Capítulo 5 +18
Una lluvia repentina comenzaba a caer en la ciudad, mientras ambos jóvenes seguían besándose
todos en aquel festival comenzaron a irse del lugar para refugiarse de la lluvia, dejando como resultado que tanto bell como lefiya ya no escucharan nada más que sus propios suspiros
Aunque no era que les importara
-p-parece que comenzó a llover- dijo bell separándose un segundo de la joven elfa
Lefiya por su parte solo recuperaba el aliento de todos esos besos que compartió con aquel humano que tanto decía que lo odiaba
Mentira
-a-aunque el clima estuvo tan agradable todo el día... jeje
Volvió a hablar bell, con el único propósito de camuflar su vergüenza, después de todo no solo le había entregado su primer beso a una chica que no era aquella princesa de cabellos dorados
-s-solo espero que kami-sama y los demás no se hayan mojado mucho...- no recibiendo respuesta alguna de la chica que tenía al frente
Incapaz de soportar el silencio el chico quiso comenzar una conversación, pero no había respuesta alguna departe de la chica la cual tenia la mirada agachada, al mismo tiempo que su rostro estaba enrojecido
Pese a no ver su rostro directamente sabia el estado en que estaba debido a que sus orejas también estaban rojas
De repente las puntas de los zapatos de lefiya comenzaron a dar ligeros golpes al suelo, pese a no querer demostrar nada era más que evidente que estaba inquieta, como un pajarillo encerrado en una jaula
o-oye...
finalmente hablo, con un tono algo suave, pero aun audible para bell, se notaba que le costaba decir las palabras que yacían en su boca, aun así, ella quiso continuar, después de todo ella fue la que propuso aquel trato y su orgullo no le permitirá retroceder
-n-no...- una pequeña pausa fue creado, alzando la mirada para ver fijamente aquellos ojos rojos finalmente dijo una frase completa - ¿n-no vas a seguir besándome?
Aquello fue sin duda alguna un golpe critico para bell, esa mirada, ese tono, todo en conjunto fue demasiado tierno, es por eso que comenzando una nueva sesión de besos el chico se lanzó hacia la chica
Ambos jóvenes sabían lo que vendría a continuación, después de todo ellos lo prometieron, podrán tener todo del otro menos sus sentimientos
Es por eso que lentamente se dirigieron hacia la única habitación de aquella solitaria casa, bell podía sentir el delgado cuerpo de la elfa pegado al suyo, sus pechos presionando contra esa delgada tela de su vestido, sintiendo como se balanceaban un poco
Los pliegues de su pecho, presionando contra su vestido y este mismo presionando contra el pecho del chico dibujaban un patrón seductor, ante ese estimulo el corazón del chico no dejaba de aumentar su ritmo cardiaco
El sonido de la lluvia se estaba volviendo cada vez mas fuerte, pero para este punto eso no era ninguna distracción para ambos, una vez llegado al pie de la cama se separaron, sus respiraciones eran erráticas, sus miradas ligeramente agachadas demostraban su vergüenza, pero al mismo tiempo sutilmente se veían al mismo tiempo, dando como resultado que el rojo y el azul de sus ojos siempre se encontraran
-lucir así en frete de un chico debe ser mi peor error de todos...- comenzó a hablar lefiya mientras intentaba mirar a otro lado - ¿Por qué siempre sucede cosas como estas cuando estas alrededor?
-...um. Bueno... yo pienso que... ¿esto hace latir mi corazón?
-lo que tu pienses no me importa- alzo un poco su tono de voz debido a lo que estaba a punto de suceder -me avergüenzo de mi misma por estar en esta clase de situación
Aun si ella dice eso
Aun si la princesa sigue en la mente de ambos
Para el chico, lefiya era una chica que el comenzó a admirar, no solo por ser diferente a sus compatriotas al ser más abierta, contradiciendo sus famosos costumbres élficas, la forma en que ella lo apoyo en todo ese día de su fallida "declaración"
Ninguno de los dos lo había notado, pero al pasar tanto tiempo juntos hizo que ellos se volvieran mas cercanos
-no se supone que sería... Aaah- ella suspiro un poco -esto es tan vergonzoso
Y con esas palabras la joven elfa comenzó a quitarse lentamente aquel vestido que había encontrado hace poco, rebelando un encantador conjunto de ropa interior de un color rosado, no dejando nada a la imaginación, el chico podía ver claramente las proporciones de la chica la cual inútilmente solo intentaba cubrir sus pechos de taya mediana
Pese a todas las contradicciones que había el ella, eso no cambiaba la admiración que bell comenzó a sentir por lefiya
Pero, aun así, un chico y una chica a solas, en una habitación de noche... no importaba cuanto respirara, no había forma de que pueda calmarse y los recuerdos de todos los temas que su abuelo le decía no ayudaban en lo mas mínimo
-y esta ropa interior es tan...
una pequeñas lagrimas se asomaron por los ojos de lefiya siendo notado por bell, no entendía del todo, pero por una vez intentaría seguir los consejos de su abuelo para estos casos, y con ese motivo en mente el hablo
-t-tu ropa interior...- con su rostro enrojecido por la vergüenza, no pensando que le costaría tanto decir esas palabras -es muy linda...
-mmm. ¿esto? – su mirada se avergonzó aún más por esa palabra -p-para nada...es muy simple- con algo de tristeza en su tono de voz -no es para nada linda
-n-no es así...- bell la interrumpió -p-pienso que, si son lindas, pero...- recordando cada enseñanza de su abuelo y de las forma de hacer sentir feliz a una chica -e-es porque las estas usando tu
Un profundo silencio de había generado después de eso, lefiya pudo sentir como su corazón había dado un pequeño salto mientras que sentir una felicidad que ella misma no era capaz de descifrar, ¿acaso ella se sentía a gusto por recibir un cumplido por bell? ya había sido elogiada anteriormente por ais, pero la sensación era completamente diferente
-además, no las usarías si no te gustaran ¿cierto? – continúo hablando bell, dejándose llevar por el momento -siempre lucias tan tensa la mayor parte del tiempo y pienso que es agradable verte usando algo tan lindo como eso, es... refrescante
-...60 puntos- dijo lefiya de la nada
- ¿eh? – hablo bell, llegando a comprender lo que dijo - ¿estas calificando mis palabras?
- ¿no pudiste pensar en algo mas inteligente? – contesto lefiya, ignorando la pregunta de bell
-eh. E-entonces... ¿puedo relajarme cuando te ves como una chica normal?... ¿algo así?
-cero puntos, lo intentaste sin nada de ánimo, fallaste
¿Qué quiere ella de mí? Fue lo que pensó bell al instante de recibir su respuesta de una lefiya que lentamente iba perdiendo la vergüenza, pese a estar semi desnuda delante de un hombre humano ella poco a poco ya no intentaba cubrir su delgado cuerpo
Una pequeña risa broto de sus labios, no entendía el motivo por esta, pero sabia que de alguna u otra manera bell era el causante de esta, se sentía más tranquila, aun sabiendo de lo que sucedería y que posiblemente se arrepentiría, o no después de aquella noche
La chica dio unos pasos hacia el chico, y fue esta vez ella la que inicio nuevamente los besos mientras que el chico empezaba a recorrer su delgado cuerpo con sus manos solo por el mero instinto, fue ahí que mientras seguían unidos por sus labios aquellos dos jóvenes lentamente se habían subido a la cama de compartirán en más de una ocasión
- ¿estas segura de lo que vamos a hacer? - alcanzo a decir bell al separarse un segundo de los dulces labios de la elfa
Un pequeño silencio de no más de un segundo se formo entre ellos, pero fue el suficiente para que lefiya escogiera su respuesta
-esta bien. Mi orgullo no me permitirá ser tomada a la ligera por ti... pero tengo reglas
- ¿r-reglas?
-no lamer, no correrse dentro y no pedir verme completamente desnuda tampoco
- ¿q-que? - con gran confusión bell la miro - ¿Qué son esas reglas?
-reglas para poder hacer esto bien juntos...- ella hablo, adelantándose a cualquiera cosa que dijera el -considerando que eres un conejo mujeriego no vas a escuchar, pero quería al menos decirlo
Esa es una forma muy cruel de decirlo, pensó bell, pero, aun así, tanta estimulación visual había afectado de sobremanera al chico el cual como el joven entrando a la adolescencia que era, le fue muy difícil no excitarse y más si en el pacto que acepto estaba incluido el cuerpo de la elfa
-bueno sobre esa última regla...- dijo bell
- ¿sí?
-solicito que sea derogada
Bell rápidamente se abalanzo hacia lefiya, comenzando a quitarle aquel brasier que cubría sus pechos, lefiya agitaba sus manos en confusión, incapaz de decidir si agarrar las manos del chico o sostener su brasier y dejarlo en su lugar
- ¡Aah, hey! ¡no dejare que me desnudes a tu gusto! - exclamo lefiya, pero era inútil -p-podemos hacerlo si solo muevo un poco mis bragas a un lado ¿cierto?
Aquellas palabras fueron ignoradas por bell, y en un instante después había cumplido su misión, los pechos de lefiya estaban a plena vista, subiendo y bajando al ritmo de su respiración, el sonrojo de su rostro la hacía ver tan inocente, tan frágil, cualquiera pensaría que ella gritaría o que al menos lucharía para volver a cubrirse
No lo hizo
Lefiya en ese instante no se cubrió ni un poco, solo miraba fijamente a bell a los ojos, aquellos ojos rojos por alguna razón les parecieron mas hermosos que los ojos color dorados, aun así, ella le da una mirada aguda haciendo que bell se detenga luego de arrojar su brasier lejos de la cama
-que injusto...- dijo lefiya con un tono suabe y algo tierno -al menos tú también quítate la ropa...
Aquellas palabras fueron para bell como una orden divina dada por su diosa, y como si fueran tan cosa, el las cumplió de inmediato, pese a que aun estaba encima de la joven elfa, el chico lentamente se quito su camisa dejando su abdomen al descubierto
Ante aquella vista lefiya se quedo hipnotizada por unos segundos, pese a no ser la primera vez que lo veía sin camisa era mas que notorio el cambio de aquel entonces, músculos mas desarrollados, un porte diferente trasmitía, dándole a entender a la joven chica que aquel chico había madurado mas desde la ultima vez
- ¡gh!
Sus pensamientos fueron interrumpidos, mientras que un pequeño y raro sonido había salido de sus labios, el motivo no era otro que el repentido agarre de bell a uno de sus pechos
-p-pensé que serian mas pequeños, pero caben perfectamente en mis manos
Aquellas palabras salieron de los labios de bell sin ningún tipo de filtro en ellas, la sensación de ver y tocar unos pechos directamente por primera vez en su vida definitivamente lo hicieron decir lo que pensaba, para su mala suerte
-Aaaah, ¿¡solo te interesan los pechos grandes!?
dijo lefiya, con un gran sonrojo en su rostro
- ¡tu...pervertido!
-perv... ¡p-pero, si tu misma me pediste que me quitara la camisa, y no te has tapado en ningún momento!
argumento bell, queriendo encontrar una salida a su discusión causada por los nervios
- ¡Hmph!
esa fue toda la respuesta de lefiya mientras fruncía el ceño, tratando de contener sus nacientes gemidos al seguir siendo tocada por bell. Ambos jóvenes estaban hiendo en circulo, sin llegar a ninguna parte, su inexperiencia, y el trato realizado no ayudaba
-...bueno, creo que la forma inocente en que te avergüenzas por ser vista desnuda es muy encantadora, además...- dejando de tocarle sus pechos bell solo la miro fijamente a los ojos -tus pechos son hermosos
aquellas palabras no cayeron bien a la joven hada la cual su rostro se pinto de rojo al escuchar esas palabras
- ¡N-no estoy avergonzada por algo como eso! ¿¡porque estoy escuchando esto de alguien como tú!?
sin saber lo que estaba diciendo la chica continuo
-o, ¿es que realmente piensas que no tengo nada para mostrar a nadie?
¿de dónde habrá salido ese pensamiento? bell no lo sabia
- ¡no puedo creerlo, te estas burlando de mí!
y mientras pensaba eso, el chico no tuvo más opción que seguir escuchando a la elfa con la que estaba compartiendo la misma cama
-¡¡insensible!! ¡¡indigno!! ¡¡cabeza hueca!! ¡¡conejo pervertido!!
No deberían estar peleando en un momento como este, pero las viejas costumbres son difíciles de olvidad y más para aquellos jóvenes, desde que se conocieron fueron conocidos por aquellas momentos donde parecían que discutían, aunque fueran mas del lado de la elfa
Es por eso que para evitar aquella nueva batalla bell volvió a reclamar los labios de lefiya, pese a que se resistió al principio lentamente esta comenzó a ceder, aquel beso comenzó a subir lentamente de intensidad, al punto que sin que se diera cuenta ninguno de los dos, sus lenguas ya se estaban tocando
Al cabo de un minuto entero ya se habían separado, pero un hilo de saliva aun los unía, para este punto los pantalones del chico lo incomodaban, y las bragas de la elfa ya estaban húmedas, pero, aun así, bell la miro fijamente y tratando de evitar más discusiones el hablo
-lo siento, no quería hacerte creer eso, y en verdad tus pechos son hermosos lefi...
-shh...- lefiya en ese instante uso sus dedos para tapar los labios de bell -no hay que decir nuestros nombres- desviando la mirada mientras, mientras su mirada se notaba algo triste -cuando nos besemos, cuando nos toquemos, cuando hagamos..."eso" ...- con un tono algo decaído, pero aun así volvió a mirar al chico que estaba arriba suyo -solo pensemos en "ella"
El chico lo entendía, lo entendía perfectamente, el recuerdo de hace unos pocos minutos no se había desvanecido, sencillamente estaba siendo considerado con la joven hada, pero ella no quería eso, el pacto realizado, la promesa firmada con ese beso les daba la libertad de desahogar sus corazones con el cuerpo del otro
No había que pensar en muchas mas cosas, no ahora, no aquí
Tales pensamientos no iban a llevarlos a ninguna parte, así que, por lo tanto, preparando su resolución el chico extendió su mano hacia el cuello de la chica y tras de ella estaban sus labios los cuales comenzaron a besarlo
-gh...
Un pequeño gemido ahogado por las manos de lefiya salió de sus labios, en el instante en que bell beso su cuello pudo sentir como si una débil descarga eléctrica recorría todo su cuerpo, aquella sensación lentamente la iba cautivando, al mismo tiempo que la asustaba por nunca haberse sentido tan bien antes en su vida
Su pequeño cuerpo temblando fue nuevamente inundado por otra descarga de placer en el momento en que unas de las manos del bell sujetara su pecho, pese a no ser tan grandes como los de otras mujeres, no eran pequeños en lo absoluto, tenían el tamaño perfecto para caber justamente en las manos del conejo
~ ¡aaahh! ~
Un gemido que no pudo ser retenido por sus manos resonó por la habitación, llevando sus manos intento esconder su rostro, apenada por aquel extraño sonido que libero no querían que la vieran, pero bell no se lo permitió, y antes que pudiera replicar tomo unas de sus manos y la movió lo suficiente para tener vía libre directamente hacia sus labios los cuales los beso sin ninguna vacilación
Los minutos pasaban y, los besos, las caricias, los roses y los suspiros iban y venían constantemente, para este punto la chica flotaba sus muslos, pudiendo sentir como su entrepierna se ponía mas húmeda, y lo mismo pasaba con el chico, su corazón estaba mas agitado que nunca, y el dolor de su entrepierna a causa de sus pantalones aun puestos solo iba en aumento,
Al separarse un segundo para recuperar el aliento ambos se vieron nuevamente a los ojos, no lo supieron en ese instante, pero por alguna razón ellos se quedaron inmovibles, solo observándose fijamente, aun así, la sensación de éxtasis en sus cuerpos no desaparecía, todo lo contrario, los llamaba a ir por mas
- ¿no...- una suave y tierna voz de parte de lefiya fue la primera en ser escuchada - ¿no vamos a seguir?
- "¿eh?" – pensó bell, incapaz de apartar la mirada cada vez mas tierna de la joven elfa que yacía debajo suyo
- ¿ya terminamos?
Aquellas palabras, dichas con un tono de tristeza en su ejecución resonaron una y otra vez en la mente del chico, haciendo que bell bajara lentamente hacia la entrepierna de la chica, abrió lentamente sus piernas, observado sus bragas con una clara mancha de humedad en ella, y sin darle ninguna oportunidad de decir una sola palabra bell, la toco en ese lugar
~ ¡aaahh! ~
Un gemido mucho mas fuerte había sonado en la habitación, pese a que el toque del chico no fue directo, pese a que la delgada tela aun evitaba el contacto directo entre ellos, aquella sensación fue mas que suficiente para hacer que la joven e inexperimentada elfa curvara ligeramente su espalda
Lefiya intento resistirse inútilmente, pese a llevar sus manos a la cabeza de bell para apartarlo de su lugar mas intimo todo fue inútil cuando el chico lentamente comenzó a correr la delgada tela que le impedía ver el cuerpo completamente desnudo de la chica y fue en ese instante que el chico comenzó a pasar su lengua
- ¡Hyah, nn... Aaaugh... Aah!
Una sucesión de fuertes gemidos resonó por toda la habitación, la descarga de placer que sentía lefiya ahora era en todo su cuerpo, ella se retorcía, queriendo escapar, pero al mismo tiempo era detenida por bell el cual para la sostenía fuertemente de sus gruesos muslos
Lefiya con mucho esfuerzo pudo llevar sus manos a la cabeza de bell nuevamente, pero este al sentirlas solo aumento la intensidad de su ataque, los gemidos producidos por esto eran mucho mas intensos, afortunadamente aquellos jóvenes se encontraban solos en esa casa, al mismo tiempo que en el exterior una fuerte lluvia había caído sobre la ciudad salvándolos de que alguien los escuchara
Rindiéndose al placer lefiya separo una de las manos de la cabeza de bell y la llevo a uno de sus pechos comenzando a estimularlo, a presionarlo, pero sobre todo a apretar y estimular uno de sus pezones el cual se encontraba completamente duro
No había que decir palabra alguna, con un simple vistazos a los ojos de la pequeña elfa bell pudo darse cuenta que en su rostro había sobrepasado el placer antes de la razón
mientras el chico adentraba un poco más su lengua en ella, en ese instante lefiya no podía contenerse más, soltando su pezón, tomo con ambas manos la cabeza del chico mientras los gemidos se hacían más y más fuertes con cada segundo que pasaba.
El líquido de su entrepierna salía sin tener la más mínima intención de detenerse, era tanto que bell aduras penas podía manejarlo, esto hizo que cayeran más sobre la ya muy húmeda sabana, los dedos de lefiya temblaban sin que ella pudiera hacer algo para detenerlos
su mirada ya solo podía dirigirse hacia arriba, aquello era una señal de que pronto terminaría y ella lo sabía claramente es por eso que dejándose llevar por el placer suplico.
~ah, ...ahh... más fuerte...~
una débil voz, luchando para decir las palabras lo más coherentes posibles salieron de los labios de lefiya
~por favo... ¡ya casi me...! ~
Su temblor se volvió más intenso, mordiendo sus labios, su cuerpo se sacude y sus piernas tensas se debilitan, con un fuerte gemido ella libera una gran cantidad de líquido directamente en el rostro de bell, el cual habia comenzado a ser el mismo el que estimulara uno de sus pechos, cayendo rendida en la cama dando pequeños gemidos ocasionales, para el chico no hubo ninguna duda
lefiya había tenido un orgasmo
su primer orgasmo
su entrepierna aun goteaba, empapando aun mas la sabana, lefiya solo daba fuertes respiraciones, tratando de recuperar el aliento perdido, pero para bell era un asunto completamente diferente, al verla de esa forma fue más que suficiente para querer más de ella
- ¿eh?
Dijo débilmente lefiya al sentir como bell le había quitado completamente sus bragas húmedas y las había arrojado sin ningún tipo de preocupación fuera de la cama, y un instante después el chico Volio a pasar su lengua por la entrepierna de la elfa
~ ¡Aaaahhh!
Curvando mucho mas su espalda, con sus pezones apuntando al cielo, con su cabeza en blanco, lefiya Volio a sentir el ataque de bell hacia en ella, recorriendo con su lengua cada rincón, comenzando a chupar produciendo en el proceso una sucesión de sonidos muy eróticos
moviendo la pared externa con su lengua y prueba aún más el interior de la chica la cual, aunque intentara tapar sus gemidos le era imposible, con gran vergüenza, pero dominada por el placer lefiya había caído nuevamente en la lujuria y llevando sus pechos hacia su boca comenzó a lamerse sus pezones
~Haa, ah... ahh... ah...haa~
Sus gemidos ahogados por sus propios pechos no se detenían, para este punto lefiya comenzaba a mover su cadera instintivamente de arriba y abajo, de forma algo tosca, pero con cierto ritmo debido a las constantes lamidas de bell, al igual que ella sus movimientos eran rítmicos, hacia arriba y hacia abajo al mismo tiempo que con sus dedos estimulaba el clítoris de lefiya para mayor placer de esta.
en ese momento bell podía sentir el interior de lefiya, podía oler sus jugos, podía saborear su sabor, sencillamente era algo que lo empezaba a cautivar
~ah, ...ahh... más fuerte...~
Su voz ya no tenía miedo ni vacilación, en ella solo había el deseo desbordante, mientras sus miradas se cruzan, pero ninguno se detenía de sus acciones, todo lo contrario, al estar viéndose mutuamente los hacia querer jugar un poco más con el otro, es por eso que lefiya con unos ojos entrecerrados solo podía presionar un poco más a bell con sus muslos, mientras que este solo recorría fervientemente cada rincón de la entrepierna de lefiya al igual que atacaba suavemente su clítoris.
Lefiya inmediatamente al sentir ese nuevo ataque soltó sus pezones y curvando su espalda ahora hacia el frente sostuvo la cabeza de bell y dejándose llevar por sus instintos mas primitivos y carnales ella lo empujo hacia su entrepierna cada vez más humedad con el único propósito que la estimule más, acción que logro al haber experimentado su segundo orgasmo
Una vez hecho eso bell se separo un poco de ella, pero sus dedos habían tomado su lugar mientras este recuperaba el aliento, viendo como lefiya se retorcía por el placer y el orgasmo que recién habia tenido
Sus ojos se encuentran empañados, su cuerpo aun arde, después de todo para ella aquella sensación el algo nuevo que experimento, lefiya miro fijamente a bell el cual se limpiaba un poco del rostro sus fluidos, y pese a que quiso apartar la mirada por la vergüenza ella pudo notar algo en bell
Su mirada parecía que algo le estaba doliendo, ¿acaso lo hizo mal? ¿ella ha cometido un error? Eran las preguntas que la joven elfa se hacia en su cabeza, ambos estaban juntos en esto, ambos habían aceptado el trato, por tal motivo era injusto que solo una parte se sintiera bien
Fue ahí que viendo mas abajo pudo notar el problema que agobiaba al chico, sus pantalones eran la causa de su malestar, ella no era una experta en el tema, pero tampoco era tan ignorante, sabia de las erecciones de los hombres y lo comprobó al ver el gran bulto que sus pantalones mantenían
Y pese a que en circunstancias normales ella hubiera aborrecido esta idea... ella ya no era la misma
-ahora es mi turno- dijo lefiya con algo de nerviosismo en su voz
- ¿eh?... ¿te refieres a...?
- ¡no me hagas repetirlo! - con algo de ahora molestia en su voz - ¡quítate el pantalón y acuéstate en la cama!
Sin decir ninguna palabra bell la obedecido, agradecido por poder librar un poco de la presión que ya lo agobiaba, pero aun así no estaba del todo liberada, puesto que aun estaba la tela de su bóxer quien lo aprisionaba
Lefiya por un segundo se quedó mirándolo fijamente, pese a que estaba aún envuelto en un trozo de tela ella trago algo de saliva mientras un pensamiento llego a su mente
- "es grande"
Armándose de valor por lo que estaba apunto de hacer lefiya llevo sus manos al dobladillo de los bóxer de bell y como el hizo con ella, los jalo hacia abajo rápidamente, pero sin contar que eso provocó que el miembro del chico saliera completamente erecto, haciendo que este casi golpeara su cara produciendo en ella una gran sorpresa
Una cosa era haber leído sobre el tema, pero otro muy diferente es ver uno directamente, aun así, al igual que hizo bell ella no podía echarse para atrás nada mas verlo, es por eso que llevo su mano a su miembro, temerosa en un principio, logrando retroceder un poco antes de tocarlo, pero con un nuevo impulso de valor lo tomo directamente
-mmm...
Un pequeño suspiro producido por bell fue señal suficiente para la chica de que lo estaba haciendo bien, ella podía sentir como el miembro del chico se endurecía aun mas en sus manos, sujetando firmemente ella comenzó a mover su mano, de arriba abajo, de forma lenta pero constante, el sonido que producía, el olor que emanaba, y aquel fruido que comenzaba a envolver su mano estaban llevando a lefiya a un trance
Miro hacia arriba para ver al chico el cual solo tenia la cara totalmente roja mientras cerraba los ojos con fuerza, pero aun así estaba jadeando débilmente, ante esa visión lefiya se sintió extrañamente motivada, es por eso que sujeto con un poco mas de fuerza el miembro del chico, al mismo tiempo que aceleraba el ritmo
- ¡Mnnggh! ¡Ooohh! ¡Se siente... tan bien!
Eran los suspiros y gemidos que bell producía, para el chico todas estas sensaciones eran algo nuevo que experimentaba, nunca antes en su vida se había tocado a si mismo, no porque no supiera del tema, sino porque nunca estuvo solo, desde que era un niño vivió en la misma cabaña con su abuelo, cuando llego a orario vivió en un sótano con su diosa, y aun al día de hoy, con su mansión y su propia habitación no se atrevía a tocarse por el hecho de vivir con varias mujeres.
Toda esa lujuria reprimida ahora mismo estaba siendo liberada por las manos de una hermosa elfa la cual solo aumentaba mas y mas el ritmo, bell es ese instante sintió que algo se aproximaba, intento alejarse, pero las firmes manos de lefiya se lo impidieron, fue por eso que rindiéndose ante el placer apretó sus dientes, cerro sus puños, para luego liberar su primer orgasmo el cual cayo en la cara de lefiya
La chica al inicio se sorprendió por eso al inicio, quería enojarse por mancharla de esa manera sin avisarle, pero no se atrevió a hacerlo, después de todo ella había hecho lo mismo con el chico...dos veces de hecho
En ese instante de calma, donde solo se podíaescuchar la débil respiración de bell tratando de recuperar el aliento, fueentonces que los fluidos que habían caído sobre lefiya lentamente fueroncayendo por su rostro, recorriendo sus mejillas, pasando por al lado de sunariz, pero, sobre todo, llegando hasta sus labios, y de esta forma, ella loprobo
- "con que así sabe..."- lefiya lentamente fue probando mas y mas de la esencia del chico, fue entonces que un pensamiento algo perverso llego a su mente –"el me hizo lo mismo dos veces seguidas"- mirando al miembro del chico aun erecto
En ese instante, aun sin soltar al chico, sin decir una sola palabra, lefiya se acerco hacia la entrepierna de bell, cuanto más se acercaba más abría sus labios, al mismo tiempo que sacaba tímidamente su lengua, y sin que bell se diera cuenta, lefiya había comenzó a lamerlo en la punta de su miembro, produciendo en bell un escalofrió que recorrió toda su columna
-Mmmmm
Ella comenzó a gemir suavemente a medida que lo introducía mas a su boca, envolviéndolo con sus labios, pero sin dejar de acariciarlo con su lengua, lentamente su saliva se fue mezclando con el esperma que aun quedaba funcionando como un especie de lubricante facilitando su labor, al principio le costo bastante, pero los instintos reprimidos la ayudaron a adaptarse rápidamente a la situación
El sonido que producía a medida que baja, subía, para luego bajar un poco más, eran cada vez más obscenos, todo eso pasaba ante la mirada de bell, el cual solo sentía mas y mas placer con cada movimiento de lefiya, fue en ese momento que pudo entender a su abuelo y su obsesión por las cosas pervertidas, después de todo, se sentían demasiado bien para ser verdad
- ¡Unnggh!
Un gemido salió de los labios del chico cuando la chica en un impulso y ayudada por el lubricante improvisado pudo llevar la mayor parte de su miembro adentro de su boca, pero sin ninguna contemplación siguió atacándolo aun con su lengua adentro de su boca, todo esto, mas la lujuria reprimida por bastante tiempo fue el detonante para que se dejase llevar
Fue por eso que llevo sus manos hacia la cabeza de lefiya, ubicándola detrás de esta y sin esperar respuesta alguna de ella, comenzó a jalarla haciendo que la joven elfa tuviera todo su miembro en su boca, unas cuantas lagrimas se formaron en sus ojos, luchando para no ahogarse por esa acción que no se detenía, ella quería separarse de él, gritarle, golpearle, insultarle de todas las maneras posibles por sobrepasare con ella
No lo hizo
En cambio, ella apretó más sus labios, comenzando a sentir placer por esta acción, fue por eso que ella llevo sus manos a su cuerpo, una mano comenzó a apretar uno de sus pechos mientras estimulaba con gran jubilo su duro pezón
La otra en cambio bajo un poco más, directamente hacia su muy mojada entrepierna la cual comenzó a estimular por primera vez en su vida por su propia cuenta, al mismo tiempo sus fluidos comenzaban nuevamente a salir
- "¡N-no puedo creer que realmente estoy haciendo esto!"- pensaba lefiya con la poca cordura que le quedaba –"pero..."- empezando a mover mas sus dedos sobre sus zonas erógenas –"se siente bien"
Sus hermosos ojos azules se había perdido ante el placer que su cuerpo estaba recibiendo, apretando su pezón con fuerza, estimulando su clítoris, envolviendo el miembro de bell con su lengua adentro de su boca mientras este la penetraba mas y mas profundo en su garganta pudiendo sentir como este palpitaba
- ¡Mnngghh!
Gemía lefiya, al mismo tiempo que por su boca se producía un fuerte ruido, era muy similar como si estuviera haciendo gárgaras, los cuales llenaban toda la habitación
- ¡Oooohh! - gimió bell mientras sostenía con un poco mas de fuerza el agarre en la cabeza de lefiya -se siente... ¡se siente tan bien! – fue todo lo que dijo, teniendo los ojos cerrados y jalando con mas fuerza la cabeza de lefiya
Pese a que casi se atraganta por esa acción, lefiya se adaptó rápidamente a la situación, ella lo podía sentir, el grueso miembro del chico que estaba en su boca palpitaba con mucha más fuerzan, incluso llego a sentir como poco a poco este aumentaba de grosor, y pese a ser esta su primera vez sabia que el chico estaba apunto de volver a correrse
Bell se encontraba en un estado de placer desenfrenado, sintiendo como estaba apunto de estallar nuevamente, los gemidos de ambos se mezclaron en el aire, el ruido de succión constante, la fuerte lluvia en el exterior, sus pensamientos inundados por el placer, todo esta haciendo que ambos se sintieran como las únicas personas en este mundo... y aun así no quisieran separarse nunca
El largo cabello de lefiya, peinado con una cola de caballo hace mucho que estaba totalmente despeinado, moviendo de un lado para el otro al igual que su cabeza
- ¡Mmnngghh! ¡Mhh mhh mh mh mh mhhhm!
Gemía lefiya constantemente al sentir como bell habia jalado su rostro hacia el fondo, empujando su miembro lo más que pudo adentro de su garganta, apretando los dientes con fuerza, echando la cabeza para atrás, mientras un fuerte suspiro salía de sus labios bell finalmente habia tenido su segundo orgasmo y nuevamente soltó todos sus fluidos en lefiya, solo que esta vez fue adentro de su boca
Los ojos de lefiya se abrieron de golpe mientras sus lagrimas caían por sus mejillas mezclándose con el esperma que empezaba a escaparse de sus labios, ella casi se ahogo por la sorpresa, dando fuertes tragos para evitar eso, al mismo tiempo que bell lentamente empezaba a separar sus manos de la parte posterior de su cabeza, no sin antes tocar sus orejas las cuales estaban sumamente enrojecidas, pero sobre todo sensibles ante todo lo que habían hecho
Dicha acción hizo que la joven elfa volviera a tener un orgasmo liberando nuevamente sus fluidos en el suelo de la habitación, al mismo tiempo que bell lentamente retiraba su miembro de la boca de lefiya, una vez termino se escuchó un "pop" al reventar una burbuja que se formo en la boca de la joven elfa al mezclar sus fluidos
Bell al instante habia caído exhausto sobre la cama, mientras que una lefiya en un transe por todo lo que sentía no evito cuando parte del semen del chico cayo de sus labios, manchando su cuerpo haya por donde caía, sus pechos y muslos eran prueba de ello, de la marca que el dejo sobre ella
- ¡l-lo siento mucho! - dándose cuenta de lo que habia hecho bell se levantó de la cama - ¡yo...!
Pero en ese instante el chico se habia quedado sin palabras, pero no era para menos, puesto que lefiya al recuperar un poco la razón rápidamente habia tragado todo el semen que estaba en su boca, todo ante la atenta y atónita mirada de un joven humano que nunca creyó ver a una elfa hacer una acción tan lasciva
Ninguno dijo nada por unos segundos que parecían eternos, lefiya habia bajando la mirada, observando como su cuerpo ahora estaba manchado, o mejor dicho marcado por el humano que ella tanto tiempo dijo que odiaba, bell mientras tanto se lleno de un gran temor, por su mente pensó que se habia sobrepasado con ella de todas las formas posibles y que seguramente estaba mas enojada que nunca, pero fue diferente cuando lefiya finalmente hablo
-hey... gracias
- ¿Por qué? - pregunto bell lleno de dudas, al mismo tiempo que lefiya levantaba la mirada, haciendo que ambos jóvenes se miren fijamente a los ojos - ¿Por qué me das las gracias? ¿no estas enojada?
-bueno... AH, fuiste tan rudo, esta es mi primera vez ¿sabes? - hubo una pequeña pausa -incluso me obligaste a beber parte de tu...- un pequeño sonrojo se hizo presente -bueno ya sabes... aun así... estoy feliz
El chico no entendía porque ella decía eso, ni mucho menos porque sonreía mientras lo hacia
-te sentiste tan bien que no pudiste contenerte ¿cierto? - lefiya cerro sus ojos -eso quiere decir que estoy cumpliendo con nuestro trato, somos solo un remplazo, y podemos hacer lo que queramos con el cuerpo del otro... para podernos satisfacer... para poder...
Una sonrisa inocente se formo en sus labios, contrastando con su rostro el cual aun estaba cubierto con los fluidos del chico, incluso pequeñas gotas de este caían desde las esquinas de sus labios, al igual que su saliva la cual se encontraba incluso en su barbilla, goteando ligeramente hacia el suelo.
Pero en ese instante, sus lagrimas volvieron a salir de sus ojos, recordando el verdadero motivo de sus acciones, ella rápidamente le dio la espalda a bell, no quería que la vieran llorar de esa manera, pero aquella acción no duro mucho, puesto que ella ya no estaba sola
Bell rápidamente se levanto de la cama y en un rápido movimiento la abrazo por la espalda, posando su cabeza en el hombro de lefiya la cual solo agradeció internamente
Duraron así unos cuantos segundos, luego de eso el chico guro sin ningún tipo de pena a la chica para así de esta manera abrazarla frente a frente, profundizando el abrazo aún más, pudiendo sentir sus pechos presionando su piel
Ante ese acto lefiya se calmó, ya no estaba sola, ya no tenia que sufrir sola, ahora tenia a bell a su lado, y si bien no era el con quien quería estar en ese momento eso no importaba, él estaba ahí y era mas que suficiente para ella
Así se habían quedado por unos cuantos minutos mas, sin decir una sola palabra, solo escuchando la fuerte lluvia que aun caía afuera, ninguno de los dos se quiso separar del otro por alguna razón, pero esto trajo consigo una pequeña reacción departe de la parte baja de bell, el contacto con la piel de la joven elfa, el olor que aun habia en la habitación y el recuerdo provoco que este tuviera nuevamente su erección
Lefiya al instante pudo sentirla presionando la erección del chico sobre su vientre, más y más duro, aun así, sin que ella se diera cuenta una pequeña sonrisa se habia dibujado en sus labios, y al separarse un poco del chico hablo
- ¿acaso eres un conejo que esta siempre en celo?
Ambos se miraron un segundo, solo para que al siguiente sus labios se unieran nuevamente, ambos aun podían sentir la esencia del otro en sus bocas, pero aquello no les importo y siguieron con ese beso por varios minutos
Aquel beso ya no correspondía al de unos novatos, la intensidad iba en aumento constante, era picante, apasionado, lleno de deseo, apenas si se daban tiempo para recuperar el aliento cuando ya uno volvía a reclamar los labios del otro
Sin importarles nada el hecho de lo estaban cometiendo estaba mal siguieron con ese beso, para ellos ya no les importaba nada ni nadie fuera de esa habitación, por esa noche ellos solo eran un hombre y una mujer que buscaban el cariño del otro, sentirse amados.
Lefiya habia elevado sus brazos hasta el cuello bell, amarándolo en un cálido abrazo con la intención de profundizar aun mas el beso, mientras que bell fue mas directo en sus acciones eh hizo todo lo contrario, el chico habia llevado sus brazos a la zona baja de lefiya, tomándola de su trasero con algo de fuerza, acción que genero un pequeño gemido de lefiya, para luego con mucha facilidad la levanto del suelo
Inmediatamente bell se hacia sentado en la cama, pero lefiya no estaba dispuesta a separarse del chico tan fácilmente, por ese motivo al igual que hizo con sus brazos ella entrelazo sus piernas alrededor de la cintura de bell mientras aun continuaban con su sesión ininterrumpida de besos
El chico en respuesta a esta acción de la chica comenzó a tocar, apretar eh incluso a pellizcar suavemente sus pechos, jugando con sus pezones, moviendo sus dedos en círculos encima de ellos, pero nada de eso se pudo comparar cuando bell se separado de los labios de lefiya, y dirigiendo su rostro rápidamente hacia uno de sus pechos el cual inmediatamente introduzco en su boca
- ¡Mmnnghhh!
Lefiya ante esa sensación hecho su cabeza para atrás, al mismo tiempo que alzaba un poco mas sus pechos para que bell tuviera un mejor agarre de ellos, ante las caricias con su lengua a uno de sus duros pezones, mientras que con la otra mano del chico jugaba con su otro pecho.
tanta estimulación hizo que lefiya instintivamente comenzó a mover sus caderas de arriba abajo, de forma algo rítmica, presionando la punto del miembro del chico con la entrada de su propia entrepierna, una fuerza sensación de ardor los inundo por todos lados, los segundos parecieron horas, fue en ese punto que ambos sabían que ya no habia vuelta atrás de lo que estaba a punto de hacer
Fue por esto mismo que lefiya se incorporó, al mismo tiempo que bell dejaba de chupar como un bebe uno de los pechos de la joven elfa, ambos se miraron a los ojos, ambos asintieron al mismo tiempo en señal de aprobación, agarrando el miembro del chico sin pena alguna lo dirigió directamente hacia la entrada de lo mas profundo de su ser, y una vez estuvo en la posición indicada ella bajo sus caderas.
- ¡Eeaaghh!
- ¡Oooohh!
Fueron los gemidos de ambos jóvenes al perder la virginidad, con sus ojos cerrados, con sus labios temblorosos, ambos estaban experimentando un mundo completamente nuevo para ellos, el interior tan apretado de la chica, la calidez que esta tenia habia dejado anonadado al chico, poco a poco lefiya fue bajando las caderas, introducción aun mas el miembro del chico, fue ahí que ambos lo sintieron, una delgada barrera que les impedía seguir
Lefiya se detuvo, con sus hombros temblando, con sus ojos húmedos por sus lagrimas miro al chico, incapaz de decir una sola palabra coherente, ella solo asintió suavemente con la cabeza, bell en ese momento supo a que se refería lo joven chica, es por eso que suavemente la tomo de las caderas y lentamente el mismo la fue bajando más hasta que finalmente
- ¡Kaaghh!
Su himen había sido roto, y con ello un fuerte gemido, mucho mas intenso que los anteriores habia salido de la joven elfa, el dolor la envolvía, nunca supo que dejar de ser virgen seria tan doloroso para ella, afortunadamente bell se percató de su expresión, reclamando sus labios nuevamente, mientras el la abrazaba a ella, sin que ninguno de los dos hiciera un solo movimiento de caderas se quedaron así por unos instante
Bell espero pacientemente a que lefiya se acostumbrara a esta nueva experiencia, separándose del beso dejando solo un pequeño hilo de saliva, con sus respiración aun algo tosca hablo
- ¿p-por... porque no...- entre ligeros jadeos lefiya hablo
-porque te estaba doliendo
-lo... lo resistiré
-no quiero que lo hagas
- ¿eh?
Fue todo lo que pudo decir lefiya antes que bell suevamente, sin separarse de ella, sin separar la unión que convirtió sus cuerpos en uno solo, cambio suavemente su posición, siendo ahora que lefiya estaba acostada sobre la cama y bell estaba arriba de ella, aquel cambio de lugares hizo que ella comenzara a sentir menos dolor
-no te hagas la fuerte, no conmigo al menos- bell hablo solo para darle un beso diferente esta vez a lefiya, aquello fue un beso lleno de cariño -me quedare así todo el tiempo que necesites hasta que ya no sientas dolor
Fue todo lo que dijo antes de volverla a besas, y al mismo tiempo que entrelaza sus manos, lefiya ante este hecho pudo sentir como su corazón dio un brinco, le hecho la culpa a todo lo que habia hecho, no quería reconocer el verdadero efecto que tuvo esas palabras en ella
- "tonto conejo"
Fue todo lo que pensó lefiya mientras correspondió esos besos, sin darse cuenta el dolor ya se habia ido de su ser, y en un sutil movimiento de caderas fue la señal para que bell entrara aún más adentro de ella.
Sus cuerpos finalmente se habían vuelto uno, bell comenzó a moverse lentamente mientras que lefiya comenzaba a rasguñarlo levemente en su espalda por tanto placer que estaba recibiendo, sus gemidos no paraban de salir pese a que sus labios estaban sellados con los del otro, pero al sentir el miembro de bell explorando su interior hizo de esa tarea algo imposible
¡Uaaahhh!
Sus movimientos se hacían cada vez más intensos, provocando que la cama comenzara a crujir, pero al estar tan concentrados el uno en el otro no lo notaron, o si lo hicieron no les importo, el sonido de sus cuerpos chocando, el olor que emanaban empezó a llenar nuevamente todo el lugar, los pechos de lefiya se sacudían de un lado a otro, así siguiendo en la posición del misionero por mas de diez minutos
- ¡Mnngghh! ¡Aaaahhh!
Gemía con fuerza lefiya mientras bell la penetraba desde atrás de su cuerpo, sus pechos chocaban constantemente contra la cabecera de la cama, excitándola aun mas al ser estimulado sus pezones por esta, con sus brazos siendo sostenidos por bell, al mismo tiempo que este atacaba sus orejas con sus labios, mordiéndolas suavemente, produciendo un gran éxtasis en la joven elfa, aunque ella nunca lo quisiera reconocer después, y menos cuando este la empezó a dar fuertes nalgadas produciendo en ella nada mas que placer
-Aaaahh! ¡SIIII...! ¡Uuh!
Gemía lefiya mientras estaba sentada encima de las piernas de bell, subiendo y bajando a gran velocidad sus caderas mientras le daba la espalda, al mismo tiempo que el chico la sujetaba por detrás de sus caderas para aumentar sus fuertes estocadas, acción que se gano mas gemidos de la joven elfa
- ¡Uuh uuuh uuh uh uuaahh!
Gritaba en éxtasis lefiya por la nueva posición en la que ambos se encontraban, bell la habia recostado sobre la cama nuevamente, pero cuando pensó que volverías a usar la primera posición con la que iniciaron para su sorpresa no fue así, puesto que bell en un rápido movimiento habia sujetando sus piernas y las mantuvo juntas cuando las alzo lo mas alto que pudo, logrando de esta forma tener una clara visión de su trasero, pero sobre todo de su entrepierna completamente húmeda y sin perder ni un solo segundo la volvió a penetrar por varios minutos más, llegando al punto qu fue la misma lefiya la que sostuvo sus propias piernas en esa posición solo para duraran más tiempo así
- ¡Aaaaghh! ¡Uunnggh!
Pasados varios minutos volvieron a cambiar de posición y ahora era lefiya la que se encontraba encima de bell, mientras estos se sostenían de las manos, sus lenguas danzaban en la boca del otro, sus caderas chocaban en un continuo vaivén en el cual ambos emitían gemidos, respiraciones calientes, sus corazones latían con fuerza al ver las expresiones en sus rostros
lefiya sonreía en éxtasis ante lo placentero que se sentía todo, ella no dejaría de mover sus caderas por nada del mundo, su sonrisa y gemidos solo se intensificaron cuando siguiéndole el juego bell sujeto sus glúteos enrojecidos por tantos azotes para aumentar mucho más el ritmo de sus embestidas.
-Nnggh!
Gemía débilmente lefiya, pero no porque no estuviera siendo bombardeada por un sinfín de estocadas por el miembro de bell, todo lo contrario, el chico la atacaba sin descanso, solo que ahora lefiya se encontraba recostada boca abajo en la cama mientras bell estaba encima suyo, la joven elfa en un intento de conservar su conciencia mordía las sabanas con fuerza, aun así, sus gemidos no se detenían
Y así pasaron muchos minutos donde ninguno daba más de sí, el hecho de durar tanto tiempo en su primera vez fue debido a todos sus emociones reprimidas y al la resistencia que sus respectivos niveles les otorgaban
pero como todo en esta vida existe un final y para la primera relación de la "pareja" ya estaba a punto de llegar, Ambos ya no aguantaban más, ellos querían correrse, y pudieron sentirlo de inmediato
-Uunnggh- suspiro bell mientras aumentaba sus embestidas, al mismo tiempo que sujetaba con fuerza los glúteos de lefiya - ¡ya casi... ¡ya casi...!
- ¡Mnngghh! ¡Aaaahhh! - gimió lefiya mientras con sus pocas fuerzas giro su rostro para ver al chico -be-bésame... ¡bésame!
La orden fue acatada, y nuevamente sus lenguas se entrelazaron entre ellas, mientras bell penetraba más y más rápido a lefiya la cual no dejaba de gemir al sentir el clímax final acercándose, y fue en ese momento que finalmente ambos se corrieron al mismo tiempo
-Mmmngh! ¡Mmhh! ¡Mmmmh!
Soltando un fuerte gemido ahogado por ese beso, ambos jóvenes se corrieron por aproximadamente un minuto, separándose del beso ellos solo apretaron sus dientes ante aquella maravillosa sensación, lefiya solo pudo sacar la lengua al sentir como su vientre era llenado por el semen de bell y este último no dejaba de correrse al sentir como el interior de lefiya no dejaba de apretar su miembro, dando como resultado que ambos llegaran al clímax simultáneamente
Cuando lefiya separo su cadera de las de bell no se esperaba que este soltara un ultimo disparo, el cual fue directo hacia ella, manchándola no solo en su espalda, sino también detrás de su cabeza, debió estar molesta por untar su cabello, pero genuinamente no le importo, su cuerpo ya estaba untado de tanta de la esencia de bell que ya no importaba
Con sus cuerpos exhausto, llenos de sudor y de los fluidos del otro fue que ambos se recostaron en la cama, tratando de recuperar el aliento, lefiya pudo sentir como el semen de bell lentamente empezaba a escurrir fuera de su entrepierna, y este por su parte usando sus ultimas fuerzas trato de cubrirla con la única parte limpia de la sabana
Aquella acción debió ser linda, la de un joven chico que quiere evitar que la joven chica se resfrié por la fría noche lluviosa, sin percatarse que la lluvia hace tiempo que habia terminado y faltaba poco para que la noche terminara, además del hecho que... el chico en algún punto comenzó a acariciarle el trasero
Lefiya lentamente se estaba quedando dormida al igual que bell, pero ante esa última sensación producida por el chico, ella simplemente... lo disfruto
Así fue como aquella noche habia terminado para ellos, la noche donde dio comienzo a esa promesa, la noche en que se unieron en cuerpo, la noche en que su relación cambio para siempre
-a pasado mucho desde esa noche- dijo bell, teniendo a una lefiya aun dormida a su lado, terminando de recordar cómo fue que todo esto inicio -y por primera vez desde que comenzamos esto yo... no eh pensado en ella- la silueta de la princesa de cabello dorado llego a su mente, solo para que al instante sea remplazada por la silueta de la joven maga elfa que tiene a su lado
Bell giro suavemente su rostro hacia un lado, observando a una lefiya dormida tranquilamente, su respiración era suave, al mismo tiempo que una sonrisa estaba en sus labios
- "es hermosa"
Pensó el chico, se sentía cómodo al estar a su lado, el hecho de que el día anterior la haya llamado por su nombre y ella haya hecho lo mismo con él mientras volvían a entregarse el uno al otro fue como si le hubieran quitado una gran carga que sostenía sobre sus hombros
Por mero impulso, bell se acerco hacia el rostro de la chica y suavemente beso su frente, acción que para su sorpresa y alegría la hizo despertar
-Nnnnn... Fuaaah- un tierno bostezo salió de sus labios
-buenos días lefiya- dijo bell con un pequeño sonrojo en sus mejillas
-buenos días bell- dijo lefiya en las mismas circunstancias del chico
Cerraron sus ojos, y juntaron sus labios en un cálido beso de buenos días
-Mmm... Nehehehe- las mejillas de lefiya se enrojecieron un poco más, al mismo tiempo que producía una tierna risa
Bell se quedo mirando esa hermosa risa que tenía afrente suyo, orgulloso de ser el único que la haya visto, para el ya no habia ninguna duda, la sonrisa de lefiya viridis era la mas hermosa en todo el mundo y estaba seguro que nadie nunca le hará cambiar de parecer
-bell
- ¿sí?
- ¿podrías preparar el desayuno? – sentándose lentamente en la cama -me gusta mucho como te quedan tus comidas
Verdad
-seguro- dijo bell, solo para darle nuevamente un pequeño beso en los labios para después salir lentamente de la habitación -no te demores
- ¡si!
Con una radiante sonrisa el día de ambos jóvenes dio comienzo
- "espero que aun tengamos muchas mas de estas mañanas tranquilas...solo nosotros dos de ahora en adelante"
Pensaron al unisonó, sin percatarse de un pequeño detalle, aquella promesa, aquel pacto que hicieron en ese día del festival... nunca mas fue nuevamente mencionado
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