Capítulo 7

-muy bien, todos han hecho un buen trabajo, mañana comienza la expedición y los voy a extrañar- la diosa del engaño hablaba, con un tono algo serio poco usual en ella - ¡por eso vamos a aprovechar el tiempo y celebremos! – dijo volviendo a su actitud de siempre

Con un tarro de alcohol en mano todos en aquel bar al que frecuentaban tan seguido sabían que la diosa solo habia buscado nuevamente una escusa mas para emborracharse, pero esta vez no estaba sola

-la tabla tiene razón- hablo Hestia ya habiendo comenzado a beber - ¡celebremos!

- ¿¡a quien llamas tabla, enana!? – loki con molestia volvió a enfrentarse a Hestia, la cual igualmente respondió

La anfitriona de la Fertilidad estaba llega, únicamente ocupada por los miembros de ambas familias las cuales habían reservado todo el lugar, el motivo era sencillo, darles a todos sus miembros una buena cena antes de adentrarse a las profundidades del calabozo y de esa forma tengan la energía suficiente para enfrentarse a los monstruos

Naturalmente ningún aventurero tenia permitido tomar alcohol, pero eso no impidió que sus respectivas diosas si lo hicieran y a lo grande

-no puedo considerar esto una celebración sin tomar alcohol- hablo Gareth mientras veía con algo de envidia a las diosas competir para ver quién podía tomar más alcohol

-esto de acuerdo con eso- hablo welf a unos cuantos asientos -cuando regresemos quisiera celebrar de verdad con una buena cerveza

-jaja eso me gustaría a mí también- con algo de humor el enano y el herrero hablaban - ¿Qué dices si hacemos una competencia como las diosas cuando regresemos?

-hecho

-haruhime-san, tu cola si que es muy bonita- anakitty estaba sentada al lado de ambas chicas orientales, conversando alegremente -que envidia

-n-no es verdad anakitty-sama- con algo de nervios ella respondió -la suya si lo es... la mía por otro lado...

-no se menosprecie así haruhime-dono- mikoto intervino -tiene que tener confianza en si misma para cuando se le declare a b...

- ¡mikoto-sama! - rápidamente haruhime habia tapado la boca de su amiga, llena de vergüenza

- ¿a haruhime-san le gusta alguien? – anakitty se acerco a las dos amigas -cuéntame, puede que te ayude

-tione-sama ya están todo el equipo guardado y listo para tomarlo a primera hora eh irnos ¿cierto? - lili hablaba con la hermana amazona en otra parte del bar

-ya te lo dije, si lo está- con algo de molestia respondió

-solo quería asegurarme- lili la miro y continúo hablando -de ese modo puedo darte todo el crédito a su capitán y que te elogie por tu buen trabajo

- ¿¡enserio!?- su actitud habia cambiado de golpe - ¡gracias!

A lo largo de aquellos días de preparación ambas familias se habían vuelto mas unidas, al punto que algunos de sus miembros habían entablado lazos de amistad, ya no todo giraba alrededor del conejo, el cual por su parte estaba en la barra del bar, disfrutando de su platillo

-bell-san- con una sonrisa syr se acerco al chico junto a su mejor amiga elfa - ¿esta deliciosa tu comida?

-sry-san, ryuu-san- con una ligera sonrisa el chico las recibió -sí, está muy buena

-me alegro, yo misma la prepare para darte energía para tu expedición de mañana

con gran orgullo sry se atribuyó la creación de la cena del conejo, por otro lado, ryuu solo volteo la cabeza un segundo, después de todo ella habia sido la responsable de probar antes los diferentes intentos de sry

-ryuu-san ¿estas bien?

-s-si no se preocupe cranel-san estoy bien- rápidamente la elfa se recompuso y lo miro fijamente -con respecto a mañana, no se confié solo por ir con la familia loki, nunca debes bajar la guardia cuando estas en el calabozo

-no te preocupes ryuu-san, tendré cuidado- el chico sonrió -muchas gracias por siempre preocuparte por mi

La elfa sonrió, sin percatarse que de sus mejillas un muy sutil tono rojizo se hizo presente, aquello fue notado por otra joven elfa a la distancia

- "¿Por qué? ¿Por qué siempre estas rodeado de puras mujeres?"

pensó lefiya mientras apretaba ligeramente su vestido, ignorando a riveria la cual le hablaba, con el ceño fruncido la joven elfa solo veía como siempre aquel conejo atraía siempre a mujeres hermosas a su lado

volvieron a sentir aquella sensación en su corazón, para la joven hada ya no habia ninguna duda...ella estaba celosa 

-bell...

Una nueva voz llamo al chico, mientras se acercaba hacia él, ignorando a las otras dos mujeres que estaban a su lado y poniendo en un mayor conflicto el corazón de lefiya

- ¿ais-san? - con confusión el chico la miro, mientras ella con una mirada un poco mas expresiva de lo habitual pensaba sus palabras - ¿sucede algo?

-mañana...no estoy en tu grupo- dijo la princesa, con la mirada algo agachada -ten cuidado...tu y lefiya tengan cuidado- la chica continúo hablando, sorprendiendo a varios por esto -si algo ocurre iré a ayudarles- la princesa se acerco un poco mas al chico mientras lo miraba fijamente a los ojos - ¿cuándo regresemos quieres volver a entrenar conmigo? – con un ligero sonrojo la princesa pregunto

El rojo y el dorado se encontraron, pero ya era demasiado tarde, el chico ya no estaba nervioso, el chico ya habia pasado por muchas cosas, el chico sencillamente... prefería ver unos ojos azules

-ais-san, yo...

Bell iba a responder, pero en eso una mano tomo la suya, dejándose llevar por el momento, sin importar que todos la vieran, la joven elfa habia llegado y tomado la mano del conejo delante de aquellas tres mujeres

Ante eso, bell instintivamente sonrió y su mano apretó la de lefiya con un poco mas de fuerza

-vaya, parece que las integrantes de la familia loki les gusta interrumpir a las demás personas- syr hablo, con un tono algo molesto en su voz, pero logrando camuflarlo perfectamente - ¿se te ofrece algo? - ella miro como las manos de ambos seguían unidas -nosotras solo estábamos dándole nuestro apoyo a bell-san

-eso no es necesario, yo...- aun sujetando con firmeza la mano del conejo, con su rostro poniéndose un poco rojo, ella hablo, con un tono fuerte, casi pareciendo una declaración - ¡estaré con bell en todo momento apoyándolo!

Aquellas palabras resonaron en todo el bar, haciendo que todos se quedaran en silencio, haciendo que todos los miren

Lefiya no comprendía porque dijo eso tan alto, y ahora que todas las miradas iban dirigidas hacia ellos se puso nerviosa ¿Qué debería hacer? Se preguntaba constantemente, ¿acaso debería revelar su tipo de relación? ¿acaso debería besarlo delante de todo el mundo? ¿demostrarle que ellos eran una pareja?

Espera ¿besarlo? ¿pareja? Ante esa sola idea se lleno de miedo, no por el hecho de hacerlo delante de todo el mundo, sino por la reacción de bell, después de todo lo que han hecho el uno con el otro nunca han hablado de ese tema

Ella no sabía que eran realmente

Pero en ese instante que bell fue nuevamente su soporte

-lo siento syr-san, pero habia olvidado que acorde hablar con lefiya sobre nuestra estrategia que usaremos a partir de mañana- él se levantó de su asiento, sin dejar de sostener la mano de la chica - ¿nos vamos?

El chico solo le sonrió a la chica, una sonrisa diferente a las que les daba a las demás, aquella sonrisa exclusiva de lefiya parecía ser mucho más radiante

-s-si...

Fue todo lo que pudo decir lefiya, saliendo del bar con bell tomando su mano, ante la atenta mirada de todos y una ais que estiro su mano, solo viendo la espalda de ambos mientras la dejaban atrás

Welf sostenía a una alocada Hestia la cual afortunadamente o desafortunadamente ya estaba borracha, mientras que lili lo pateaba sin cesar, por su parte tanto mikoto como anakitty consolaban a una decaída haruhime, asegurándole que todo debe ser un malentendido, después de todo muchos en la familia loki ya intuían lo que sentía lefiya por ais

Por su parte la diosa del engaño solo levanto una ceja, intuyendo algunas cosas, levantándose de su asiento, ella genuinamente quería confirmar algunas cosas

Los minutos pasaron, minutos en los cuales ninguno decía nada, solo caminaban con sus manos aun entrelazadas, ya era muy noche, por eso no habia nadie para verlos, aunque no era que les importara realmente

Una vez llegaron a un pequeño parque bell se detuvo, giro levemente su cuerpo para ver a la pequeña hada algo decaída, fue así que comenzó su conversación

- ¿estas bien?

El chico no recibió respuesta alguna

Lefiya solo apretó ligeramente el agarre de su mano a la de bell

- "¿desde cuándo los papeles se invirtieron?"- llena de confusión la chica solo pensaba –"estoy actuando como el principio, cuando bell y la señorita ais se iban a entrenar a esa muralla"- la chica pensaba, llegando a una sola conclusión –"en aquel momento estaba celosa, pero estaba celosa que alguien mas se acercara a la señorita ais, pero ahora..."- su agarre se hizo un poco más fuerte –"estuve celosa cuando vi a todas esas mujeres con bell"

Un mar de pensamientos inundaba la mente de lefiya, su corazón palpitaba con fuerza, ella levanto lentamente la mirada, lista para responderle al chico, pero este se le adelanto

-lo siento

- ¿porque te disculpas? - con gran confusión, mientras agachaba nuevamente la cabeza y su cabello cubría parte de su rostro -tu no hiciste nada, soy yo la que debería disculparme con...

-precisamente por eso mismo- la interrumpió, tomando nuevamente la palabra -yo no hice nada- bell soltó la mano de lefiya, acción que la molesto ligeramente adentro de su mente -no hice nada para que syr-san, ryuu-san y ais-san no se acercaran tanto a mi- bell delicadamente llevo su mano al rostro de lefiya, haciendo que esta lo mirada fijamente a los ojos y acomodando su cabello logrando ver su hermoso rostro -estabas celosa ¿cierto?

- ¿yo celosa? Puff jaja- comenzando a reír, pero de una forma fingida -por supuesto que no estoy ce...

La chica fue silenciada por un repentido beso del chico, al inicio ella se resistió, pero a los pocos segundos sencillamente se dejo llevar, aquellos besos la cautivaban cada vez más, fue por eso mismo que ella misma correspondió aquel beso y lo profundizo al abrazar al chico desde su cuello, todo mientras bell la abrazaba desde su cintura acercando su pequeño cuerpo al suyo, haciendo que sus pechos se pegaran a bell, pero a ninguno les molesto

- ¿ya te sientes mejor? – pregunto el chico, separando un momento sus rostros, pero no sus cuerpos

-un poco- respondió la chica, mientras sonreía dulcemente -gracias

-cuando te sientas mal solo dímelo- el chico pego su frente con el de la chica, mientras ella hacia un pequeño puchero por pensar que era tratada como una niña 

-no me trates como una niña

-nunca lo hare

Después de esas palabras sus labios volvieron a unirse, para este punto ya eran dependientes uno del otro, el sabor de sus labios era como una droga para ellos, aquellos jóvenes se habían vuelto adictos a los besos del otro

La costumbre actuó, haciendo que bell llevara lentamente su mano a uno de las piernas de lefiya, recorriendo su suave muslo, subiendo lentamente por debajo de su falda, llegando hasta su trasero donde al instante lo apretó

~ ¡ah! ~

Un lindo gemido se escapo de los labios de lefiya, aquello no era su culpa, no del todo al menos, después de todo desde que su estadía en aquella casa termino ninguno de los dos ha vuelto a tomar el cuerpo del otro, únicamente consolándose con besos y carisias ocultos de las demás personas

-extrañaba escucharte gemir- aquellas palabras del chico solo hicieron que la chica se sonrojara muy notoriamente

- ¡tu...! - tratando de controlarse para no gritar -eres un conejo que esta siempre en celo- bell esperaba su enojo, pero todo lo que recibió fue a lefiya recostándose ligeramente en su pecho mientras lo abrazaba -lo admito, yo también extraño cuando me tocas así- giro su cabeza, y junto con su abrazo hacia que bell no pudiera ver su cara sonrojada

Ambos jóvenes se quedaron abrazados por un minuto aproximadamente, por su posición lefiya podía escuchar claramente el palpitar del corazón del chico, aquel sonido la tranquilizaba, fue después de eso que ella se separo un poco de bell, volvieron a verse a los ojos

-pero por mas que lo extrañe no quiero hacerlo en un lugar como este, sin nada de privacidad

-tienes razón- bell tomo la mano de lefiya y esta con gran alegría entrelazo sus dedos -por eso estaba pensando en un futuro comprarme una casa, justo como hizo loki-sama

-puf... jajaja- una tierna risa salió de los labios de lefiya - ¿tan desesperado estas de volver a tener mi cuerpo?

aquellas palabras hicieron sonrojar a bell, para lefiya aquello lo hacia ver mas lindo, es por eso que siempre que tenia la oportunidad lo haría sonrojar

-n-no se trata solo de eso- afirmando de cierta forma las palabras de la chica, cosa que la hizo sonrojar y aun mas cuando el chico comenzó a acariciar su mejilla -extraño que sea tu rostro lo primero que vea al despertar, extraño esos besos de buenos días, extraño preparar el desayuno mientras tu solo usas mi camisa y me abrazas por la espalda, extraño que sea tu rostro lo ultimo de vea antes de dormir juntos después de darnos un ultimo beso de buenas noches

El corazón de la joven hada comenzaba a latir con fuerza, sus labios dibujaron una hermosa sonrisa, sus mejillas se sonrojaron un poco mas mientras recostaba su cabeza en la mano de bell y sus ojos seguían viéndose directamente

Aquellas palabras la estaban poniendo muy feliz

Verdad

-ahora que estoy en mi propia sede, y en mi propia habitación lo veo todo muy grande, hay demasiado espacio, es como si faltara algo- bell uso su otra mano y delicadamente movió unos pequeños cabellos de la chica, para así tener su rostro completamente descubierto - ¿quieres saber lo que me falta? – el chico se acercaba lentamente al rostro de la chica

-dime- fue lo único que dijo antes de cerrar los ojos

-me haces falta tu

Un nuevo beso fue dado entre ellos, sin nada de lujuria, simplemente en aquel beso se trasmitían todo su cariño el uno por el otro, pese a que ninguno a dicho una sola palabra, sin saberlo ambos se las trasmitían con sus acciones 

- ¿cuándo compres esa casa les darás las llaves a tu familia? – pregunto la chica, separándose del beso, pero abrazando el brazo del chico

-las puertas siempre estarán abiertas cuando ellos quieran visitarme, pero no- respondió el chico, al mismo tiempo que comenzaba a caminar junto a lefiya -la única persona que quiero que tenga las llaves eres tu

Bell sonrió mientras el corazón de lefiya comenzó a latir con mas fuerza, la joven elfa agacho la cabeza tratando de esconder inútilmente su increíble sonrojo por aquella propuesta indirecta

Definitivamente ellos estaban llevando esto en completo desorden

¿aparte de bell existía otra persona que la haga sentir la persona más importante del mundo? Fue lo que ella se preguntaba con una clara respuesta

No lo habia

Incluso cuando estaba interesada en ais nunca llego a sentirse de esa manera, ella sabia que era malo comparar a las personas, pero aun así no pudo evitarlo, por su mente paso los momentos que paso con ais y después con bell y el chico se llevaba la clara victoria en todos los sentidos

- "¿en verdad estuve enamorada de la señorita ais? Yo nunca sentí esta inmensa felicidad cuando hablábamos, ¿espera? Eso significa que yo... ¿estoy enamorada de bell?

La respuesta era clara, era demasiado obvia, pero el hecho de haber comenzado todo esto en desorden lo hacían confuso para la inexperta elfa, aquella pregunta pronto tendría que ser respondida, tanto por su parte como por el chico, pero no ahora no

Aun así, ella sonrió, y con una gran alegría su única respuesta por el momento fue un beso en la mejilla del chico, después de eso ambos se fueron en un cómodo silencio sin saber que alguien los habia visto eh incluso alcanzado a escuchar parte de su conversación

-vaya, no pensé que lefiya y el hijo de la enana tuvieran esa relación- con los ojos medio abiertos la diosa del engaño solo veía como ambos jóvenes se alejaban - ¿de entre todas las personas tuviste que escogerlo a el lefiya? – ella no se molestó, al contrario una sutil sonrisa se dibujo en sus labios -estoy segura que esto me traerá dolores de cabeza por parte de la enana y esa pervertida- dijo para luego darse la vuelta y regresar al bar -lo lamento por ustedes mujeres, pero la felicidad de mi hija es primero

Los minutos pasaron, bell acompaño a lefiya hasta su sede, separándose un poco antes de llegar, no querían hacerlo, pero los guardias que custodiaban la entrada lo verían y seguramente lo informarían, al despedirse ambos se quedaron unos instantes en silencio, solo mirando los labios del otro

Estaban tan tentado a volverse a besar, pero con gran fuerza de voluntad lo pudieron evitar, conformándose solo con un "hasta luego" fue como ambos se separaron

Una vez el chico regreso a su sede fue salvado del interrogatorio debido a que Hestia se habia emborrachado mucho mas luego que se fuera del bar, del mismo modo todos los demás tenían que despertarse temprano, por ese motivo una vez dejaron a su diosa borracha en su habitación todos se fueron a descansar

Aquella fue una larga noche para dos chicas, pero mucho mas para una joven renard

Por su parte lefiya parecía de algo distinto, cuando llego su compañera de habitación no estaba presente, sabia que si la encontraba despierta muy seguramente la interrogaría, fue por eso mismo que intento dormirse cuanto antes

Pero las palabras y las acciones de bell aun continuaban en su mente, sin que ella se diera cuenta estaba incluso tarareando de felicidad, sus orejas tenían las puntas sonrojadas mientras estas se movían un poco

- "si se compra una casa y solo yo tendría una copia de la llave... ¿¡no me haría eso como su esposa!?- pensaba lefiya, dejándose llevar completamente por sus pensamientos –"¡esto está hiendo muy rápido!

Su corazón latía con fuerza, mientras que su mente se dejaba llevar por sus pensamientos, todo eso mientras una gran sonrisa siempre permanecía en sus labios

- "no somos oficialmente una pareja, pero después de todo lo que hemos hecho... aunque eso no me molestaría"

Por su mente pasaron todos los momentos que vivió con bell en aquella casa, después de eso se imagino en un futuro volverlos a vivir, pero ahora en aquella casa que bell quería comprar

Ser sus rostros lo primero que vean al despertar, mientras se dan un beso de buenos días 

Solo para repetir la misma escena al momento de dormir nuevamente juntos 

Pero su imaginación no termino hay, lefiya dejándose llevar por su corazón se imaginó muchas más situaciones, y todas siempre incluían a bell estando a su lado

La imagen de ella y bell estando juntos en un día tranquilos, sentados uno junto al otro, compartiendo un kotatsu mientras toman te y usaban ropa a juego la emociono 

Su mente poco a poco se iba dejando llevar, y sin que se diera cuenta aquellos pensamientos iban subiendo cada vez mas de tono, después de todo, si ellos vivirán juntos, sin nadie de su familias naturalmente podrían tener momentos más íntimos

-ya estoy en casa- dijo bell ahora convertido en todo un hombre

-bienvenido a casa cariño- dijo lefiya ahora convertida en toda una mujer, acercándose a su esposo usando nada mas que un delantal - ¿quieres cenar, darte un baño... o me prefieres a mí? - dijo suavemente mientras se acercaba 

-mmm que difícil decisión- pronunciaba bell mientras se acercaba a lefiya y le susurraba al oído -por eso lo quiero todo- con delicadeza el hombre mordió suavemente la punta de la oreja de la mujer elfa -te quiero comer mientras tomamos un baño juntos

~ ¡ah! ~ gimió lefiya mientras abrazaba el cuello del hombre, de su hombre -sabía que pedirías eso cariño- dijo eso solo para sostener la mano de bell y dirigirlo al baño -esta vez te daré un servicio especial

-no puedo esperar para recibirlo- fue lo último que dijo mientras se iba quitando la camisa, al mismo tiempo vea toda la espalda desnuda de la elfa

Ante aquella fantasía la verdadera lefiya se emociono al igual que se avergonzó, ella no supo en qué momento habia comenzado a tocarse pensando nuevamente en bell, ella quería culparlo por eso, por haberla vuelto de esa forma, pero ya tendría toda la expedición para "castigarlo"

Ella continuo con sus toques, al mismo tiempo que recordaba todas las veces que lo han hecho y algo que extrañaba pero que nunca le dirá a bell era cuando complacían al otro usando sus bocas, la sola idea de volver a hacer eso la excitaba, solo aumentando mas el movimiento de su propia mano 

Lefiya temblaba, se estaba dejando llevar completamente, no sabía cuánto más podría resistir sin volver a hacerlo con bell, sus géminos lentamente salían de sus labios, afortunadamente ella pudo escuchar como su compañera de habitación estaba abriendo la puerta

Lefiya rápidamente se cubrió completamente con las sabanas y fingió estar dormida, rezándole a su diosa que elfy se lo creyera, cosa que así paso

Con su corazón agitado lefiya solo pudo tener un único pensamiento

- "¡maldito y sensual conejo!"

La noche habia terminado y el día de la expedición habia comenzado

Ambas familias se habían reunido muy temprano en las puertas del calabozo, finn daba unas ultimas indicaciones, todos lo escuchaban con atención, o casi todos, tanto bell como lefiya se miraban ocasionalmente, aprovechando que están en medio de una multitud para disimuladamente tocarse por un segundo sus manos

Nadie se deba cuenta de eso, puesto que toda la atención la recibía el capitán de la familia loki o bueno, casi algunas si se daban cuenta de ese detalle

Las horas fueron pasando, los diferentes grupos se dividieron, todos acordaron en encontrarse en el piso 18 para descansar y pasar la noche luego de montar su campamento, el calabozo parecía estar mas activo de lo normal, pero los ya experimentados miembros de la familia loki lo sobrellevaban demasiado bien.

Aun así, muchos se impresionaron con la velocidad que bell demostraba, incluso su forma de pelear contra los monstruos les recordaba ligeramente a los movimientos de ais, lefiya escuchaba como alababan a ver, aquello la hizo feliz

Aun así, ella no se quedaría atrás

- ¡Fusillade Fallarica!

La magia de fuego fue liberada, aniquilando a los monstruos que quedaban, con el camino despejado estaban listos para reunirse con el resto de la familia en el piso 18, nadie dijo nada simplemente siguieron con su camino

Pero solo uno hablo

- ¡eso fue increíble lefiya! - con gran emoción en su voz bell se acerco a la joven elfa

- ¿eh? - con un pequeño sonrojo lefiya hablo -esto es lo normal bell, no es nada para emocionarse

-eso no es cierto- el chico negó con la cabeza unas cuentas veces -tanto tu magia como tu son increíbles- termino de hablar mientras sonreía

Ante esa imagen lefiya llevo sus manos a su pecho, sentía como su corazón volvía a acelerarse, para este punto se estaba preocupando que algún día bell le haga tener algún problema cardiaco, aun así, ella solo podía sonreír

- "ya antes me han felicitado, pero que lo haga bell lo hace mucho mejor"

Con una linda sonrisa y pese a estar a la vista de algunos personas lefiya miro a bell, ambos caminaban a la par, uno al lado del otro, fue ahí donde ella con un tono mas suave y lleno de cariño hablo

-gracias...bell

Las horas siguieron pasando, el primero grupo de la expedición ya habia derrotado al Goliat y ya estaban preparando el campamento para pasar la noche, las carpas en donde dormirían ya estaban preparadas, algunos fueron a preparar la comida, las mujeres fueron en turnos para darse un baño

ante esa noticia lefiya miro a bell directamente a los ojos, ella sabía que aquella ocasión habia sido culpa de Hermes, aun así, ella no pudo evitarlo, fue ahí que bell se acerco discretamente a la joven elfa y susurro

-aquella vez no fue mi culpa

-ya lo sé, yo...- iba a continuar, pero el chico la interrumpió

-además a la única que quiero ver es a ti

Con una gran sonrisa bell se alejo de una ruborizada lefiya, ella no sabia en que momento aquel chico habia tomado tanta confianza como para decir tales palabras

Aun así, una parte de ella le gustaba

Los minutos pasaron y ya todos estaban cenando, ambas familias interactuaban entre ellas, anakitty y mikoto hablaban con haruhime sobre algún tema que la hacía sonrojar, Gareth esta considerando probar algunas de las armas y armadura de welf le ofrecía, finn junto a riveria hablaban con lili sobre estrategias a la hora de comandar unidades

Riveria solo estaba ahí para evitar que tione malinterpretara toda la situación

Lefiya y bell comían juntos, en un punto la bebida de la chica se habia agotado, bell amablemente se ofreció a traerle más, pero ella se negó, agradeciéndole la amabilidad, levantándose dejando a bell solo con los demás miembros de la familia loki

-por cierto, bell cranel- uno de los tantos miembros de la familia hablo

- ¿sí?

- ¿Cómo hiciste para hacerte tan fuerte en tan poco tiempo?

-estuviste increíble hace algunas horas

El chico pensó, el motivo, el instante en que decidió volverse mas fuerte, un recuerdo llego a su mente, la vez en que ais lo salvo de un minotauro

Aquello parecía ser su motivo, pero eso era una mentira, el ya tenia in sueño propio antes de siquiera llegar a orario, ser un héroe, pero no se quedo solo ahí, ahora tenía más metas que cumplir, la promesa con los xenos, su revancha contra asteruis

La meta de proteger a sus seres queridos, sus amigos, su diosa, su familia

Antes que pudiera pensar en alguien mas la imagen de una joven elfa de ojos azules llego a su mente

Si

Sin darse cuenta la imagen de la princesa fue completamente remplazada por la hermosa hada con la que han compartido tantos momentos únicos

Con una sonrisa bell solo los miro y respondió

-me esforcé

Aquello pareció ser una respuesta vaga, pero todos solo asintieron, después de todo ellos mismo pensando que quizás no se enforzaban tanto en ser mas fuertes, siempre terminaban dependiendo de sus ejecutivos

- ¡oye, tomate! – bete grito sin más, llamando la atención de muchos

Bell al instante se tensó, ya habia tenido varios encuentros con aquel ejecutivo que siempre que lo veía se burlaba de él.

-no intentes lucirte, al lado de los demás inútiles sobresales un poco, pero al final sigues siendo muy débil- lo decía sin más, de forma burlona, de forma hiriente

Todos los compañeros de grupo de bell agacharon la cabeza, ninguno decía nada, incluso bell se quedó callado, él no quería comenzar una pelea

No porque tuviera miedo, el chico ya se habia enfrentado con valentía a oponentes muchos más fuertes que él, lo que en verdad lo retenía era las posibles represalias, no quería que por culpa de su pelea ambas familias dieran se separaran

Él no quería separarse de lefiya

Aquello era un miedo infundado, un miedo que nunca sucedería, pero aun así no quería arriesgarse, por tal motivo decidió que aguantaría lo necesario

- "aguanta un poco más, después de esto inventare una escusa para irme con lefiya a algún lado y poder volver a sentir sus labios"

Aquella idea era lo que mantenía a bell tranquilo, resistiendo las burlas de bete

- ¿¡Por qué no respondes!? - sus gritos se intensificaron, pero bell permaneció callado molestándolo - ¡tomate de mierda! ¿¡quien te crees para ignorarme!?

Los ladridos de bete ya habían llamado la atención de todos los presentes, y con un gran suspiro bell finalmente hablo

- ¿Qué ocurre bete-san?

-no entiendo porque dejaron que un montón de debiluchos vinieran, todos son solo unos estorbos- bete miraba a todos los miembros del grupo de bell, algunos fruncieron el ceño, otros solo agacharon la cabeza -incluso la inútil elfa aprendiz de esa vieja

en ese instante y sabiendo de quien hablaba bell apretó con fuerza su puño, estaba apunto de usar su habilidad, no le importaba nada, sencillamente no iba a permitir que alguien hablara de esa manera de ella.

Pero aquello no fue necesario, para sorpresa de él, de bete y de todo el mundo una gran cantidad de liquido fue derramado encima del causante de tantos gritos, la responsable de todo fue la propia lefiya la cual habría arrogado toda su bebida en la cabeza de bete

- ¡cállate maldito imbécil! - grito lefiya, despojada de la sutileza y elegancia de su raza

Lefiya tenia tanto que decir, tanto que gritarle a bete, pero no pudo, un segundo después noto como todos la veían con caras de inmensa sorpresa, incluso el mismo bete esta congelado incapaz de comprender lo que habia sucedido

-l-lo siento- fue todo lo que dijo la chica antes de salir del lugar lo más rápido que pudo

ais intento llamarla, de detenerla, pero no pudo ni comenzar a decir su nombre cuando alguien mas le gano, ya que bell fue el primero en reaccionar

- ¡espera, lefiya!

La princesa estiro su mano, tratando de alcanzarlo, pero solo pudo ver su espalda mientras se alejaba de ella, corriendo detrás de su amiga, de otra mujer, ella no lo sabía, pero aquello hizo que su corazón le empezará a doler

Un sentimiento de perdida empezaba a florecer en su corazón

Poco a poco todos fueron retomando control de sus sentidos, saliendo de la asombro, incluso el mismo bete el cual intento seguirlo, pero un fuerte ruido resonó detrás de él, originado por un bastón, al girar su cabeza lo que encontró fue a riveria mirándolo de una manera muy intimidante

-con que vieja ¿eh?

Lo siguiente que se escucho fueron los gritos de bete

Por su parte bell corrió en busca de la joven elfa, y luego de pasar unos cuantos minutos mas finalmente la hayo, sentada en la orilla de un pequeño lago, el techo del piso simulaba una hermosa noche llena de estrellas

El chico se sentó al lado de la chica en silencio, ella al percatarse que era el solo se recostó sobre su pecho, dejándose acariciar su espalda, le encantaba como bell sabia lo que necesitaba sin tener que decir nada

-eso fue increíble- comenzó a hablar bell

-claro que no lo fue, insulte a uno de los ejecutivos de mi familia

-pero se lo merecía ¿no?

-bueno si, pero...- la chica se separó un poco del chico para verlo a los ojos - ¿es normal sentirme así?

- ¿Cómo? – pregunto bell con algo de confusión

-feliz, llena de energía, sentirme capaz de lograr lo que sea

Ante aquella emoción bell solo soltó una pequeña risa, la cual no duro mucho cuando lefiya comenzó a pellizcarle la mejilla

- ¿Por qué no te defendiste? - pregunto la chica, soltando su mano del rostro de bell para que pudiera hablar bien

-tenia miedo- el chico respondió, viendo de inmediato la expresión de molestia de la chica, por eso rápidamente se aclaro -no tenia miedo de bete-san, de lo que tenia miedo era de que si comenzaba una pelea con el nuestras familias fueran separadas, no solo de la expedición sino también cuando regresemos a casa

-sabes que eso es imposible

-lo sé, es solo que ya una vez nos separaron, no quería que eso volviera a ocurrir

El corazón de lefiya comenzó a latir más rápido, la chica miraba al chico con asombro, conmovida por sus palabras, una sonrisa se habia formado en sus labios sin siquiera darse cuenta

-aunque cuando te insulto si estuve dispuesto a responderle- continúo hablando bell, solo haciendo mas feliz a la chica -pero en eso llegaste y le derramaste tu bebida en la cabeza jaja- bell rio un poco -apareciste cuando mas te necesitaba- bell en ese instante le dio un ligero beso a lefiya, no durando mas de unos pocos segundos -fuiste mi heroína

Lefiya ante esas palabras no dijo nada, con un gran sonrojo en sus mejillas ella solo abrazo con algo de fuerza el brazo de bell el cual no tuvo ningún problema en eso

y ahí, en la orilla de un hermoso lago con la vista del gran árbol del piso 18 dos jóvenes aventureros estaban sentados uno al lado del otro

ninguno hacia ningún ruido, no por vergüenza, ni porque no tuvieran nada que decirse, simplemente estaban disfrutando la compañía del otro

en medio de ese tranquilo y cálido momento lefiya lentamente movió su mano sutilmente hacia la de bell

el chico sin apartar la vista simplemente sonrió y entrelazo sus dedos con los de la joven elfa

lefiya sonrió, su corazón latía con fuerza, sus mejillas se sonrojaron más mientras veía de perfil el rostro de aquel chico con el que ha hecho tantas cosas, cosas que siempre imagino hacer con ais, pero ahora solo las quería hacer con bell

-me gustas...

- ¿eh?

la primera voz en romper el silencio fue las de la joven chica, no supo porque lo hizo, para ella simplemente...

le nació decírselo

pero la vergüenza la invadió, su corazón acelerado y su intento de ocultarlo era inútil

ellos en ningún momento habían dicho lo que sentían por el otro, después de tantos besos, tantas carisias y de llegar a tal nivel como para hacer "eso" aun así nunca se habían dicho nada parecido

- ¡tus manos...! m-me gustan tus manos

la chica giro suavemente su rostro, pero sus ojos seguían mirando a los del chico

-son muy bonitas tus manos

- ¿eso crees?

-s-si... estaba pensando que me gustan mucho

por su parte bell estaba igualmente con su rostro enrojecido, podía sentir como su corazón latía con fuerza ante esas palabras y sin que se diera cuenta sus labios formaron una sonrisa

-gracias

el chico respondió, mientras suevamente entrelaza aún más sus dedos con los de la chica

-a mi...también me gustan tus manos

lefiya ante eso sonrió, cerro sus ojos y simplemente se inclinó hasta recostarse en los hombre de bell, el cual también cerro sus ojos y se recostó ligeramente sobre la chica

aquello fue una declaración indirecta, ambos lo presentían, no estaban seguros del todo, pero al menos era mas que suficiente para ellos de momento y sin soltarse nunca de las manos lefiya fue la última en hablar

-gracias...

Los minutos pasaron, demasiados de hecho, ellos sabían que tenían que volver, no solo para descansar y continuar mañana con la expedición, sino también para no hacer peor el posible interrogatorio que talvez les harían

Bell fue el primero en levantarse, naturalmente ayudo a lefiya a hacerlo y cuando estaban apunto de soltarse para caminar fue evitado por la chica la cual ocultaba su rostro con su cabello al agachar la cabeza

-e-esta noche...

- ¿lefiya?

-esta noche...duerme conmigo

- ¿p-pero y tu familia? – con su rostro enrojecido nuevamente bell se empezó a imaginas un escenario en concreto

-no importa- con algo de vergüenza lefiya hablo -mi carpa esta un poco alegada del resto

No quería reconocerlo, pero aquello fue completamente intencional, lefiya tenía la intención de dormir nuevamente con bell, lo extrañaba, la sensación de abrazarlo mientras dormía le daba mucha tranquilidad la cual no habia vuelto a tener desde que ambos dejaron esa casa en donde todo comenzó

Bell pensando otra cosa acepto muy nervioso, y así ambos regresaron, lo primero que vieron fue a bete amarrado completamente, sin la posibilidad de moverse mientras estaba encima de una gran hoguera

Lefiya por su parte le indico la dirección y el color de su carpa, diciéndole a bell que no tardara mucho, cosa que le parecía difícil, pero al ver como ella lo miraba con unos ojos tiernos no se pudo resistir

Le costó, tuvo que pedirle el favor a welf que lo cubra, el herrero estaba intrigado por su más reciente actitud con aquella elfa que parecían que antes lo odiaba, ante eso el chico solo rio un poco, pero al final su amigo acepto solo con la condición que después le contara lo que estaba pasando, bell solo sonrió aceptando eso.

Pero lo que ninguno contaba es que haruhime habia escuchado aquella conversación, y con algo de miedo comenzó a seguir al conejo

Sin que bell supiera que lo estaban siguiendo fue que llego a la carpa indicada por lefiya, entrando como si fuera la suya propia

-lefiya, ya llegué

-e-espera...

muy tarde

bell sin ningún tipo de vergüenza en su ser entro a la carpa de la joven hada con la que ha compartido tantos momentos y ante su vista estaba lefiya la cual se estaba cambiando de ropa

ella inmediatamente se tapó su pecho descubierto

- ¡c-cierra la carpa!

se quejó ella, la vergüenza se le notaba en su rostro, las puntas de sus orejas rojas, el toque rojizo en sus mejillas, y una vez que la carpa estuvo cerrada ella dejo de tapar su pecho, dejando todo su ser a plena vista

ante esa vista el chico sonrió

-vaya, hace mucho que no te veía avergonzada, después de todo te eh visto desnuda muchas veces

- ¡n-no es por eso!

la joven hada alzo por segunda vez el tono de voz

error

ella inmediatamente uso sus manos para tapar su boca mientras se calmaba, con una mirada algo molesta miro al chico mientras terminaba de hablar

-no se trata de eso, ¿qué hubiera pasado si alguien me hubiera visto?

cuestiono ella, ante esa pregunta bell lo imagino

la sola idea que otro hombre viera a lefiya sin nada de ropa le hacía fruncir el ceño, lefiya ante esa vista lo intuyo a la perfección... bell se pondría celoso, su pequeño corazón dio un pequeño salto de alegría

ella ya se habia puesto celosa antes al ver a tantas mujeres coquetear con el conejo, y saber que bell sentía lo mismo que ella, aunque solo sea en su imaginación la consolaba

-la próxima vez entra con más cuidado quieres

dijo lefiya, con sus brazos cruzados, sin importarle seguir mostrándole todo su pecho desnudo al chico, mientras que bell solo se acercó lentamente a la joven elfa

-lo siento

se disculpó, al mismo tiempo que el chico estiro sus brazos en dirección de la chica, acción que fue imitada por lefiya dando origen a un abrazo entre ellos

- "que cálido"

Pensaron ambos al mismo tiempo, aquella sensación fue tan gratificante, pese a estar casi al lado de sus familias y todo el ruido que eso conlleva, para ellos era como si fueran los únicos seres de este mundo, ninguno de los dos pudo resistir mucho más y nuevamente sus labios se unieron en un cálido beso

la intensidad lentamente aumentaba, bell comenzó a bajar sus manos, recorriendo la espalda expuesta de lefiya a su merced, la sensación le producía un cosquilleo agradable a la chica, pero aquella sensación fue mucho más intensa cuando el chico no conforme con esto llevo sus manos a su trasero y las apretó con algo de fuerza

~ ¡ah! ~

un ligero gemido se escucho

-conejo pervertido, ¿no puedes tener algo de pudor? – lefiya se separo un poco para verlo -te dije que vinieras a dormir nada más, no a hacer "eso"

su regaño no iba muy acorde con la sonrisa en sus labios, al mismo tiempo que ella se pegaba más al chico haciendo que sus pechos lo presionaran

-nuestras familias están al lado nuestro, ¿qué pasaría si alguien nos...

aquella pregunta no termino de formularse cuando el chico reclamo lo que ahora era suyo por derecho propio, aquellos labios que lo volvían loco, aquello labios tan adictivos que lo hacían buscar mas

-no soy un conejo

dijo el chico con algo de gracia

-si lo eres, eres un conejo pervertido...pero

dijo la chica mientras por iniciativa propia ella misma le subía la camisa a bell, viendo su abdomen desnudo, quedando en igual de circunstancias, dejando esa idea de solo dormir en el olvido

-eres mi conejo

fue lo último que se dijo en esa carpa antes que aquellos jóvenes volvieran a unir sus labios y los únicos ruidos que salieran después fueran ligeros gemidos de places

lamentablemente ese momento de felicidad entre ambos trajo uno de amargura para una joven Renard de cabello rubio, haruhime habia escuchado todo lo acontecido desde casi el principio

ella lo sabía, nunca sería algo más para bell que su amiga

ella ya estaba conforme con decir que sería la segunda

aun así

escuchar como su héroe, como el hombre que tanto amaba se entregaba tan apasionadamente a los brazos de otra mujer que no sea ella le dolía

con la cabeza agachada y en completo silencio la chica se alejó de aquella carpa, no dejando más que un rastro de sus lágrimas en el suelo

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top