos a tratar- Debería llamar a los chicos.
-Mándale un mensaje a Steve para que vaya con Thor a recogerlos...
-No puede mira -mostró su celular y era un mensaje de Steve que le había tomado una foto a Thor mientras ayudaba a unas mujeres en la calle.
-¿Y esas quienes son? -le arrebató el celular y se sonrojó al verse a sí mismo en donde estaba, sentado en la sala de conferencias viendo aburrido al frente- ¿Y porque estoy yo aquí? ¿Cuándo tomaste esta foto Stark? -Tony le quitó el celular.
-Primero, son unas agentes las que están ahí y Steve me dijo que se tardarían un poco por una alerta de algo, no em dijo que cosa. Segundo, te la tomé porque te veías lindo -le guiñó el ojo y Loki lo empujó y ambos recibieron un regaño de parte del uno de los presentes para que prestaran atención.
-Solo llama a los niños entonces -reprochó Loki recargándose en la silla.
Los tres hijos de los Vengadores se encontraba sentados en las escaleras de la escuela esperando a que llegaran por ellos.
-Creo que no vendrán -murmuró Peter.
-No, no lo harán -afirmó Harley.
-Mierda -soltó Zenda- ¿Quieren ir por un portal? -sonrió sacando la lengua.
-Ni se te ocurra Zenda -se escuchó la voz de Loki y los tres chicos se abrazaron a verlo de pie frente a ellos.
-¿M-Madre? ¿De dónde saliste? -rio.
-No estoy aquí realmente, es una ilusión, pero como ya nos regañaron por estar con el celular en la reunión, vine así a decirles que tomen el camión al centro y tu padre y Steve los llevarán al complejo.
Peter sonrió- ¿Podemos pasar por unas hamburguesas antes de ir a la estación? Debemos pasar por el subterráneo de todas formas.
Loki lo dudó un poco viendo a Zenda quién recibió un ligero codazo de parte de Harley y ella compendió sonriéndole a Loki y suplicando por dejarlos ir.
-Quisiera comer una -sonrió.
-De acuerdo, pero van las compran y vienen de vuelta al complejo, ¿escucharon? -los tres asintieron y Loki sonrió desapareciendo, obviamente nadie más que ellos lo había visto ahí.
-De acuerdo, vamos al museo.
-¿Museo? ¿No íbamos por hamburguesas?
Los chicos la miraron y rieron- Obviamente no Zenda, muy pocas veces pasa esto de que no vengan por nosotros.
-Y ahora es momento de mostrarte la ciud... -gritos ensordecedores y desesperados se escucharon desde el otro lado de la calle frente al gran edificio que se encontraba ahí- Pero que... -todavía quedaban algunos alumnos de la escuela y ellos al igual que el trío se acercaron al lugar corriendo para ver que pasaba.
-¡Chicos salgan de aquí hay una bomba en el edificio -los tres se congelaron! "¿una bomba? ¿porque?"
-¿Está segura señora? -preguntó Peter a la mujer que corría para alejarse rápido del lugar.
La mujer no tuvo tiempo de responder cuando una explosión se hizo presente en unos de los pisos ante la mirada de todos. Vidrios salieron volando en todas direcciones.
-¡Hay gente arriba! -gritaban algunos.
-¡Si el edificio colapsa nos aplastará a todos aquí, tenemos que irnos! -decían otros.
Todos se cubrieron la cabeza protegiéndose. Zenda tragó saliva cuando vio que Harley tenía un pedazo de vidrio que había volado incrustado en su brazo, era pequeño pero lo había herido atravesando su ropa, el chico ayudaba a levantar a un señor que había caído por el estruendoso movimiento y por los escombros que comenzaban a caer.
-Harley, tu brazo -murmuró Zenda, el chico miro su brazo buscando que era lo que ella miraba cuando sintió el ardor y dolor, se sacó el pedazo de vidrio que lo hería.
-Iré a ayudar -dijo Peter tratando de correr pero Harley lo jaló de la mochila que aun tenía acuestas.
-No Peter, solo vámonos.
-No.
-Peter... -las palabras se le quedaron a medias pues vio como el edificio comenzaba a arder.
-Dije que no Harley, no lo haré, no me iré.
-No es eso idiota, mira arriba -Peter frunció el ceño y volteo hacia arriba de ellos, vio perfectamente cuando un gran trozo de edificio descendía rápidamente desde arriba justo hacia ellos- ¡Muévanse de aquí! -gritó Harley ayudando al señor a caminar pero había todavía más gente en el suelo y otras corriendo, unas cuantas saliendo del edificio todavía.
Zenda se quedó parada viendo fijamente como el trozo de estructura caía sobre ellos, su primer reacción fue alzar los bazos y la de Peter también, Harley cubrió al hombre mayor con su brazo cerrando los ojos.
Harley abrió los ojos y vio como el gran trozo de edifico había quedado a centímetros de su cabeza y de varias personas también, ubicó a Zenda y a Peter sosteniendo la estructura firmemente.
-¿Estas bien? -preguntó Peter preocupado al ver a su hermano que lo miraba fijamente.
-P-Peter...
-¡¿Estas bien?!
-¡Si! -respondió algo alto.
-Saca a los civiles -sus brazos temblaron porque más estructura cayó sobre la ya sostenida, pero entonces sintió como una rápida ráfaga de aire le rozó la mejilla volteo y era un tipo de "tentáculo" pensó, lo subió hasta la fuente de origen y se dio cuenta que venían de la espalda baja de Zenda, esas cosas sostenían más fuerte y elevaban la estructura hasta el punto en que ya no tuvo que sostenerla más. Todos los civiles se asombraron y se quedaron estáticos incluyendo a los hermanos.
-Ayuda a Harley con las personas -Peter sintió.
-Eres un pulpo -dijo sarcástico.
-No son tentáculos bobo, son látigos, pero pueden soportar este peso, espero -murmuró lo último- ¡Rápido! -Peter comenzó junto a Harley a sacar a la gente y ayudarla a moverse rápidamente a otro lugar más alejado de ese punto.
Uno de sus látigo tronó y se disipó en el aire sacándole un ligero gemido de dolor. Otra explosión se dejó escuchar, esta vez mucho más fuerte y no había sido arriba, sino justo frente de dónde ella estaba.
Muchos civiles salieron disparados por la explosión, sintió como su espalda golpeo fuertemente con la pared de otro lugar al otro extremo de la calle, sus oídos estaban apagados, no escuchaba nada en l absoluto, estaba aturdida, parpadeaba para enfocar la vista, cuando abrió los ojos pudo ver como Peter estaba atrás de ella sosteniendo el peso de su cuerpo y Harley frente a ella haciéndola reaccionar.
-¡Zenda! ¿Puedes oírme? -parpadeo.
-¿Qué?
Peter la cargó con cuidado y comenzaron a correr, pero Zenda notó algo que jamás había notado ni sentido antes, era un sentimiento extraño, su cuerpo se adormeció por un instante, sintió una sensación de miedo, era muy muy extraño. Entonces comenzó a ver como varias de las personas del lugar tenían un aura fuerte y pesada a su alrededor, todas aquellas estaban tiradas y regadas por el suelo cubiertas de graves heridas y escombro, frunció el ceño abrazando el cuello de Peter viendo desde arriba de su hombro.
-Las personas -dijo ella.
-No podemos volver... -murmuró Peter.
-Pero están heridas -habló de nuevo.
-Tu también -dijo Harley mirándola y ella volteo a verlo y buscó de dónde, pues nada le dolía. Su estómago, la ropa que tenía estaba llena de sangre, pero su herida, si una vez estuvo, ya había sanado.
-No tengo nada -su cabeza le dolió- Peter bájame.
-No Zenda, Harley tiene razón, hay que irnos, ya hicimos mucho.
-Yo puedo entrar a ayudar, ustedes si quieren quédense aquí -forcejeo y logró bajarse de los brazos de Peter.
-Zenda
-No Zenda, no podemos, quisiera... -dudo- Pero no -la jaló pero ella se plantó y Harley no pudo moverla- Por favor, ya avisaron a los bomberos y a los policías.
-¿No es más efectivo llamar a nuestros padres? -preguntó Peter.
-Creo que a esta hora ya lo saben -habló Harley viendo las llamas que salía del edificio.
-¡Ayuda! -gritaban.
Zenda negó con la cabeza al escuchar los gritos de las personas a su alrededor, le taladraban los oídos.
-Yo puedo ayudar y lo haré -se soltó del agarré de Harley y corrió de vuelta al edificio sintiendo el calor en el ambiente.
-Carajo -dijo Harley.
-No podemos dejarla sola.
-Nos verían.
-¿Tu crees que nadie nos vio hace un rato? Vieron a Zenda y nos vieron junto a ella, sabrán quienes son nuestros padres, se hará aun más público que antes y todo... -vieron como el edificio comenzaba a colapsar Zenda seguía al pie del lugar, Peter reaccionó colocándose rápidamente un disparador de telaraña que él mismo había hecho y disparó hacia ella jalándola hacia ellos- ¿Estás bien? -ella sintió viendo al frente.
-No -soltó y de sus manos comenzó a salir magia de color turquesa que abrazó gran parte del edifico que estaba colapsando evitando que cayera al instante- No creo que lo soporte mucho -frunció el ceño, su cabeza comenzaba a dolerle- ¡Tienen que sacar a la gente que queda abajo! -grito y Peter y Harley se miraron preocupados- Tengo que acercarme un poco más -caminó.
-Carajo -fue lo último que dijo Peter antes de lanzarse frente al peligro de nuevo, todo mientras su rostro era visible ante todo el mundo.
-¡Peter! -gritó su hermano.
Un pedazo de edificio cayó e iba directo a Harley, lo miró fijo y su reloj se transformó rápidamente en un guante como los de la armadura de su padre y disparó haciéndolo pedazos salvándose a sí mismo.
-Bien a la mierda con esto -murmuró Harley corriendo hacia Zenda y Peter uniéndoseles, un traje parcial fue lo que cubrió el cuerpo de Harley, también unas botas con propulsión lo hizo elevarse hasta llegar al punto de la explosión inicial, vio como había personas desmayadas dentro- Mierda.
Dos disparadores tenía Peter en sus muñecas y Zenda seguía utilizando su magia y fuerza para sostener el edificio. Todo era un desastre, muchos ya habían comenzado a grabar y era inevitable dejarse ver ante los espectadores- Nos castigaran por dos años.
-¿Tan poco? -medio dijo Zenda sosteniendo el aliento- A mi posiblemente por unos 100 años.
-Peter, necesito que sostengan la estructura principal, la columna secundaria colapsará si no la mantienen en su lugar -apuntó a una columna que estaba a nada de deslizarse y caerse- No dejen que se caiga o todo terminará -Peter asintió y Zenda también.
Zenda cerró los ojos y suspiró, dos látigos salieron de su espalda estirándose hasta su límite actual y hicieron huecos en la columna para mantenerla firme
Te ayudaré a sostenerla, no podrás tu solo -Peter sonrió.
-Increíble Zenda -corrió hasta dónde Harley le dijo Peter y los látigos de Zenda lo ayudaron a sostener fuertemente la estructura.
-¡Aléjense de esa columna! -"esa voz" los dejó con los nervios de punta.
-¡Son los Vengadores! -comenzó a gritar la gente a su alrededor, Harley que seguía volando vio como frente a él, Ironman se elevaba y lo empujaba.
La sangre se les heló a los tres chicos que estaban ayudando. Harley vio a su padre y tragó grueso. Peter que sostenía la columna quedó como debilucho cuando el Capitán América apareció levantándola con gran facilidad haciendo encogerse al chico araña. Zenda volteo a ver como Peter era ayudado y sintió como la demás estructura del edificio comenzó a aligerarse y a mantenerse más firme, una magia verde se dejaba ver y la sentía emanar desde detrás de ella, giro su cabeza para encontrarse con Loki, trago saliva sonriéndole nerviosamente, pero él ni la miró en cambio le hizo una seña a Thor quién si volteo a ver a su hija pero frunciendo el ceño.
-M-Madre -murmuró.
-Muévete -le dijo Loki parándose frente a ella y ella asintió soltando su magia.
-Baja de aquí con las personas que tienes - ordenó Tony, porque si, Harley tenía ya tres personas en los hombros -asintió y bajó con cuidado de no soltar a ninguno.
-Muévete Peter -fue lo que Steve dijo y el chico obedeció.
-Zenda quita esto -ordenó Thor y Zenda también soltó la columna deshaciendo los látigos.
-Ve con Peter y Harley -Zenda volteo y vio como Steve los hacía caminar hasta dónde Loki y Zenda estaban- Hablaremos con ustedes más tarde -los tres asintieron- Espérenos en el complejo y no salga -énfasis en lo de no salir, un ligero portal se abrió y ellos lo cruzaron rápidamente apareciendo al salir dentro del complejo.
Los tres soltaron el aliento que no sabían que contenían, sus piernas flaquearon y los tres chicos cayeron de rodillas al suelo respirando aceleradamente. Tenían moretones y rasguños, sus ropas hechas girones.
-Estamos fritos -dijo Peter recostándose en el suelo del lugar y estirándose como una estrella de mar.
-¿Tu crees? -bufó Harley sentándose y recargando su espalda en un sillón.
-Perdimos las hamburguesas -soltó Zenda acostándose como Peter y ellos la miraron, ella rio y los contagió haciéndolos sonreír también.
-¿Pero qué...? -los tres voltearon a la puerta del lugar, era un hombre castaño que tenía una mochila en su mano- ¿Qué les paso? -soltó la mochila y caminó hasta dónde estaba la cocina, los chicos lo siguieron con la mirada.
-Volviste antes -dijo Harley.
-Si bueno -no se molestó en explicar porque lo hizo- ¿Quién es? -vio a Zenda que tenía todavía la sangre en la blusa y su rostro lleno de suciedad, siguió dándole un mirada más a los hermanos- De nuevo... ¿están bien?
-¿No has visto las noticias? -preguntó Peter girándose, ahora quedando boca abajo.
-Venía en el Quinjet, no quise poner nada más que música -miro a Zenda- Sabes te me haces muy conocida -dijo tomando una cuchara y sacando un bote de helado de chocolate del refrigerador.
-Oh cierto, es la hija de Thor y Loki -mencionó Harley y Clint reaccionó, "por supuesto, esos ojos y su cabello" pensó y volteo a ver a la pantalla.
-V.I.E.RN.E.S, ¿la enciendes?
-Claro joven Peter -contestó la I.A encendiendo la pantalla y fue cuando los cuatro presentes se enderezaron viendo fijamente a la pantalla que dejaba ver tres imágenes.
-Mierda -murmuraron los tres chicos, pues eran ellos quienes estaban en las noticias.
"Estos tres jóvenes aparecieron milagrosamente salvando a mucha gente, dos de los chicos ya fueron identificados como los hijos adoptivos del matrimonio Rogers Stark, pero no se sabe nada de la chica en cuestión, aunque miren eso, el hijo menor de los héroes líderes de los Vengadores lanzando una ¿telaraña? y que me dicen del mayor, volando con lo que parece la tecnología de Stark y la chica, sosteniendo un edificio entero con... ¿magia?"
"Nuevos héroes o nuevas amenazas"
Eso se dejaba ver en los noticieros dónde sea que cambiaran de canal.
-¿Qué relajo hicieron los tres? -dijo Clint caminando hasta el sillón dónde Harley estaba recargado.
-Ni nos digas nada ya nos regañaran en cuanto lleguen.
Dicho y hecho, así fue, cuando las dos parejas de padres llegaron, los regañaron, bueno relativamente fue Tony y Loki los que los regañaron, Steve y Thor tenían miedo de meterse porque le tenían de cierto modo a sus esposos. Poco a poco pasó de un regaño a una felicitación y consuelo dentro del complejo.
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-¿Cómo está tu brazo? -preguntó en la puerta de la habitación de Harley.
Sonrió- Mejor, Loki me sanó y no tengo nada mira -era cierto la herida había sido cerrada.
-Que bueno.
-¿Y Zenda?
-Con sus papás -caminó hasta sentarse en la orilla de la cama dónde Harley estaba
Suspiro- Escuché que posiblemente tengamos que ir mañana a una rueda de prensa.
-Si también lo escuché -se mordió el labio- ¿No tienes miedo?
-¿A qué?
-A que nuestro mundo cambie, por nuestros errores.
-¿Le llamas error al salvar a las personas? -negó- Nuestras vidas cambiaron cuando nuestros padres nos adoptaron y siento que fue lo mejor que nos pudo haber pasado.
-Si, fue lo mejor que nos pudo haber pasado.
-Además... -tomó su mano- Siempre juntos, ¿recuerdas hermano? -Peter le sonrió.
-Si -recostó su cabeza en su hombro y así se quedaron.
-¿Estas bien? -Thor la abrazó por el cuello rodeándola con su brazo, ya era de noche y los noticieros seguían hablando de lo mismo.
-Si.
-¿No te duele nada en verdad? -preguntó Loki con una tasa de chocolate en sus manos, a su hija le gustaba mucho, se acercó y se sentó junto a ella también. Los tres Dioses estaban arriba de la estructura del complejo, por fuera de este, en su techo.
-No madre, estoy bien, ¿cómo están Peter y Harley?
-Están bien, los sané -le dio la taza- Toma.
-Gracias... -tomó un sorbo- Lo siento mucho Padres.
-Zenda ya hablamos de esto, ya no estamos molestos, nos preocupamos que algo les sucediera.
-No sé que haría si algo te pasara corazón -dijo Thor acariciando su mejilla y Zenda sonrió de lado.
-Les causé problemas, a todos aquí -frunció el ceño, la cabeza le volvió a doler.
-¿Qué te duele? -dijo Loki tomando su frente.
-Nada -negó- En verdad lo siento mucho, mañana me disculparé con Steve y Tony por meter a Peter y Harley en esto, no quería que se lastimaran, sé que son humanos, son en cierto modo... solo... no quería que se lastimaran -volvió a decir.
-Está bien Zenda -Loki tomó su mano y frunció el ceño- Thor, tócala.
Thor lo hizo y la sintió fría- ¿Tienes frío? -cuestionó.
-No, ¿porque?
-Tu mano está fría, hasta tu madre lo sintió.
-Pero no siento frío -negó- Por cierto madre, cuando estábamos ahí, me sentí... algo rara, sé que puede que no sea nada más pero tuve... ¿miedo? pero sentí algo más, pero no sé que es...
-¿Me muestras? -Loki le pidió su mano y Zenda asintió posando su mano en la mano de Loki, este cerró los ojos y vio la memoria de su hija, observó como si fuera Zenda quien mirar, a las personas en el suelo, unas con un aura oscura mermando de ellas, otras sin nada y él mismo sintió una sensación extraña al verlos, pero solo fue momentáneo, pues los sucesos que ocurrieron después no lo dejaron ver mucho más, quitó su mano y respiró un poco asustado- N-No pude ver nada corazón -Zenda asintió.
-Supongo que solo fue... miedo.
Loki asintió viéndola, la había engañado, pero a su esposo no, él lo conocía y vio el miedo en los ojos de Loki.
-Ouch -se tomó uno de sus ojos y los cerró.
-¿Que tienes? -los abrió lentamente y sus padres se quedaron perplejos.
La pupila de la chica se afilo revelando esa expresión que parecía reflejarse por todo su rostro sin siquiera ser su voluntad, el color de sus iris heterocromáticos se tornó de color dorado intenso y brillante.
-No es nada -sonrió Zenda- Solo me duele la cabeza, creo que mejor dormiré -se levantó y sus padres seguían sentados- ¿Qué ocurre?
-Tus...
-N-Nada -se adelantó Loki antes de que Thor siguiera hablando- Si es mejor que vayas a dormir Zenda, mañana iremos con ellos a la rueda de prensa, así que descansa.
-Descansen padres.
-D-Descansa amor -dijo Thor sonriéndole y Loki le tomó el brazo aguadando sus piernas.
-Loki -lo tomó antes de caer- ¿Qué fue lo que viste?
-Vamos adentro primero -dijo caminando junto a él.
-Tenemos que hablar con Odín -dijo Loki sentado en la cama y Thor a un lado de él.
-¿Qué paso?
-Creo que... ya sé de que es Diosa nuestra hija -lo miró abrumado.
-¿De que?
-Muerte, eso fue lo que vio ella, eso es lo que vi o eso es lo que creo yo... no estoy seguro, tenemos que hablar con tu padre cuando volvamos -se abrazó a Thor- No quiero que nada le pase a Zenda, no quiero un destino así para ella.
Thor comprendió y abrazó protectoramente a su esposo entre sus brazos- Nada le pasará, no dejaré que nada le pase, te lo prometo.
-Thor -se separó y lo miro a los ojos- Si ella es una Diosa de la muerte -dudo- Será mandada lejos, no quiero, no podría -frunció el ceño- Y no permitiré que la separen de mi -sus ojos se volvieron rojos.
-Tranquilo, ya te lo dije, no dejaré que nos la quiten -apretó sus manos- Además n estamos seguros de eso, puede que no sea eso, no ha nacido un Dios de la muerte en Eones, tampoco creo que as leyes pasadas se ejerzan ahora, mi padre no permitiría que nada le pasara a su nieta consentida -sonrió acariciando su mejilla y dándole un beso en los labios, uno húmedo pues Loki soltó unas cuantas lágrimas.
-Los Dioses de la muerte eran odiados y temidos, ella es buena, nunca sería mala.
-Se caracterizaban por tener un poder que sobrepasaba a todos los Dioses, por eso los... desaparecían, pero nuestra hija no es así y si lo fuera -negó- No haría actos así.
-Quién diría que un acto tan simple como ver la muerte de unos mortales revelaría algo así.
-Si Zenda es una Diosa de la muerte... -no quiso pensar más en eso y negó- Mejor vamos a dormir, mañana tenemos que presentarla -sonrió- Claro aun no como Vengadora -rio- Pero si como nuestra hija y como una nueva protectora más de este mundo.
-Si -dijo Loki abrazándolo una vez más antes de dormir.
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-Bien vengan aquí -dijo Tony a sus hijos y Peter y Harley caminaron tras él con Steve acompañándolos, los chicos bien bañaditos y peinados pero aun no cambiados, no sabían que ponerse, Tony suspiró- Les tengo algo preparado -tocó su reloj una veces y una pared se removió de su lugar dejando ver dos hermosos trajes, uno era muy similar al de él, pero de un color azul con plateado el otro era un traje diferente, no era de tipo armadura, era un traje más flexible, pero de rojo y azul- Iban a ser un regalo cuando estuvieran listos pero... ahora es el mejor momento para usarlos.
-¿Cómo supiste que teníamos algo así en mente? -preguntó Peter.
-Desde el incidente dónde tu detuviste un autobús con tus manos vistiendo una pijama con unos colores parecidos y esos goggles hippies y cuando Harley destruyó ese contenedor con ese líquido dentro de la escuela para evitar que todos terminaran envenenados -movió las manos- Creo que me lo dejaron de mucho pensar.
-Bueno -dijo Steve- Primero entraremos nosotros, luego cuando escuchen que los anunciemos, entrarán.
-Deben saber que no los vamos a presentar como Vengadores si es lo que pensaban, los presentaremos como lo que son, nuestros hijos, y no vamos a explicar para nada lo de la araña -Peter asintió- Y tampoco diremos, que ya ocurrió esto antes, tal vez se descubra pero no importa.
-¿Que hay de Zenda?
-Ella también entrara con ustedes, y bueno, entraran con sus trajes puestos, pero cuando les digamos se quitarán la máscara.
-Creo que están consientes de que esto cambia todo, ¿cierto? -asintieron afirmando- Me refiero a que su identidad como nuestros hijos ya era conocida desde hace años y ya se habían acostumbrado a los periodistas y todo eso, pero ahora su identidad de civil tanto como familiares cambia por completo.
-Están en el ojo del huracán hijos -Steve los observó tomando una mano de cada uno de ellos- A partir de ahora se tienen que cuidar más entre ustedes, y no saltar ante cualquier peligro, ¿de acuerdo? Esto también lo hablaremos más tarde.
-Si padre.
-Lo haremos.
-Bien, entonces -Tony se acercó y los abrazó a ambos- Vayan a cambiarse -los trajes dieron vueltas desapareciendo por la pared- Están en sus habitaciones, cuando estén listos bajan cuando Happy les indique.
-Como que me estoy arrepintiendo de esto -dijo Peter alejándose de sus padres rumbo a sus habitaciones.
-Si creo que yo también -mencionó Harley sacudiéndose el cabello- Me puse mucho Gel.
Peter le sacudió bruscamente el cabello- Para que lo haces, no vamos a la escuela o algo así.
-Peter -se quejó el mayor- Déjame.
-¿Qué están haciendo? -Happy había aparecido vistiendo su típico traje negro- Vayan rápido a cambiarse -venía acompañado de Pepper.
-Hola niños -ella los saludó a cada uno con un beso en la mejilla- ¿Y sus padres?
-Hola Pepper.
-Por ahí.
-Suerte en su presentación -dijo ella caminando hasta dónde divisó a la pareja, mientras los chicos eran escoltados por Happy hasta sus habitaciones, las de ellos dos estaban una al lado de la otra.
-Buenos días guapos -saludó y ambos le dieron un beso en la mejilla a ella.
-Hola Pepper.
-Señorita Potts -rio Tony.
-Ya vi a los chicos, se veían nerviosos, pero parece que no eran los únicos, pero bueno ya llegué y yo entraré primero, todo saldrá bien, ¿de acuerdo? -ambos asintieron y ella entró a la sala dónde varios medios de comunicación ya estaba ahí, varias voces se dejaron escuchar en cuanto abrió la puerta, pero se silencio cuando se cerró.
-Mierda si nosotros estamos nerviosos ya me imagino ellos -habló Tony abrazando a Steve.
-Tranquilo Tony -besó su cuello- Todo saldrá bien y estarán de alguna forma más seguros ahora.
-¿Más seguros? ¿Enserio Steve?
-Si digo, ya no se podrán meter con ellos porque sabrán que no se dejaran -rio y Tony frunció las cejas.
-Bueno tienes un punto -dijo Tony riendo y separándose del abrazó- Te amo Steve.
-Y yo a ti Tony -sonrió y beso ligeramente sus labios, pero Tony atrapó con una mano la corbata de su traje y lo atrajo hacia él para prolongar más ese beso.
Se separaron sonriendo- Recuerdo cuando no podíamos hacer esto en público -rio y Steve se sonrojó pasando sus manos por la cintura del castaño y una mano curiosa apretó una de sus redondas nalgas.
-Me alegro que ese tiempo ya pasó -sonrió viéndolo fijamente.
Steve y Tony ya estaban dentro hablando y explicando algunas cosas junto con Pepper quien les daba apoyo moral y se metería si algo pasaba, a falta de alguien sanguinario con los medios como Natasha que estaba fuera, Pepper los defendía a la perfección, Peter y Harley estaban afuera esperando la señal cuando vieron que Thor y Loki por fin hacían acto de presencia.
-¿Wow eres una mini copia de Stark? -burló Thor- ¿Tu eres... una arañita?
-Déjalos en paz Thor -regañó Loki y este acaricio la cabeza de ambos- Zenda no tarda en venir -sonrió viéndolos- Me gustan sus trajes, entren con la máscara, después cuando sus padres les digan se la quitan, ¿si?
-Si -respondieron ambos- Gracias.
Vieron como Thor y Loki entraban, era raro verlos con trajes formales, bueno a Loki no tanto, era como ver a Tony todo el tiempo vistiendo trajes de marca y así, pero otra cosa era ver a Steve y a Thor vistiendo formalmente y hoy era el día de ver a los cuatro con sus elegantes trajes.
El teléfono de Peter comenzó a sonar con sus brillante tono- Mierda es Ned.
-Apágalo -dijo su hermano.
-Le dije que no molestara, ¿Por qué me está marcando? -dejó de sonar y un mensaje llegó.
"Michelle me está preguntando por ti" -eso se dejaba ver en a pantalla de su celular. Peter palideció y le entregó el celular a su hermano.
-¿Qué tienes? -miró la pantalla del celular y entendió- Que suerte tienes -sonrió- Ahora si cayó.
-Que vergüenza, no quiero topármela ahora.
-Te verá en las noticias cuando entremos -le devolvió el aparato y Peter abrió los ojos a un más viendo al frente- Ey, ¿qué tienes? -el chico araña tomó del mentón a su hermano para que girara la cabeza en dirección hacia dónde él miraba y entonces ambos quedaron sonrojados.
Zenda venía caminando rápidamente pues se la había hecho tarde por decidir como iría con su traje o armadura, al final se decidió por combinar ambos.
Su cabello negro con luces doradas lo llevaba suelto, le llegaba hasta más abajo de la cintura, en su frente se dejaba ver una línea algo delgada que era de oro asemejando una corona pero que cruzaba por su frente con un rombo en el centro y dos pequeños cuernos dorados parecidos a los de Loki sobresalían por los costados, justo dónde los de ella estaban en su forma Jotun, porque si ella obtuvo sus cuernos desde mucho antes. Portaba un tipo corset color negro ajustado a su cintura que cubría su busto, era más como un tipo de armadura no tan pesada que dejaba al descubierto sus hombros y brazos. En la parte de la espalda baja había una parte descubierta, al final del corset y al principio tenía luces doradas, llevaba un cinturón verde de listón algo grueso que asemejaba ser una falda corta por enfrente y larga por detrás que salía desde dentro del corset, sus muslos los llevaba descubiertos dejando ver su hermosa piel y unas botas negras hasta sus rodillas. En sus brazos, uno portaba un guante largo y negro que llegaba hasta antes de su axila cubriendo su codo y el otro llevaba una protección de metal plateado en su antebrazo con vistas azules y algunas runas se veían en el grabado.
-Chicos -corrió al verlos- Perdón que tardara -sonrió- Wow se ven bien los dos -alagó.
-Te ves hermosa.
-Te ves preciosa.
Ambos chicos dijeron y se miraron entre ellos frunciendo el ceño.
Zenda rio y sonrió- Gracias -miro al suelo- Siento que es como una ceremonia -dijo haciendo aparecer una capa negra y larga que le llegaba hasta arriba de los talones- Creo que queda algo así -sonrió y los chicos también.
-Si, ya nos quedó claro que fueron sus hijos quienes aparecen en las fotografías y videos, pero queremos saber quién es la otra chica que estaba con ellos en ese momento, claramente en los videos se ve que saca algo de su espalda, es decir, tiene un poder además de la fuerza de la que se ve es poseedora como su hija Peter.
-También, ¿cómo es que su hijo mayor pudo construir una armadura así, tan bien hecha.
Los reporteros y una muy odiada por los tres presentes en ese momento en la sala se estaban llevando las palmas por las preguntas tan fuertes e incesantes que hacían.
-La otra joven es nuestra hija -la voz de Loki entrando dejó a los reporteros sin palabras- Es nuestra hija señores y señoras -sonrió ladinamente acercándose junto a Steve y Tony siendo seguido por Thor.
-Llegamos aquí hace apenas dos días, lamentamos que se haya dejado ver así, pero gracias a las acciones de ellos tres, mucha gente volvió a ver a sus familiares aquel día -mencionó Thor parándose a un lado de Loki, este pelinegro y el castaño estaban en el medio y los dos rubios a los costados, junto a lado de Steve estaba Pepper también quien ya sabía eso pues cuando le llamaron para que viniera le explicaron resumidamente la situación.
-¿Quiere decir señor Thor, que esa chica es una Diosa?
-Así es señor, es una Diosa -respondió a un reportero.
-¿Una Diosa de que, del trueno como usted o de las mentiras como su esposo el Dios Loki?
-Diremos por ahora que solo es una Diosa sin título fijo, es muy complicado de explicar esto a ustedes ahora mismo -respondió Loki.
-¿Quieren decirnos que solo hicieron esta rueda de prensa para justificar los actos de sus hijos? -Christine Everhart era el nombre de esta mujer que hablaba lanzando venenos por la boca en cada pregunta incitando a los demás periodistas a hablar más y más.
-Por supuesto que no señorita Christine -respondió Tony conteniéndose.
-Es hora -habló Steve y Pepper se acercó atravesando a los padres para abrir la puerta.
-Sus máscaras chicos -sonrió al ver a Zenda- Un gusto pequeña, después nos presentaremos bien.
Rápidamente Peter se puso la máscara al igual que Harley y Zenda elevó de la parte de atrás de su capa una capucha grande y negra que le cubría el rostro pues era pesada y solo dejaba que se le vieran los labios.
-Andando -dijo Pepper y los tres pasaron a la sala, el primero en entrar fue Harley con su traje, el segundo fue Peter también vestido con el suyo y al final entró Zenda, su cabello venía oculto y su rostro también por la capucha solo se veía la parte de enfrente de sus ropas.
Los tres jóvenes se quedaron en medio de Tony y Steve y Thor y Loki, Hayley quedó en la orilla alado de Steve, Peter alado de él y Zenda quedando en la otra orilla alado de Loki.
-Bueno, aquí están, ellos son nuestros hijos.
La rueda de prensa sirvió para disipar muchas dudas e incertidumbres que surgieron por parte de los actos de los tres jóvenes, todo salió muy y concluyeron con algo asombroso.
Hayley retiró su máscara- Me llamó Harley Rogers Stark, tengo 16 años y soy el hijo mayor del matrimonio Rogers Stark, los líderes de los Vengadores. Me comprometo a cuidar y velar por la seguridad de todos ustedes, sin importar quienes sean -por las cámaras se reflejaba el rostro del chico, ventilándose por todo el mundo, destapando su identidad a todos.
Fue el turno de Peter- Soy Peter Rogers Stark, tengo 15 años y también soy hijo del matrimonio Rogers Stark y me comprometo a utilizar mis habilidades para cuidarlos a todos.
Zenda destapó con mucho cuidado y delicadeza su rostro, poco a poco dejando ver su rostro, la capucha se integró a su capa desapareciendo y miro a los presentes y todos se percataron de sus ojos heterocromáticos, sus pupilas afiladas se dejaron ver, su cuerpo esbelto y formado, todavía faltándole por desarrollarse por completo, su cabello negro y dorado. Toda ella dejó perplejo a todos los presentes, de alguna manera sintieron miedo pero algo los hacía sentirse atraída a ella.
-Mi nombre es Zenda, princesa de Asgard y princesa Jötunheim -su voz hizo que los presentes medios de comunicación se estremecieran un poco- Soy hija de los Dioses Thor Dios del Trueno y Loki Dios de las mentiras y el engaño, también tengo 15 años de vida y desde que nací tengo el deber de proteger todos los mundos de Yggdrasil. Lo único que hice ayer fue tratar de proteger a esas personas, no quería inculcarles miedo o incertidumbre sobre mi origen, soy Asgardiana y una Jotun también, les aseguro que daré todo mi poder, habilidades y vida para proteger la Tierra -terminó de hablar y Thor y Loki voltearon a verla sorprendidos, talvez nadie se haya dado cuenta por su falta percepción, magia u algo parecido, pero ellos lo notaron, pareciera como si su voz los tranquilizó en gran manera, no sabían si era miedo lo que les dio esa reacción, pero de ahí todo terminó. Los medios de comunicación incluida la rubia se calmaron de atacar a los chicos y a ella misma. Tony dio por concluida la reunión y los chicos salieron llegando a una de las salas del complejo, y Clint los esperaba ahí.
Pasada la semana que dijeron, Zenda y sus padres volvieron a Asgard, tan pronto llegaron, Loki habló con Frigga sobre lo que había visto su hija y Frigga le recomendó hablar directamente con Odín, Thor seguía un poco reacio a que su hija fue una Diosa de la muerte, era algo ilógico a sus ojos, pero algo era seguro, Odín era el único que podría desmentir o afirmar ese hecho.
Odín era el único que podía ver sobre cada uno de ellos, es decir, él podía saber de que eran Dioses. Muchos Dioses nacían ya teniendo fijo en que Dios se convertirían, habían otros como Loki que debían realizar una hazaña o algo parecido para ser el detonante. Mucho tiempo antes, se decía que los Dioses de la muerte nacían siéndolo, y su poder no podía ser controlado por nadie, de ahí el porque los mandaban lejos desapareciéndolos para siempre, porque estos Dioses eran peligrosos por su nulo control en su magia y poder, pero estos Dioses no pasaban una edad determinada más de 11 o 12 años, pero Zenda ya contaba con 15, cosa que a los Reyes y Príncipes se les había muy extraño, pero había una sola respuesta y es que Zenda no tenía como tal un título definido, no desde la última vez de Odín la vio.
Cuando Odín acudió a revisar a su nieta, se sorprendió, ella yacía inmersa en el sueño de Odín, tan pacífica y sin estar al tanto de lo que pasaría en esos momentos. Se acercó y comenzó.
-¿Cómo la ve? -preguntó Loki tomando la mano de Thor y este lo medio abrazaba.
-Es extraño... -Odín pasaba su mano por la frente y cabeza de su nieta para lograr entrar a su mente y a su poder interno, más haya del que lograba sacar por completo.
-Odín -Frigga habló- ¿Está bien?
Odín la miró y asintió- Ella está bien pero -suspiró- Las suposiciones de Loki eran correctas y erróneas a la vez -los miró- Zenda -acaricio su cabello devolviendo su magia y dejándola tranquila- Es una Diosa de la persuasión.
Al decir eso sus padres suspiraron aliviados, ella ya había obtenido su honorífico, y eso en parte es lo que Loki sentía o lo que logró sentir.
-Pero no lo obtuvo por lo que tu dijiste -miro a Loki y este trago saliva apretando la mano de Thor, Odín se giro para quedar completamente frente a su hijo y a su nuero- Zenda es la Diosa de la persuasión, pero también es una Diosa de la muerte.
-Imposible -Frigga se acercó también a tantear el terreno y lo comprobó ella misma, miro a la pareja y luego a Odín.
-Hijo, no miento, ni mucho menos quiero hacerlos entrar en pánico pero algo es seguro, nada le sucederá a su hija -tomó la mano de Frigga- No tienen que saberlo, nadie tiene que saberlo.
Thor y Loki se acercaron a dónde yacía Zenda, Loki la abrazó y Thor abrazó a Loki, no podían quitarle a su hija, no después de luchar por tenerla, jamás lo permitirían, nunca lo harían.
-Tranquilos, las leyes que aplicaban sobre eso fueron hace muchos años, y se hacían impartir por el mero hecho de que los Dioses de la muerte no tenían control sobre sus poderes, pero sabemos que Zenda tiene control propio de ellos -Frigga tranquilizaba a los padres de la chica mientras Odín pensaba.
-Las leyes son de hace eones, han pasados eones sin que un Dios de la muerte nazca, además solo eran hombres, jamás hemos visto una Diosa, esto cambia todo por completo -Odín por fin se decidió a hablar.
-Zenda no es peligrosa, usted lo sabe -dijo Loki a Odín y este asintió.
-Lo sé hijo -Odín se dio vuelta para quedar de nuevo viendo a su nieta dormida, elevó su mano y en las muñecas de la chica se formaron dos brazaletes plateados con piedras azules, Thor y Loki se acercaron- Esto debe detener en cierta manera el poder de muerte que ella, si lo deja salir por accidente, estos brazaletes servirán como sellos, son grilletes forjados en Nidavellir -apuntó al martillo de Thor- Están hechos del mismo metal del que hicieron tu martillo Thor, no podrá romperlos ni quitárselos.
Loki frunció el ceño- Estás aprisionando a mi hija Odín -reprochó el pelinegro.
-Se que se escucha feo si lo dices así, pero es la única manera de mantenerla a raya si alguna vez sucede algo, además, deben decirle todo a Zenda, debe saberlo para que esté más segura -Loki no dejaba de ver mal a Odín y Thor también, lo había hecho sin consentimiento de ellos, pero bueno, ellos pidieron que su hija se mantuviera con ellos y era la única forma de que ella no causar destrozos más adelante.
-Debe aprender a controlar este poder también -habló Frigga- En sus entrenamientos la vigilaré yo misma -se ofreció- Hijos -se acercó a la pareja y los abrazó- Tenemos también que informar a Sigyn, por cualquier cosa -asintieron- Bien -beso sus mejillas- Despiértenla y díganle todo. No deben sentir miedo ni lastima por ella -sonrió- Nunca lo hagan, jamás digan eso ni lo piensen, el que sea una Diosa de la muerte no significa que cambie como es.
Odín y Frigga salieron del lugar y dejaron a los padres despertar a su hija, cuando Zenda despertó lo primero que vio fue a su padre que le sonreía y luego a su madre quién solo la observaba a la espera de algo.
-Hola -bostezó- ¿Cuándo me quedé dormida? -los miro y su vista se desvió a sus brazos, viendo a sus muñecas precisamente, frunció el ceño- ¿Qué es esto? -volvió a verlos, sentía una gran magia salir de esos brazaletes y quería una respuesta.
-Hija -habló Thor- Tenemos que hablar contigo de algo muy importante -tomó su mano y se acomodó para sentarse junto a ella Loki la miro sonrió y tomó su otra mano.
-Necesitamos explicarte algo -dijo Loki y Zenda asintió temerosa.
La luna brilla elevada en el cielo nocturno, las estrellas se dejaban ver hermosas. Sentada en el descanso de la ventana de sus aposentos viendo hacia afuera se encontraba Zenda, inmersa en sus pensamientos, retomando en su cabeza una y otra vez la conversación y la confesión que sus padres le habían hecho. En cierto modo estaba molesta, no sabía sin con ellos o con ella misma, a quién si no quería ver era a su abuelo, quién le había puesto esas cadenas que cargaría toda su vida, abrazó sus piernas recargando su mejilla en sus rodillas, soltando una lágrima.
Narfi había preguntado por ella unas horas antes y ella no lo dejó pasar, sus padres ya deberían estar dormidos al igual que sus abuelos, suspiró soltando otra lágrima, sentía que sus lágrimas le quemaban las mejillas, una pequeña polilla se paró en el borde de la ventana, ella fijó su vista en el animal, la tocó levemente para que se subiera a su mano.
La contempló detenidamente, inclinó su cabeza hacia un lado y la polilla en un segundo estaba muerta, Zenda la soltó rápido y esta cayó al vacío del otro lado de la ventana, su brazalete brilló levemente de color azul intenso, se aferró a sus piernas abrazándolas fuertemente, sus uñas se enterraron en sus brazos perforando su piel, su sangre resbaló por su brazo y goteo dónde ella estaba.
Había nacido una Diosa de la muerte y aunque trataran de ocultarlo, muchos seres en el Universo lo supieron con ese sencillo acto, un accidente con un animal insignificante, tal vez podría aprender a controlarlo y protegerse de ahora en adelante de todo lo que el futuro le traería consigo, pero tomaría tiempo, dejo de llorar y lo decidió. Ella haría honor al título de Diosa de la persuasión y Diosa de la muerte por igual , controlaría su poder y lo haría propio del todo, elevó su rostro al cielo lleno de estrellas y suspiró una última vez, dejando ir todos sus agobios, sonrió cerrando sus ojos, cuando los abrió estos eran dorados. Era hora, esto apenas comienza.
-Fin-
Bueno, originalmente había visto que sería este capítulo y un epílogo, pero bueno, creo que este capítulo es considerablemente largo y pienso que sirve para ser el último capítulo.
No soy buena dando finales porque además esta es la primer historia que termino y le agarré mucho cariño, en verdad aprecié todos los mensajes bonitos que me mandaron en todo lo largo del estar de esta historia, los aprecio demasiado, en verdad, gracias por esperarme cuando tardaba mucho como esta vez y bueno, aquí está, el final de la historia de Thor y Loki, el final de OBLIVION, ya dependerá después si haré como una segunda parte de esta historia, pero recuerden que esta da el final a la historia de OBLIVION, es decir, no tiene que ser el final de esta historia, con la que apenas comienza con su hija, con Zenda y con todo lo que vendrá para ella, pero repito, será después si me decido a hacer una segunda parte o más bien sería una historia aparte hablando de la historia de su hija, ahora por un tiempo me concentraré en otras cositas que tengo previstas.
Muchas gracias por leerme y escogerme para guardar mi historia en sus listas de lectura, por darle votos y comentar. Espero de corazón les haya gustado mucho, nos vemos luego en otra historia.
Comenzaré a editar y corregir esta historia posiblemente por ratos, para verificar mis faltas de ortografía y hacer su lectura más amena, también los invito además a leer otra historia que estaré editando y modificando está en mi perfil y se llama Memorias de un Ángel.
GRACIAS POR LEER :3
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