Arco 2. Capítulo 21.

En el capítulo anterior.

- Fuerzas especiales de contención de anomalías.

- ¿Cómo se le ha ocurrido esta idea?

- Por el mundo en el que vivimos señor Ivanov. Deben existir criaturas, entes u objetos demasiado peligrosos/  poderosos/ extraños para que estén sueltos y así poder asegurar que no causen estragos.

- Me parece correcto. ¿Cómo se organizarían estas nuevas fuerzas especiales sargento?

- Usted sería la cabeza visible señor pero acompañado de un consejo de 5 personas a su elección, confío en que yo sea una de ellas, para las decisiones más importantes y estratégicas para las misiones y demás.

- Sí claro que será una de esas personas. He de suponer que requerirán instalaciones, equipamiento para los soldados, científicos,  material de contención, etc... ¿No?

- Sí señor Ivanov.

- Tengo un par de preguntas sargento.

- ¿Cuáles señor Ivanov?

- Una es ¿Cómo se llamarán estas fuerzas especiales?

- Serían las EAA o Escuadrón Anti Anomalías.

- Vale, me gusta. Y ¿solo será un equipo o varios?

- Serán varios equipos. Cada equipo está dedicado a contener distintos tipos de amenazas. Ya sea desde más científicas a más esotéricas, señor Ivanov.

- Comprendo. Bien eso es todo. Mientras construyen unas instalaciones para la EAA pueden utilizar las ya existentes, reservando una zona de los laboratorios y de la zona del ejército para esto. Si alguien quien sea le dijese algo dile que venga a verme. 

- Me sentiría más seguro si me firmase una autorización, señor Ivanov.

- Está bien. Afortunadamente tengo unos papeles de autorización estándar. - Te los firmo - Aquí tienes. Cada vez que alguien se le ocurra discutir sobre eso muéstrele esta autorización.

- Sí señor Ivanov.

- Por cierto. Prepara un equipo de respuesta rápida para la contención de alguna anomalía.

- Sí señor.

Tras esto se retiró e hice llamar al Jefe Maestro. En cuanto vino le empecé a decir sobre la nueva misión:

- Buenos  días Jefe Maestro.

- Buenos días señor Ivanov. ¿Qué quería señor?

- Necesito de su ayuda para una misión de rescate de una civil en pleno territorio enemigo.

- Sí señor. Necesito más información. 

- Es cercano al castillo del enemigo y será una misión nocturna. Prepare un equipo de ODST mientras tanto. 

- Sí señor.

Tras esta conversación se fue y yo continué revisando más informes y detalles de cargamentos y demás...

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Pasé horas y horas encerrado revisando datos hasta que a mitad de la tarde Vita me habló:

- Buenas tardes Draco.

- Buenas Vita. ¿Qué ocurre?

- Hay un grupo de semihumanos a las puertas del muro sur.

- ¿Cuántos son, Vita?

- Son solamente 5.

- ¿Cuál es el problema?

- Quieren hablar contigo personalmente.

- ¿Se sabe de qué?

- No solo sé que hay dos elfos entre ellos. Más bien elfas.

- Ya veo. Al menos podré salir del despacho un rato. Que me preparen un vehículo con una pequeña escolta de dos marines y dos ODST.

- Ahora mismo me encargo Draco. Espera un momento...

- ¿Qué ocurre Vita?

- Me avisan de que se ha abierto un portal en la base dentro del bosque ent.

- ¿Dentro de la base?

- No. A las puertas.

- Pues cambiamos el rumbo. Qué me lleven rápidamente a la base del bosque ent. Porque no tenemos los trenes aún operativos ¿no?

- No, Draco.

- Pues nada. Preparamelo rápido.

- Estará enfrente del centro neurálgico de la base en menos de 5 minutos.

- Vale bien. Que apunten todos al portal. No sabemos que puede salir de aquí.

- Si por supuesto.

Literalmente estuvo en menos de cinco minutos. Era un warthog con ametralladora donde yo iba en el puesto de copiloto, un ODST de piloto, los dos marines en el asiento trasero y el último ODST en el sitio de la ametralladora. 

Fue un camino rápido debido a que habían semi- asfaltado el camino para poder llegar correctamente y sin muchas dificultades. El problema llegó en la zona del bosque porque teníamos que tener cuidado de no derribar ningún árbol.

Tras un camino tortuoso para evitar derribar árboles llegamos hasta la zona donde se había abierto el portal. Los ODST estaban apuntando al portal y cuando llegamos salió algo del portal y se cerró automáticamente. 

Parecía un hombre que llevaba una extraña armadura de color amarillo con un casco con un visor en forma de t muy fino. Estaba acompañado de una antigua pistola norteamericana 1911 y un rifle de francotirador también bastante antiguo. Desde hace bastante tiempo que no se usaban estas armas. Estaba inconsciente. Mandé a los ODST que se lo llevasen a la enfermería de la base para curarlo y luego se lo llevasen a la zona de interrogatorios.

Algo me decía que iban a seguir viniendo personas de otros mundos a través de distintos portales y demás. Afortunadamente el hombre se encontraba en buen estado a pesar de estar inconsciente. En cuanto se recuperó de las magulladuras y los pequeños cortes que tenía por el cuerpo se lo llevaron a la sala de interrogatorios. 

Fui hasta la sala de interrogatorios y puse a dos ODST vigilando la puerta por fuera y a otros dos ODST vigilando la sala dentro, concretamente al desconocido que estaba atado con esposas en las manos. Me senté delante de él y despertó. Entonces empecé a hablar:

- Buenas tardes.

- ¿Buenas tardes...? ¿Do... dónde estoy? 

- Primero de todo caballero: ¿Como se llama?

- Soy Yellow Eye. ¿Y usted es?

- Soy Draco Ivanov. Bien. Aclaradas las presentaciones ¿Qué le ha ocurrido? Lo único que sabemos es que apareció de un portal completamente magullado y con varios cortes por el cuerpo e inconsciente.

- Más o menos recuerdo algo. Estaba huyendo de alguien o algo con mis compañeros de equipo a través de un portal. Hubo unas extrañas interferencias y ahora me encuentro aquí.

- Vale bien. ¿De qué año es usted señor Yellow?

- Cuando escapamos era 2017. ¿Dónde estamos?

- Supongo que no hay muchos motivos para no decírtelo. Estamos en un mundo fantástico con diversas criaturas "mágicas". Bienvenido a una de las bases de Terra Nova.

- Ah, ok.

- ¿Por qué no estás sorprendido?

- En mi mundo estoy acostumbrado a tratar con todo tipo de anomalías. De normal trato con alienígenas, demonios, agua curativa, dioses, etc. Estoy más que acostumbrado. 

- Tengo una pregunta. ¿Tienes alguna cosa en contra de los que no son humanos o al menos completamente? 

- En verdad, me da igual. Simplemente soy un mercenario y un asesino. No hago distinciones a la hora de eliminar objetivos. Además mi equipo está formado por una gema, una serpiente humanoide, un robot, un alienígena y un humano fusionado con un elemental de hielo. Los únicos humanos somos yo, mi compañero Violet y mi líder Comando.

- Es muy interesante saberlo señor Yellow Eye. Tengo algo que proponerle pero antes. - le digo a los ODST que abandonen la sala.

- Sí señor Ivanov. - Se marchan

- Bien por donde íbamos... Ah sí. ¿Le gustaría trabajar para mí de manera fija? Le aseguraría un hogar y un trabajo fijo como su propio nombre indica. Y lo mismo le ofrecería a sus compañeros en el caso de viniesen a este mundo. ¿Trato hecho?

- Me parece bien. ¿Y cuando me instalo?

- En el momento que te retiren las esposas y mis soldados te acompañarán hasta tu nueva casa. Luego te presentarás en la base principal. Diles que vas directamente de parte del señor Draco Ivanov y que buscas al general Valdez.

- Bien. ¿Se me devolverán mis armas?

- A pesar de que sus armas son "antiguas" comparadas con las nuestras no serán devueltas por motivos de seguridad civil.

- Supongo que es justo. Bueno, me acompañan ya a mi nueva casa ¿o qué?

- Sí ahora van. Que yo también estoy ocupado.

Tras esta breve conversación con el extraño mercenario conocido como Yellow Eye se lo llevaron a su casa y yo me fui poco después en un pelican  acompañado de un par de ODST hasta la zona que Vita me había dicho antes para reunirme con los otros semihumanos y las elfas. Los marines que me habían acompañado se asegurarían junto con otros ODST de que el nuevo invitado no intentara hacer tonterías mientras lo llevaban a su nueva casa.

Llegamos en unos 10 minutos. Llegamos a las puertas del muro sur que estaban cerradas.  Entonces pedí el informe de lo que estaba pasando afuera de los muros a uno de los cabos que se encargaban de la seguridad  de éstos. 

- Buenas tardes cabo.

- Buenas tarde señor Ivanov.

- Informe de la situación cabo.

- 3 semihumanos y 2 elfas.

- Lo de los semihumanos es obvio que se ven porque tienen ciertas partes humanas y animales.

- Y ¿cómo han supuesto que eran elfas?

- Por las orejas, señor. Y si me lo permite me parecen bastante atractivas.

- Contrólese cabo. - digo con una sonrisa - ¿Tienen algún arma?

- Los semihumanos parece que llevan una especie de dagas mientras que las elfas una lleva un báculo y la otra un arco.

- Retirarles las armas en cuanto entren incluyendo el báculo. La seguridad de los civiles es lo primero.

- Sí señor Ivanov.

- Que abran las puertas. 

Las puertas empezaron a abrirse lentamente mientras las sirenas sonaban con un sonido algo estridente. Tardaron un poco y la verdad deberían aumentar la velocidad de estas. Cuando por fin se abrieron vi quienes me buscaban.

Eran dos elfas: una con el pelo rubio y liso pero con una coleta con un vestido verde que parecía hecho de plantas y bastante sugerente la verdad. Estaba armada con el arco que parecía hecho de madera como se hacía antiguamente. Atrás tenía un carcaj de flechas con plumas.

La otra elfa tenía el color de pelo marrón oscuro  con un vestido de ¿cuero? de color rojo ,un poco revelador como no, y un báculo de madera oscura rematado en una especie de cristal cubierta por ramas que emanaba luz de color verde. También era interesante ver que tenía una pluma de color verde radioactivo. 

Pero también les acompañaban tres semihumanos más bien semihumanas:

Una tenía orejas de lobo de color gris, un pelo gris oscuro con algunaz partes de color gris bastante claro, vestida con guantes grises de piel y con un abrigo de color negro, una falda gris y una bufanda de un color muy blanco. Lo que más inquietaba eran sus ojos de color azul eléctrico.

Otra de las semihumanas tenía orejas y una cola de marrón claro de zorro. Llevaba un vestidito blanco decorado con un lazo a cuadros de color naranja y blanco. Parecía bastante joven y como no llevaba una falda algo corta de color marrón.

(Ignorad por favor la letra que aparece. Lo encontré en Google)

Y la última semihumana era interesante. Tenía el pelo rosa, piel clara vistiendo una especie de blusa de color amarillo y una falda de color azul oscuro. Pero lo más interesante es que era mitad serpiente. La cola era de color rosa y tenía los ojos de color amarillo oscuro.

Se acercaron y la elfa que llevaba el arco se adelantó y preguntó:

- ¿Quién es el líder de este sitio?

- Soy yo. Draco Ivanov, líder de Terra Nova tanto política como militarmente.  ¿Y usted es señorita...?

- Soy Amarïe. Princesa del reino de Lindon.

- Encantado de conocerla señorita Amarïe. Le pido por favor que usted y sus acompañantes entreguen las armas incluyendo el báculo de su amiga. Es simplemente por seguridad.

- ¿Pero se nos devolverán?

- En el momento que se terminen las relaciones diplomáticas entre nosotros.  Repito por segunda vez: entregue usted y sus acompañantes sus armas.

- Tsk vale. - Los ODST recogieron las armas de las semihumanas y de ambas elfas.

- Y ahora sí. Acompáñenme hasta base para poder hablar fácilmente.

Aquí nuevo capítulo gente.  Espero que os guste y hasta pronto guapos/as.