Capítulo 19.

Arco 2. Capítulo 19.

En el capítulo anterior.

Entonces me empiezo a acercar junto con dos ODST y otros dos científicos. Los científicos miraban con curiosidad a la criatura y los ODST les apuntaban con sus rifles de asalto ante cualquier posible acto hostil de las misteriosas criaturas. Pero solo gimió un poco y terminó por morir finalmente. Entonces digo:

- Hay que avisar inmediatamente a la base de la montaña. Tenemos que llevarnos los cuerpos de estas criaturas inmediatamente y estas máquinas habrán que transportarlas a las distintas bases que tenemos.

- Pero señor Ivanov - me dice uno de los científicos. - ¿Cómo haremos para transportar estas enormes máquinas?

- Tendremos que dividirlas en varias partes. No sabemos nada de su fisionomía ni de su tecnología. Seguramente incluso nos ayude a avanzar más rápido.

- Sí señor Ivanov. Ahora avisaremos a la base.

- Bien, andando.

- Señor, sí señor. - dicen todos al unísono.

Tras esto empezaron a recoger los cuerpos de los extraños seres y los llevaron a una especie de jaulas de cristal blindado con agujeros para oxígeno aún estando muertos e intentaron abrir por donde habían salido las criaturas y salió un líquido rojizo claro de éste a modo de mini-cascada. Lo peor es que olía como a sangre mezclada con agua, es decir, sangre aguada. Mandé a que recogiesen muestras del extraño líquido rojo para analizarlo y determinar correctamente su procedencia.

Pedí que me llevasen arriba con un hornet que era momento de hablar de nuevo con el doctor Wu.

---------------

Menos mal que había un ODST disponible para llevarme en hornet hasta la base de la montaña. Al menos no hubieron muchas interferencias de camino a la base ni aéreas ni electromagnéticas.

En cuanto llegamos me dirigí automáticamente hasta donde estaba el doctor Wu. Le dije que teníamos que hablar urgentemente:

- Doctor Wu tenemos que hablar urgentemente y con rapidez.

- Sí señor Ivanov. ¿Qué ocurre?

- ¿Tenemos a disposición algún tipo de tecnología de clonación o resurrección de muertos?

- Estamos estudiando esa tecnología y estamos cercanos de un prototipo para resucitar muertos y clonar. ¿Por qué señor Ivanov?

- Hemos descubierto unas extrañas criaturas que han salido de una especie de máquinas de guerra que se encontraban enterradas.

- Comprendo señor Ivanov. Y requiere de los conocimientos de estas criaturas ¿no?

- Sí doctor Wu. Su tecnología nos podría ir muy bien. Pero sin que uno de los especímenes conseguidos nos muestre como funciona y así nosotros poder adaptarla a nuestras necesidades.

- Sí señor Ivanov.  Nos pondremos enseguida a seguir estudiando esa tecnología.

- ¿Por cierto ya les han llegado los androides?

- Sí señor. Están operativos pero aún nos faltan los drones.

- Lo sé. Aún estaban creandolos cuándo me fui. Me dijeron que me avisarían cuando los tuvieran. Pero como he estado más o menos incomunicado pues quizás no hayan podido contactar conmigo.

- Quizás tenga razón señor Ivanov.

- Pero ¿mientras tanto os sirven los androides para ayudar a los ODST y a los científicos para la exploración de ese nuevo bioma?

- Aún no hemos iniciado ninguna expedición pero pronto iniciaremos una. Por lo pronto sabemos, lo poco que hemos explorado e investigado, es que  existen mucha fauna y mucha vegetación nueva, nuevos yacimientos minerales y un nuevo posible combustible también. Además existen unas extrañas ruinas metálicas.

- Ya comprendo. Pero mientras tanto ¿pueden enviar alguna misión con los dos nuevos androides?

- Sí señor Ivanov. Pero ante la falta de drones se nos limita el rango de exploración y de acción por ejemplo en riscos, montañas muy escarpadas, sitios de una gran altura y entornos peligrosos. 

- Lo comprendo doctor Wu. ¿Han estado enviando reservas de materiales nuevos a la base principal para poder seguir construyendo maquinaria bélica y civil?

- Sí señor.

- Bien. Voy a dar una vuelta alrededor de la base mientras tanto y....

De repente Vita me avisa desde base que hay dos personas que buscan hablar conmigo. Lo que me faltaba por hoy: Primero descubrimos dos extrañas criaturas, seguramente alienígenas,  con sus respectivas máquinas de guerra enterradas bajo la isla. Segundo descubrimos extrañas estructuras, más bien ruinas, metálicas que parecían artificiales sin saber su procedencia en la cueva que recién habíamos descubierto y ahora dos personas querían hablar conmigo. Tuve que llamar al piloto del pelican para que me llevase de vuelta a la base principal.

Estuve un buen rato esperando porque el piloto estaba tomando un café en la cafetería de la base con algunos compañeros. Debería haber pasado yo también por allí que tenía un poco de hambre la verdad. Pero ya comería en cuanto llegase a la base principal tras las dos reuniones que tenía.  Ahora entendía a mis superiores en la Tierra.

Cuando terminó de tomarse el café, tras 15 minutos, nos dirigimos hasta el pelican que me llevaría hasta la base principal. Era un trayecto corto pero cuando llegamos ya era bastante tarde. Era casi de noche pero me fui a mi despacho del centro de operaciones donde dije a Vita que dejase pasar a la primera persona que quería hablar conmigo. Era una de las prisioneras que hicimos hace unos días antes. Estaba acompañada de dos ODST que la dejaron por la fuerza en la silla y con las esposas en las manos. Me presenté:

- Buenas tardes señorita. Soy Draco Ivanov, líder de Terra Nova. ¿Con quién hablo?

- Soy la princesa Kendra del reino de Raden. Si usted es el líder de Terra Nova ¿por qué se reúne con una prisionera?

- Prefiero tratar personalmente con los líderes o prisioneros de distintos bandos. No me gusta dejar estos asuntos en manos de diplomáticos.

- Ya veo...

- ¿De qué quería hablar conmigo señorita Kendra?

- Tengo algunas preguntas...

- Dígame.

- La primera: ¿Todos sus soldados son magos y como es que tienen golems, elefantes y dragones de hierro?

- No. Todo es producto del esfuerzo científico. Y no son golems ni elefantes ni dragones. Son máquinas de guerra. Es un tema complicado de explicar.

- Mmmm. No lo entiendo muy bien pero vale... ¿Por qué no nos habéis ejecutado?

- No tiene sentido tu pregunta. ¿Para qué vamos a ejecutaros?

- Porqué soy una de las principales exponentes del enemigo.

- Señorita no nos interesa ejecutarlos. Simplemente sois prisioneros de guerra. Además aún les necesitamos. Y no. no puede preguntar el porqué.

- Ehhhh vale.

- ¿Alguna pregunta más?

- ¿Me podría ayudar...?

- Pero si acabas de decir que porqué no te ejecutabamos por ser del enemigo. Y ahora ¿pides nuestra ayuda?

- Sí... No apoyo para nada las políticas de mi padre y necesito que rescaten alguien que me importa...

- Está bien. Te ayudaremos. Pero simplemente por conveniencia. ¿A quién debemos rescatar señorita Kendra?

- A mi mejor amiga. Está siendo atosigada por algunos chicos de mi ciudad...

- Mmmm ya. Necesitamos más datos sobre la ciudad y la casa donde vive tu amiga.

- ¿En... Enserio me van a ayudar?

- Sí señorita Kendra. Pero antes por favor abandonen la sala un momento por favor. - Le digo a los ODST.

- Sí señor Ivanov. - Salieron de la sala.

- Vamos a ver señorita Kendra. Su "mejor amiga" es su pareja ¿verdad?

- Sí... Pero mis familiares no lo saben ni lo aceptarían. Por favor salvenla.

- No te preocupes. Sé lo que se siente. Tranquila que la salvaremos.

- Muchas gracias señor Ivanov.  - dice casi llorando - Le daría un abrazo pero no puedo.

- No pasa nada. Creo que puedo ofrecerle un trato. La llevaremos a una casa cercana a la mía y podrás vivir tranquilamente. Pero hasta entonces tendrás que ir con las esposas.

- Gracias por ayudarme señor Ivanov.

-  No es nada. Ahora le llevarán a su casa. Cualquier duda di Vita en voz alta y se me avisará automáticamente de que quieres hablar conmigo.

- Sí señor Ivanov.

- Luego hablamos si eso. Además es tarde y debes estar cansada. Mis soldados te acompañarán hasta tu casa.

- Vale señor Ivanov.

Avisé a los dos ODST de antes que entrasen para llevársela a la casa y Vita me recordó que aún quedaba una persona que quería verme. Le dije que la dejase pasar. Mientras revisaba unos informes de transporte de mercancías y materiales, movimientos bélicos, estudios del entorno en las tres zonas que estaban estudiando entró Victoria así que la saludé:

- Buenas noches Victoria. ¿Qué  ocurre para hablar conmigo a estas horas?

- Quería hablar sobre lo de mi mitad unicornio.

- Sinceramente no sé mucho sobre este tipo de temas pero si tengo que suponer diría que en algún momento de tu vida te fusionaste con un unicornio que se quedó dentro de ti.

- Cuando nací fusionaron el alma del último unicornio de Idhún con mi alma. Y aquí estoy ahora. Luchando en una guerra por la libertad de un mundo que ni siquiera pensaba que existía.  Y acertaste más o menos.

- Sabes que es un pequeño don que tengo desde siempre.

- No sabes lo que te he echado de menos. Cuando me enteré de que moriste...

- Lo sé. No pude ni despedirme de ti. Pero no elegí morir porqué sí. Fue el destino.

- Sí supongo... - Me da un abrazo y yo se lo devolví.

- ¿Querías hablar conmigo de alguna cosa más?

- No, no era solo eso. Buenas noches y que descanses Draco.

- Igualmente Victoria.

- Se marchó y tras un rato siguiendo comprobando informes de distinta índole salí del despacho y del centro neurálgico de la base hasta mi casa. Era tan de noche que las tres lunas brillaban en su máximo esplendor. Según la hora del reloj de la casa eran las 12 de la noche. Karla estaba durmiendo, al igual que la pequeña hidra.

Le di un beso en la frente y la arropé un poco mejor. Me cambié de ropa y me acosté en la cama. Me costó un poco dormirme pero afortunadamente pude dormir tranquilamente. Era extraño que no tuviese ningún sueño pero sí que escuchaba voces que eran ininteligibles.

Al día siguiente desperté otra vez por los rayos de sol y porque Karla me despertó con un beso en la boca. Me dijo que tenía que salir un rato antes. Le pedí si se podía quedar con la hidra porque yo estaba muy ocupado últimamente.  Me dijo que vale pero que le debía un favor y yo le dije que se lo devolvería con gusto.

Me cambié,  desayunamos un poco y me dirigí rápidamente hasta mi despacho en la base principal. Una vez llegué a mi despacho me quedé revisando más informes hasta que Vita me avisó de un suceso extraño:

- Buenos días Draco.

- Buenos días Vita. ¿Qué ocurre?

- Se ha abierto un portal extraño a pocos metros de la puerta este de la base.

- ¿Cómo? Avise a las tropas disponibles para ir rápidamente hasta la zona.

- Sí Draco. Aunque tengo que darte otra noticia.  Son civiles acompañados de soldados armados con rifles extraños, mechs, tanques, eetc y liderados por una especie de androide.

- Voy ahora mismo.

Se prepararon rápidamente tropas afuera del centro y me llevaron hasta la zona donde se encontraban esos humanos. Afortunadamente estaban relativamente cerca y cuando nos vieron apuntaron sus armas al igual que mis soldados a ellos. Pero el extraño androide dijo que bajasen las armas y yo hice lo mismo. Entonces le pregunté:

- Buenos días. Soy Draco Ivanov,  líder político y militar de Terra Nova. ¿Con quién tengo el placer de hablar?

- Buenos días señor Draco Ivanov.  Yo soy el Dr. Samuel Hayden. - Dice el androide.

Aquí nuevo capítulo gente.  Espero que os guste y hasta pronto guapos/as.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top