Confianza
Pasar los fines de semana con Kenma se había vuelto una costumbre. Todos los sábados Nezuko llegaba desde temprano, almorzaban juntos y luego se ponían a ver películas o jugar videojuegos. Al rededor de las seis de la tarde se acurrucaban un par de horas, Nezuko le hacía trenzas a Kenma mientras él hablaba.
Finalmente Kenma se había abierto a ella, le había contado de su padre ausente y su madre llena de trabajo que casi no veía, sobre como conoció a Kuro y empezó a jugar voleibol, sobre como era la primera vez que estaba en una relación y todo lo que le daba miedo al respecto.
Ella también le había contado sobre su familia, sus padres que normalmente eran sobreprotectores y querían las cosas como ellos decían, aunque había aprendido varios trucos para que la dejaran hacer lo que ella quería y también sobre su hermana mayor, quien había sido su amiga de toda la vida puesto que normalmente no tenía amigos o los que tenía eran muy pocos y vivían lejos.
Ahora que ambos sabían más el uno del otro comprendían varias cosas sobre la personalidad de cada uno, además de que Nezuko finalmente le había confesado que fue por él que entró a Nekoma y efectivamente tal y como lo dijo Hinata, aquello se le había hecho muy romántico.
El dormir juntos se había convertido también en un hábito, siempre que tenían oportunidad lo hacían e incluso Nezuko lo había metido varias veces a escondidas a su casa y es que estando juntos era tan fácil quedarse dormidos como si fuera natural.
También había podido volver a ganarse la confianza de los demás, había sido una gran felicidad para ella cuando a Kuro se le salió naturalmente llamarla "Nezuko-chan" de nuevo que incluso había corrido a abrazarlo y le dio las gracias por haberla perdonado.
Todo parecía extrañamente tranquilo, ella nunca había pensado alguna vez tener una relación tan estable como en la que se encontraba ahora y era muy lindo. Suspiró mientras contemplaba la tarea a medio hacer que tenía en frente, no podía concentrarse.
Pronto el equipo iría a las nacionales y aquello la ponía extremadamente nerviosa, sentía que el equipo había mejorado bastante pero había visto varios vídeos de juegos oficiales de los equipos contrincantes y eran demasiado buenos y si no fuera poco también irían los de Karasuno.
Los chicos estaban muy emocionados y querían llegar a competir contra ellos y recrear una batalla legendaria que hacía mucho no tenían: La batalla del basurero; pero... ¿Sería que aquella batalla afectaría emocionalmente a los chicos? Sabía que podían hacer a un lado eso cuando jugaban pero ¿Después que pasaría?
Estaba especialmente preocupada por Kuro y Yaku, ya sería su último año. Todas aquellas preguntas hacían que no se pudiera concentrar y a veces que ni siquiera pudiera dormir.
Decidió mandar un mensaje a Kenma.
Nuevamente no puedo dormir, cuéntame algo :3
No tardó ni cinco minutos en contestarle.
¿Quieres venir? O yo voy
Aquella pregunta no se la había esperado pero esta vez era más fácil que él fuera, ya que no había nadie en su casa y una pequeña ayuda con su tarea no le vendría mal.
Ven, por favor TnT
Después de una media hora aquel chico había llegado con toda una bolsa llena de snacks y distintos videojuegos.
— Supuse que nos vendría bien un par de cosas, traje lo que te gusta – dijo él mientras pasaba a la casa.
Le ayudó con su tarea en lo que comían un par de los snacks, después jugaron unos minutos y posteriormente se habían acurrucado. Esta vez era Kenma quien jugaba con el cabello de Nezuko.
— Tu cabello ya está largo – comentó él mientras enredaba un mechón de éste, el cual ya le llegaba a los hombros a Nezuko.
— Sí, no sé si debería volver a cortar o dejarlo largo – respondió ella.
— Sea como sea te vez hermosa – comentó él — ¿Por qué no has podido dormir últimamente? –
— Tengo las nacionales en el pensamiento... – contestó ella y Kenma rió.
— Pensé que eso nos tenía que preocupar a nosotros –
— ¡Oye! Cómo mánager también tengo esa preocupación, no hagas de menos mi trabajo – se quejó ella haciendo pucheros.
Kenma pellizco las mejillas de Nezuko mientras ella seguía haciendo pucheros.
— Tan tierna – dijo y luego le dio un beso rápido.
Ella solo pudo sonreír ante aquel acto y acarició la mejilla del chico.
— Me da miedo, me preocupan los de tercero... Y luego tú pasarás al último año y yo me quedaré en segundo... – siguió ella suspirando.
— ¿Te preocupa que me vaya pronto? – dijo Kenma algo extrañado.
— Claro que sí, después irás a la universidad y tal vez allá encuentres a alguien mejor que yo – contestó Nezuko dramatizando demás aquella frase.
— No seas tonta, mi amor – dijo él poniendo los ojos en blanco.
Nezuko lo miró sorprendida, era la primera vez que le decía así.
Kenma se sonrojó ligeramente y volteó para otro lado para no verla fijamente.
— No podría encontrar a alguien mejor... Es por eso que... Si ganamos las nacionales te convertiré en mi prometida – continuó Kenma y después de decir aquellas palabras se escondió en una almohada que tenía cerca.
Nezuko seguía impresionada por aquellas palabras, pero logró sonreír.
— Entonces... Esfuérzate para que así sea, mi amor – contestó ella, haciendo que Kenma muriera aún más de vergüenza.
Ella sabía que incluso si no ganaban aceptaría esa propuesta, pero debía de darle una meta a Kenma para que se esforzara aún más.
Esperaba que el destino quisiera que aquello se volviera realidad.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top