~13~

-Narra Sesshomaru.-

¿Este humano es su padre? Más le vale que no se le acerque por qur no respondo a lo que pueda hacer.

- ¿No vas a saludarme? - pregunto él desquiciado mientras extendía los brazos para que ella fuera a abrazarlo, mire a Kagome, ella estaba por estallar en lágrimas, tenía el seño fruncido y dejaba ver sus hermosa dentadura en una mueca de enojo. Me acerque a ella y la atraje hacía mi cuerpo, la envolvi en un abrazo. Mi orgullo ya ni existe cuanndo estoy a su lado, además prometí cuidarla, serle fiel y sobre todo amarla, aunque no se lo allá dicho, yo lo cumpliré.

- ¿Dejas qué otro hombre te abrace, en vez de tu padre? - dijo cruzandose de brazos y hablando en tono serio.

- ¡Tu no tienes ningún derecho a acercarte a ella! Humano despreciable.- me miro con burla, para después decirme.

- ¿Humano? Te recuerdo que todos somos humanos.- en ese momento le sonreí maliciosamente, kagome me miro y asintió, mis ojos se tornaron rojos, su expresión mostro sorpresa, pero esto recién empieza, empecé a transformarme, él me miro con miedo, se alejo varios pasos, agache mi cabeza hacía él.

- ¡E..ER..ERES UN PERRO GIGANTE! ¡HIJA ALEJATE DE ESE MONSTRUO! ¡NAOMI, LLAMA A PROTECCIÓN ANIMAL! - sus gritos me molestaron, salte sobre él y aplaste su cuerpo evitando su cabeza, con mi pata derecha, él intento a toda costa zafarse de mi. Mire a Kagome, ella me hizo una seña para que lo soltara, me contuve de matarlo o hacerle algo, ya que no quiero dañar los sentimientos de mi Miko. Apenas lo solte y se alejo mucho más de mi, cuando se pudo levantar yo ya estaba en mi apariencia humanoide.

- ¿Algo que decirme, humano? - él nego rápidamente, Kagome rio por lo ocurrido recién.

- ¡¿No le vas a decir nada?! ¿Te vas a reír de mi solamente? ¿Qué haces al lado de esa bestia? - Kagome volvio a estar seria, deje salir un gruñido y él hombre se calló. Me miro asustado y después miro a Kagome con enojo.

- ¡Deja de mirarla! - ya me estaba fastidiando, ahora ya no me importa si ella se enoja conmigo,  matare a este hombre si se le acerca.

- ¿Te molesta que mire a mi hija?
- Humano, vuelves a decir que es tu cachorra y no reacciono a mis actos. - le mostre mi mano izquierda que empezó a enmanar veneno, él me miro incrédulo, entonces agarre una ardilla y la toque con la mano que tenía mi veneno, la ardilla se desintegró en ese momento, solo se escucho los chillidos de dolor del animal para que después unos sollozos aparecieran, mire a Kagome, ella tenía sus manos tapando su boca y lágrimas cayéndose de sus ojitos color chocolates. Me acerque a ella e intente abrazarla (obvio que ya no tenía el veneno) pero ella se metió adentro. Mire al humano que estaba allí, este estaba asustado, se notaba por su expresión y cambio de olor, me acerque a él con mi velocidad sobrehumana, no le di tiempo a irse que ya lo tenía agarrado del cuello de su ropa.

- Si la llegas a tocar de cualquier forma. ¡Te mataré! ¿Entendido? - él asintió rápidamente. Lo solte dejando que su cuerpo caiga al suelo sin ninguna suavidad. Volví a entrar a la cabaña donde estaba Kagome, empecé a seguir su olor hasta una habitación que se encontraba al fondo de todo, fui allí y entre sin tocar, ella se sobresalto al escuchar abrirse la puerta y rápidamente se secó las lágrimas pero, al verme solo suspiro y miro a otro lado, la luz estaba prendida, la habitación era de color rosa, tenía muchas animales chiquitos de muchos colores, creo que se llamaban ¿Peluches? O algo así, había muchas cosas de muchos colores, la cama en la que ella esta sentado, era mas chiquita que la que ella usa actualmente. Me acerque a un mueble que tenía una imagen de la madre de Kagome mucho mas joven, él padre también joven y una niña entre medio de ellos, la imagen era un papel que era rodeado de un marco pintado de azul con varios corazones color rojo.

- Soy yo de niña. - casi dejo caer la imagen de la sorpresa ¿Estaba hablando?  ¿Por qué no lo hizo antes? La mire con clara sorpresa, no lo iba a disimular, ella suspiro y dijo.

- Soy una sacerdotisa, me autocure sola.
- ¿Por qué no me contaste antes?
- Por qué lo acabo de hacer.
- ¿Y por qué llorabas?
- Son muchas pegruntas ¿No crees?
- Solo responde esta última.
- Es por que me duele volverlo a ver después de todo lo que me hizo.- me dijo volviendo a llorar, la abrace de inmediato, ella correspondió a mi abrazo, después de varios minutos, nos separamos, agarre el mentón de ella y no le di tiempo para que protestara, ya que pegue mis labios con los suyos, tardo en corresponderme pero lo hizo, empezamos con un beso tierno, hasta que mordi sus labios para meter mi lengua, pero cuando le mordi, ella empezó a soltar un poco su poder espiritual, este empezó a quemarme, me separe rapido de ella, me pare cerca de la ventana, la mire y ella volvio a llorar.

- ¡No! ¡No! ¡No! ¡No! ¡Ya no por favor! ¡Ya no! - llevo sus manos a sus oidos tapandolos mientra negaba y decía eso.

- Ya, perdón, no fue mi intención. - me acerque y me arrodille enfrente de ella, agarre sus manos suavemente e hice que me mirara.

- Te prometo que no lo vuelvo hacer. Pero ¿Por qué te pusiste así, amor?- me encanta llamarla "Amor" ya que ella se sonroja y además yo le dije a mi madre que cuando encuentre a la persona correcta, la llamaría así.

- Esta era mi habitación cuando era una niña. Aquí fue en donde él me lastimo muchas veces. En este lugar quedo mi infancia.

Ella volvio a llorar, ya no puedo verla así, cerre los ojos con furia, la solte y rápidamente me levante, iba a matar a ese desgraciado, ya no soportaba su presencia,  Kagome entendió lo que iba a hacer y fue detras mío tratando en vano de pararme, fui a ese lugar llamado "Cocina" y allí estaba él con un cuchillo y en el piso estaba Naomi llorando y pidiendo que por favor no la dañe, cuando él estaba por atacarla, con mi mano que volvía a enmanar veneno tome su brazo quemando su piel, siendo humano empezo a disolverse rápidamente, el forcejeo en vano, cuando sentí su hueso pare, el tomo su brazo mientras se retorcia de dolor, Kagome se acerco rápidamente a su madre para ver si tenia algo, por suerte no tenía nada, volví mi vista a él, este estaba de espalda, mientras se quejaba, me acerque a él y con mi latigo le di en la espalda, se quejo por el dolor que le estaba ocasionando, pidió para que parara pero solo hice caso omiso y empecé a darle varios latigazos que lo hicieron perder mucha sangre, lo tome del cuello y comencé a soltar mi veneno quemando su cuello, su sangre se esparcia por todo el lugar, cuando dejo de moverse, supe que lo mate, que aburrido es matar a los humanos, mueren muy rápido.
Me acerque a Kagome y su madre para ver si estaban bien, ellas estaban afuera, las dos me miraron con lágrimas en sus ojos.

- Ti..tienes sangre en tu ropa.- me dijo la madre. Yo mire mis mangas y el resto de mi kimono y si, estaba lleno de sangre, solo lo ignore y me acerque a Kagome, ella me abrazo con fuerza y yo correspondi de inmediato. Ahora ellas podra ser feliz sin que aquel hombre las moleste.

- ¿Qué le hiciste? - me pregunto ella sin soltarme.

- Termine con su insolencia. - Kagome levantó su cabeza para mirarme, ella entendio a que me refería, se solto de mi y fue adentro, yo solo me quede afuera de brazos cruzados, sabía que no le iba a gustar lo que iba a ver, mire de reojo a la madre que estaba parada allí con una mano tapándose la boca y la otra tocandose el cuello, me miro y yo asenti, ella me sonrió, lo cuál me sorprendió.

- Gracias por acabar con nuestro sufrimiento. - asenti sin decir nada, cando escuche el grito de Kagome, supuse que ya vio el cadáver, entre rápido al igual que la madre, Kagome estaba apoyada contra un cofre blanco donde guardan su comida. Su madre miro lo que estaba viendo su hija, al ver el cadaver cerro los ojos y agacho su mirada.

- ¿Estas bien?
- Si, no te preocupes, yo todos los días veo el cadáver de mi padre en la cocina. - me lo dijo con clara ironía, la mire con el seño fruncido, suspire y me acerque a ella, coloque mi mano sobre su hombro y....

---

¿Qué les pareció?

¿Están felices de qué alla muerto ese hombre?

¿Qué haran con el cuerpo?

¿Naomi le dire a Sota?

¿Donde se encontrara Sota?

¿Sesshomaru se volvera loco con el caracter de su Miko?

-Sesshomaru: Ya me volvió loco hace rato. Lo peor es cuando esta en "Sus días" allí, hasta a mi me da miedo.
-Kagome: ¡Abajo¡ Perro malo. Yo soy un angel. Nadie me teme.*todo se enconden detras de la escritora mientras sujetan un crucifijo. *

Bueno espero que les allá gustado y feliz año nuevo *-* corazones.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top