{{{Los personajes que aparecen en esta historia no me pertenecen, son de sus respectivos creadores, lo único que me pertenece es la historia}}}

+++ Anteriormente +++

Luego de eso el tren hacia Hogwarts partió.

Sin embargo, a mitad del camino de pronto el tren se detuvo, las luces se apagaron y la temperatura disminuyó.

"¿Qué ocurre?", preguntó Neville.

"Esto es malo", susurró Harry.

"¿Qué quieres decir?", le preguntaron los gemelos.

"Son dementores", respondió Elizabeth con una voz fría que era reflejada en sus ojos. Una voz que nunca habían escuchado en la cálida Diosa Elizabeth.

En el exterior los dementores comenzaron a acercarse hacia el detenido tren.

Hermione comenzó a lanzar hechizos de calentamiento.

Los dementores habían comenzado a entrar en el tren.

+++ Actualmente +++

Muchos que se encontraban en el tren comenzaron a asustarse, en especial los de primer año. Los dementores ya estaban en el tren y comenzaban a revisar todos los compartimientos.

"Los del ministerio son imbéciles, ¿Cómo se les ocurre mandar a los dementores a un tren lleno de niños?", mostró su molestia Hermione.

Oyeron gritos asustados que venían de distintos lugares, lo peor de todo es que seguían llegando dementores.

Los pecados y Elizabeth decidieron ayudar, no permitirían que nadie saliera lastimado. Ya no les importaba que descubrieran quienes eran, lo único importante era la seguridad de los estudiantes.

Elizabeth de inmediato salió de su compartimiento y comenzó a alejar a los dementores con sus poderes de diosa.

Harry creó un gran agujero en la ventana y decidió alejar a los dementores que aún no llegaban al tren. Así que activó su materia oscura y creó alas de oscuridad. Voló así el techo y comenzó a lanzar llamas del purgatorio a todo dementor que se acercaba.

Los demás pecados usaron su propia magia y desintegraron a todo dementor que encontraban. Elizabeth fue la que más acabó con dementores ya que sus poderes son lo opuesto y los superan por mucho, así que ella decidió no contenerse y eliminó a todos sus enemigos.

Harry quemó sin piedad a todos los dementores que intentaban acercarse. Los que aún estaban lejos se dieron cuenta de que si se acercaban morirían, así que decidieron retirarse. Harry se aseguró de que los dementores ya no estuvieran a la vista para volver a su compartimiento.

Al regresar vio que todos habían regresado. Hermione se encargó de arreglar el agujero que Harry había hecho.

Pero había algo extraño, el frío no había desaparecido. Esto extraño a los pecados y a la diosa. Elizabeth decidió salir a averiguar lo que ocurría, pero de pronto dos dementores bajaron del techo y comenzaron a succionar el alma de Elizabeth.

Harry al ver eso reaccionó antes que cualquiera y tiró a Elizabeth hacía Luna y Hermione quienes la atraparon y la apartaron lo más que pudieron de los dementores.

Harry agarró a los dementores del cuello (Si es que se le puede llamar así) y los sacó con fuerza del compartimiento.

Su marca estaba en su frente y sus ojos de demonio estaban tan llenos de ira que matarían a cualquiera con solo una mirada. La temperatura descendió aún más y un poderoso instinto asesino fue liberado.

Los pecados se estremecieron por el gran instinto asesino que sentían, sin duda alguna su capitán estaba furioso.

"¿Cómo se atreven?", les preguntó Harry a los dementores, "¿Cómo se atreven atacar a MI mujer?", les volvió a preguntar. Su cuerpo temblaba de ira.

Los dementores se retorcía por el increíble instinto asesino que sentían. Lo único que deseaban era liberarse y huir de ese lugar para alejarse del furioso príncipe de los demonios. Al parecer habían reconocido a Harry demasiado tarde y habían atacado a alguien importante para el príncipe. Lamentablemente para ellos se dieron cuenta de eso demasiado tarde.

Harry miraba con gran furia a la basura que se había atrevido atacar a Elizabeth. Sus llamas del infierno comenzaban a aparecer en sus manos y quemaban a los dementores quienes chillaban de dolor.

Lentamente los dementores comenzaban a volverse cenizas. Harry les había dado una muerte lenta y dolorosa.

Cuando finalmente ya no quedaba nada de ellos Harry comenzó a calmarse y su instinto a retroceder. La temperatura poco a poco comenzó a volver a la normalidad.

Harry dio largas y profundas respiraciones, necesitaba controlar su ira. Finalmente, cuando pudo controlarse y se sentía más calmado se giró hacia su compartimiento.

Lo que vio le hizo levantar una ceja. Los pecados estaban todos de rodillas y sudaban como si acababan de terminar una maratón. Elizabeth estaba inconsciente en los brazos de Hermione y Luna quienes la protegían de cualquier peligro que pudiese aparecer. Fue entonces que se dio cuenta de que se había excedido al liberar su instinto.

"Lo siento, creo que me excedí un poco", se disculpó Harry.

"¿Un poco?", le preguntó Fred con burla mientras se levantaba.

"Creo que tu definición de poco es diferente a nuestra definición", le dijo George con el mismo tono de burla que su gemelo mientras también se levantaba.

El resto de los pecados también comenzó a levantarse. Hermione acomodó a Elizabeth en sus brazos y comenzó a usar su magia para curar el daño que los dementores le hicieron.

Neville salió del compartimiento para revisar cómo estaban los demás. Cuando se dio cuenta de lo que pasaba de inmediato regresó flotando a gran velocidad.

"¡Capitán!", gritó Neville alterado.

"¿Qué ocurre?", le preguntó Harry.

"Todos están desmayados gracias al instinto asesino que liberaste", le respondió en forma de regaño mientras cerraba la puerta.

"Vaya, eso es malo", dijo Hermione sin tomarle mucha importancia. Comenzó a extender su magia por todo el tren y todos comenzaron a despertar.

"¿Qué hiciste?", le preguntó Luna con curiosidad a Hermione.

"Simplemente los desperté a todos ya que no quiera llegar más tarde de lo que ya vamos", respondió Hermione tan tranquila como siempre mientras acariciaba la cabeza de una dormida Elizabeth.

"Entiendo", fue lo único que dijo Luna.

"¿Qué ocurre capitán?", le preguntó George mientras veía a un pensativo Harry que miraba por la ventana mientras el tren partía una vez más.

"Estoy planeando una reunión con Dumbledore", respondió Harry.

"¿Por qué?", preguntó Fred.

"Al parecer tendrá pesadillas con dementores", Harry sonrió maliciosamente, "¿Quieres venir conmigo Luna?", le preguntó.

"Claro, será divertido", sonrió Luna con inocencia.

Elizabeth despertó y se acomodó en el asiento del tren bajó las atentas y sobreprotectora mirada de Harry y Hermione.

De pronto la puerta se abrió y un adulto con cicatrices en su cara que estaba vestido con ropas viejas y desgarradas estaba en ella.

"¿Se encuentran bien?", les preguntó.

"Si", le contestó Neville, "Pero ¿Quién eres tú?", le preguntó.

"Mi nombre es Remus Lupin y soy vuestro nuevo profesor de defensa contra las artes oscuras", respondió presentándose.

Sin que se diera cuenta Luna comenzó a ver sus recuerdos.

"Interesante", susurró Luna al ver la relación que tenía Remus con el padre humano de Harry. Decidió transmitir de inmediato la información y en unos segundos Elizabeth y el resto de los pecados sabían la vida de Remus.

Elizabeth regañó con la mirada a Luna ya que ella consideraba que había indagado en la vida de alguien si su permiso. Luna solo se encogió de hombros sin darle importancia.

"Un gusto profesor, soy Elizabeth Taylor, ellos son mis amigos Neville Longbottom, Fred y George Weasley, Luna Lovegood, Hermione Granger y mi novio Harry Potter", se presentó ella y presentó a los demás.

Todos asintieron cuando su nombre fue dicho por Elizabeth.

"El gusto es mío", contestó Remus mientras miraba a todos en especial a Harry el cual miró más tiempo, "Pero será mejor que coman chocolate", les dijo mientras les extendía un poco de chocolate.

"No es necesario profesor", le dijo George.

"Nosotros tenemos chocolate", le informó Fred.

"Aunque gracias por la oferta", dijeron al mismo tiempo los gemelos.

Luego comenzaron a sacar grandes cantidades de chocolate de una de sus maletas la cual estaba llena solo de eso.

Remus se sorprendió, pero decidió seguir revisando a los alumnos por lo cual se despidió.

La razón por la que los gemelos tuviesen una maleta llena de chocolate es porque todos los pecados y Elizabeth son adictos a él.

(N/A: Momento de confesar. Soy una chica adicta al chocolate).

Todos comieron chocolate hasta estar satisfecho. Luego de eso el resto del viaje hacia Hogwarts fue normal.

= Salto de tiempo =

Cuando ya todos estaban en el gran salón de Hogwarts comiendo la cena de esa noche. Dumbledore anunció que los dementores estarían alrededor de Hogwarts para capturar a Sirius Black. Eso hizo que Elizabeth y los pecados fruncieran el ceño, definitivamente el director y el ministro eran unos idiotas sin remedio.

Harry tuvo una reunión con Dumbledore y Luna le siguió. Al parecer el director no dormirá con comodidad por muchas noches.

El año escolar empezó sin ningún problema a excepción del anuncio de los dementores. Aunque Harry sin que nadie le viera comenzaba a eliminar dementores cuando los veía muy cerca de Hogwarts.

= Salto de tiempo =

Neville se encontraba en el salón de la clase de herbología con la profesora Sprout quien le había pedido que se quedara para que le ayudara con algunas plantas ya que Neville era muy bueno con ellas.

Aunque sin que la profesora lo supiese estaba frente al Rey de las hadas quien tenía un gran conocimiento de plantas.

Cuando Neville terminó de ayudar a la profesora y recibió 10 puntos para Gryffindor se retiró antes que la profesora y comenzó a caminar hacia su sala común.

Cuando iba por la mitad del camino escuchó un grito femenino y de inmediato se dirigió al lugar. Ahí encontró a Hannah Abbott junto a Susan Bones quienes eran atacadas por los dementores. Neville los contó y eran cinco dementores.

(Imagen de Hannah Abbott)

(Imagen de Susan Bones)

Susan se encontraba desmayada y Hannah intentaba proteger a su amiga usando cualquier hechizo que se le viniese a la mente, aunque nunca dijo el correcto.

Neville sacó su varita.

"¡Expecto Patronum!", gritó Neville. Un poderoso oso surgió de su varita y espantó a los dementores.

Finalmente, Hannah se desmayó por cansancio mágico y mental que tiene no sin antes susurrar un <<Gracias>> a Neville quien llevó a las dos Hufflepuff a la enfermería con el encantamiento de levitación.

Cuando llegó a la enfermería, Madame Pomfrey de inmediato le ordenó que colocara suavemente a las dos chicas en diferentes camas. Neville hizo lo que le dijeron y dejó a las dos chicas ser atendidas por la enfermera quien le estaba pidiendo explicación. Neville le contó de lo sucedido, pero omite el hecho de que él puede hacer un Patronum corpóreo.

"¿Estarán bien?", le preguntó Neville a la enfermera.

"Si, solo necesitan descansar y comer chocolate, gracias por su ayuda señor Longbottom", le contestó Madame Pomfrey.

"De nada, pero será mejor que me retire tengo trabajo que hacer", dijo Neville.

Madame Pomfrey solo asintió ya que estaba revisando a las dos chicas en caso de que hubiese algún otro problema que ella no haya visto.

Y sin mirar atrás Neville se fue de la enfermería y se dirigió a su sala común para hacer sus tareas y contar lo que ocurrió a sus amigos. Aunque deberá esperar para contárselo a Luna ya que ellas es una Ravenclaw.

= En la enfermería =

Madame Pomfrey se había ido a su oficina para avisar del incidente al director y al jefe de casa de las dos Hufflepuff.

Sin darse cuenta, una de las dos chicas se comenzaba a mover en su cama. Hannah estaba comenzando a tener un sueño.

/ (Mente de Hannah) /

Hannah se despertó en una cueva. Cuando salió de la cueva vio un hermoso prado, pero no vio a ninguna persona y eso la asustó.

Comenzó a caminar un poco más, pero un sonido y un pequeño temblor la detuvo. Una inmensa sombra con la forma de una chica la cubrió.

"Es bueno ver que ya estás despierta", le dijo la voz de una chica.

Hannah se giró y se encontró con una chica gigante quien la miraba con una sonrisa y una ligera curiosidad.

Continuará...

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Hola, un nuevo capitulo, espero que les guste.

Lamento la demora de este capítulo.

Si tengo errores en la escritura lo siento.

Muchas gracias por sus apoyos.

Espero sus opiniones, sugerencias y comentarios.

Nos vemos, bye bye.