Miraba atentamente al hombre, a mi lado se encontraba Konohamaru formando unos sellos y al ver esos sellos supe de qué se trataba.

—Andando.

Di la orden de ir, yo fui primera a darle un golpe a aquel miembro de Akatsuki, pero como era de esperarse me esquivó y me tomó del brazo; con mi byakugan ya activado le di un golpe en uno de sus puntos de chakra con dos dedos haciendo que me soltara.

—¡Ahora!

Konohamaru apareció detrás con el Rasengan ya formado y entonces lo golpeo haciendo que este chocara con una de las paredes.

—¡Ahora, ___ nee-chan!

Volví a formar aquel dragón e iba a golpearlo, pero inesperadamente aquel tipo desapareció.

—¿Qué? —digo confundida deshaciendo mi técnica. Comencé a buscar con mi byakugan, pero no los encontraba en ninguna parte. —¿Se han retirado?

—¡__-___nee-chan!

Konohamaru gritó desesperado y entonces me di cuenta de lo que sucedía, toda la aldea comenzaba a destruirse.

—¡Konohamaru! ¡____-san!

Ebisu nos había abrazado para así protegernos y en ese mismo instante apareció una babosa comenzando a rodearnos.

Cuando la babosa nos dejó salir pude ver como todo se encontraba completamente destruido, activé mi byakugan viendo como había personas que lograron salvarse y otras que no.

—¿Se encuentran bien? —preguntó Ebisu.

—Sí, pero tú no te ves muy bien. —digo al verlo con una pierna rota. —¿Puedes cuidarlo, Konohamaru?

—¿Qué piensas hacer, ___nee-chan?

—Buscaré a mi hermana.

Konohamaru asintió a lo que comencé a irme en busca de mi hermana, iba saltando los escombros y buscando con mi byakugan, hasta que logré dar con ella.

—¡Hanabi! —exclamé preocupada acercándome rápidamente. —¿Te encuentras bien?

—Solo obtuve unas pequeñas heridas en mi brazo derecho. —respondió con una sonrisa. —¿Tú estás bien?

—No te preocupes por mí en estos momentos. —digo buscando entre mis cosas una venda para luego comenzarla a rodear en su brazo herido. —Debes preocuparte por ti.

Yo tenía un fuerte dolor en mi brazo izquierdo, sin embargo, no iba a dejar que ella se enterara y preocuparla.

—Pero eres mi hermana mayor. —me dijo. —Me preocupo porque eres de mi familia.

Sus palabras me conmovían.

—¡___!

La voz de Kiba llegó a mis oídos, él se oía bastante preocupado, miré en su dirección viendo como él se acercaba con rapidez junto a Akamaru y al momento de llegar a nuestro lado se bajó de su perro, y me abrazó.

—¿Qué crees que haces, Kiba? —pregunté con molestia. —No es momento para abrazos.

—Lo siento. Solo me alegra que estés con vida. —decía separándose. —Eres mi compañera de equipo y me preocupabas.

—Vaya. ¿Así que ahora soy tu compañera?

—Esa vez no estaba pensando bien. —decía juntando sus manos. —En verdad lo siento.

—Ya está, Kiba. —coloco una mano en su hombro. —Pero la próxima vez que te olvides de mí te golpeo con mi byakugan.

—No me imagino cuanto deben doler tus golpes ahora. —dijo tragando en seco y entonces Akamaru ladró. —¿Eh? ¿Qué dices, Akamaru?

—¿Qué sucede?

—Naruto ha aparecido.

Cuando dijo que Naruto había aparecido me sorprendí bastante, miré en dirección hasta donde se encontraba una especia de cráter, pero no lograba ver nada y es por eso por lo que activé mi byakugan pudiendo así ver a Naruto.

Él se encontraba frente a Pain, el líder de Akatsuki.

—¿Qué es lo que piensa hacer? —pregunté al ver a la Hokage posicionarse frente a Naruto, entonces apareció uno de los otros miembros e iba a atacarla, pero Naruto la salvó. —Vaya. Que poder.

—¿Qué es lo que sucede allá? —preguntó Kiba, pero no respondí. —Vamos. Tienes la ventaja de poder ver lejos, yo no puedo porque no tengo tus ojos.

—No soy relatora, Kiba.

—Sé buena y hazlo por mí.

—Byakugan. —oí decir a Hanabi. —¿Ese es Naruto-san?

—¡Eso no vale! ¡Ustedes pueden ver y yo no!

—Tks. Eres molesto. —digo de mala gana. —Naruto se encuentra en estos momentos enfrentándose a Pain.

—¿Qué es ese jutsu? —preguntó Hanabi. —Impresionante.

—¿Qué? ¿Qué sucede? —preguntaba curioso Kiba.

—El chakra de Naruto está formando una especie de Shuriken gigante. —comenté. —Logró darle a uno.

En ese mismo instante la técnica de Naruto causó una explosión.

—¿Qué clase de Jutsu más poderoso era ese? —preguntó asustado Kiba.

Naruto seguía peleando con cada uno de los miembros de Akatsuki, incluso logró derrotar a otro y entonces comenzó una batalla cuerpo a cuerpo con Pain.

❇❇❇

La batalla no estaba yendo muy bien, Pain había asesinado a aquella vieja rana frente a Naruto y aprovechó su distracción para atraparlo; él le clavó varias barras en su cuerpo dejándolo inmóvil en el suelo.

—Naruto-kun...—murmuré presionando mis puños para luego ver a Pain. —Maldito...

—¿Qué sucede, ___?

—Por favor cuida de Hanabi, Kiba. —le pedí haciendo que ambos me miraran sorprendidos. —Te la encargo.

—¡Espera, ___!

—¡____nee-chan!

Ignoré sus gritos para comenzar a dirigirme al campo de batalla donde se encontraba Naruto, corrí y corrí con toda la rapidez que pude.

Entonces llegué y di un salto para dar un golpe con mi palma en el suelo haciendo que Pain se alejara de Naruto.

—No permitiré que le hagas daño.

—¿Refuerzos?

—¡¿Qué haces aquí?! —exclamó paranoico Naruto. —¡Vete! ¡No eres rival para él!

—Me ofendes que pienses que no soy una rival para él. —digo colocándome en posición de combate. —Pero eso lo sé muy bien. Simplemente estoy siendo egoísta.

—¿De que hablas?

—Han pasado muchas cosas en este último tiempo. Me has hecho pensar de otra manera. —confesé. —Es por eso por lo que estoy aquí. Yo te protegeré, Naruto.

Miré de reojo a Naruto y entonces con una de mis manos golpeé una de esas barras destruyéndola, iba a ir por otra, pero Pain me había elevado evitando que pudiera hacer algo.

Él me lanzó con fuerza al suelo, varias heridas se me fueron causadas, pero eso no evitó que yo siguiera en combate.

—¡Detente! ¡___-chan! —exclamaba Naruto desesperado. —¡No te pongas en peligro!

—Esto no se compara en nada a los entrenamientos que llevé acabo. —digo con una sonrisa limpiando la sangre que tenía en mi labio. —¡Te mostraré de lo que estoy hecha!

Concentré chakra en mis pies para que así Pain no lograra elevarme, sabía que eso me resultaría pocas veces, pero al menos lograría algún avance para ayudar a Naruto.

—Así que estas usando esa técnica. —dijo Pain. —Veo que te han informado muy bien.

Di un giro golpeando con mi pie otra barra y así romperla, pero eso lo aprovechó Pain para alejarme de Naruto.

—Así que no me dejarás otra alternativa. —comenté volviéndome a incorporar. Concentré bastante chakra en mis manos formando así unos puños de dragones. —¡Recibe esto!

Corrí esta vez hasta Pain, comencé a mandar golpes para poder dañarlo, pero él simplemente los esquivaba y entonces logré darle un golpe en su hombro, con mi pie le di un golpe en su pierna para hacer que cayera.

Nuevamente fui donde Naruto y destruí otra barra, iba a ir por otra, pero nuevamente Pain me elevaba, esta vez me elevó aún más alto y me lanzó al suelo con fuerza.

—¡___-chan!

Aquella caída me provocó bastante daño, apenas logré levantarme y me sentía muy cansada.

—No entiendo. —decía Pain. —¿Por qué sigues luchando?

—Hace un tiempo no me hubiera importado nada. —digo agitadamente para luego ver a Naruto. —Pero él me hizo cambiar. Yo protegeré a Naruto cueste lo que cueste, incluso si eso significa dar mi vida por él.

—Por favor, ___-chan. —suplicaba Naruto. —Detente.

—Naruto. Lo que dije esa vez en el puesto de ramen no era una broma. —confesé formando una sonrisa. Él se sorprendió bastante. —Tú siempre me has gustado.

Volví a correr para poder destruir otra de esas barras, pero Pain me había elevado nuevamente haciendo que cayera  a una corta distancia.

—¡___-chan! ¡Por lo que más quieras vete! —suplicaba Naruto. —¡No te pongas en peligro!

—Siempre...había tomado un mal camino. —digo formando un media sonrisa. —Pero tu me cambiaste, Naruto. ¡Tu sonrisa me ha salvado!   

Comencé a acercarme a Naruto con dificultad, mi cuerpo no daba para más, pero hasta el último esfuerzo yo trataría de ayudar a Naruto.

—___-chan...por favor. —volvía a suplicar Naruto. Su voz estaba a punto de quebrarse y era algo que me mataba. —Ya basta...

—Yo mantengo mi palabra...—digo con una sonrisa sosteniendo la barra que se mantenía en sus manos haciendo que él me mirara bastante sorprendido. —Porque ese es mi camino ninja.

Nuevamente sentí como me elevaban, ya no podía hacer nada, incluso si quería protegerme no tenía suficiente chakra; ya que lo había utilizado en proteger a Konohamaru junto a Ebisu. Caí con fuerza al lado de Pain, el cual sacó una barra y la clavó en mi pecho haciéndome escupir mucha sangre.

Desde donde me encontraba podía ver claramente a Naruto, estiré mi mano tratando de alcanzarlo, pero era imposible.

—N-Naruto-kun...—murmuré su nombre formando una débil sonrisa.  

—¡____-chan!

Mis ojos comenzaban a cerrarse y lo último que pude oír fue el grito desgarrador de Naruto.