—¿Por qué debes marcharte? No es justo que dejes todo. Apenas y supimos que te aceptaron en la universidad.

—Por eso es que debo hacerlo, aún no he presentado documentos. Puedo solicitar el intercambio Osito.

—No lo entiendo Tay, porque debes sacrificar tu vida por la de tu hermano. Si él quiere vivir en otro país, que lo haga solo. No tiene derecho a arrastrarte con él.

—Newwiee, sabes que es la única familia que me queda en este mundo. No puedo alejarme de mi hermano. Entiende por favor.

—Es que... Tay, como me pides que entienda que te perderé. Perderé a mi mejor amigo. Además, no comprendo por qué no puedes decirme a dónde te irás. Si lo supiera, podría visitarte. ¿Cuál es el misterio Tay? Dime que está pasando realmente.

—Por favor Osito... No puedo darte más detalles. Lo haré cuando sea el momento, pero por lo pronto, ayúdame a hacer las cosas fáciles. Por favor, te lo pido, mis últimos días aquí, contigo, quiero que sean inolvidables.

» Cuando empecé a sospechar que Tay me ocultaba algo, llegué a pensar que podría ser que Joss y él ya eran novios, y no encontraba la manera de contármelo; pero al saber que Joss viajaría al extranjero a continuar con su especialización, mi corazón se sintió aliviado. Claro, ni por un instante imaginé que Tay me diría que también se marcharía de Phanadul, a quien sabe dónde.

Lo cierto es que nos graduamos del colegio y él decidió dejar el país para irse a reunir con su hermano en el exterior. No me dijo a donde iba, solo se despidió y me dejó.

Pasé días y semanas muy tristes, Mild también se había ido. Todos a los que conocía me abandonaron. Ni siquiera tenía ganas de estudiar, me sentía solo en el departamento que estaba lleno de recuerdos con mi mejor amigo. Así que cuando mi madre me sorprendió con la noticia de su embarazo, no lo dudé y decidí mudarme nuevamente a casa, después de todo, ella era una mujer mayor y definitivamente iba a necesitar cuidado especial y ayuda hasta que diera a luz.

Sería el hermano mayor, habría un bebé en la familia, y definitivamente eso me serviría de mucho, para tratar de olvidar.

Los días fueron pasando, esperábamos la llegada del bebé con mucha alegría, y definitivamente vivir el proceso de embarazo con mi madre, estaba siendo de mucha ayuda para mí. Pero cuando la navidad llegó, extrañamos a Off, mi hermano, y no pude evitar pensar en que también debió haberlo pasado mal cuando se separó de su mejor amigo. Pero nunca imaginé el estado en el que se encontraba, cuando fui a buscarlo.

En casa teníamos una llave extra de su departamento, pero, a decir verdad, yo nunca antes había ido a visitarlo. Era la primera vez. Cuando entré en el pequeño y oscuro estudio y vi el lamentable estado en el que se encontraba, el corazón se me rompió.

Podía sentir su dolor, aun sin saber porque estaba en ese estado. Quería llorar, no podía contener mis lágrimas, era un Off completamente distinto al que conocía, mi hermano estaba triste, deprimido, derrotado. Me dolía ver su mirada perdida, oscura, sin brillo porque claramente el Off frente a mí, había abandonado las ganas de vivir... mi hermano, parecía estar torturándose a sí mismo, buscando olvidarse de todo, de todos, él... se estaba dejando morir.

No podía hacer preguntas, porque no me respondería, pero me imaginaba lo peor y lo único que podía hacer en ese momento, era tratar de ayudarlo. Mi corazón estaba hecho trizas, me dolía hasta el alma verlo así y lo único que deseaba era poder reconfortarlo, deseaba con todo mi ser, hacerlo sentir mejor.

Estaba aferrado a un grueso libro, no quería soltarlo cuando lo llevé al cuarto de baño y preparé la tina para asearlo. Él, solo lloraba y yo lloraba con él. Lloré mientras lo bañaba, lloré cuando froté su cabeza al intentar lavar su cabello y los mechones se desprendían y caían al piso... Lloré por él, lloré porque de sus labios no salía otra palabra más que G...u...n

Y entonces me abofeteé mentalmente, y me recriminé a mí mismo, porque yo había pasado muchos días difíciles, triste, desde que Tay se fue, y mi hermano había experimentado la misma sensación porque Gun, su mejor amigo, se había marchado mucho antes. Off, había sufrido la pérdida de su madre, cuando era muy chico, y desde entonces, siempre tenía dibujada una sonrisa en el rostro, pero yo sabía que no era más que una fachada. Nadie podía estar bien después de perder a la persona que más amaba en el mundo, así que estaba seguro que una nueva perdida debía haberlo afectado mucho. Tenía que haberlo buscarlo antes, sin embargo, solo quise estar bien, pensé en mí y en que no quería sentirme triste, y me olvidé de todo lo demás... de él.

Tenía que remediarlo, tenía que ayudar a Off, debía ser el hermano que necesitaba. Tenía que llevarlo de regreso a casa, pero no en el estado en que se encontraba, antes, debía ayudarlo a mejorar, mientras trataba de no pensar en Tay. 

𝕰𝖛𝖎𝖎𝕭𝖑𝖚𝖊 ʚĭɞ