~Tercer Mes~

Sus ojos se quedaron fijos en el plato de comida justo frente a él. Luego observó con disimulo el que estaba frente a su esposo.

Jin siempre ha sido alguien de estómago exigente, Por así decirlo.

Siempre podías verlo comer una cosa por ahí y otra por allá, era simplemente maravilloso notar que no ganaba peso a pesar de dicho estilo de vida. Porque sí, comer era algo vital, pero otra cosa es hacer de el consumo de alimentos un tipo de Hobbie.

Hasta el momento todo iba normal y sinceramente el Kim menor podía entender perfectamente que su embarazado esposo necesitaba incrementar el consumo de comida...

Pero ya no sabía si estaban en un día normal, almorzando, o si era un tipo de competencia para ver quién tragaba más.

Podía ver a su hermoso y delicado Omega tragar como si su vida dependiera de cada bocado. Era impresionante, de hecho, el morocho estaba asustado ¿Eso era malditamente normal? No dudaba de la capacidad metabólica de su pareja. Para nada, es una de las razones por las que está más asustado. Se acabaría toda la despensa en menos de una semana si seguía así.

No era un tacaño. Nunca se había considerado uno. De hecho, si Jin le decía que hicieran la compra del mes semanalmente, él lo haría.

¡Pero estaba en peligro la salud de su Jinnie!

¡No era normal comerse un jodido pollo él solo en minutos!

-Principe... ¿Te sientes bien?

La mirada consternada del morocho dejaba ver lo preocupado que estaba. Pero al parecer el contrario estaba más interesado en aquel plato de arroz con el que estaba batallando tan arduamente.

Sabía que a su Omega le gustaba Por alguna extraña razón el hecho de sentir que se atragantaba con la comida. Un dato bastante curioso y hasta cierto punto, perturbador. ¡Pero qué va! ¡Si todos tienen sus gustos extraños! A NamJoon le gusta observar un bonsai hasta por media hora seguida. Sí, todos tienen sus gustos exquisitamente extraños.

-Mmnh... Sí ¿Suscedeh algoh? -pregunta con sus mejillas llenas de aquel alimento blanco que tanto amaba- ¿No te ha gustado la comida?

Una vez que tragó, era más fácil hablar. Pero su esposo a penas bajaba la mirada para notar que casi ni había probado el platillo por estar más asombrado en el apetito voraz del mayor.

-Está todo exquisito. Siempre cocinas bien, Jinnie. Solamente quería saber cómo te sentías por el embarazo...

El de Nivea piel suelta una pequeña risa y niega acariciando con su mano izquierda su ya notable vientre.

-No, hoyuelos. Sé que mi comida es exquisita. Solamente quería saber si te ha gustado la comida porque de no ser así, quisiera que amablemente la pongas a mi lado. Sería una lástima desperdiciar.

Los labios del contrario se separan y frunce el ceño pero empuja su plato observando el brillo en los ojos ajenos. Bien, debería considerar seriamente duplicar las raciones de comida cuando vaya a comprarlas. Porque se estaba asustado.

-No... No... Tranquilo, lo mío es tuyo. -sonrió mordiendo su labio inferior llorando por dentro, se sentía bastante lleno solamente con ver aquellas porciones desaparecer tras los gruesos labios del anverso. - Iré a traer el postre... ¿Helado de fresas o prefieres el de galleta?

Complicada decisión. Tanto que SeokJin dejó de comer para concentrarse en pensar. Cerró los ojos meditando unos segundos antes de observar a su esposo con una seriedad que casi aterraba.

-Que sean ambos. Y trata de poner crema batida. Le da un toque encantador~

Canturrea como si no estuviese comiéndose una orden familiar de comida hace menos de dos minutos. Y por si fuera poco, ahora también quería no una, sino dos porciones de helado con crema batida.

¿Sería buena idea llevar a SeokJin al doctor?

Quizás una dieta no sea malo... Dudaba que aquello le haga bien al bebé, a ese paso, tendría un pequeño helado en vez de un cachorrito.

-No hay problema... Ahora mismo los traigo.

Quizás debería pedirle consejos a sus amigos. Es decir, habían dos de ellos que ya tenían un pequeño bebé en su hogar. Según sabe, y leyó en aquellos folletos, el apetito del gestante crecía, nunca esperó que tanto. ¿Qué serían los cambios de humor?

Esperaba que sean siempre positivos.

SeokJin era alguien muy alegre. Así que no debía tener miedo...

No debería, ¿Cierto?














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