[13/2, 23:19] Mitsuomi WOLF: INFIEL

Estaba muy dolida por el engaño, mientras esperaba que la experta en ciencias ocultas, por no decir bruja, la atendiera, Marina iba recordando cómo había descubierto a Manuel haciéndole el amor a su mejor amigo Giovanni, casi se muere al ver a ese hombre, fornido, velludo, viril, besando y penetrando ¡a otro hombre!, quizás si fuera a una mujer se lo perdonaría, pero, no era así. ¿Qué dirían sus amigas al enterarse?, que ella no era lo suficientemente buena en la cama como para que el atlético de su novio fornicara con otro tipo. No solo le dolía la infidelidad, sino también su orgullo y amor propio.

De repente la voz de la bruja la sacó de sus pensamientos.

- Señorita, puede pasar.

Marina entró muy resuelta, pero al ver lo lúgubre de la estancia pensó en dar media vuelta y regresarse, pero su odio pudo más que su miedo, tomó aire y entró.

- Pasa y siéntate querida, ya te atiendo, le dijo Casilda “la bruja”, mientras acomodaba las cartas del Tarot.

- Gra-gracias, - dijo Marina, es usted muy a-amable.

Con el rabillo del ojo le echaba una mirada a la habitación, estaba medio oscura, con velas y velones por todas partes, en el suelo había dibujada una estrella de seis picos, ella caminó rápido sin querer pisar nada. En el centro de la pared, justo detrás de Casilda, había un cuadro de Satanás, se veía inquietantemente real, sus ojos eran rojos, sangrientos, casi se podía decir que tenían vida, ella se sentó, sin poder disimular su nerviosismo.

- Vera señora Casilda, -dijo Marina - yo no he venido a que me lea las cartas, he venido porque mi marido, bueno, mi novio; me es infiel, y yo…yo, quiero vengarme”.

- Ok, ¿Y qué tienes pensado para vengarte?, ¿quieres que se quede impotente?, ¿Qué ninguna mujer lo busque más?, ¿lo vuelvo marica…? No sé, tú me dirás…

Marina se quedó en silencio, aún no había pensado como. Con dejarlo impotente no iba a lograr nada, puesto que era gay, y a lo mejor aprovechaba que no se le levantaba el miembro para que lo penetraran a él, además tampoco era venganza que ninguna mujer lo buscara…

- Entonces querida, -apuró Casilda-, ¿cómo castigamos a tu Romeo infiel, a ese “macho” que siente debilidad por otros hombres?

- ¿Cómo lo sabe? –preguntó Marina parándose de un salto-, ¡no se lo he dicho a nadie!

- Querida, tengo “ciertos” poderes, ¿lo olvidas?

- Haga lo que quiera, -respondió Marina de mala gana-, solo quiero verlo muerto, pero que sea rápido. Ahí está todo lo convenido. Puso en el escritorio una foto de Manuel con su nombre completo escrito por la parte de atrás, y un fajo de billetes.

- ¿Está completo el dinero?

- ¡Claro que lo está!, Ojalá sea tan buena como me han dicho, ya que le estoy pagando una pequeña fortuna. Además, no quiero que quede rastro de su asesinato.

- No te preocupes querida, verás que en menos de un mes tu Romeo ya no existirá, y nadie sospechará de ti.

Marina salió del lugar, sintió un gran remordimiento, como si le hubiera pagado a un sicario . Respiro profundo, contuvo el llanto y se marchó a su casa.

Pasaron dos semanas, un tiempo en el que no podía dormir, en que la culpa le carcomía el alma. Había apagado el celular para que Manuel no la llamara, también para que nadie le dijera que ya había muerto. Se fue a un hotel para que no la encontraran, para que nadie fuera su casa a darle la mala noticia. Pero, a decir verdad, la estaba matando la curiosidad, el no saber nada de Manuel. Sentía que aún lo amaba, que, a pesar de todo, lo adoraba como el primer día. Se arrepintió de no haber hablado con él, ella solo había entrado a la casa con las llaves que el mismo le había dado, se había asomado al cuarto y se encontró en ese bochornoso acto sexual; no había hecho ruido, no había hecho nada, solo salió corriendo y cerró tras de sí la puerta. Manuel debía estar preocupado por no saber de su paradero.

Resuelta, se vistió y se dirigió a la casa de su amor tormentoso, tenía que salir de dudas, tenía que hablar con él y saber por qué la había engañado, bueno, si estaba aún con vida. Debía estarlo, seguramente Casilda era una de tantas charlatanas que hay en la calle.

El camino a la casa de Manuel se le hizo eterno. Al fin llegó. Se asomó por la ventana, estaba todo oscuro. Sacó las llaves de la cartera y entró a la casa. Había una inquietante soledad, un olor putrefacto se encontraba en el ambiente, con el corazón latiéndole a mil por horas se metió en la habitación.

Un nauseabundo olor la hizo retroceder, se tapó la boca para no proferir un grito de terror. Allí estaba Manuel, o bueno, lo que quedaba de él, era casi un esqueleto con poca piel pegada a los huesos, ya no tenía casi cabello, las moscas y otros insectos lo rodeaban; estaba sentado en un sofá al lado de la cama, en medio de una mancha de color oscuro y gusanos por docenas. Se dio media vuelta asqueada, arrepentida, ahogada en sollozos, cuando escuchó una voz que le heló aún más la sangre.

- ¿Marina, Marina eres tú?, -dijo la cadavérica boca de Manuel, aún no había muerto, pero le faltaba poco-, amor, sé que eres tú, no quería morirme sin volver a verte, aunque ya estoy ciego, estaba loco de preocupación hace tantos días que no se de ti, debes tener dos mil llamadas perdidas mías en tu teléfono, fui varias veces a tu casa y no te encontré, le pregunté a tus amistades y familiares y nadie sabía nada de ti, temía lo peor.

- Si, aquí estoy, - respondió Marina, hacia un esfuerzo sobrehumano para seguir de pie, en la entrada de la habitación, aguantando ese fétido olor, conteniendo las náuseas que sentía, contemplando esa macabra imagen, oyendo con profundo dolor al amor de su vida,- te escucho..

- Ya no pude buscarte más, -siguió Manuel-, de repente, me empecé a sentir mal, me empecé a hinchar, me puse amarillento y luego verde, mi abdomen creció enormemente, de todos mis agujeros me salían gusanos, el cabello se me caía, olía a carne podrida… hasta que literalmente exploté, no sé de qué maldita enfermedad me contagio Giovanni, él me estaba chantajeando, tiene pruebas de que tú robaste una fuerte cantidad de la empresa en donde ambos trabajan, para casarnos, me dijo que yo le gustaba, porque ¿sabes qué?, el desgraciado es ¡marica!, me obligó a que tuviéramos relaciones, a que lo besara, como no respondía como hombre con él me obligó a tomar una pastilla para ayudarme a tener erección. Me sentía asqueado, supongo que tú te enteraste y por eso desapareciste. Te amo demasiado para permitir que vayas a la cárcel.

- No puede ser, -rompió en llanto Marina-, no puede ser…

Aquella confesión era más de lo que podía soportar, sentía que todo el mundo se le venía abajo, después de todo, Manuel la amaba, la amaba tanto que prefirió tener sexo con un hombre a verla encerrada.

Rápidamente se montó en su carro rumbo a la casa de Casilda, tenía que decirle que parara ese hechizo, que revertiera esa brujería al costo que fuera necesario, de ser posible, le daría todo el dinero que ella había robado, sino se casaba, no le importaba con tal que el hombre que amaba volviera a ser como antes. Apenas el carro se alejó, Manuel exhalo su último suspiro.

Al llegar tocó la puerta desesperada, la ayudante de Casilda ni bien habría cuando Marina entró dando grandes zancadas, abrió la puerta de la oficina de la bruja y tomándola por ambos brazos le suplico:

- ¡por favor detén el hechizo que le hiciste a Manuel, te daré el triple, lo que quieras, pero detenlo por favor, no me fue infiel, ha sido toda una confusión!, ¡una terrible confusión!

- Verás querida, -dijo fríamente Casilda apartándole los brazos con desdén-, eso no va a ser posible. Usé en él una brujería haitiana que consiste en meter una foto, con el nombre completo escrito en la parte posterior, de la persona a la que se quiere eliminar, en la boca de un cadáver reciente y coserla. Conforme el cadáver se va descomponiendo y secando, así también la persona se va secando y descomponiendo en vida, y eso querida, como puedes ver, es un proceso irreversible.

- ¡No, no puede ser!, -gritó Marina al borde de la locura-, ¡esto no puede ser!, ¡he cometido el peor error de mi vida!, ¡he matado al hombre que más amo en el mundo, y él también me amaba, me amaba!, ¡sin él no quiero seguir viviendo, no quiero!

- Pues también te complací en eso querida,- dijo sarcásticamente-, pues resulta que Giovanni, es mi hijo, y si, es gay, a él le gustaba tu novio, y a quien no, si Manuel es un Dios. Pero él no le hacía caso, fue entonces que mi hijo se enteró que tú habías cometido ese desfalco para casarte y lo chantajeó, se supone que tú no deberías enterarte de nada.

Pero Manuel, se sentía sucio, como si lo hubieran violado y mató a mi bebe, para que no te delatara y no siguiera extorsionándolo, ¡lo mató!

Marina de repente se sintió mareada, con nauseas, y cayó al suelo. Al abrir los ojos, se encontró con la desagradable cara de Casilda.

- Debí haberme desmayado ha sido muy fuerte todo lo que he visto y oído el día de hoy, -dijo aun sintiéndose débil-, Manuel me ama, me ama, y yo lo condené…

- Y por culpa de ese estúpido, mi hijito, mi único hijo, ¡está muerto!

- La culpa es de su “hijito”, no tenía por qué chantajear a Manuel, debió aceptar que era un hombre prohibido para él, que mi novio no es gay, que me ama a mí…

Marina, de repente empezó a bañarse en sudor, sentía un calor asfixiante que la devoraba…

- ¡me quemo, me quemo!, ¿qué me has hecho bruja?, ¿qué me has hecho?

- Manuel me quitó lo único que tenía en esta vida: mi hijo. Ya no podía vengarme de él, total tú lo condenaste a muerte, así que ayer fui a la morgue y metí en la boca de un cadáver tu foto, así que quédate tranquila, que dentro de poco tú también acompañaras a tu Romeo infiel al infierno.

Marina ya no pudo escuchar nada más, se había convertido en una infame masa de carbón. El cadáver en cuya boca estaba su foto, no tuvo tiempo de descomponerse: había sido cremado..
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[14/2, 00:39] +57 320 8785777: LA MUJER PERFECTA
Derechos de autor: Jacqueline Sandoval 🌹

Siempre he sido un hombre exigente, puesto que se lo que valgo y cuales son mis capacidades, por lo mismo sabía que no cualquier mujer podría ser digna de ser mi esposa.

A pesar de que conocí a muchas mujeres hermosas con las que tuve incontables aventuras, jamás me enamoré de ninguna, para llegar a un matrimonio debía encontrar a una mujer perfecta, alguien quien creí que era Amanda, una atractiva ingeniera que llegó a trabajar junto conmigo.

Desde la primera conversación sentí una conexión especial, era divertida y muy inteligente, por lo que decidí invitarla a salir. Ella en un principio dudo en aceptar, ya que no quería mezclar su vida privada con el trabajo, algo que me pareció muy sensato, aún así insistí.

Aquella noche reímos y conversamos de muchas cosas, todo iba perfectamente hasta el momento en que me contó que tenía un hijo, en ese momento desapareció todo el encanto, mi expresión cambió y ya no quise seguir conversando, pensaba que aquella mujer solo era una más del montón, talvez una facilona, que obviamente no se merecía a un hombre como yo, por lo que pedí la cuenta y le llamé a un taxi para que la fuera a dejar a su casa y yo me fui a la mía, decepcionado de que a mis treinta y cinco años no había encontrado a mi mujer perfecta, sentía que en este mundo ya no había nadie que fuera merecedora de mi amor.

Ya casi con las esperanzas perdidas conocí a Gabriela, una mujer hermosa, femenina, con gracia y elegancia. Ella era la única hija del pastor de la iglesia a la cual asistía mi madre.

Desde que la vi me ilusione con ella, por lo que traté de acercarme, pero ella muy seria no correspondió a mis halagos, esto me hacía desearla aún más, cambiando mi estrategia acercandome a sus padres.

Luego de mencionarles mis intenciones, su padre me autorizó a cortejarla y ella por fin aceptó mis halagos.

Mientras más la conocía más me enamoraba, me sentía dichoso de haberla encontrado y orgulloso de haberla esperado y no sucumbir ante el encanto de otras mujeres que al final, según yo, resultaban indignas para recibir mi amor.

Gabriela no trabajaba ni salía de fiestas, era una señorita de su casa, sus padres la habían criado como se dice "a la antigua usanza" dedicada a su hogar, con todas las condiciones para atender a su futuro marido, algo que para mí era totalmente beneficioso.

Al poco tiempo nos casamos, formando una feliz familia, ella era todo lo que esperaba de una esposa, dedicada a su casa, manteniéndola siempre aseada, cocinando exquisitas comidas, siempre sumisa, siempre disponible para los momentos de placer, sin jamás exigir nada, atendiendome  en todos mis caprichos, a pesar que muchas veces trabajaba hasta tarde y casi no me encontraba en casa, ella jamás me reclamaba ni exigía tiempo para ella, era mi mujer perfecta.

Al cabo de unos años tuvimos tres hijos, todos adorables, quienes eran mi orgullo, bien educados, estudiosos y respetuosos, éramos la familia ideal y la envidia de quienes nos rodeaban.

Sinceramente no me faltaba nada para ser feliz, pero como seres humanos nunca estamos conforme con nada, por lo que la rutina de la perfección me hizo querer buscar nuevas aventuras.

Así conocí a Paula, una linda mujer con malas experiencias en el amor, por lo que aprovechando su soledad decidí conquistarla, comenzando una aventura. Con Paula vivía la pasión de una forma con la cual no me atrevía a practicarla con Gabriela, con ella disfrutaba de una pasión desenfrenada y sin tabús, sentía que mi vida ahora si ya era perfecta, tenía  una excelente esposa, hermosos hijos y una amante excepcional.

Todo era idílico, pero al poco tiempo, Joaquín mi hijo mayor, comenzó a enfermar.

Gabriela me decía que solo era una gripe, yo confié en ella, pese a que cada día veía a mi hijo más débil, sin que el médico nos diera un diagnóstico certero. En ese momento pensé que era un castigo de Dios por fallarle a mi mujer, por lo que decidí terminar mi aventura con Paula.

Por las noches al llegar del trabajo, iba directamente a la habitación de Joaquín, él me esperaba con una sonrisa débil, debido a su enfermedad, pero aun así se esforzaba por aparentar estar bien, con sus diez años era un niño maduro, quien me decía:

-No te preocupes papá, yo ya me mejoraré, y podremos salir a jugar a la pelota nuevamente, por ahora solo leeme esas historias que tanto me gustan -

Me sentaba a su lado, con los ojos llenos de lágrimas y con la impotencia en mi corazón de no poder aplacar los dolores que sentía, pero al igual que él, trataba de ocultar mi tristeza, y le leía las historias de aventura que tanto le gustaban.

Al par de semanas mi hijo mayor falleció, dejando el peor dolor que puede sentir una persona, mi corazón estaba destrozado y mi cabeza no dejaba de atormentarme con la idea de que había sido un castigo divino por haber engañado a mi esposa, en cuanto a Gabriela su dolor era tan grande como el mío, hiciera lo que hiciera no podía aplacar su sufrimiento, me sentía una basura que no merecía su amor incondicional.

Pasaron un par años y con el tiempo y con amor pudimos unirnos aún más con Gabriela, ella había vuelto a sonreír a pesar de nuestro dolor, ya que sabíamos que teníamos que seguir adelante por los otros dos hijos que nos quedaban, y que tanto nos necesitaban, por lo que tratamos de seguir haciendo una vida normal.

Cierta tarde en que estaba en la oficina, recibí una visita inesperada, era Amanda, quien nuevamente sería parte de nuestro equipo de trabajo, la saludé amablemente y la invité a almorzar para conversar de nuestras vidas, sin segundas intenciones, ya que según yo, ya había aprendido mi lección. En aquel almuerzo Amanda me mostró una fotografía de su hijo, un niño ya grande de agradable mirada y una hermosa sonrisa como la de su madre, en ese momento pensé en lo prejuicioso que había sido al discriminar a una mujer por ser madre soltera, ella me contó de todo el esfuerzo que requería sacar adelante a un hijo siendo madre soltera, que había dejado su vida amorosa de lado por dedicarse completamente a su hijo, realmente era una buena mujer, quizás tan buena como la que tenía yo, pensé en aquel momento.

Después del almuerzo, regresamos al trabajo, esa tarde pasé a comprar un ramo de rosas para Gabriela, para agrederle por ser la mejor esposa del mundo, pero al llegar me lleve una gran sorpresa.

Marina, mi hija, estaba grave en su cama, tenía mucha fiebre y casi no me reconocía, Gabriela lloraba en la cocina, entre sollozos me decía que no soportaría perder a otro hijo, la abracé y le dije que no pensara en eso, que a Marina no le pasaría nada... que equivocado estaba.

La llevamos al hospital, pero todos nuestros esfuerzos fueron en vano, mi niña en mis brazos me decía que no quería morir, mis lágrimas caían por su cara, mientras le decía que luchara que yo no la dejaría partir. Los médicos me la arrebataron de mis brazos en medio de una crisis, tratando de hacer lo posible para salvarla, pero nada dio resultado, perdiendo así a mi hija.

Nuevamente el dolor y la culpa se apoderaron de mi, preguntándome que si acaso por el hecho de haber almorzado con Amanda, me había ganado un nuevo castigo... la idea de ser el culpable por la muerte de mis hijos me destrozaba y más aún al ver el dolor de Gabriela, nuevamente sentía una basura de persona.

Ya con esta nueva pérdida mi personalidad cambió completamente, ya no quedaba rasgos del hombre que había sido en el pasado, ahora era una persona triste, amargada, infeliz, sin que nada me hiciera sonreír, ni siquiera mi Gabriel, mi hijo menor de cuatro años, me hacía sentir feliz, si no todo lo contrario, trataba de alejarme de él como así también de mi esposa, pensaba en que tenía una maldición por mi comportamiento soberbio de antaño, sentía que perdería a todos a quienes amaba, fue por tal motivo que me convertí en una persona fría.

Fue en ese período de frialdad, en que comencé a ver a mis hijos muertos, ellos se me aparecían en todo lugar, con una mirada triste, de mucho dolor, sus llantos hacían que sintiera que mi corazón se hacía mil pedazos, lloraba a gritos pidiéndoles perdón, pero ellos no dejaban de llorar, pensé que me estaba volviendo loco, todo mi vida se había convertido en una completa pesadilla, no podía comer, no podía dormir, ni concentrarme en el trabajo, debido a esto mi superior me aconsejó que me tomara vacaciones y regresara en unos meses.

Acepté la decisión, y me quedé en casa aquellos meses. Ya al estar en mi hogar me di cuenta de muchas cosas que había pasado por alto durante todos esos años, seguía viendo a mis hijos quienes seguían llorando, pero sin hablarme, solo mostrándome lugares y señalando ciertos objetos que eran de su habitación, busque en aquellos lugares y encontré cosas que jamás me imaginé, entre los dibujos de Joaquín habían muchos aterradores, en donde dibujaba una presencia oscura asechandolo, todos con algo en común, un anillo en su mano. No entendía a que se refería con esos dibujos, pero lo que sí pude entender es que a través de ellos él pedia ayuda, el dolor y el miedo embargo todo mi ser, ¿sería a caso posible que mi hijo sentía miedo por alguna entidad maligna?.

Seguí hurgando entre las pertenencias de mi hija, esperando encontrar dibujos,  pero no encontré más que su diario, en un principio dudé en leerlo, talvez por no escudriñar en su privacidad, pero en ese momento Marina se me presentó y me dijo léelo y salva a mi hermanito.

Con miedo y manos temblorosas abri aquel diario, enterándome del peor horror que un padre podría descubrir. En aquel diario Marina describía sus ganas de morir, cansada de una vida de maltratos físicos y humillaciones  provocados por su madre, no entendía como podía ser posible que una hija se refiriera así a su madre, más aun cuando Gabriela era una mujer ejemplar y dedicada a su familia... ¡no eso no lo podía aceptar!.  Con una gran ira arranque las hojas de aquel diario arrugandolas y lanzandolas  al piso, pero Marina y Joaquín aparecieron en ese momento diciendo:

- Todo lo que dice ese diario es verdad, nuestra madre no es la persona que tu crees que es, ella es un monstruo que nos dañó y ahora debes salvar a nuestro pequeño hermano, debes evitar que  le arrebate la vida asi como lo hizo con nosotros-

Lo que escuchaba era inconcebible, ¿de que hablaban estos entes?, seguramente eran demonios haciéndose pasar por mis hijos para atormentarme, pensaba confusamente.

Salí de casa y me fui a un bar para ahogar mis pensamientos, pero el alcohol no fue lo suficientemente efectivo para nublar mi mente.

Ya sin los resultados esperados decidí regresar a casa, aún confundido, pero al salir del bar me encontré con un antiguo amigo, quien también asistía a la iglesia en donde conocí a Gabriela, pero quien había dejado de ir durante muchos años atrás, al verlo me alegré de encontrar a un vieja amistad, por lo que le ofrecí una copa y conversación para desahogar mis penas, él aceptó y regresamos al bar.

Después de un rato de plática, me confesó que se había asombrado mucho de que me hubiese casado con Gabriela, después de todos los comentarios que en antaño circulaban sobre su persona, no entendí en aquel  momento a que rumores se refería, pero luego de titubear un poco decidió contarme.

-En aquellos tiempos se rumoreaba que Gabriela con tan solo catorce años se había escapado de casa, estuvo unos años fuera viviendo de la prostitución y la droga, pero después de que su padre la encontrara la llevó de regreso a casa y desde ahí ya nunca más la dejó salir, se dice que ella estaba embarazada pero aquel niño murió antes de cumplir el año, todos pensamos en aquel tiempo que talvez aquel niño había nacido muy débil y enfermo, debido a las constantes palizas que le daban a su madre durante el embarazo, su padre era un hombre muy cruel y estricto, fue por eso que yo dejé de asistir a la iglesia, ¿recuerdas que ahí fue que nos conocimos?,  tu llegaste cuando se habían callados aquellos rumores, la gente se olvidó del tema, pero a mi aquella situación me inquietó demasiado, por lo que decidí alejarme de aquel ambiente, luego de unos años me enteré que te habías casado con Gabriela, algo que me asombró, ya que como te recordaba siendo un hombre tan exigente, jamás me imaginé que estarías con una mujer con un pasado tan oscuro-

Cada palabra que escuchaba era como una historia de ficción, ¿cómo era posible que nunca hubiese averiguado de su pasado? La vi tan perfecta que jamás se me ocurrió indagar sobre su vida, me sentí engañado y estupido, no sabía con quien me había casado, ¿en verdad era un monstruo?, ¿los fantasmas de mis hijos realmente tenían razón?

Todas estas preguntas inundaban mis pensamientos, pedí la cuenta y me despedí de mi antiguo amigo.

Cuando llegué a casa me sentía un tanto ebrio y confundido, no sabía como actuar, quería pedirle explicaciones a Gabriela, pero no sabia como enfrentarla, llegué a mi habitación y ahí estaba ella esperándome, sumisa como siempre, con una encantadora sonrisa y un sexy babydoll, invitandome a la cama. En ese momento pensé, que todos estaban equivocados, mi mujer era la mujer perfecta, por lo que nadie me separaría de ella.

Me senté a su lado y le di un apasionado beso, en ese instante escuché a mi hijo toser desde su habitación, no se porque, pero aquella tos me alarmó, me levanté y fui por él, a su lado estaban sus dos hermanos quienes lo miraban con tristeza.

- No lo has ayudado, ahora nosotros hemos venido por él, aquí no está seguro -

- ¡No! ¡No toquen a mi hijo!-

Grite con desesperación, mientras Joaquín me señalaba con el dedo un frasco que estaba en la mesa de noche, no entendía las palabras que aparecían escritas, estaban en un idioma que no conocía, pero que al parecer era Alemán.

Mi hijo seguía tosiendo, por lo que sin pensar tomé a Gabriel en brazos junto a ese frasco de pastillas y lo llevé al hospital.

Al llegar pudieron salvarle la vida, a pesar de que estaba muy grave, en cuanto al frasco, me dijo el médico que era una droga ilegal que podria acabar  lentamente con la vida de un niño sin dejar rastros, por lo que me interrogaron para saber de donde la había obtenido, confuso les dije que no era mío que lo había encontrado en su habitación, que seguramente era un remedio que le daba mi esposa.

El médico llamó a la policía, y fueron a casa en donde detuvieron a Gabriela.

Aquella noche y el día siguiente  me quedé en el hospital al lado de mi hijo, hasta que éste recuperó el conocimiento.

Después de una semana me di valor para enfrentar a Gabriela, fui hasta donde la tenían recluida y pude hablar con ella, le pregunté que cual fue el motivo para hacer lo que hizo, si teníamos una vida perfecta y feliz.

-¿Perfecta y feliz? Yo jamás fue feliz a tu lado, ¿crees que alguien sometido puede ser feliz?... durante años viví sometida a mi padre aguantando abusos, encarcelada físicamente en mi propia casa y encarcelada mentalmente por los constantes maltratos, y luego tuve que casarme  contigo por las amenazas de mi padre y nuevamente me vi encarcelada dentro de tus prejuicios de perfección... jamás fue feliz y jamás te ame-

No quise responderle nada, no era necesario, entendí que esto me lo había buscado yo mismo por mi constante búsqueda de la perfección, una perfección inexistente para nosotros los humanos.

Después del juicio de Gabriela se decidió recluirla en un centro de atención mental, ya que la diagnosticaron con el síndrome de Munchausen, una enfermedad mental que provoca el daño infantil, en especial provocado por la madre hacia sus hijos, como una forma de demostrar poder, generalmente producido por maltratos en su niñez.

Después de aquel fallo, jamás volví a saber nada más de ella, ni de mis hijos fallecidos, solo se que están bien a través de los dibujos de Gabriel, quien constantemente los dibuja como angelitos sonrientes.

Despues de todo esto regresé a mi trabajo y me hice cargo de mi hijo, quien se recuperó sin secuelas, y con quien hemos formado un gran lazo, me esfuerzo y trabajo para él y todo mi tiempo libre se lo dedicó a él, ahí entendí el gran esfuerzo que hacen las madres solteras por hacerse cargo solas de sus hijos, mujeres a las cuales despreciaba por creer que eran inferiores e indignas, ahora entendí que no hay mujer más perfecta que la que sacrifica su vida por el bienestar de su familia... que equivocado estaba, pero nunca es tarde para darnos cuenta que el valor de una persona se mide por lo que es y no por lo que aparenta.

Fin
Jacqueline Sandoval 🌹
[14/2, 20:07] Mitsuomi WOLF: SAN VALENTÍN.

Tanto tiempo planeando como decirle a mi compañera de oficina si aceptaba salir con migo y hoy el catorce de febrero por fin me iba a atrever.

Pero no contaba que ella tenía otros planes y claro yo no estaba en planes.

Justo a las cinco de la tarde la esperaba fuera de laa oficinas, ja que torpe fui

Cuando por fin se veía salindo del edificio alguien se me adelantó y llego con ella llevaba en una mano flores y chocolates en la otra un peluche. La irá me cego lo que había yo comprado terminó en el deposito de basura.

Los seguí toda la tarde, fueron a comer, después caminaron por un parque jajajajaj parecian adolecentes, se sentaron en una banca doble, yo aproveche y me sente en la parte de atrás  y alcancé a escuchar lo que ella le decia, no podia creer que ese idiota me la hubiera ganado.

Llegada la noche la llevo a su casa, por lo menos no se metieron a ningun motel eso si me hubiera matado. Sin embargo ella le pidió un regalo que el se nego a darle, pero claro yo se lo daría sin problema alguno.
Créditos:Hugo Rincón Jiménez.

Lo seguí hasta su casa por fortuna era una de dos pisos y para mi suerte al parecer vivía sólo.

Esperé a una hora adecuada para mí.

Cerca de las tres de la mañana entre por el patio lo mas sigilosamente posible, al entrar en la casa tire algunos utensilios de cocina para que el bajara y ahi aproveché, un golpe fue suficiente para poder llevar acabó mi cometido.

Laura le pidió sus ojos de regaló.

Mi regaló llegaria el quince de febrero con una nota con recortes de revista diciendo tus deseos son ordenes mi amor...
[14/2, 21:08] +57 320 8785777: LA TIENDA DE  LAS MUÑECAS

Una señora ya de edad tenía una tienda de muñecas de porcelana. Esa tienda era la más popular de esa ciudad, puesto que las muñecas que aquella señora vendía eran extremadamente bellas, parecían muy reales, lloraban y reían. Según cuentan ella las hacía. Muchos llegaban a preguntarle cuál era el secreto para crear muñecas tan lindas pero la señora jamás dijo nada. Un día, amanecieron con una noticia, la señora había fallecido, parecía haber muerto de un paro cardíaco. La tienda entonces pasó a manos de su única hija, ésta hacía mucho tiempo que había abandonado aquella ciudad. Al saber de la muerte de su madre fue entonces que volvió a pisar las calles de El lugar donde había nacido. Al llegar al lugar su madre ya había sido enterrada, ella así lo quiso, por alguna razón dijo no querer despedirse de ella. Se fue a aquella tienda y rodeada de aquellas muñecas comenzó a llorar. Empezó a buscar dos muñecas en especial, ella decía que esas muñecas eran suyas y que su mamá se las había quitado. Todos confundidos no entendían la actitud de la hija. Ansiosa busco hasta que las encontró. Las tomó en sus brazos y empezó a llorar como una niña pequeña. Después de eso pidió que le dejaran sola en la tienda. Cuando por fin la gente se fue, a los cinco minutos aquella tienda empezó a arder, le había prendido fuego. La hija de la señora salió caminando por la puerta principal de la tienda mientras aquello comenzaba  a quemarse por completo. Lo más aterrador viene después, cuando aquellas muñecas comenzaban a consumirse gritos de terror se comenzaron a oír. Gritos de niños agonizando, llantos de desespero. Entonces la hija de la señora gritó: ¡ya son libres! ¡Sus almas son libres! Las personas confundidas e incrédula antes lo que estaban presenciando le preguntó a la muchacha. ¿Qué es lo que está pasando? La hija de la dueña de la tienda entonces le dijo : acabo de liberar las almas de los niños que mi madre encerraba en aquellas muñecas... Incluyendo las almas de mis dos bebés.
[16/2, 06:45] Mitsuomi WOLF: A lo largo de mi carrera he examinado alrededor de 600 cuerpos, un calculo aproximado de distintos géneros y distintas edades, pero tuve un caso particular, aquel "paciente" se quedó con nosotros durante 3 largos meses del cual cada vez que lo recuerdo me doy cuenta que algunas personas por las maldades que hacen en vida, ni llegada su muerte pueden descansar.

Todo transcurrió por el año 2015, si la mente no me falla, eran alrededor de las 9 de la noche, cuando personal policial, llega a la morgue a dejarme un nuevo "paciente", este llegó como N.N. pues no se halló documentación para su reconocimiento, se hicieron los trámites y actas de recepción y entrega acorde a ley. La única recomendación que se realizó, es que necesitaba lo más pronto posible el diagnóstico por el cual había fallecido dicha persona, nunca me dijeron que era un asesino y violador, ello lo descubriría al transcurrir las horas. Llegada las 10 de noche se inició el procedimiento pericial para poder encontrar la causa del deceso, alrededor de las 00:00 calculo que se terminó digo calculo pues la hora exacta siempre se expresa "aproximadamente", el diagnóstico arrojó muerte súbita ( La muerte súbita se produce cuando de repente su corazón comienza a latir muy rápido y tiembla, en lugar de bombear sangre al cuerpo y al cerebro. Si no se trata, la muerte súbita puede llevar a la muerte en minutos), por haber realizado u hecho algún acto el cual lo lleno de excitación hasta llevarlo a la muerte.

Bueno, ello no se me hizo raro pues hasta por enterarte que has sido ascendido, la emoción puede llevarte a morir, la próximas horas para mi si fueron de terror, no solo por saber la causa de la muerte si no a la vez descubriría quién era aquel sujeto. Alrededor de la 1:30 am, estaba realizando el informe pericial dando la espalda a aquel cadáver, acostumbrado a trabajar así pues no era novato en esta materia, siento que alguien avanza y toca mi hombro, pensé que era mi colega que venía a reemplazarme para irme a descansar y el continuase con sus labores, grande fue mi sorpresa que al hablarle este no responda, pero no hice ni el mínimo intento en voltear pues me encontraba concentrado en lo mio. A los segundos sentí estremecer mi cuerpo pues una risa burlona y malvada irrumpió la tranquilidad que aquel espacio tenía, rápidamente volteando para ver qué sucedía, me percato que me encontraba completamente solo, no estaba ni mi colega, ni nada, solo aquel cadáver, que al acercarme pude constatar que este era quien se había reído pues al momento de la autopsia en rostro no había mueca alguna solo una seriedad sepulcral, pero ahora esbozaba una sonrisa o seña de maldad.

Para esto ya mi adrenalina había comenzado a subir, regrese rápidamente donde estaba trabajando aquel informe para culminar y depositar aquel cuerpo en el frigorífico, no han pasado ni 10 minutos y volví a escuchar otro sonido pero esta vez era un grito de enojo de ira, al voltear de nuevo hacia donde se encontraba aquel cuerpo, pude notar que este me miraba fijamente con amargura, odio, rencor, como si yo le debiese algo, este sujeto para esto ya estaba completamente muerto, se le habían removido todos los órganos. era imposible que siga teniendo funciones corporales, lo que opte fue por maldecir y soltar una grosería, exclame..¡¡¡Mierda déjame trabajar!!!, con la adrenalina al tope y ya ofuscado, lo tape, por completo y lo lleve al frigorífico.

Alrededor de las 4:50 a 5:20 aproximadamente regresó la policía, verificando si ya habíamos logrado tener la exactitud en hora y diagnóstico de muerte, más que todo como curiosidad pues dichos datos no son entregados al azar. Bueno, en lo que conversábamos solicite, que me den un alcance de cómo habían encontrado a este sujeto y sobre quien era, muy tranquilo este oficial me respondió:
-Este maldito era un violador, unos vecinos que merodeaban la zona "X", escucharon pedir auxilio a un menor quien gritaba desgarradoramente pues este trataba de ultrajarlo, para luego caer inconsciente sobre el.

Recién ahí logré entender el porque este sujeto estaba tan lleno de ira y al mismo tiempo desquiciado quizás su espíritu no descansaba pues no había culminado su fechoría, solo atiné a reírme y pedirle que emitan un boletín informando sobre el cuerpo y sus características, pues no deseaba que pasara ni una noche más en la Morgue.

Como mencioné líneas arriba este cuerpo siguió con nosotros por los próximos 3 meses, la identificación de él, a pesar de que se difundió nunca llegó familiar alguno a reclamarlo, así que bueno decidí, en lo personal me ensañe con él, lo descuartice por así decirlo para luego quemarlo, en el caldero, ¿porque? pues. durante su estancia nos atormentó, gritaba y molestaba demasiado. ¿Como podría gritar si estaba muerto?, vaya pregunta verdad!!!, hay almas que por el daño que hacen jamas lograran la paz eterna, además llegué a creer que ni en el infierno lo querían. Hay aspectos que decidí olvidar.
[16/2, 07:58] Mitsuomi WOLF: LA REINA LILITH (relato fantástico):

Lilith, la Reina Bruja, nació hace miles de años en algún lugar del Próximo Oriente. Durante su infancia no fue una reina ni una bruja, sino la hija de un humilde artesano. Cierto día, cuando Lilith ya era una hermosa adolescente, su pueblo fue asaltado por unos bandidos, que mataron a todo el mundo salvo a las mujeres y niñas más bellas. A estas se las llevaron consigo para venderlas como esclavas, pero mientras recorrían el desierto sufrieron los embates de una tormenta de arena. Lilith aprovechó la confusión reinante en la caravana para huir de sus captores. Estos, al darse cuenta de que había huido, enviaron varios hombres en su persecución, pero Lilith consiguió burlarlos con la ayuda de Ahmed, un joven cazador que llevaba varios días siguiéndola, porque la había visto de lejos y se había prendado de ella. Buscando un lugar seguro donde pasar la noche, Ahmed y Lilith llegaron a las ruinas de un templo dedicado al terrible dios Pazuzu. Ahmed cazó un jabalí y le dijo a Lilith que encendiera una fogata para asar la carne, mientras él registraba las criptas inferiores del templo en busca de riquezas que robar. Volvió poco después, muy pálido y con la ropa ensangrentada. Lilith, asustada por su aspecto, le preguntó qué le había pasado. Por toda respuesta, Ahmed la agarró y la obligó a mantener relaciones sexuales con él. Tras llegar al orgasmo, se desplomó para no volver a levantarse. En realidad, Ahmed había muerto en la cripta, al ser atrapado y desangrado por una araña gigante. Pero el espíritu de Pazuzu, que deseaba el hermoso cuerpo de Lilith, había poseído el cadáver del muchacho, resucitándolo temporalmente para satisfacer su lujuria. Nueve meses después Lilith tendría una hija a la que llamó Ardat, pero esa no fue la única consecuencia del coito. Cuando eyaculó en su vientre Pazuzu le transmitió una elevada dosis de energía mística, volviéndola prácticamente inmortal, aunque el único signo exterior del cambio fue que los ojos de la muchacha, anteriormente castaños, se volvieron rojos como rubíes. Tras abandonar el templo, Lilith llegó a una ciudad cercana, cuyos habitantes eran adoradores de Pazuzu. Cuando estos vieron sus ojos, reconocieron en ella a una elegida del dios y le ofrecieron el trono. Lilith vivió durante años en el palacio real, repartiendo su tiempo entre las tareas de gobierno, la educación de Ardat y el estudio de la brujería. Pero cuando su hija creció empezó a manifestarse su naturaleza demoníaca y un día, mientras jugaba con otras niñas, se enfadó por un motivo pueril con una de sus amigas, a la que mordió hasta chuparle toda la sangre. Entonces pensó que si se quedaba allí podría convertirse en un peligro para su propia madre y decidió marcharse. El sabor de la sangre humana le había resultado tan agradable que se convirtió en el primer vampiro del mundo. Durante más de mil años recorrió los bosques en busca de nuevas víctimas, algunas de las cuales también se convertirían en vampiros. Pero en cierta ocasión tuvo la mala idea de acercase a la tenebrosa Cimeria, donde cierto guerrero consiguió matarla atravesándole el corazón con su espada. Su cadáver quedó tendido en medio del bosque, donde fue encontrado por una loba blanca. Cuando esta lamió su sangre, el espíritu de Ardat entró en su cuerpo, volviéndola inmortal y poseyendo su mente. Entonces la loba se dirigió a la ciudad donde reinaba Lilith, impulsada por el espíritu de Ardat, que aún echaba de menos a su madre. Llegó justo a tiempo para salvarla de unos bandidos que habían planeado raptarla. Cuando estos ya habían conseguido apresar a la reina tras asesinar a sus guardias, la loba se arrojó sobre ellos y los mató a todos, resistiendo numerosas heridas. Lilith, agradecida, usó su magia para curar a la loba, a la que llamó Tiamat. Para evitar nuevas incursiones enemigas, hizo construir un nuevo palacio subterráneo, prácticamente inexpugnable, y siguió gobernando su misterioso reino. La reina bruja todavía sigue allí, pues, aunque ocasionalmente se ha planteado retirarse de este mundo para gozar del descanso eterno, no tiene demasiada prisa. La inmortalidad estimula la paciencia.
[17/2, 01:15] Mitsuomi WOLF: El 16 de Febrero de 1955, el húngaro Paul Kern murió luego de pasar 39 años sin dormir. Al estallar la Primera Guerra Mundial, el húngaro Paul Kern se enlistó de manera voluntaria para pelear en el frente ruso. A mediados de 1915, a pocos días de haber entrado en combate, un disparo enemigo impactó en el borde inferior frontal de su rudimentario casco, Kern perdió el conocimiento y permaneció moribundo durante varias horas, en el momento de la retirada fue recogido por un grupo de médicos que lo trasladaron a un precario hospital en Lembreg, actual Ucrania. Las heridas de Kern eran devastadoras, la bala le había destrozado el lóbulo frontal casi por completo y los médicos solo esperaban el trágico desenlace. Luego de varios días Kern despertó, de inmediato se dieron cuenta que no tenía daños neurológicos, hablaba normalmente, recordaba el incidente, hacía abstracciones, leía y hacía cálculos matemáticos, creyeron estar frente a un milagro, pero las consecuencias no se hicieron esperar, Kern había despertado, pero para no volver a dormir. El trastorno de sueño de Kern se hizo irreversible, luego de mas de 10 días se esperaba una muerte segura por el aumento de la presión sanguínea y un seguro ataque cardíaco, pero eso no ocurrió. Kern regresó a Hungría donde llevó una vida normal como empleado del correo, el no dormir le trajo más beneficios que trastornos, por las noches recorría bares donde cobraba por relatar su historia, El resto de su vida fue monitoreado por médicos húngaros y estudiado por especialistas de toda Europa, luego de casi 40 años sin dormir una sola hora, su vida se apagó el 16 de Febrero de 1955. Luego de su muerte su caso siguió siendo estudiado, pero al no tener otro registro en la historia, se considera una excepción irrepetible.
[28/2, 04:28] +52 1 951 124 0022: En una comunidad de la mixteca yo escuché muchos lamentos, era la 2:45 am cuando escuché unos gritos de angustia, la verdad me arrugue y me puse mis audífonos y escuché musica...hay cosas que es mejor no saber
[28/2, 04:29] +52 1 951 611 8189: Sería la llorona
[28/2, 04:45] +52 1 951 235 7379: "UN EMBARAZO INFERNAL"

Mi esposa y yo tenemos unos 4 años de casados, y somos una pareja feliz, pero hay algo que nos perturbó mucho, y fue enterarnos de que ella era in fértil, fuimos a muchos doctores, diversas opiniones, pero la conclusión siempre era la misma, así que dejamos de intentarlo, y a pesar de la tristeza que da el saber que no podrás tener hijos, decidimos seguir adelante y ser felices solo nosotros dos.
Sin embargo una amiga de mi esposa le aconsejo ir a ver a un anciano, el cual al parecer podía lograr lo que la ciencia no, y hacer que mi esposa quedara embarazada, yo me opuse, puesto que no creo en esas tonterías, pero la vi tan emocionada que no tenia fuerzas para anegarle este pedido, así que fuimos a ver al anciano.
El lugar era una pequeña casita algo misteriosa, al entrar se podía sentir el olor a incienso y hierbas, el viejo estaba sentado en el piso, y le dijo a mi esposa que hiciera lo mismo, pero dentro de un circulo hecho de velas rojas, todo el asunto me estaba pareciendo de lo mas siniestro, pero todo sea para que mi esposa sepa que al menos lo intentamos. El anciano, tenia un rostro pálido, muy demacrado, y nos contó que hace mucho tiempo el tenia una pequeña niña como de 8 años, la cual había muerto por una rara enfermedad, la cual ni el pudo evitar con todos sus rezos y pócimas, pero que no se daba por vencido, y sabia que algún día la vería de nuevo, tenia una foto de la niña, la cual era muy bonita, pero parecía que le faltaba el dedo medio de la mano derecha. En fin, puso su mano sobre mi mujer, dijo unas palabras extrañisimas, y nos fuimos de aquel lugar.
Al cabo de unos meses, cuando ya por fin confirmábamos que no había sido mas que otra perdida de tiempo, sucedió el milagro, mi mujer regresó a casa feliz diciéndome que estaba embarazada, yo no lo podía creer, y ambos lloramos de felicidad, en ese momento no pensamos que el anciano tuviera algo que ver, la verdad no importaba, la felicidad que nos embargaba era lo único importante.
Lastima que la felicidad que sentíamos, fue desapareciendo al pasar los primeros dos meses de embarazo, mi esposa sufría de horribles pesadillas, tenia visiones de que todas las noches la visitaba una niña pequeña, que subía a la cama y le acariciaba la barriga, pero aquella niña estaba lejos de ser normal, ella me decía que solo su presencia era como si le robaran el aire, y sentía un mal olor en la habitación, yo no sentía nada, aunque estuviera durmiendo al lado de ella, pero cada vez que despertaba sudando y sobresaltada, se abrazaba fuertemente a mi y lloraba aterrada. Las cosas se intensificaron al pasar de las semanas, sus visiones comenzaban a afectarme a mi también, yo despertaba de madrugada, porque sentía la presencia en nuestra habitación, y vi claramente como una niña a la que no le podía ver el rostro, parecía mas bien una sombra, entraba lentamente al cuarto, yo estaba petrificado, y no podía mover un musculo, solo movía los ojos, la niña se subió a la cama junto con nosotros, y yo la observaba mientras acariciaba la pancita de mi amada esposa, donde estaba mi hijo formándose, mi esposa no reaccionaba, y las lagrimas de impotencia salieron de mis ojos, luego la niña se acerco a mi oído, y dio un grito espeluznante antes de desaparecer.
-Que te pasa mi amor?….porque estas tan alterado?…
-No..no pasa nada mi amor, solo tuve una pesadilla…
-Tu también la viste verdad?…no me lo niegues.
-Ya te dije que no fue nada, duerme, recuerda que mañana vamos a lo del ultrasonido para ver al bebe.
Yo no podía decirle lo que había visto, eso solo la perturbaría mas, puesto que yo ya estaba aterrado. Fuimos a al ultrasonido, para ver por primera ves a nuestro hijito querido, las primeras imágenes eran lindisimas, mi esposa y yo llorábamos de felicidad, pero el doctor, examinando mas a fondo, observó una anomalía muy extraña en nuestro bebe, al parecer, una de sus manitos no se había formado por completo, y daba la impresión de que el dedo medio de la manito derecha, simplemente no estaba. Fue algo muy triste, pero lo íbamos a querer como fuera.
Al llegar a casa, mi esposa estaba muy nerviosa, parecía estar muy aterrada y confundida:
-Gonzalo, recuerdas hace meses cuando fuimos a ver a ese anciano para que nos ayudara?
-Claro que si mi vida, que te ocurre?
-Que no recuerdas, que el tenia una niña que murió hace mucho, y que casualmente le faltaba el mismo dedo que a nuestro bebe?…..y ahora que lo pienso….la chiquilla de esa foto, se siente como la que se ha estado presentando en mis pesadillas…..sera que acaso….
-Por favor Amalia….no pienses eso….es solo una casualidad, acaso crees que su hija va a reencarnar en nuestro hijo?….eso es imposible, no creo en esas cosas…ya cálmate y no llores.
-Gonzalo…no te lo había dicho, pero hace un momento antes de salir el doctor me dijo que no va a ser un niño, tendremos una NIÑA…
Ese comentario me heló la sangre, porque aunque yo lo negara, estaba realmente asustado, y por mas que lo negara eran demasiadas las coincidencias, sin decirle a mi esposa decidí ir a hablar con aquel anciano, el cual ya no se encontraba en aquel lugar, su casa y él habían desaparecido, pregunté y nadie sabia de su paradero, eso me dejó aun mas preocupado. Al regresar a casa, mi esposa dormía en el sofá, intenté levantar la y llevarla a la cama, pero de repente se despertó gritando muy angustiada:
-Saca mela…sacamela…por favor…sacala de dentro de mi…
-Pero que te pasa?….que?
Amalia se arrancó la camisa, y al verle la barriga, casi que muero del terror, se apreciaban unas manos tratando de salir por debajo de su piel, se movía por todos lados como buscando una salida de su cuerpo, ella gritaba de dolor, y yo no sabia que hacer, las cosas en la casa comenzaron a caerse, las mesas y sillas temblaban, realmente era algo aterrador, algo mas allá de lo que yo jamas hubiera pensado que podía pasar, yo estaba muy asustado, pero no iba a dejar que mi esposa muriera, así que la desnudé, la puse en posición de parto, y a pesar de que no dejaba de gritar, intenté sacar a ese bebe o lo que fuera de entro de ella, así que introduje mi mano, y sentí que toqué su cabeza, empece a extraerla, y se escuchaban ruidos raros en toda la casa, una fuerza invisible me arrojó lejos, y mientras estaba allí en el suelo, tratando de no desmayarme, vi como por si sola, esa cosa salia del cuerpo de mi esposa, la cual ya no gritaba… lo primero que vi, fue su mano de cuatro dedos, luego la otra, la cabeza con cabello largo y negro, sus ojos eran negros como la noche, cayo al suelo llena de sangre y con la placenta de mi esposa, rasguñaba el piso con sus largas y tenebrosas uñas, definitivamente, era la niña de la foto, que ya no era un feto, ni un bebe, era una niña de ocho años, pero no linda como en la foto, esto era otra cosa, algo infernal. Aunque estaba aterrado y petrificado, logré sacar fuerzas, tomé un arma que tenia en casa, y le disparé en la cabeza a aquella cosa, y dejó de moverse, luego corté el cordón umbilical de manera rudimentaria, y llevé a mi esposa al hospital, donde lograron salvar su vida.
Varios meses después, aun no hemos podido olvidar esa experiencia tan terrorífica, pero estamos tratando de seguir adelante, sin embargo algo me tiene intranquilo, desde hace unos cuantos días, me parece ver a aquel anciano parado frente a nuestra casa tomando de la mano a una pequeña niña, pero al tratar de acercarme a él, simplemente desaparecen, siento que aun nos vigila. Mi esposa está embarazada otra vez, hoy fue a hacerse el ultrasonido, yo no fui, porque quería que ella me sorprendiera, aquí llega con la noticia:
-Mi amor, por fin llegas, estaba ansioso por saber que tendremos…pero que te pasa?…porque traes esa cara?….estas pálida….Amalia?….mi amor háblame….que viste en el ultrasonido?..
Mi esposa no puede responderme, esta paralizada de miedo….y….yo también...
Para terror de ella y del mio, el feto que lleva dentro, nuevamente le falta un dedo, y tiene rasgos de ser la niña nuevamente,he seguido viendo al anciano junto a la niña, al parecer, cada vez que Amalia quede embarazada, será de esta niña...👈🏽☝☝🤠🤘
[28/2, 05:43] Mitsuomi WOLF: QUIERES QUE TU MASCOTA HABLE?
😱
No puedo tener hijos, miles de tratamientos, pastillas, pero nada hizo efecto para embarazarme. Impotente física y mental, que le dije al Daniel que mejor se fuera en busca de otra. Sé que lo pensó y me dolió bastante, pero imposible culparlo.

Sin embargo, no aguanté cuando agarró el bolso para irse, armé una gran discusión, lo encaré diciéndole cobarde, que lo odiaba porque no se la jugaba por lo nuestro… pero lo convencí y se quedó.

Con el tiempo, encontramos formas de llevar nuestra sexualidad sin tener que tocar el tema “del hijo”, por sanidad mental. También es cierto que comencé a sentirme insegura, porque esas semanas llegaba tarde sin razón, o cuando lo llamaba al teléfono no me contestaba.

Me quedé callada, pero no me pude contener, así que lo esperé hasta bien tarde para enfrentarlo, pues para mí era bastante obvio: me estaba engañando con otra mujer.

Sentí la puerta y cuando lo fui a encarar me sorprendió al punto de dejarme completamente en silencio.

- ¿Qué es esto? – le pregunté.
- Un gatito…. Feliz cumpleaños, amor.
- ¿Un gato?
- Sí… siento no haberte contestado los llamados, pero estaba con este asunto y me podías descubrir, no quería arruinarlo.
- ¡Amor! ¡Te amo tanto!

Me puse a llorar, lo abracé, para mí aquel animalito significó lo que como pareja nunca íbamos a lograr: un hijo.

Pero venía enfermo, le dábamos agua y no tomaba, apenas reaccionaba a cualquier movimiento. Esa noche lo abrigamos con un calefactor a su lado. Dormimos bastante poco pensando en que no pasaría del amanecer. Bien temprano pudimos darnos cuenta de que aún respiraba, así que tomamos un taxi y partimos al veterinario. Tomé de la mano al Daniel y le repetía que no quería que se muriera. Estuvimos una hora esperando respuesta hasta que al fin nos dieron un diagnóstico:

- El gatito está bien, tiene todos sus signos vitales funcionando con normalidad. Se ve débil pero no lo es… ya deberían pensar en un nombre para él.

Pasaron unos días y el pequeño caminaba con dificultad. Después corrieron semanas y ya era capaz de escaparse de la caja mientras andaba lentito por la alfombra, luego se detenía y miraba el techo. Cada cosa nueva que hacía se lo hacía saber a mi novio por teléfono.

- Amor, ya le tengo nombre al gato. Se llamará Martín – le dije.

Pensó que lo estaba jodiendo, para él humanizarlo a tal punto de bautizarlo con un nombre de persona lo encontraba demasiado. Discutió conmigo, pero yo siempre ganaba.
El Martincito al mes y medio no dejaba tranquilo a nadie, le gustaba morder la mano cuando estábamos durmiendo, juguetón, lindo, y como de costumbre miraba siempre hacia arriba, como si quisiera cazar algo. Lo queríamos tanto que cuando cumplió tres meses le compramos una cajita feliz.
Pero para mí lo mejor estaba por llegar cuando descubrí un producto por la Internet que cambiaría todo:

- “¿Tienes un animal y lo amas como si fuese tu propio hijo? ¿Te gustaría que tu mascota al fin te dijese papá o mamá? Contrata “Wildlife Conection”, pídelo ahora y con tu teléfono podrás escuchar lo que siempre te ha querido decir”

Le exigí al Daniel que lo contratara, pero este me repetía que valía tres millones de pesos. Tuve que imponerme como siempre y no le hablé por varios días… hasta que agarré las maletas. Me trató de calmar, pero respondí que era un inconsciente conmigo porque no podía ser madre, y que esto podría reemplazar (en parte) todo el asunto.

Entonces, así fue como se fueron tres millones de pesos en el “Wildlife Conection” y comenzamos a probar aquel famoso sistema para "catlovers"
Yo le hablaba al Martín con la aplicación, pero este lo único que hacía era mirar el techo sin responder absolutamente nada.
Hasta que un día, mientras cocinaba lo escuché claramente.

- Mamá… tengo miedo.

Me acerqué a él, emocionada.

- ¡Martincito, hablaste!
- Tengo miedo, mamita – me dijo mientras miraba hacia arriba.
- ¿Por qué bebé mío?

Pero no respondió nada más.

Esa misma noche me acosté con Daniel, mientras nuestro “hijo” se encontraba arriba de nuestras frazadas.

- Amor… el Martín se comporta súper extraño.
- ¿Por qué?
- Porque lo único que hace es mirar el techo como si hubiese algo. Fíjate.
- Pregúntale que le pasa con tu famosa aplicación.
- Hazlo tú... yo lo hice y me respondió que "tenía miedo".
- Okey. Martín ¿Qué es lo que hay allá arriba que miras tanto?
- Papá… hay una mujer que está sobre ustedes y los está observando, ahora mismo.

Apreté del brazo a mi novio, se me apretó el estómago.

- Hay una mujer que ustedes no pueden ver, pero yo sí... también la puedo escuchar – agregó.

Había oído alguna vez que los gatos tenían la capacidad de ver a los muertos, pero jamás pensé que podría ser verdad.

- ¿Y qué te dice? – le pregunté
- Dice que mi papá la mató… dice que la ahogó con una bolsa, que revisen cerca del río, que ahí la dejó.

Daniel abrió los ojos, pero yo insistí.

- ¿Qué mas te dice?
- Dice que fue su amante, y que nunca podrán tener un hijo porque ella te maldice.
- ¡¿Cómo le vas a creer?! ¡Esta weá está mala! ¡¿Cómo los gatos van a ver fantasmas?! ¡¿Sabes que más?! ¡Ahora mismo me deshago de esta aplicación! - exclamó mi novio.
- ¡¿Es cierto lo que dice el Martín?! – le pregunté asustada.
- ¡¿Cómo va a ser cierto?! ¡Parece que te aguanté mucho con el tema de humanizar a este animal, pero ya superaste todos los límites!
- ¡¿Qué pasa si llamo a los pacos y les digo que hay un cuerpo cerca del río?!
- ¡¿Te volviste loca?!
- Lo hago de manera anónima… si total no hay nadie enterrado en ese lugar ¿Cierto?

- ¡Me dice que la mató el día de tu cumpleaños! – exclamó aquella voz artificial.

Daniel se volvió loco. Agarró al gato del cuello, abrió el ventanal, caminó al balcón y asomó a mi pequeño al viento.

- ¡¿Qué estás haciendo?!
- ¡Voy a tirar a este gato culiao de acá!
- ¡Asesino! ¡Me engañaste, yo sabía! ¡Mataste a tu amante!
- ¡Dile adiós a tu gatito!
- ¡MARTÍN!

Me abalancé sobre él, forcejeamos, Daniel se desestabilizó y se fue cuesta abajo. El gato se soltó y quedó parado sobre los fierros del balcón. Comencé a tiritar mientras veía a mi novio reventado en el primer piso.

De pronto, se escuchó una risa artificial desde mi teléfono. Observé a mi gato que me miraba con sus ojos redondos y brillantes.

- ¿Martín… por qué te ríes?
- Porque yo no veo a los muertos…  humana estúpida.

#HistoriasCuentosYLeyendasDeTerror
[29/2, 04:52] +52 1 951 360 1586: En el pueblo en el que vivo como es un pueblo cañero personas de otros lugares mayormente de la Sierra llegan a cortar caña hay casas en donde se quedan a vivir un tiempo a las orillas del pueblo una mujer de blanco se apareció la cual los espantó me contaron que cuando ellos estaban durmiendo la mujer jalo a uno de los pies y lo arrastró unos metros después cuando todos se despertaron por oír los gritos fueron a ver qué era y vieron a la mujer de blanco cerraron la puerta rápidamente y ellos se encerraron en la casa y se pusieron a rezar y mientras ellos resavan la mujer gritando  muy espantosamente golpeaba la puerta con  fuerza la gente que estaba cerca de esa casa fueron a ver y les contaron lo que pasó me dijo mi abuelita que ya tiene tiempo que eso pasa en el pueblo
[29/2, 17:05] +52 1 951 360 1586: 😈TRATO CON EL DIABLO😈

Hice un trato con el diablo y lo que descubrí me dejó helada…

El trato era simple, yo podría hacerle algunas preguntas... Y a cambio mi vida se acortaría.

No importa, pensé, si lo que sospechaba era cierto, valdría la pena.

Aun con miedo empecé.

Yo; ¿Es real el cielo?

Diablo; -Si, tan real como lo es el infierno (su voz era grave con un raspado parecido a las brasas de una chimenea).

Yo; ¿Quiénes irán al cielo?

Diablo; -Todo aquel a quien dios deseé tener ahí.

Yo: -Le temes a Dios?

Un poco nerviosa trate de explicar mis intenciones, no quería hacerlo enojar... Pero el calmado acepto mi pregunta.

Diablo; -Cuando Dios me creo, elimino mi capacidad para sentir miedo, es más, no puedo sentir muchas cosas.

Yo; - Que es lo que puedes sentir?

Diablo; - Dolor.

Yo; - ¿Podrías hablarme más sobre la pregunta del cielo que te hice hace un momento?

Diablo; -El cielo está abierto para todas las criaturas de Dios sin excepción.

Yo; -Entonces... Tú también puedes entrar en el cielo. Ya que eres una creación de Dios

Diablo; -Podría.

Yo; - ¿Por qué no lo haces?

-Porque cometí el pecado más ofensivo, hice lo que solo Dios “mi padre” debería hacer.

Yo; - ¿A qué te refieres? Pregunté y por algún motivo empecé a sentirme mal.

Diablo; -Me refiero a la creación, cree a mis ángeles a mi imagen y semejanza, así que la culpa recae en mí.

Mis ángeles están encausados en crear sufrimiento y destrucción, por lo cual Dios dictaminó que sus almas sean confinadas al infierno por toda la eternidad.

Yo; -Tus ángeles... Son los demonios

Diablo; -Obviamente, además no puedo irme al cielo sin mis creaciones pues ellos estarán sufriendo.

Por ese motivo decidí que el infierno sea nuestro cielo y yo me quedare para sufrir a su lado.

Yo: -Por qué haces tal sacrificio

Diablo; - Los ángeles son más cercanos que un hijo.

Yo: -Muchas gracias, el mundo estará eufórico cuando les dé la noticia, el cielo existe y tenemos la oportunidad de llegar ahí.

Diablo; - Pero tú no podrás... De hecho, ninguno de ustedes. puede hacerlo.

Mi voz se tornó temblorosa, pero pude decirle... No fue eso lo que dijiste

Diablo; -Se lo que dije. (Con un tono de voz triste).

Yo; -No entiendo?

Diablo; -A diferencia de los animales y plantas de este mundo, ustedes no son una creación de Dios, son una creación mía.
[1/3, 01:43] Mitsuomi WOLF: Hola muy buenas tardes.

                      (El viaje)

Soy taxista, mi nombre es John, tengo 60 años. Desde joven he trabajado en este oficio y les contaré mi experiencia con el lado oscuro del mal. Yo siempre fui un escéptico, no creía en fantasma ni nada por el estilo. Hasta que una noche en mi taxi trabajando como una noche cualquiera dos ancianas me hicieron parada y me pidieron que les hiciera un viaje. Éstas vestían ropas muy viejas y se veían sucias. Una de ellas se le veían golpes en los brazos y cara. La otra llevaba una maleta que parecía muy pesada, yo  me ofrecí a ayudarle pero muy brusca me dijo. ¡no!-. Entonces simplemente me alejé y me dirigí al taxi. Ya estando ellas adentro comenzó aquel viaje que hasta el día de hoy lo recuerdo como si fuera sido ayer. Ella me iba indicando las calles que debía tomar, calles extrañas y muy solas, donde la oscuridad reinaba. Todo era desolado e inquietante. Fueron dos largas horas de camino y durante ese tiempo pude ver por el espejo retrovisor algo volando cerca de nosotros. Parecía ser un ave pero no pude conocer que especie era. Sólo que si era grande y completamente negra donde gracias a la luz de la luna la pude notar. Éstas parecían angustiadas y muy apresuradas de llegar hasta el destino que llevaban. Cuando de pronto escuché el llanto de un bebé recién nacido, yo rápido las volteé a ver y ellas solo me miraron como si nada pasaba. Yo seguí conduciendo. No quise preguntar nada, pues bastaba lo que habían visto mis ojos Hasta ese momento como para querer saber más. Deseaba llegar con prontitud hasta donde ellas iban ya que todo eso me daba escalofríos. De pronto una de las ancianas me grito. ¡alto! ¡detengase!. Yo entonces frene de golpe y les pregunté. ¿qué sucede?- ellas solo se bajaron del taxi sin decir nada y me dijo una de ellas. -tome. Aquí está su dinero- yo entonces tome el dinero y las dejé ahí. Ellas se quedaron en un lugar donde no había ni un alma. Un lugar solo y sin nada a su alrededor. Todo aquello me era extraño y muy espeluznante. Pero daba gracias a Dios que por fin había terminado ese viaje y que solo sería un cuento para contar... Estaba equivocado... A mi regreso mire aquel animal volando de nuevo detrás del auto. No entendía que podría ser eso y tampoco quería averiguarlo. Seguí conduciendo y tratando de ignorar ese animal pero, de pronto me fue imposible el hacerlo pues ese animal ya no volaba a una corta distancia de mi taxi... Ahora venía volando pegado a mi ventana... Entonces me empecé a poner nervioso muy asustado pues ya no parecía un animal sino un humano con alas y pico... Sus ojos eran cuencas vacías, llenas de oscuridad sin fin pero aún así sentía su mirada fija y penetrante hacia mí... Comenzó a picotear la ventana como intentado quebrar el vidrio... Yo no paraba de temblar y temía perder el control del auto. Este seguía picoteando violentamente la ventana que llegue a pensar por un momento que quebraría el vidrio... Pero de pronto... En un abrir y cerrar de ojos desaparecido... Se esfumó... Hasta entonces... Y solo hasta entonces logré controlarme un poco y decidí ese día dar por concluida mi jornada de trabajo y regresar a mi casa... Al llegar a ésta me recibió mi perro Brandon, yo me recosté en mi sillón aún con aquello clavado en mis pensamientos... No podía olvidarlo. Me dirigí a subir al segundo piso donde estaba mi habitación... mi perro Brandon iban conmigo... Cuando al llegar a la puerta oí el rechinar de la ventana, ésta parecía ser asotada por el viento, se me hizo extraño pues no hacia viento. caminé hasta dentro de la habitación y volteé hasta la ventana... mi perro empezó a ladrar... ladraba muy violentamente... Me acerqué a ésta a paso lento y viendo a los alrededores. Al llegar me asomé y vi a poca distancia aquel animal que me persiguió en todo el viaje... Parado... Viéndome fijamente sin parpadear... Me miraba como si quisiera que le entregara algo... algo de él... algo que le pertenecía y que yo tenía... levantó una mano y me indicó abrirle la puerta... Se me erizó la piel... Me quedé sin habla y estaba muy asustado. Mi perro seguía ladrando. Yo solo trate de ignorar aquello, cerré la ventana y me quedé quieto sentado en la cama junto a Brandon... Éste no parecía calmarse. Se paró frente a mí y seguía ladrando hacia la ventana... Después de unos minutos éste se calmó y empezó a arañar la puerta pidiendo que se la abriesen. Yo entonces me levanté y abrí la puerta, éste salió y empezó a bajar las escaleras yo iba atrás de él... Al llegar al último escalón... Mi perro comenzó a ladrar de nuevo hacia la ventana que estaba junto a la puerta principal. Yo solo me quedé parado... Con la respiración algo acelerada... Tenía escalofríos por todo mi cuerpo... No sabía qué hacer... El miedo me estaba carcomiendo... Cuando entonces oí el mismo llanto de un bebé recién nacido que provenía de afuera.... El mismo llanto que oí mientras llevaba a esas ancianas... Y ahora se oía afuera de mi casa... Decidí asomarme a la ventana aún cuando sentía colapsar del miedo... Sudor goteaban de mi frente mientras más me acercaba a aquella ventana.. mi perro no paraba de ladrar cada vez más violento y brusco... Yo seguía caminando... Despacio sin hacer ruido... Cuando al fin llegue a la ventana, mis ojos parecían salir de mis cuencas... La sangre se me congelo... Mis piernas temblaban y me paralice... Dios mío, que escena tan macabra y espeluznante la que observaba... Era realmente espantosa... Ese animal le arrancaba con el pico los ojos... uno por uno... A quien parecía ser un bebé de solo horas de nacido... yo, solo seguí ahí parado viendo aquello horroroso mientras éste seguia con el bebé en brazos comiendo los ojos del bebé... Pero... ¡Era realmente un bebé!... Mis ojos comenzaban a ver cómo aquel supuesto bebé comenzó a tomar forma de un animal extraño... Éste cayó al suelo y le empezaron a salir brazos y piernas largas.... Muy largas... Yo simplemente no pude seguir viendo aquello tan espeluznante, me alejé de la ventana temblando como un papel. pensé en salir de ahí, mi perro venía atrás de mí aún ladrando... Yo corrí hasta la cochera y entró al taxi... Fue entonces que vi aquello que una de las ancianas llevaba cusndo las recogí... Aquello que no me dejaron tocar... Sí... Aquella maleta pesada.... Esa maleta pesada estaba ahora en mi auto... Maleta hecha de cuero de algún animal... ¿la olvidarían?... O simplemente la dejaron a propósito?... No lo sabía... Lo que si entendía ahora es porque ese animal estaba afuera de mi casa pidiendo que le abriera la puerta... Éste se vino tras esta maleta.

Tomé la maleta y me dirigí a mi cuarto... Mi perro Brandon seguía conmigo pero éste al fin se había calmado. Cada escalón que subía la sentía más pesada y difícil de cargar. No sabía si aquel animal seguía afuera pero por si aún estaba ahí, trate de hacer el menor ruido posible. Al entrar a mi cuarto a como pude subí la maleta a mi cama. La miré por varios minutos pensando en que podría contener esa maleta... Se veía un poco espeluznante... Tenía muchos símbolos y era de cuero. Temía encontrarme con algo más espantoso de lo que estaba afuera de mi casa... Dudaba en abrirla y ver su contenido... Pero al mismo tiempo la curiosidad se apoderaba de mí... Después de pensarlo me decidí a abrirla.. puse mis manos en ella y me disponía a abrirla cuando escuché... Toc... Toc... Alguien tocaba mi puerta... ¿quién podría ser a esta hora?... Mi perro Brandon salió de mi cuarto y comenzó a ladrar frente a la puerta principal... Yo lo seguí pero a pasos sin sonido... Al llegar casi al último escalón de me detuve... Mire por el rabillo de mi ojo que algo corrió hacia mi habitación... Mi perro Brandon salió tras de eso y yo lo seguí... Al llegar a la puerta de mi habitación, la abrí muy despacio... Pero muy despacio... Mi perro Brandon se veía ansioso de entrar... Cuando entramos éste se le tiro encima a una especia de un animal extraño de cuatro patas, este estaba encima de la maleta... Yo simplemente me quedé perplejo... No pude moverme... Eso era muy aterrador... Mi perro seguía atacando a aquel animal cuando mire como a eso de cuatro patas comenzó a tomar forma de humano... mis ojos no lo podían creer... era irreal... Eso se había convertido en una de las ancianas a quien le hice ese viaje... Ésta lanzó a mi perro y lo dejó muy golpeado. Yo seguía parado sin poder creer lo que estaban viendo mis ojos. Ésta muy desafiante tomó la maleta y solo me dijo. -con la prisa se me olvido- y salió de la habitación... Cuando al llegar a la puerta principal se detuvo... Retrocedió y se veía muy pálida. Yo atrás de ella solo observaba... Cuando por la ventana vi de nuevo asomarse aquel animal con forma de humano... Me miró y me ordenaba que le abriera la puerta... Mientras aquella anciana parecía aterrada. Ésta lanzó la maleta y tomó forma de un ave grande, casi similar a la de aquel animal que yacía afuera pidiéndome que le abriera la puerta. Intento tomar la maleta cuando se oyó un estruendo que golpeó fuerte la puerta. Ésta cayó al suelo, rápido se levantó e intento de nuevo tomar la maleta. Yo entonces corrí hasta la puerta con la intención de abrirla pero aquella anciana con forma de animal me lo impidió y me dijo. -no lo dejes entrar, te estoy salvando la vida- yo entonces me detuve mientras que aquel animal seguía pidiéndome que abriera la puerta... Yo no sabía que hacer... No sabía quién de ellos no tendría la intención de acabar conmigo. Cuando aquella anciana tomó de nuevo la maleta y me preguntó. -¿quieres saber que contiene está maleta?- yo aterrado por todo lo que estaba pasando le dije. -solo quiero que se vayan de mi casa por favor- la anciana comenzó a reír muy macabrantemente y con mucha burla. Yo entonces corrí de nuevo hacia la puerta y ésta gritó. ¡no! ¡no la vayas a abrir!... Pero ya era muy tarde... La puerta ya estaba abierta. Aquella anciana comenzó a gritar de angustia, tomó la maleta con fuerza mientras que aquel animal venía caminando hacia ella. No entendía que era lo que contenía esa maleta para que ambos la quisieran con desesperación... Con ansias de poseerla. Mientras yo seguía parado observando, aquel animal entró a la casa y tomó a la anciana, éste empezó a chuparle el alma hasta que está poco a poco se fue convirtiendo más pequeña hasta que quedó como un bebé de horas de nacida. Empezó a sacarle los ojos con el pico y luego se los comió. El llanto de ese bebé se oían por toda la casa, hasta que se calló y entonces empezó a tomar forma de un animal con piernas y brazos largos... Aquel animal tomó la maleta y empezó a abrirla yo solo seguía parado observado todo lo que ocurría... Perplejo ante algo que nunca había visto... Ante algo tan espantoso... Ante algo en el que no creía... Éste al abrir la maleta metió lo que quedaba de aquella anciana, la cerro y me dijo. -una bruja menos-. Entonces entendí que en aquella maleta habitaban cadáveres de brujas muertas, y que el desespero de aquella anciana era volver a darles vida a esos cadáveres como solo ella sabía... Magia negra. Aquel animal solo era el cuidador de esa maleta que aquellas ancianas le habían arrebatado y que ahora había vuelto a sus manos. Este agarró la maleta y solo se fue volando. Después de esa experiencia no me queda duda que el mal existe. Y que habitan a nuestro alrededor y que nos observan sin nosotros darnos cuenta...

Historias de ultratumba.
[1/3, 05:11] Mitsuomi WOLF: 《En el bosque》

Mi esposo llegó muy borracho como todos los fines de semana, pero esta noche era diferente venía de un humor terrible, tirando todo a su alrededor, gritando y maldiciendo a más no poder, despertando a mi pequeña Emma quien lloraba muy asustada.

Le pedí que se calmara por nuestra hija, algo que  lo enfureció mucho más y me dio un golpe a puño cerrado que me mando directo al piso, mi pobre Emma se lanzó encima de él tratando de ayudarme, la tomó del cabello y la arrojó con fuerza a la pared haciendola sangrar de su cabeza, tenía que hacer algo no iba a permitir que nadie tocara a mi hija ni siquiera él, mientras me daba la espalda agarre la botella de whisky con la que llegó y con todas mis fuerzas se la rompí en la cabeza dejándolo inconsciente, tome a mi hija y corrimos sin mirar atrás adentrandonos en el bosque que rodeaba nuestra casa.

Después de unos minutos de correr mi hija y yo ya no podíamos más así que paramos a descansar, mis padres habían muerto hace años así que no tenia a quien recurrir ni a dónde ir con mi hija, era de noche y en medio de ese bosque reinaba la oscuridad, se oían algunos animales nocturnos y el crujir de los árboles.

Abracé a mi hija y seguimos caminando guiadas por la luna llena, de pronto nos quedamos inmóviles no podía creer lo que veían mis ojos, ahí frente a nosotros había una pequeña cabaña.

Corrimos a pedir ayuda y tocamos sin parar pero nadie salió, con cuidado me metí por la ventana era una cabaña muy pequeña pero acogedora, revise y efectivamente no había nadie fue por mi hija y nos acurrucamos en una camita, mi hija se durmio en mi brazos y yo lloré desconsolada hasta caer rendida.

Habían pasado algunas horas cuando oí ruidos, estaban abriendo la puerta, con mucho miedo me levanté y camine de puntitas para ver quien había llegado, pude observar entre la oscuridad a un pajaro muy grande de plumas de un negro brillante, majestuoso abrió sus alas y empezó a sacudir su cabeza, sus plumas fueron tomando forma de largos y finos cabellos negros, sus alas se convirtieron en delgados brazos y sus feas garras en delicados pies, su cara lucia radiante y suave, con los rayos de la luna su piel parecía brillar.

Escondida en la oscuridad me quede en shock ante lo que vi, camine hacia atrás sorprendida y sin darme cuenta tire algunas cosas, eso me delató y me condenó.

-Quien anda ahi?- dijo una suave voz; trataba de aguantar la respiración en esa abrumadora oscuridad, cuando sentí un aliento frío en mi cuello, con miedo me di la vuelta y ahí estaba ella frente a mi mirándome fijamente con esos ojos color carmesí, con una fuerza descomunal me tomo del cuello y de pronto no sentía el piso, no podía quitar sus manos, me faltaba el aire y ahí tras de ella vi a mi pequeña Emma llorando de nuevo.

-Suelta a mi mami- grito mi hija con miedo y lágrimas en sus ojos, ella volteo a verla y con las pocas fuerzas que me quedaban le grite -Corre!! Corre mi pequeña!!

La mujer me soltó y caí al piso ya sin fuerzas, mi hija corrió torpemente y ella para mi pesar en un abrir de ojos estaba delante de ella, aún tirada en el piso vi como la vida de mi hija se me escapaba entre las manos al ver rodando su pequeña cabeza frente a mi, mi alarido de dolor rompió el silencio de la noche, sentía mi pecho arder mientras amargas lágrimas rodaban por mi rostro lamentando el haber entrado a esa cabaña, pero mi sufrimiento pronto llego su fin cuando unas largas y frias garras atravesaron mi corazón.

Bien lo dice el dicho, cuando no te toca aunque te pongas, cuando te toca aunque te quites, esa noche a mi pequeña Emma y a mí nos tocaba morir de una forma horripilante ahí en el bosque.

Autor: Monica Sanchez
[1/3, 15:31] Mitsuomi WOLF: 1 2 3 AQUI ESTOY OTRA VEZ.

Luisa había cumplido once años, y sus padres pensaron que era tiempo de que dejara de compartir la habitación con su hermana menor, construyeron una habitación sobre la cochera, y mudaron ahí todas sus cosas.

La niña estaba muy contenta, tenía mucho espacio para sí, y la privacidad que comenzaba por necesitar de acuerdo a su edad.

Aun no tenía muchas cosas con las cuales llenar la habitación, así que su madre la invito a un bazar, donde se pueden encontrar todo tipo de cosas, algunas de segunda mano, con dueños anteriores, se encontró con un pequeño armario de madera, con detalles de enredaderas, ya estaba muy maltratado, pero aun así lo llevaron a casa para que papá la reparara, junto con otras cosas.

El padre de Luisa lijó y pintó el armario dejándolo como nuevo, lucia hermoso en la habitación. Ella pensaba guardar ahí su diario y cosas privadas que necesitaba estuvieran fuera de la vista de los demás.

Esa noche se escuchó desde dentro del armario un golpeteo, como si alguien tocara, abrió las pequeñas puertas, no pudo ver nada, pero el sonido continuaba. Ella estaba segura que venía de ahí, pero decidió creerle más a sus ojos.

La siguiente noche, ella dejó las puertas del armario abiertas, no se escuchó el golpeteo, así que lo hizo costumbre, pero no podía guardar cosas en él, porque cuando lo hacia estas eran arrojadas hacia fuera en su primer descuido.

Pidió a una amiga viniera a dormir a su casa para montar guardias juntas. Se divirtieron un poco al ver que el armario “escupía” lo que le ponían dentro, se desvelaron un poco hablando de sus cosas, cuando desde el pequeño mueble un hombrecillo regordete y diminuto, asomó su cara entre las repisas, era de color verde grisáceo, estaba desnudo, tenía una especie de cuernos a los costados, sus ojos apenas parecían abiertos, en su boca redonda había dientes delgados, largos y afilados, sus dedos largos y delgados se tomaban de las puertas para impulsarse hacia fuera, las niñas corrieron a la habitación del padre, este para evitar más escándalo por la noche se llevó el mueble a la cochera, pero como esta estaba debajo del cuarto de las niñas, la criatura subió a través de las paredes, golpeteando dentro del armario de ropa dijo -1,2,3 Aquí estoy otra vez- dando un salto a la cama y devorando a las dos pequeñas .

Créditos a quien corresponda
[2/3, 17:11] +52 1 953 171 8839: Hola comunidad,  primero que nada disculpen mis faltas de ortografía, pero esto acaba de suceder y aún estoy temblando.
Trabajo como shift mánager en un restaurante llamado Arby's en houston TX, me transfirieron ahí recientemente,  y por lo que se es un edifico nuevo, tiene cerca de dos años.
Usualmente trabajo en la mañana y tardes, pero A veces me toca cerrar el lugar, y hoy fue uno de esos días.
Los domingos no es usualmente ocupado, así que solo tres personas cubrimos el turno de la noche, uno en la cocina, otro en el frente y otro en Drive thru, (ventanilla donde pasan los autos), en esta última estaba yo, a las 10 se fue mi cajera del frente ya que el lobby se cierra a esa hora y el Drive thru se queda abierto hasta las 11.
Para no hacer muy larga la historia, nos quedamos dos personas, el cocinero y yo, Nelson es un hombre mayor de ya unos 60 años, es muy amable, pero el vive solo con su madre, una señora mayor, y por desgracia alrededor de las 10:30 Nelson recibió una llamada, su madre había tenido un accidente y estaba en el hospital. Yo entendí perfectamente la situación y le dije que se podía ir, que yo podía cerrar sola ya que solo faltaba limpiar los pisos, la cortadora y hacer el papeleo.
Nelson se fue a eso de las 10:40 y yo me quedé sola, no hubo ningún cliente desde esa hora hasta las 11 así que no tuve ningún retraso en hacer toda la limpieza, y para apenas entradas las 11 ya había terminado de limpiar y solo faltaba el papeleo.
Me fui a la parte de atrás donde estaba la computadora y comencé a meter toda la información en el sistema y cosas del estilo.
(Aquí cabe aclarar que yo tengo audífonos bluetooth y usualmente siempre llevo uno puesto para escuchar música.)
Mientras estaba en la computadora escuche un ruido, era como si alguien hubiera movido una caja, me extrañe un poco, pero no le tome mucha atención al principio, ya que pudo ser que estaba mal acomodada en los estantes y se haya movido sola, o eso pensé para tranquilizarme.
Seguí en lo mismo y hasta subi un poco el volumen de la musica, recuerdo que vi la hora en el reloj de la computadora y ya eran las 11:22, ya solo faltaba que metiera los depósitos cuando escuché un ruido fuerte y claro; alguien había golpeado la puerta del refrigerador, pero desde adentro.
(Otra cosa que hay que aclarar, es que es uno de esos refrigeradores enormes que es literalmente un cuarto entero y tiene una pesada puerta de metal que solo se puede abrir por fuera, accionando un seguro y luego jalando la manija.)
Me quité los audífonos y voltee hacia la puerta muy extrañada, en ese momento traté de pensar en una explicación lógica, ¿había alguien más? ¿Se habían metido a robar?
Inmediatamente saqué de mi bolsa una pistola eléctrica que siempre cargó conmigo, y me levanté de la silla, pero apenas di un paso, se escuchó otro golpe, y luego otro y otro, eran golpes muy fuertes, como si alguien tratara de salir de ahí desesperadamente, a este punto sentía que mi corazón se iba a salir.
Sostenia mi taser con fuerza en mi mano y grité: "Quien quiera que seas! No te voy a dejar salir y voy a llamar a la policia!" Y seguido de esto, presione el botón que activa el taser y hace ese horrible sonido de electro shock, hice esto para hacerle saber a cualquiera que estaba ahí, que yo estaba armada y que no le tenía miedo.
En ese momento los golpes pararon y yo no dejaba de mirar a la puerta, estaba por sacar mi celular de mi bolsa del pantalón cuando las luces del lugar comenzaron a parpadear, eso jamás, JAMAS, había pasado antes, de un momento a otro se apagaron definitivamente y los golpes regresaron, incluso pareciera que eran más fuertes, no aguanté más, lo único que pude hacer fue tomar todo el valor que tenía y corrí hacia la puerta trasera que estaba a unos metros detrás de mi, salí corriendo del lugar y ni siquiera tomé mi bolsa, ni nada, solo corrí lo mas.rapido que pude hacia mi camioneta y me alejé lo más rápido posible con lágrimas entre los ojos.
Se que mañana voy a estar en problemas con mi manager general, por que ni siquiera cerré la puerta detrás de mi y además se que no me va a creer esta historia, pero se las platicó a ustedes aún que se que no es algo sumamente aterrador pero es lo más horrible que me ha pasado. Y hasta donde yo se, otros compañeros se han quedado hasta después de las 12 y nunca nada extraño les ha pasado...
Si fue algún ladrón con una mala broma, les haré saber, además de que mañana les adjuntare fotos del lugar para que se den una idea de la situación,  también cabe aclarar que nunca antes me había pasado algo así, había escuchado algunos ruidos extraños en casa y nada más, pero nunca nunca algo así de fuerte.
Por ahora solo voy a tratar de calmarme, por que no creo que me.sea posible dormir. Gracias por leer.
[3/3, 02:56] +52 1 951 342 9282: 𝗟𝗔 𝗠𝗔𝗥𝗜𝗣𝗢𝗦𝗔 𝗗𝗘 𝗟𝗔 𝗠𝗨𝗘𝗥𝗧𝗘.

Dice la creencia que al matar una de estas mariposas nocturnas se dicta una sentencia de muerte puesto que pasando los días la persona se muere. O si vez en tu casa una de estas, y es de noche, anuncia la futura muerte de un familiar o de algún vecino.

Se cuenta que cierta vez había un hombre, el cual no era creyente de los mitos, ni de las leyendas, mucho menos creía en el famoso mito de la "Mariposa de la muerte".

Para su desdicha esa misma noche llegó a su casa una mariposa nocturna, la cual era de color negro, café y gris. Esta mariposa era del tamaño de la palma de su mano y reflejaba unos círculos siniestros dibujados como si fuesen dos ojos.

Entrando la mariposa se poso en el techo de su casa, el hombre al verla ignoro todo mito o creencia y sin pensarlo dos veces la mató, sin recordar de lo que le habían dicho días antes sobre la mariposa.

Aliviado por lo que había hecho, el hombre se fue a dormir diciendo: "No pasa nada, todo esta bien". Pasando los días, saliendo de su casa como siempre lo hacía, casi cruzando la pista, no se fijó y un carro lo atropello rápidamente, matándolo instantáneamente.

La historia de este hombre se hizo conocida y de esta manera muchas personas empezaron a temerle a esta creencia  y a todo lo que se decía sobre la supuesta "Mariposa de la Muerte"💀
[3/3, 22:58] Mitsuomi WOLF: La intrusa en la morgue.

Esta historia le ocurrió a mi padre hace unos años, cuando se desempeñaba como guardia de la morgue en un importante hospital general del bajío, en el centro de México.

Mi padre era policía, y se le asignó el cuidado de la morgue en una época donde por la violencia de la guerra contra el narco; llegaban varias víctimas durante las noches. Había ocurrido que comandos armados entraban a los hospitales para rematar a sus objetivos si es que estos habían sobrevivido, a extraer cuerpos de sicarios o simplemente con motivos de intimidación.

Era una noche cálida de verano, justo en medio de la famosa canícula; y mi padre estaba cubriendo el turno de las 11 de la noche a las 6 de la mañana junto a otro compañero a quien llamaré Miguel. Mi padre se encontraba afuera del hospital, tomando un café a eso de las dos de la mañana cuando recibió una llamada de Miguel en el radio.

Miguel le explicó que un empleado de mantenimiento había estado trapeando un corredor cerca de la morgue cuando alcanzó a ver a una silueta corriendo de un lado a otro al final del pasillo. Sin saber qué hacer, llamó a los elementos de seguridad y no tardó mucho para que mi padre se reuniera con Miguel y el empleado les diera su testimonio.

Pensando que podía tratarse de algún miembro del crimen organizado, los dos entraron al sótano del hospital y anunciaron su presencia; pidiéndole a quien estuviese dentro, que se rindiera y saliera con las manos en alto. Nadie les respondió, y más sorprendente aún, no había rastros de que alguien hubiese entrado por las otras puertas que conectaban con el piso superior del hospital.

Se dividieron para cubrir más terreno y mi padre se encontraba subiendo las escaleras al primer piso cuando recibió una llamada de Miguel; que le decía que había visto al intruso correr a lo lejos, y que se trataba de una mujer. Luego de reunirse, Miguel y mi padre corrieron en dirección al pasillo por donde había desaparecido la mujer; y fue ahí que la vieron cerca de un corredor poco iluminado.

La mujer estaba frente a una puerta gris, de metal. Las luces en esa área del hospital fallaban mucho, y a esa hora se encontraban apagadas; por lo que no pudieron verla claramente. De lo que se distinguía, iba desarmada y llevaba un vestido que le llegaba abajo de las rodillas, zapatos de piso y una cabeza llena de esponjado cabello negro y le cubría las facciones.

Miguel le habló a la mujer, preguntándole quién era.

No hubo respuesta. En lugar de ello, la mujer abrió y entró a la habitación; azotando la puerta detrás de sí. Le tocaron y gritaron que abriera, sin respuesta alguna. La mujer había asegurado el cerrojo, así que la única forma de abrir fue llamar a mantenimiento y pedirle las llaves.

Cuando el empleado de mantenimiento llegó y escuchó lo que había ocurrido, les lanzó una mirada de confusión y preguntó si estaban seguros de lo que había ocurrido. Mi padre le dijo que sí, a lo que el empleado le respondió que era imposible; pues esa habitación no tenía forma de cerrarse desde adentro.

De cualquier forma, les abrió y los dos entraron apuntando con sus armas. Llevaban linternas, así que barrieron cada centímetro de la habitación con ellas en busca de algo; pero no había rastro alguno de la mujer o de cualquier cosa fuera de lugar, más allá de un olor desagradable y dulzón que mi padre no pudo identificar en un principio; pero le causó bastante repulsión.

El empleado de mantenimiento entró después de ellos y encendió las luces de la habitación. Efectviamente, el lugar estaba vacío con excepción de algunas herramientas en anaqueles y dos planchas de metal. Una estaba vacía, y la otra cubierta con una sábana y lo que parecía ser un cuerpo.

Ahí estaba la mujer, oculta y haciéndose pasar como un cadáver en el área de la morgue. Mi padre se acercó a ella, diciéndole que todo había terminado y que era mejor rendirse. Al aproximarse, percibió de nuevo el aroma; esta vez más fuerte. Era el olor de un cadáver.

Al retirar la sábana, mi padre sintió como se le encogía el corazón y Miguel dejó salir una maldición bastante fuerte.

Ahí, bajo la plancha y ya con rasgos de lividez cadavérica; estaba esa mujer. Desnuda, con el esponjado cabello negro hecho una pasta y enmarcando su rostro; acrecentando aún más el aspecto tétrico de sus mejillas demacradas y las venas oscuras en ellas.

La etiqueta atada en el pulgar del pie derecho decía que había muerto cuatro días atrás.
[3/3, 23:32] Mitsuomi WOLF: ERES LA PEOR

Con ocasión de la fiesta de Halloween, la maestra les había dicho a los niños que dibujaran en un papel el monstruo más terrorífico que hubieran visto jamás. Todos los niños dibujaron monstruos “normales”, salvo Martita, una niña algo extraña, que dibujó a un hombre normal.

La maestra le preguntó quién era y ella respondió con toda tranquilidad:

-Ese es mi papá. Es el monstruo más terrorífico que conozco.

La maestra se quedó tan sorprendida por esa respuesta que no se atrevió a decir nada. Pero, cuando terminó la clase, le envió un mensaje a la madre de Martita, para comunicarle lo que había hecho su hija e insinuarle que tuviera cuidado con su marido, pues quizás estuviera casada sin saberlo con un maltratador de niños.

Aquella misma tarde, cuando la maestra abandonó el colegio para volver a su casa, fue aplastada junto con su vehículo por un monstruo aterrador, que apareció de repente y se desvaneció sin dejar rastro antes de que llegara la policía.

Poco después, la mamá de Martita llegó a su casa y le dijo a su hija:

-Martita, estoy enfadada contigo. Por culpa de tu dibujito tuve que matar a tu maestra antes de que descubriera que nuestra familia no es humana.

Además, me has ofendido. Le dijiste a esa imbécil que papá era el monstruo más terrorífico que conocías, cuando yo soy mucho peor que él.

Martita dijo tranquilamente:

-Ya lo sé, mami. Pero es que, como tú puedes cambiar de forma, no sabía cómo dibujarte.

Créditos al autor