Royal Woods Michigan - Residencia Loud - 7:00 a.m.

Podemos ver a nuestro protagonista, el cual se encontraba en su cama, durmiendo tranquilamente. Hasta que de pronto, este abre sus ojos, para luego soltar un bostezo.

Lincoln: Hmm, que frío hace. Debemos estar como a... Muy pocos grados. Espero no enfermarme otra vez. Y menos hoy que... Es mi cena con Cookie. - dice el peliblanco con una leve sonrisa, mientras se levanta de su cama.

De pronto, el teléfono de la habitación del peliblanco comenzó a sonar, por lo que esté con algo de confusión se acerca a la mesa y lo toma, para luego contestar.

Lucas: Buenos días muchacho. Verás, no tengo mucho tiempo, ya que... Estoy en la empresa trabajando. Así que iré al grano. Te conseguí una pequeña reservación en uno de los restaurantes de tu abuelo. Ya saben tu nombre, cara y edad. Te atenderán de la mejor manera a ti y a esa señorita, no lo eches a perder. - dice el pelinegro en un tono serio, mientras escribía algo. - Buena suerte.

Lincoln: Hmm, gracias tío Lucas. Es usted una buena persona. Ojalá mi mamá y usted, estuvieran juntos. - dice el peliblanco con una sonrisa, haciendo que Lucas se sonroje de la vergüenza.

Lucas: Muchacho, tu aún eres joven para decir eso. Digamos que los asuntos entre tu mamá y yo, son algo... Confidenciales. Y ehm, debo colgar nos vemos luego. - dice el pelinegro bastante nervioso, mientras colgaba la llamada.

Lincoln: Hmm, que raro. El tío Lucas se escuchaba muy raro. Quizás sea por levantarse temprano. A mi mamá le pasa lo mismo, siempre está muy apurada. - dice el peliblanco algo confundido, mientras salía de su cuarto, para luego caminar al pasillo. Pero cuando estaba por ir al baño, este se topa con Lori, la cual estaba subiendo las escaleras. - Ay no...

Lori: Por favor, en serio tengo que toparme contigo, todos los días. De verdad, a veces me dan ganas de irme, pero todavía no termino la preparatoria y no encuentro una buena universidad a la que irme. Por que en serio, ver tu cara todos los días me produce migraña. - dice la rubia en un tono de molestia, hasta que Elizabeth sube las escaleras con una mirada seria.

Elizabeth: Hijo... Ve a bañarte por favor, no te preocupes. Aquí no hay ningún peligro. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos, al mismo tiempo que el peliblanco se va al baño. - Escúchame bien, Lori. Ya se muy bien las fechorías, que le has hecho. Leni ya me dijo que lo golpeaste y no creas que no voy a defenderlo de ti. Así que mejor aléjate de mi pequeño, por que si me entero... Que le vuelves a poner una mano encima. No me contendré en hacerte algo. Te quedo claro.

Lori: Mjm, cree que me da miedo, señora. Pero si no es más que una simple ama de casa y su hijito un mocoso llorón capaz de defenderse por si solo. Por eso lo molestaban siempre. O es que acaso no le contó su hijo, que su abusador regreso a la escuela, el día de ayer. -  dice la rubia con una sonrisa, mientras que Elizabeth movía sus dedos y su mano con mucho enojo.

Elizabeth: Hmm... No te pongo una mano encima, por que al menos yo... Tengo modales. Así que mejor, ve a hacer cualquier cosa de tus tonterías y déjanos en paz. Pero eso si... Ya estás advertida. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras se iba a la habitación, al mismo tiempo que Lori algo molesta, entraba a la suya.

Un rato después. En la escuela, nuestro protagonista se encontraba en los casilleros, buscando algunos libros, al mismo tiempo que varios de sus amigos se acercan a él, para hablar sobre algunas cosas.

Rusty: Viejo, mira lo que encontré bajo la mesa de la tienda de antigüedades. Es una goma de mascar de hace como 5 años, aún parece ser comestible. Me preguntó si una chica lo mastico. - dice el peli naranja con una sonrisa, mientras mostraba la goma de mascar medio masticada.

Clyde: Rusty, eso es muy antihigiénico. Te dará algo por llevar eso en la mano. Pero bueno, como has avanzado con el cómic Lincoln, has hecho nuevos dibujos. - dice el pelinegro con una sonrisa, hasta que Lincoln saca varias hojas con muchos dibujos de sus hermanas, peleando y combatiendo el crimen.

Rusty: Wow... Pero... Quizás puedas incluir a tu hermana Zoe. Ella sería como la... Heroína para mayores. No te parece. - dice el peli naranja mientras levantaba las cejas, hasta que Jordan le da una fuerte patada en el trasero, que lo tira contra el suelo. - Ay... ¿Por qué hiciste eso?.

Jordan Chica: Por que eres un asqueroso, pervertido. No creas que olvidamos lo que hiciste ayer, de espiar nuevamente en nuestros vestidores, Rusty. - dice la castaña bastante enojada, mientras alzaba sus puños. - Con permiso chicos. Debemos darle una lección a este pervertido.

Zach: Claro, no hay problema. Vamos Lincoln, no querrás ver esto, se pone feo cuando Jordan y Polly se unen. - dice el pelirrojo mientras comenzaba a caminar con sus amigos. Hasta que escuchan los gritos de Rusty. - No miren atrás, no miren atrás.

Rusty: No, no esperen... Ay... Aaaah... Aaaah... Podemos hablarlo, chicas... Por favor... No fue mi... Auch... Mi intención... Ay... Espera Polly no pases con tus patines por ahí... Duele mucho... No, no, no... ¡Aaaaaaaaah!. - grito el peli naranja haciendo que el albino y sus amigos, salgan corriendo de ahí.

Minutos después. En el salón de quinto año, nuestro protagonista se encontraba mostrando algunas hojas a Clyde, el cual se encontraba sorprendido, por ver varios dibujos.

Clyde: Vaya, son excelentes amigo. No solo lo digo por sus diseños, si no que... Sus trajes y habilidades si le quedan, al ser cartas de Ace Savvy. Se nota que has leído el cómic. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras miraba los dibujos, hechos por el peliblanco.

Lincoln: Si, valió la pena terminar el que me dio Leni. Eso me ayudó mucho, para crear sus trajes, sus habi... Habilidades y todo lo demás. Pero... No sé... No quisiera incluirme en el cómic... Yo no sé que personaje ser... O crear uno para mi. - dice el albino con algo de desconfianza, mientras miraba los dibujos.

Clyde: Puedes ser Ace Savvy, amigo. Recuerda. Tu eres Ace y yo, Jack un solo ojo. Así de simple, jeje. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras miraba los dibujos. - Ahora, solo deberé agregarle los diálogos, y listo. Tendremos el cómic, para la próxima semana. Solo falta que te incluyas como Ace Savvy.

Lincoln: De acuerdo Clyde, nos vemos en el receso, me tengo que ir a mi clase, antes de que llegue mi profesora. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras se iba corriendo. Pero cuando se estaba por ir, este se topa con la señorita Johnson, la cual lo detiene con la mano.

Sra. Johnson: Oh, pequeño... Con que aquí estabas. Verás, tu profesora no vendrá el día de hoy, debido a que estaba enferma, así que hoy te quedarás conmigo en mi clase. Busca algún asiento vacío y siéntate ahí. - dice la pelirroja con una sonrisa, mientras se iba a su escritorio. Al mismo tiempo que el peliblanco se sentaba en una banca.

De pronto el timbre de la escuela comienza a sonar. Haciendo que varios alumnos entren a sus aulas. Entre ellos varias chicas y Rusty, el cual llevaba muletas, los ojos morados y la pierna con varios vendajes.

Cookie: Eh, Lincoln... ¿Qué haces en nuestro salón?. - dice la castaña algo sorprendida, mientras se sentaba al lado del albino, el cual estaba rodeado por Stella, Haiku, Jordan Chica y Tabby.

Lincoln: Hmm, bueno... Mi maestra no vino el día de hoy, así que me mandaron aquí. Pero... Es bueno estar con ustedes, jeje. Me siento más seguro que en mi salón. Allí todos me miran raro. - dice el albino algo nervioso, mientras se rascaba el cabello. Hasta que de pronto, Chandler entra al salón con su mochila en mano.

Sra. Johnson: Casi llegas tarde, Chandler. Ve a sentarte. Es tiempo de comenzar con la clase. El día de hoy, hablaremos sobre la fotosíntesis de las plantas y lo que influye en la tierra. Lincoln, ya que vienes del primer año, puedes colorear este pequeño dibujo que te dejo en tu asiento, de acuerdo. - dice la pelirroja con una sonrisa, mientras le daba una hoja al peliblanco, el cual se queda algo confundido. - Bueno, saquen sus libros y abranlos en la página número 46.

Cookie: Oye Lincoln... Ya que estás aquí. Aprovecho para decirte, que saliendo de la escuela, me iré a arreglar un poco. Me puedes recoger a las 5 en mi casa, si no tienes problema. - dice la castaña en un susurro, mientras abría su libro.

Lincoln: Eh, claro que sí señorita Cookie, no hay problema. Yo iré por usted a esa hora. - dice el albino con una sonrisa, mientras comenzaba a colorear. Al mismo tiempo, que escuchaba como la señorita Johnson, dictaba su clase.

Minutos después, en el almuerzo. Varios alumnos del quinto grado, se encontraban reunidos. Entre ellos, los primos Loud y Cristina, los cuales discutían un tema muy grande, llamado Chandler.

Lemy: Pues, no se ustedes. Pero yo no me trago ese cuento, de que Chandler no vaya a hacerle nada a mi hermano. Estoy seguro, que ese infeliz, está tramando algo. Y si lo descubro, le romperé la cara. - dice el castaño en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos.

Cristina: No lo sé, Lemy. Yo tampoco me terminó de convencer por eso, pero... No podemos hacerle nada. Parece que Lincoln, va a protegerlo a toda costa, a pesar de las adversidades. - dice la pelirroja en un tono serio, mientras se cruzaba de brazos.

Jordan Chica: Eso me preocupa, aún más. Lincoln es muy bueno, para perdonar a ese canalla. No entiende que Chandler, puede ser un doble cara que puede llegar a traicionarlo. A veces pienso que Lincoln, es un poco tonto, para pensar así. - dice la castaña en un tono de frustración, mientras se agarra su frente. - A veces me llena de rabia, las veces que ese idiota lo hizo llorar. Eso sí me pone de malas.

Tabby: Ya se... Pero ni modo, deberemos aguantarnos esta farsa del Chandler bueno, hasta que Lincoln se de cuenta de su maldad o de que ese baboso, lo traicione de vuelta. - dice la pelinegra en un tono serio, mientras comía algo de pollo.

Liberty: Mejor guarden silencio, allá viene Lincoln y detrás de el, está Chandler sacando dinero de su bolsillo. - dice la peliblanca en un tono serio, mientras que todos volteaba la vista.

Por la puerta de la cafetería. Lincoln entraría sin problemas, para luego caminar a la caja. Pero detrás de el, Chandler entra por la puerta. Hasta que de pronto, alguien le mete el pie. Haciendo que esté se caiga y se queje por el dolor.

Chico: Jejeje, que sucede McCann. Te duelen las heridas. Espero que no sigas siendo tan cruel, como para golpearme. Ya que, recuerda lo que dijiste. Tus zapatos valen más que mi casa. - dice un chico con una sonrisa, al mismo tiempo que el pelirrojo se levanta con dificultades.

Lincoln: Te encuentras bien, Chandler. Déjame ayudarte por favor. - dice el albino algo preocupado, mientras tomaba del brazo al pelirrojo. Haciendo que todos se queden boquiabiertos por tal acción del peliblanco. - Oye... ¿Cuál es su problema?. No ves que está lastimado. Deberías ser más considerado, con los que estás lastimados.

Chico: ¿¡Que!?. Pero como puedes defender a ese tonto. Si solo ha causado muchos problemas. Quizás la paliza que te dio, debió fundir tu cerebro enano. - dice el chico algo molesto, mientras se iba a su mesa. Al mismo tiempo que el peliblanco, levantaba al pelirrojo. El cual se recarga en la pared.

Chandler: Ah... No sé por qué me ayudas, enano. Sabes que la escuela entera, podría odiarte, por ayudar a alguien que fue un abusador, ¿no es así?. - dice el pelirrojo bastante adolorido, mientras se tocaba su espalda.

Lincoln: Lo se... Pero no me importa. Se que a mis amigos, no les importará que te ayude. Ellos son buenas personas, no son como los demás. Y se que tu también eres diferente. Solo debes encontrar ese camino de buen corazón. - dice el albino con una sonrisa, mientras ayudaba al pelirrojo, el cual empieza a caminar con lentitud. Mientras que Lincoln se iba a la caja nuevamente.

Haiku: Hmm, esa bondad que tiene... Es sorprendente. Lincoln está perdonando a un enemigo, el cual le ha hecho bastante daño, durante todo este tiempo. Debo decir que es algo admirable, nunca eh visto a alguien tan puro en la vida. Pues a pesar de que Lincoln esta muy roto por dentro y por fuera... Sigue siendo alguien con un excelente corazón. - dice la pelinegra con una leve sonrisa, sorprendiendo a la mayoría de sus amigos. Pues era muy raro, ver a Haiku sonreír.

Mientras tanto, en las empresas Harriet. Lucas se encontraba en su oficina, checando algunas cosas de las construcciones, hasta que de pronto, este escucha como su teléfono comienza a sonar, por lo que este aprieta un botón y contesta.

Secretaria: Señor Harriet, aquí hay una mujer de cabello blanco, de nombre Elizabeth Rochester y solicita verlo, ¿La dejo pasar?. - dice la secretaria desde su escritorio, llamando la atención de Lucas, el cual se acomoda la corbata.

Lucas: Eh no... Déjala pasar, no la dejes esperando por favor. Déjala pasar. - dice el pelinegro en un tono serio, mientras colgaba el teléfono, para luego aclarar su garganta y acomodar su corbata, al mismo tiempo que Elizabeth entraba a la oficina con una carpeta.

Elizabeth: Buenos días Lucas. Vengo a hablar contigo, sobre el refugio que te comente, en la comida que tuvimos hace tiempo. Quisiera hacerle un par de cambios. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras se sentaba enfrente de Lucas, para luego darle la carpeta.

Lucas: Muy bien, déjame ver que cambios le pondrás. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras abría la carpeta, para luego comenzar a leerla y observar algunas imágenes. - Muy bien, cafetería, dormitorios, patio de juegos, centro de adopciones e incluso tienen un refugio pequeño para animales. Eso elevaría un poco los costos, pero no sería mucho. 

Elizabeth: Entonces si podrían hacer esos cambios. Es que... Ayer, mi hijo me comentó que había posibilidades, de que su conejito Copito, siga con vida y... Me dio la idea, de crear un refugio para animales desamparados. Eso no estaría mal, incluso los niños adoptados, se pueden llevar una mascota a casa, sin costo. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras juntaba sus manos, al mismo tiempo que Lucas cierra la carpeta.

Lucas: Elizabeth Rochester... Eres una genio. Sin duda, tus ideas son muy buenas y de corazón. Eres demasiado buena para este mundo, al igual que el muchacho. Pienso que si comenzamos lo antes posible, en mas o menos 2 meses, podremos haber creado tu proyecto. Incluso varias fundaciones de caridad, podrían apoyarnos en esta causa. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras se levanta del escritorio.

Elizabeth: Oh Luke... Eres un hombre maravilloso, gracias por ayudarme con esto. De verdad, muchas gracias. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras le daba un abrazo al pelinegro, el cual se queda algo sonrojado. Pero decide corresponderlo, para luego mirar a la peliblanca, la cual agacha un poco su cabeza.

Lucas: Hmm, de nada Elizabeth. No tienes nada de que agradecer. Al contrario, yo te agradezco a ti, por... Haber vuelto. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras se separaba de Elizabeth, la cual un poco sonrojada, se queda viendo con el pelinegro algo sonrojada. Hasta que el sonido de un reloj interrumpe su momento. - Oh, voy tarde a una junta.

Elizabeth: No te preocupes, ya me voy a ir. Debo hacer unas compras y luego me iré a casa. Nos vemos después... Luke. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras se marchaba de la oficina, al mismo tiempo que Lucas se le quedaba viendo algo sorprendido. Para luego mirar su carpeta, viendo las ideas de Elizabeth.

Lucas: Luke... Hmm, aún tengo recuerdos cuando me decían así a los 7 años. Como pasa el tiempo, no lo creen. - dice el pelinegro con una sonrisa, mientras miraba al lector, para luego marcharse a su junta.

Después de varias horas, en la casa Loud. Nuestro protagonista se encontraba sentado en su cama, mientras se miraba fijamente al espejo. Acomodándose una corbata con algo de dificultad, hasta que su madre le hace el nudo perfecto.

Elizabeth: Listo cariño, quedaste muy bien. Con ese chaleco y esa corbata, pareces un pequeño hombre de negocios, así como... Luce Lucas. - dice la peliblanca con un leve sonrojo, mientras que Lincoln se mira fijamente al espejo.

Lincoln: Se nota, que el señor Lucas y tú, son realmente buenos amigos, mami. Quizás incluso algún día se hagan novios, como dice Lemy. - dice el peliblanco con una sonrisa, haciendo que su madre se sonroje demasiado.

Elizabeth: Vamos hijo, tampoco es que yo y Lucas, nos gustemos... Claro que no. Simplemente, me parece un poco atractivo, eso es todo. - dice la peliblanca con un sonrojo en su rostro, mientras miraba a otro lado, al mismo tiempo que Lincoln se reía un poco.

Lincoln: Tranquila mamá, era un chiste. Pero bueno... Ya es momento de ir, por Cookie. Aunque, me siento nervioso. No es la primera vez, que salgo con ella, pero... Al estar a su lado, sigo sintiendo bastante amor. Supongo que si es verdad... Estoy enamorado de ella. - dice el albino con un leve sonrojo, mientras se miraba al espejo.

Elizabeth: Hmm, el amor es muy confuso hijo. No lo puedes ver, ni escuchar... Pero lo puedes sentir. En tu corazón, y en tu estomago. Son como aleteos de mariposas. - dice la peliblanca con una sonrisa, mientras abría la puerta. - Pero bueno, mejor nos vamos de una vez. Te acompaño por que... No quiero que te encuentres con Lori y que ella te haga algo. Vamos.

Después de varios minutos de viaje. Nuestro protagonista se encontraba afuera de la mansión Pingrey, con un pequeño ramo de flores. Para luego voltear la vista. Viendo a su mamá, la cual le guiña el ojo. Por lo que este con algo de nervios, toca el timbre. Para luego esperar a que abran.

Sebastián: Buenas tardes... Oh, es usted joven Lincoln. Que gusto me da verlo. La señorita Judith, viene enseguida. Espérela aquí por favor. - dice el mayordomo con una sonrisa, mientras se coloca al lado de la puerta, para luego mirar como la castaña, bajaba las escaleras, completamente arreglada. - Oh, justo ahí viene. Señorita Judith... El joven Lincoln la espera.

Cookie: Gracias Sebastián, puedes retirarte. Lincoln... Vaya que gusto verte. Ya estoy lista para irme y... Esas son para mi. Vaya, muchas gracias, eres muy detallista. - dice la castaña con una sonrisa, mientras recibía el ramo, al mismo tiempo que el peliblanco se quedaba hipnotizado por su belleza.

Lincoln: Hmm, no es nada. Cookie... Pero... Nos vamos, mi mamá nos espera, para llevarnos. - dice el albino con una sonrisa, mientras veía como la castaña asiente con la cabeza, para luego cerrar la puerta y caminar con el peliblanco, el cual toma su mano.

Cookie: Eres muy caballeroso Lincoln. Por eso elegí salir contigo, el día de hoy. Siendo sincera, me encanta estar contigo... A tu lado. - dice la castaña con una sonrisa, mientras caminaba al lado del peliblanco, el cual se sonroja levemente, para luego ir con la peliblanca, la cual los estaba esperando, al lado de Vanzilla.

Mientras tanto, en otro lugar. Podemos ver a El Jefe, el cual se encontraba jugando póker, al lado de algunos sujetos, los cuales vestían de traje y llevaban algún cigarrillo o habano en la boca, mientras veían sus naipes.

El Jefe: Jeje, saben algo... Cada vez, estoy mas cerca de tener a ese mocoso entre mis manos. Mi agente, me ha dicho que ese enano, tiene habilidades similares a las de su mamá. Pero no están desarrolladas por completo, debido a su edad e inocencia. - dice con una sonrisa, mientras apostaba algunas fichas.

Sujeto 1: Y que piensas hacer con él, aparte de torturarlo. Acaso vas a convertirlo en un asesino, como lo hiciste con Elizabeth y el resto de tus tropas. - dice con una sonrisa, mientras dejaba salir algo de humo por su boca.

El Jefe: Quizás. Si es verdad, que ese chico tiene habilidades como Elizabeth. Me podría servir de mucho. Podría ser incluso mejor, de lo que fue su mamá. Y hasta podría hacer que corrompa su inocencia, para volverlo más fuerte y más sádico. - dice con una gran sonrisa sádica, mientras bebía algo de vino.

Sujeto 2: Eres un desgraciado, pero te apoyo amigo. No es tan fácil, conseguir niños que puedan corromperse. La mayoría que eh visto, son basura. Solo sirven para nada. Enanos como el que dices, podría ser una gran ayuda, para nuestra organización. Solo espero y él, no lo atrape antes. - dice el sujeto en un tono serio, mientras apostaba algunas fichas.

Sujeto 3: ¿Quién?. ¿Te refieres a ese bastardo?, Ja. Dudo mucho que pueda hacer algo. Suele trabajar solo y dudo que ese enano y él, se relacionen. Lo veo demasiado imposible. Pero no podemos descartar la posibilidad, no lo crees jefe. - dice con una sonrisa, mientras jugaba con un revolver en su mano.

El Jefe: Hmm, si se atreve a ir por mi objetivo, yo mismo lo liquidare. Cuando quiero algo. Hago hasta lo imposible por conseguirlo. Y si no lo consigo, lo elimino. - dice en un tono serio, mientras coloca un par de Aces la mesa, para luego levantarse e irse.

Un rato después, en el restaurante. Nuestro protagonista se encontraba sentado en una mesa, enfrente de Cookie, la cual toma los cubiertos sin mucha dificultad, pero con el peliblanco era otra cosa, pues habían demasiados cubiertos en su plato.

Cookie: Hmm, ese tenedor y ese cuchillo, son para lo del centro de tu plato, los de tu izquierda con para los vegetales y la cuchara de la derecha, es para el aderezo. - dice la castaña con una sonrisa, al mismo tiempo que comenzaba a comer.

Lincoln: Oh, ya veo. Una disculpa, es que... No soy muy bueno, para elegir esto. Me confundo mucho. Pero gracias por ayudarme. - dice el albino con una leve sonrisa, mientras tomaba una porción de comida, para luego comenzar a comer. - Hmm, sabe muy bien.

Cookie: Mjm, mi madre me enseñó a como usar estos cubiertos. Desde niña, eh tenido que aprender muchos modales sobre como comer, sentarme, hablar y pararme. Pero solo en las fiestas elegantes. Para lo familiar o la escuela, suelo actuar muy normal. - dice la castaña con una sonrisa, mientras se limpiaba con una servilleta.

Lincoln: Vaya, no se que decir. Digo... Los modales son algo que todos llevan, pero... Yo no sabía que eran tan importantes. Aunque mi abuelito, me aconsejo sobre muchas cosas, me dijo lo más básico, para salir con alguien. Siempre se tu mismo y nunca finjas ser alguien que no eres. Mi abuelito fue alguien muy sabio y por eso lo admiro mucho. A veces me vendrían bien, algunos de sus consejos. - dice el peliblanco con una sonrisa, mientras bebía algo de agua.

Cookie: Eso fue algo sabio. Sin duda tu abuelito fue alguien muy listo. El mío es igual, solo que suele ser muy trabajador, para emprender su negocio y salir adelante. Me dijo en una ocasión, que incluso tuvo una cafetería en un pueblito de Canadá. Para comenzar en el negocio. Pero en el primer día de un empleado, lo despidió por que le dio cafeína a un niño de unos 7 años. Cosa que no se podía hacer. - dice la castaña con una sonrisa, mientras continuaba comiendo.

Lincoln: Vaya, eso es tener mala suerte. Ser despedido en su primer día. Pero bueno, supongo que las cosas no salieron como se las esperaba. - dice el peliblanco algo nervioso, mientras seguía comiendo. - Hmm... Oye... Sobre el baile... Quisiera decirte que... Eh estado practicando con mi hermana Zoe, algunos pasos lentos y... Quisiera poder bailar un poco contigo, así... De forma lenta. Para acostumbrarme mejor.

Cookie: ¿Bailar... Conmigo?. Wow, ehm... Por supuesto que si. Bailamos en una ocasión, y nos fue muy bien. Creo que podemos volver a intentarlo una vez más. - dice la castaña con una sonrisa, mientras se limpia con una servilleta, para luego levantarse de la mesa. - Allá, hay algunas parejas bailando, vamos a hacerlo.

Lincoln: Eh, ahora... De... De acuerdo. - dice el peliblanco algo nervioso, mientras tomaba la mano de la castaña, para luego caminar hacia la pista de baile, al mismo tiempo que comenzaba a sonar una canción lenta. Para luego pararse en la pista. - Ehm... Ahora que hago.

Cookie: Solo toma mi mano, mi cintura... Mírame a los ojos y dejemos guiar a nuestros cuerpos, por la bella música. - dice la castaña con una sonrisa, mientras tomaba la mano de Lincoln, para luego comenzar a moverse con el peliblanco, el cual se sonroja bastante, al tener a Cookie, tan cerca de él.

Con medida de iban moviendo. El peliblanco cada vez, iba entrando más en el ritmo lento, a tal punto, de que este comenzo a apoyarse más en la cintura de la castaña, la cual se sonroja un poco, pero no le presta importancia, y sigue bailando con el albino, hasta que de pronto, ambos se quedan parados, viéndose fijamente.

Sus miradas chocan, sus manos temblaban con muchos nervios y sus labios se movían lentamente, hasta que de pronto, sus cabezas se comenzaron a acercar poco a poco. Al mismo tiempo que sus ojos se iban cerrando, mientras que Cookie levantaba una de sus piernas hacia atrás y nuestro protagonista se ponía de puntitas, para alcanzar a la castaña. La cual tenía sus labios, muy cerca de los del peliblanco.

¿Qué pasará?, ¿Acaso Cookie y Lincoln podrían darse su primer beso?, ¿El proyecto de Elizabeth se podrá llevar acabo?, ¿Quién será esa persona que los aliados de El Jefe, mencionaron?, descúbranlo muy pronto, en el siguiente capítulo.

Continuará... Fin del capítulo 74, si les gustó dejen su voto, comenten y síganme para más y antes de irme, quiero mandarles un saludo muy especial y un abrazo muy fuerte a:

KarlaOreki
KanaoTsuyuri77
DianaMorales795
Naimar62
Alejandrafox32
CM-Makima
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MagicalLinaLestrange
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Megalosiento
VegettoSparkle
Grave_Clobber

Bueno, hasta aquí los saludos, yo me despido por ahora, mi nombre es PinBlack97 y esto es todo por hoy, les mando un abrazo muy fuerte, chao chao.