Capítulo 5
Arco 1. Capítulo 5.
En el anterior capítulo
Una vez llegué a la zona pude ver que estaban muy cerca esas extrañas criaturas que parecían árboles. Los Scorpion estaban apuntando en caso de que hubiesen actos hostiles. Y cuando se acercaron el más grande empezó a hablar:
- Hola humanos. Somos los ent y venimos en son de paz. ¿Quién es vuestro líder?
- Soy yo. Me llamo Draco Ivanov. ¿Para que me buscaban?
- Así que es cierto. Hay humanos en esta isla con extraño armamento.
- ¿Cómo se han enterado?
- Los espíritus de la naturaleza hablan. Y hablan de unos extraños humanos con potente armamento plantando cara a otros humanos. La pregunta es ¿por qué?
- No soportamos su racismo contra otras razas. Y menos contra los semihumanos.
- Ya veo humano. Veníamos a que nos ayudases.
- ¿Para que me necesitan a mí y a mi gente?
- Necesitamos protección. La naturaleza pierde fuerzas y por tanto nosotros perdemos fuerzas.
- ¿Cómo quiere que le ayudemos?
- Un grupo de duendes están talando y matando a los nuestros por lo tanto nos estamos extinguiendo.
- No se preocupen. Mis tropas los ayudarán a eliminarlos. ¿Sabría decirme cuántos son?
- Son un poblado de 50 duendes. Al principio nos respetaban pero conforme aumentaban en número empezaron a buscar más espacio y nos veían como enemigos.
- Bien. A cambio necesitamos su ayuda
- ¿Con qué humano?
- Con los elfos.
---------------
Tras esta conversación con los seres llamados ents firmamos una alianza en la cual nosotros protegeriamos su bosque de origen de cualquier amenaza y ellos nos ayudarían a entablar buenas relaciones diplomáticas con los elfos para que no me ataquen nada más verme y poder ayudarlos contra los humanos "nazis" de este mundo.
También teníamos que encontrar a la resistencia humana que conocemos bien poco según nos cuentan los refugiados. Al parecer se ocultaban en las montañas del continente Nav y hacían de guerrilleros contra las caravanas de recursos para el imperio pero aún así estaban débiles.
Mientras tanto los 3 pelicans habían regresado con más refugiados pero dado que era prácticamente de noche mandé a un ODST y un marine a que los llevara a las viviendas y a presentar de la base lo básico.
Me fui hasta mi casa extrañado de no ver a Karla en todo el día. Aunque claro yo también he estado muy ocupado. Pero antes me paró el comandante Jackson:
- Señor Draco.
- ¿Qué ocurre comandante?
- ¿Tiene un minuto señor?
- Sí comandante. ¿Qué ocurre?
- Quería informarle de la misión de rescate.
- Adelante.
- 20 civiles rescatados todos semihumanos. Mayoritariamente son chavales y su líder se llama Ari y parece ser una semizorro.
- Ya veo. ¿Algún dato más?
- No señor. Solo sabemos que son pocos y que huyen del exterminio de los suyos. Aparte de eso nada.
- Bien. Váyase a descansar que se lo ha ganado. Mañana hablaremos.
- Señor si señor.
Tras esta breve conversación retomé mi camino hasta mi casa que necesitaba descansar ya de una vez. Habia sido un día largo y algo me decía que el resto de días en este mundo iban a ser iguales.
Llegué a mi casa por fin. Fui a la habitación de Karla porque pensaba que ya estaría durmiendo a estas horas. Pero no estaba así que me dirigí a mi habitación para ver si estaba durmiendo allí.
Lo que me encontré fue sorprendente. Karla estaba desnuda encima de mi cama como esperándome. Entonces me habla:
- Te ofrezco mi cuerpo por habernos salvado a mí y a mi gente.
- No hace falta tranquila. - digo mientras trato de irme pero de repente noto como me agarran y me pone en la cama a la fuerza. Se había transformado en demonio. La verdad me gustaba un poco la verdad.
- Estoy aquí para cumplir con mi deber de devolverte el favor.
- Te dije que no... Que no es lo que buscaba -digo nervioso. La veo temblando de repente. - ¿Tienes miedo, verdad?
- ....
- No te quiero hacer daño.
- Sé que no harías eso. Por eso me gustas.
- Karla... - Entonces nos besamos.
Dejamos de hablar solo. Éramos solo cuerpos que se amaban y que se sentían el uno al otro. Me quité la camisa junto con los pantalones y la ropa interior.
Simplemente nos dejábamos llevar. Yo besaba su cuerpo desnudo y le penetraba mientras ella gemía de placer... Lo que yo no sabía es que desde una cámara que había en mi casa me estaba observando Vita, la inteligencia artificial de la base.
Mientras observaba desde la interior de la CPU mediante una holopantalla, Vita no sabía lo que le pasaba. Le estaba empezando a doler el pecho de repente porque sentía que le latía el ¿corazón? rápidamente mientras veía esa escena.
Al día siguiente....
Me desperté otra vez por los rayos del sol de la mañana. A mí lado estaba Karla desnuda pero cubierta por las sábanas. La besé en los labios para despertarla suavemente. Vi como abría esos bonitos ojos cada uno de un color y me sonrió. Entonces le saludé:
- Buenos días Karla. ¿Has dormido bien?
- Sí Draco. Con el hombre que quiero. - Me besa. -¿Y tú?
- Igualmente Karla. Tengo que hacer unas cuantas gestiones hoy. Vamos a levantarnos.
- Vale Draco.
Nos levantamos y nos vestimos. Después nos fuimos a poner la ropa para luego desayunar en la cocina. Tras esto nos despedimos con un beso en la boca.
Me dirigí hasta la base principal. Me recibió Vita:
- Buenos días Draco. ¿Has dormido bien?
- Sí he dormido bastante bien. ¿Alguna novedad?
- Los satélites han detectado una especie de flota acercándose a nuestra costa del este. Desconozco la bandera pero está principalmente tripulado por humanos armados.
- Debe ser ese famoso reino humano racista. Habrán descubierto nuestra reciente incursión en su territorio y la desaparición de sus soldados en el nuestro.
- ¿Preparamos las defensas antinavales?
- Sí será lo mejor. Avisaré a las tropas. Mientras tanto di a todos que estén alerta.
- No voy a descansar ni un solo día de verdad.
- Parece que no Draco.
- Bien. Tú encárgate de base y yo de lo otro.
- Vale.
Mediante la radio de la base llamé al Comandante Jackson para que preparase las defensas de la costa:
- Comandante Jackson, bienvenido.
- Buenas señor. ¿Para qué me ha llamado?
- Lleve los Scorpion que tengamos y a cuatro sistemas de artillería kodiak para defender nuestra costa oeste.
- ¿Por qué señor? ¿Nos atacan?
- Se está acercando una flota de barcos del famoso reino humano. Necesitamos que no se acerquen.
- Comprendo señor.
- Llévate a los ODST para recoger a los posibles supervivientes del agua.
- Señor sí señor.
Se fue a llevar y preparar los tanques y la artillería.
Tras un rato largo de espera...
De repente recibo una llama desde la costa por parte del comandante Jackson.
- Señor ya están a la vista. ¿Disparamos?
- Sí disparen.
- Bien señor.
Aquí nuevo capítulo gente. Espero que os guste. Y pronto actualizaré.
Un saludo y hasta pronto
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top