Obito aterrizo en la rama de uno de los cientos de arboles que se extendía por los alrededores de la aldea de los magos carmesí, eso solo se extendía por unos cuentos kilómetros, por el momento había estado siguiendo el camino principal, pero decidió tomarse un momento para recolectar algunas bayas y cazar algo que pudiera comer después.

Como su viaje fue una decisión de ultimo momento no había tenido tiempo de prepararse adecuadamente con raciones y demás equipo necesario, solo tenia una capa de viaje que le había comprado al viejo de la sastrería.

Era, como toda la ropa de los demonios carmesí, o al menos la mayoría de ellos, de color negro con bordes de color rojo, Obito había pedido una modificación.

Esta capa tenia en la espalda el símbolo del clan Uchiha, en ese momento el verdaderamente había estado ilusionado con la idea de portar el símbolo de su clan, pero de alguna manera ahora no estaba tan seguro de esa elección.

En primer lugar el clan nunca hizo nada por el, había sido repudiado por no ser lo suficientemente bueno, al final fue la propia aldea la que lo cuidado luego de la muerte de su abuela.

Aun así, el clan siempre había sido lo único que podía usar para defenderse cuando Kakashi se burlaba de sus escasas habilidades, después de todo incluso si era tratado como basura, el solo hecho de pertenecer al afamado "clan Uchiha" era suficiente para el, porque significa que el podía llegar a ser tan fuerte como los miembros de su clan, porque significaba que despertaría el Sharingan, y entonces podría demostrar a todos su talento.

Claro que cuando mas tardaba en despertar el doujutsu mas ansioso se sentía, y entonces cuando se sentía superado por Kakashi y su abrumador talento, solo podía decir que eventualmente lo superaría, una vez despertara esos ojos.

Y aunque nunca lo admitirá ante Rin, o incluso Minato-sensei, cada día estaba mas y mas ansioso ante la perspectiva de nunca poder despertarlo, de quedarse estancado como la oveja negra del clan Uchiha, de ver como Kakashi seguía avanzando, como rin se convertía en una medico talentosa, como Minato-sensei se volvía Hokage.

Y el seguía siendo Obito Uchiha. Un perdedor.

Se detuvo y aterrizo en el suelo.

― pero incluso con estos ojos . . . sigo siendo un inútil. ― murmuro mientras levantaba una mano y la llevaba a su rsotros.

Fue demasiado idealista al pensar que solo por hecho de tener estos ojos el seria diferente, incluso con ellos seguía siendo el mismo perdedor, que no puede hacer nada, que siempre falla.

Dio un paso y comenzó a caminar.

Había estado corriendo por las primeras horas de viaje y estaba apunto de llegar a un lugar señalado en el mapa que había conseguido. Además incluso con el poco tiempo que había pasado el pueblo, había logrado estudiar y aprender un poco sobre los monstruos, mas por experiencia que metiéndose en los libros, pero eso solo se aplicaba a los monstruos que estaba en las cercanías de la aldea, y esos eran monstruos poderosos que estaban mayormente en solitario, había escuchado que muchos monstruos se mueven en manadas, así que probablemente debería de ser cuidadoso.

Por mucho que tuviera confianza en que podría derrotar a un monstruo fuerte, no aplicaba lo mismo si tenia que enfrentar a varios de ellos de manera consecutiva.

Había escuchado que la mayoría de los aventureros que venían a la ladea usaban un hecho de teletransportación, el único inconveniente era el precio, demasiado caro para el.

Obito sintió el peso de las monedas en su bolsa de dinero, había dejado la mitad de lo que había ganado, al padre de Yunyun, por el tiempo que lo hospedo, dudaba que esa cantidad fuera suficiente pero eventualmente volvería para pagar su deuda por completo.

Se detuvo por un momento y luego abrió su mapa.

Según esto pronto llegaría a una planicie que se extendía por un gran tramo, había dos cosas a tomar en cuenta.

En primer lugar no había un solo árbol en kilómetros, así que tendría que correr, el otro problema era que los monstruos podrían verlo desde una gran distancia, no quería retrasarse peleando contra monstruos, su objetivo era obtener una tarjeta de aventurero en el pueblo llamado Axel, y luego de eso tal vez ir al frente donde se estaba desarrollando la guerra contra las fuerzas del rey demonio.

O aumentar su fuerza aceptando misiones del gremio, aun no estaba seguro de cual seria el mejor movimiento. De todas maneras, su objetivo por el momento era evitar peleas innecesarias.

Luego de 20 minutos llego al lugar.

Era la primera vez que se alejaba tanto de la aldea de los magos carmesí, así que naturalmente estaba un poco ansioso, por que también era la primera vez que viajaba en solitario.

Se detuvo frente a la llanura, tal y como había escuchado parecía interminable apenas podía ver la linea verde en el horizonte donde seguramente estaban los arboles, había escuchado que un grupo de ventureros tardaba un día en cruzarla, teniendo cuidado con los monstruos, pero uno de los magos carmesí que había salido en su juventud le había presumido que podría cruzarla en solo un par de horas.

Aunque Obito sintió que ero era un poco estúpido, considerando que podría haber usado la teletransportación.

Ignorando esos pensamientos Obito ajusto su mochila, hasta ahora había estado usando la técnica de saltar por los arboles, pero ahora tendría que correr, si mantenía un buen ritmo podía cruzar este lugar en una hora, tal vez menos.

Obito comenzó a correr.

Moviéndose con una velocidad moderada. No quería cansarse en exceso.

La mayor parte del camino fue bastante bien, como podía ver a los monstruos de lejos evito a los mas peligros y únicamente tuvo que enfrentarse a un oso de golpe, que logro eliminar con relativa facilidad.

Después de eso simplemente parecía que los monstruos habían desaparecido, aun así mientras corría logro ver a una figura parada en medio del su camino, ahora podía ver el final de la llanura, asique solo le tomaría unos cuantos minutos llegar al final.

Pensó en rodear a la figura, pero no podía reconocer el tipo de monstruos que era, así que dudo por un momento, se detuvo a uno 10 metros.

Era un monstruo humanoide, con cara parecida a un cerdo, y orejas de un cerdo.

Obito repentinamente recordó algo de este monstruos . . . ¿arca? No recordaba el nombre correctamente, aun así este monstruo era uno que contaba con cierto nivel de inteligencia, en pocas palabras podía hablar y comunicarse, aunque no dejaba de ser un monstruo.

Había algo mas sobre ellos, pero Obito no alcanzaba a recordarlo.

De todas manera no parecía muy fuerte, tomando un kunai Obito lo sostuvo e hizo un ademan para lanzarlo, pero de detuvo, estaba seguro que había escuchado algo sobre estos monstruos.

Se movió y tomo un libro que había conseguido de uno de los magos.

Normalmente no se tomaba el tiempo de revisar el manual de monstruos hasta que lo hubiera derrotado pero en este momento sintió que había algo malo con esta situación.

Activo su Sharingan y comenzó a pasar las paginas a una velocidad increíble se detuvo de golpe y leyó la información contenida en el libro.

"Los orcos son como una raza muy fértil y pueden reproducirse con casi cualquier otra raza, sin embargo, desde que los orcos machos prácticamente se extinguieron, las hembras restantes comenzaron a secuestrar machos de otras razas humanoides a sus aldeas para engendrar descendencia hasta que expiran. Como tal, en el momento de la historia, los orcos han incorporado rasgos de varias razas, mientras traumatizan a cualquier hombre humanoide lo suficientemente desafortunado como para llamar su atención."

Una gota de sudor bajo por la cabeza de Obito, en realidad este monstruo sonaba mucho mas aterrador que un oso de golpe.

Aunque esa era toda la información que había, Obito presto especial atención a la palabras "aldea" si había un orco, entonces supuso de debería de haber una aldea en las cercanías, atacarlo en este momento seguramente seria peligro y solo llamaría la hostilidad de toda la aldea, entonces tomo la decisión de pasarla de largo.

― hola gua-

― waaaa. ― Obito lanzo un golpe asustado, su puño conecto limpiamente con la cara del orco enviándolo al suelo, y dejándolo inconciente.

Obito se detuvo y lo miro con los ojos abiertos, ¿Qué demonios? Se había acercado mientras el decidía que hacer.

Miro a monstruos en el suelo, debería de dar el golpe final, no, tomando en cuenta que no es monstruo que actúe en solitario lo mas probable es que sus compañeros tomen venganza o lo intenten si el lo mata en este momento.

― ufff, lo dejare por ahora. ― Obito se dio la vuelta y comenzó a caminar. ― pero, ¿no es demasiado débil?

Ninguno de los monstruos que había enfrentado había caído con un golpe como ese, mas bien había algunos que incluso un kunai no podía atravesar su gruesa y dura piel, supuso que había monstruos mas débiles que algunos, obviamente. Pero se sintió raro ser consiente de que había algunos tan débiles que caerían con solo un golpe.

Continuo caminando, escucho pasos detrás de el.

Girando su cabeza con un movimiento veloz, vio otros dos orcas dirigiéndose hacia el, tenían expresiones extrañas en sus rostros de cerdos, pero supuso que estaban enojados por que derroto a uno de sus compañeros, Obito no le dio mucha importancia, y como solo eran dos no debería de ser difícil vencerlos.

No le tomo mucho tiempo.

Una vez mas Obito comenzó a caminar, pero se detuvo cuando escucho pasos, pero esta vez parecían mas.

Se dio al vuelta y volvió a ver a cuatro de estos monstruos corriendo hacia el.

Luego fueron, 8, 16, y finalmente Obito dejo de contarlos y comenzó correr.

El suelo temblaba, y el sonido de cientos de pies golpeando el suelo se podía escuchar incluso a cientos de metros de distancia, Obito estaba corriendo como si su vida dependiera de ello, no de hecho lo hacia, incluso  sentía que se dejaba de correr, perdería algo mas importante que su vida.

― hey, chico guapo, ¿no quieres pasar el rato conmigo?

― lograste derrotar a muchas de nosotras sin problemas, sin duda tienes buenos genes.

― hazme un hijo.

― si vienes con nosotras descubrirás el cielo.

Obito sintió que un escalofrió recorría su espalda, cuando el coro de voces agudas resonaba en todo el lugar, podía suponer que eran hembras o algo así.

No le importaba.

Solo quería huir.

Aunque estaba corriendo con relativa velocidad y estaba creando una distancia entre el y la estampida de monstruos, ella parecían obtener fuerzas de algún lugar y estaban manteniendo el ritmo, Obito quería evitar que esta estampida lo siguiera hasta una ciudad o si tenia la mala suerte de encontrarse con algún aventurero en el camino.

Ideando un plan sencillo.

Tomo una bomba de humo y la lanzo al suelo, esta estallo en una nube de color blanco.

La estampida se detuvo por un momento confundida, un segundo depuse Obito salió corriendo de la nube de humo.

― no me atraparan vivo. ― el grito mientras corría con todas sus fuerzas, la manada de orcos rugió mientras iba detrás de ese Obito.

5 minutos después el suelo se rompió y Obito salió de un agujero.

― los jutsus del elemento tierra son muy útiles. ― Obito pensó mientras se apresuraba a correr en la dirección contraria a donde se fue su clon perseguido por la manada de orcos.

Cuando llego a donde terminaba la llanura no se detuvo ni un segundo, salto directamente a uno de los arboles e incremento su velocidad aun mas.

Luego de varios kilómetros corriendo Obito se tomo un momento para descansar.

En ese momento una oleada de recuerdos llego a su cabeza.

Obito se llevo una mano a su cara. Definitivamente usaría la teletransportación la próxima vez.

Se sentó en la rama del árbol, necesitaba un momento de descanso.

Soltado un suspiro se lanzo de la rama del árbol y aterrizo en el suelo. Según sus caculos a una aventurero le tomaría dos días de viaje llegar a la ciudad, pero como el había corrido por su vida, seguramente llegaría al anochecer a esa ciudad de las aguas termales, luego de eso no estaba seguro de cuantos días de viaje serian para llegar a la ciudad de los principiantes.

Coloco sus manos detrás de su cabeza, viendo los alrededores el lugar se parecía bastante al bosque de la aldea carmesí, aunque mas bien todos los bosques se veían casi iguales ¿no es así?

Mientras pensaba esas cosas Obito logro ver a una figura para delante de el, rápidamente se detuvo en seco y se movió para rodearla.

― ¿necesitas ayuda?

Obito escucho una voz femenina mucho menos aguda que la de los orcos, aunque claramente tenia el tono de una mujer femenina(XD).

Obito se detuvo una vez mas y se giro para ver mas detenidamente a la figura, usando sus habilidades ninja se acerco un poco mas para que ella no pudiera detectar su presencia, y entonces la vio.

Era una mujer, y estaba usando una armadura bastante elegante, parecía una aventure muy experimentada, y se le hacia un poco familiar, pero no acertaba a recordad donde o cuando la había visto, seguramente había sido en la aldea, después de todo muchos aventures de alto rango o experimentados iban a ella para conseguir equipos de alta calidad.

Decidió que podía hablar con ella un momento.

Dibujo una sonrisa en su rostro, que esperaba no pareciera demasiado falsa.

Se acerco mientras levantaba su mano, pero se detuvo en el acto.

Frente a la mujer caballero estaba un monstruo, uno bastante peculiar.

De color verde, una pequeña figura estaba tirada en el suelo en un estado completamente indefenso, que inspiraba a la compasión incluso a los guerreros mas experimentados

Le había advertido de este monstruo.

Para el salir del pueblo era algo obvio, mas no cuando lo haría, aunque eso no evito que abriera su boca y presumiera que algún día saldría del pueblo para derrotar al rey demonio.

y claramente también se lo había dicho al hombre para el que recolectaba ingredientes, el solo lo miro con una expresión aburrida, antes de decir casualmente.

"probablemente podrás con cualquier monstruo, pero alguien tan tonto como tu probablemente debería de ter cuidado con la chica de la tranquilidad"

Obito se había sentido ofendido, pero luego se había sentido curioso.

¿Qué era una chica de la tranquilidad?

Tomo su confiable libro de monstruos, y abrió la pagina donde estaba la información de es monstruo.

"chica de la tranquilidad. Este monstruo de tipo planta no produce daño físico... creara en los aventureros una fuerte necesidad de protegerla . . . te atrapara hasta la muerte . . . debes de eliminarlo en cuanto lo veas"

Obito cerro el libro y miro hacia la chica.

Podía ver vendajes en sus manos y pies, junto con manchas de lo que supuso eran la sangre del monstruos, frunció el ceño por un momento.

Definitivamente era una chica de la tranquilidad, seguramente esa mujer caballero estaba fingiendo para acercarse a ella para poder exterminarla.

Obito se contuvo de intervenir y observo la escena, admirando por las habilidades de una venturero experimentado.

La chica empezó a acercase al monstruos, la chica de lan tranquilidad sonrió, el corazón de Obito tembló por un momento, en realidad casi camino hacia la mujer caballero para evitar que matara al monstruos.

Que aterrador era este monstruo, fue el sincero pensamiento del Uchiha.

La mujer caballero saco su espada.

La chica de la tranquilidad la miro con sus ojos llenos de lagrimas.

― ¿vas . . . matarme?

Un nudo se formo en el estomago de Obito, una voz tan resignada a su destino, llena tristeza y aceptación.

Pudo ver como la espada de la mujer comenzaba a temblar. Probablemente la mujer estaba pensando en que hacer a continuación, matar a un monstros con la apariencia de una niña pequeña no era sencillo.

― lamento . . . ― cada palabra golpeaba con una daga. ― lamento que . . . mi existencia . . . te haga sufrir . . .

Obito estaba llorando antes de darse cuenta.

― en mi próxima vida . . . espero no ser un monstruo

La mujer no pudo soportar y salió corriendo, con lagrimas corriendo por sus mejillas.

Obito que había permanecido oculto no podía culparla. El mismo no se atrevería a matar a ese monstruo, uno que se pareciera tanto a un humano, y aun mas que tuviera una apariencia tan indefensa.

El se dio la vuelta, iba a rodear a la chica de la tranquilidad, y luego encontraría a la mujer caballero, para ver si ella podía decirle información útil sobre la vida de los aventureros.

― ahhh ― una voz cargada de molestia llego a sus oídos, Obito se giro rápidamente y miro en dirección a la chica de la tranquilidad. ― que fastidio, esa tampoco cayo, aunque se veía muy apetitosa ahg

La chica se tumbo en el suelo mientras en su rostro desaparecía cualquier rastro de tristeza o dolor, y era reemplazada por una apatía desbordante.

― supongo que me tendré que conformar con . . .

Se detuvo cuando Obito se paro frente a ella con una expresión en blanco.

― ¿vas ... a matarme?

.

.

.

.

.

Obito se golpeo la cara mientras caminaba, definitivamente tuvo suerte de que el viejo de la tienda le hubiera advertido de este monstruo, o seguramente hubiera muerto antes de conseguir su misión de salvar el mundo.

De cualquier manera no se esforzó mucho para alcanzar a la mujer, tomando en cuenta su pesada armadura, no debería de poder moverse excesivamente rápido, eventualmente se toparía con ella.

― oh, ahí esta. ― Obito dijo mientras veía a la mujer caballero, estaba de cuclillas mientras dibujaba en el suelo.

Moviendo su mano Obito hizo un saludo casual.

― hola. ― dijo, la mujer se volvió para mirarlo con los ojos abiertos.

― h-hola― dijo con una voz nerviosa, mientras se limpiaba algunas lagrimas de su cara, y lo miraba. ― oh.

Ella hizo un sonido extraño, y Obito inclino la cabeza confundido.

― ¿eres de la aldea de los magos carmesí ? ― ella pregunto.

― ¿eh? Si. ― dijo Obito mientras se detenía a unos metros de la chica.

― ah, seguramente no me recuerdas, pero nos conocimos en la aldea, hace unos días,

― ¿es así? ― dijo el pelinegro mientras inclinaba la cabeza confundido.

― si, aunque supongo que es normal que no me recuerdes. ― la chica dijo con una sonrisa.

Obito hizo una mueca, y asintió.

― de todas maneras mi nombre es Obito. ― dijo mientras sonreía.

La chica lo miro un momento antes de sonreír.

― ya veo, ni nombre es Darkness.

Obito escucho el nombre y asintió con una sonrisa.

― entonces, Darkness-san, ¿usted va hacia Alcarentia?

― si.

― yo también. ― Obito dijo y luego agrego. ― es mi primer viaje fuera de la aldea así que estoy un poco nervioso.

― ya veo, ¿entonces puedes venir conmigo?

― eso me ayudaría mucho. ― dijo el pelinegro emocionado.

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..

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Fin 

Lo mas probable es que la próxima semana sea de Reinhard o Izaya :b