10. Basta.
Leer la nota del final. Tacos gratis si lo haces 🌚
🌹
Cierta tarde, caminaba, solo, a casa. Alexy siempre tenía algo que hacer los viernes en la tarde, con sus amigas, abandonando a su desamparado hermano. Bueno, tal vez soy un jodido exagerado, pero estar solo un viernes en la noche en casa aburre más que los doramas de romance que ve Alexy a la madrugada (de esos que no te dejan pegar el ojo por las incesantes escenas de llanto).
Quería llamar a alguien, tal vez, para no sé, una película o algo así. Reflexionando me di cuenta de que solo tengo a Alex y Nathaniel. Por supuesto que también a Carolina pero mis aires de galán estaban en los suelos en ese momento, con todo mi ánimo en general a decir verdad.
El parque es un lugar bonito después de todo, empecé a pensar, aunque sea ruidoso y lleno de lodo e insectos desagradables (y libre de tomacorrientes), es muy lindo.
Después de un largo, larguísimo rato de dar vueltas por ahí como idiota, ví un perrito, totalmente negro, y con unas barbas que le hacían ver gracioso. Al parecer su pelota se había estrellado contra mi pierna. La tomé entre mis manos (bah, estaba majada) y se la lancé de vuelta, y debo aceptar que me sentí realizado cuando me la trajo de vuelta. Pero no podía quedarme jugando con él, alguien podría estarle buscando y no quería un problema por ser acusado falsamente de "secuestra perros". Me agaché para ver su placa, por el frente decía algo como i love my human, le di vuelta para encontrarme con su nombre, Bache.
No me resistí a darle unas caricias en la cabecita, cosa que no debí haber hecho porque tenía una penetrante mirada en mi cuello, y he de imaginar que era del dueño(a) del perro. Efectivamente, así era. Pero no esperaba encontrar una cara así de familiar.
— ¿Armin? —ladeó su cabeza, tomando el cachorro en brazos— ¿Tú, en el parque?
— Eso mismo digo —reí— Pensé que te gustaban los gatos.
— Mi pequeño felino necesitaba un amigo —ella restregó su mejilla contra la cara del animal— y esté me recordó a ti, se veía tan feito y desamparado
— ¡Hey! —me quejé. Ella solo siguió burlándose.
Recordando, en mismo momentos de reflexión, nunca había tenido un momento tan familiar, tan acogedor con Carolina. Era una conversación amena, fluida, graciosa, y me gustaba mucho. Bueno, me gustaba porque era con ella. Me hacía feliz pensar que, aunque lo olvidará, volviera a enamorarse de mi. Y yo cada vez enamorándome más de ella.
— ¿Juegas con nosotros? —su voz me sacó de mis cavilaciones— el doctor dijo que debía salir más, y reír más, y con esa cara de tonto que pones es muy fácil. Acompáñanos.
Es por tu culpa, pensé. Asentí, miré mi mano y luego le extendí la pelota, ella negó mientras dejaba en perro en el suelo y sonreía.
— Lanzala, así funciona este juego, genio.
— Perdón, señorita sabionda de juegos de perros —volví a reír, ella infló sus cachetes en un puchero.— Ya ya
Y la lancé. Bache corrió a toda velocidad y me la trajo de vuelta.
Nos turnamos para tirarla un par de veces más. Era cansado hacerlo seguido, así que simplemente me senté en el césped, ella me imitó, con el cachorro, que respiraba agitado con su lengüita afuera, en su regazo.
— Fue divertido —murmuró, mimando a su mascota.— Gracias...
— No es nada —le sonreí, y extendí mi mano hacia la cabeza del cachorro— Sabes que me gusta pasar tiempo conti---.
— Basta.
Me interrumpió. Por unos segundos le miré confuso, ella solamente evitó mi mirada, clavando esta en unas personas que se veían jugar a los lejos.
— No.
Respondí igual de autoritario, aunque muriendo de los nervios por dentro.
— Eres masoquista o algo —suspiró rendida— El querer que te recuerde solo te hace daño y ahí sigues.
— No soy de rendirme fácil —me encogí de hombros, siguiendo las caricias al animal.
— Me hace mal verte así. —mi punto débil, ah— lleno de esperanzas y no sé, simplemente no me gusta, basta.
— Dije que no, Carolina —busqué su mirada— No hago que me recuerdes, hago que me quieras de vuelta. Porque los sentimientos son imborrables ¿Sabes?
Se sonrojó. Qué orgulloso estoy de mí mismo. Quiero era imagen de fondo de pantalla. Guardando en mi galería de la mente. Click.
— Tonto —rió— deja de pensar en voz alta.
Mierda.
🌹
Adivinen quién está de vuelta JAAAAAAAA si soy yo xd
Hace mucho que no se me ocurría nada para esta fan fic, y después de pensarlo mucho decidí que esto va a a ser mucho Fluff de Armin recordándole todo lo que pasaron y balblabla. Así que serán caps más cortos, y concretos, para actualizaciones más rápidas
Así que lamento avisar que no tendrán su drama (?)
O tal vez si, depende de lo que sugieran ustedes, corazoncitos de melon hermosos 😘
Gracias por el apoyo y nos leemos pronto
(Comenten si quieren drama o no prros)
Bais 💜💚
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