Al oeste de Tokyo, 4:30 am

Fat Gum y Nighteye estuvieron peleando con varios nomus durante varias horas. El traje de ambos estaba rasgado y con marcas de golpes sangrientos. El cansancio se hacía notar, así que trataron de mantener a raya en un mismo lugar a las criaturas para que los estudiantes pudieran hacer las evacuaciones.

— Oe, Tetsubro. Ayúdame que hay personas atrapadas dentro de un incendio. -pidió Red Riot mientras un condominio de apartamentos se caía a pedazos-.

— Hai. -con un guiño aceptó a proceder el héroe Real Steel que activó su estado metalizado para entrar a rescatar a una familia de cuatro personas-.

Sin embargo, dentro del incendio el escenario era muy difícil porque resulta que un nomu high-end sostenía la cabeza de una mujer y la apretaba fuerte con una sola mano. El padre estaba noqueado y los hijos, una hembra y un varón, lloraban pidiendo piedad.

— Maldito, déjala ir. No tiene que ver en nada. -apretó los dientes mientras trataba de ponerse nervioso para evitar un desastre mayor-.

— QUIERO AL MÁS FUERTE. -exclamó el bicho con el cerebro salido-.

— No tengo mucho tiempo, está en frente mío y si me acerco puedo lastimarlos a ellos porque esto puede colapsar. -pensó Tetsutetsu-.

— Si quieres al más fuerte, suelta a la señorita. -Tetsutetsu buscaba persuadir al nomu de soltarla, pero no parecía surtir efecto-.

— DEMUESTRAME QUE ERES EL MÁS FUERTE, O DESTRUIRÉ TODO. -entonó esa cosa mientras apretaba más fuerte-.

— S-sal-v-valos a-a e-ellos-s. -dijo como pudo la mujer que estaba sin fuerzas como para resistirse-.

— El que no arriesga, no gana. -Tetsutetsu se lanzó para tomar con los brazos a los dos niños, al hombre y arrebatarle la rehén al nomu-.

— ERES DÉBIL. -el nomu sonrío macabramente para terminar su grotesco cometido, pero...-.

— POOOOOOOWEEEEEEEEEEEEEER. -todo iba en cámara lenta por unos segundos-.

La escena era impresionante. Un joven rubio de perfil bien parecido al estilo Tin-Tin apareció para envestir con un zurdazo directo a la cabeza del nomu para desorientarlo. El héroe de la clase 1-B, sin pensarlo, tomó como pudo a la mujer que estaba atrapada para después correr hacia la salida y encontrarse con Kirishima.

— Hermano, lo que acaba de pasar no me lo vas a creer. -indicó Tetsutetsu mientras el pelirrojo le ayudaba con la carga-.

— Togata-senpai llegó a ayudarte. -dijo sin pensar mientras corría hacia la salida del edificio-.

— ¿Cómo lo supiste? Verlo en acción es otra onda. -suspiró el chico de hierro pensando que impresionaría a su hermano de otra madre-.

— Él me vio en la entrada y usó su don para rescatarte porque vio en la situación que tú estabas. -explicó sonriente sin darse cuenta que su amigo estaba decaído-.

— Espera, ¿no había perdido su don? Los rumores decían que fue en su pasantía. -extrañado habló Tetsu-.

— Pasaron muchas cosas y pues, lo recuperó gracias a una heroína bastante especial para nosotros. -Eijiro pensó en la fiesta de navidad donde Eri estaba vestida de Santa-.

Los dos siguieron bajando hasta llegar a un lugar seguro que servía como área para heridos. Los doctores notaron a los dos héroes sosteniendo a la familia rescatada, ellos dispusieron a entregarlos a los profesionales de la salud.

Cerca del lugar, Shishida tenía doble tarea y recibía la ayuda de Anima (Koda) y Rokketi (Pony). Tenía que proteger el área de pacientes donde estaba auxiliando a los heridos de los edificios aledaños y pelear contra los nomus.

Koda se mantenía a distancia distribuyendo a animales nocturnos como lechuzas como distracción y búhos siberianos, halcones y murciélagos como ataque.

(Cr: encontrado en Fireven de 4chan)

— Lechuzas a mí. Ustedes deben ser el cebo, sobrevolar a los monstruos y ustedes halcones y murciélagos devoren su cabeza. Los búhos sirvan como rastreadores para el resto. Vayan, vayan, vayan. -ordenó Koda desde arriba de un rascacielos mientras estaba buscando a sus compañeros con la vista-.

El héroe peludo de la clase 1-B y la rubia gringa estaban rodeados por cuatro nomus. Ella estaba herida de sus piernas, el talón del pie (o pata) izquierdo estaba destrozado y su cabeza presentaba varias contusiones de consideración.

— Gevaudan, I need your help. -indicó la heroína que venía de intercambio-.

— Dime, Rokketi-san. -indicó la bestia que estaba sangrando de la cabeza, un ojo cerrado por el dolor, una mano rota y con dificultades para estar de pie-.

— Anima & you are fighting strongly. But we have to move faster. So, throw me forward as hard as you can. I got a plan. -la chica estaba decidida a hacerse su movimiento-.

— ¿Estás segura? -preguntó Shishida que estaba inseguro y veía que los nomus comenzaban a avanzar-.

La chica dio un asentimiento, orientó tres veces los ojos hacia los nomus sin voltear la cara. Jurota entendió lo que significaba. Entonces sin perder más tiempo tomó de la cintura a Pony y la lanzó como una jabalina en línea recta.

La chica volaba directamente hacia su objetivo, puso sus manos sobre sus sienes y atacó.

— HORNHOU CHAINSAW. -la rubia lanzó una ráfaga de cuernos de su cabeza, estos giraban a una velocidad de casi 13,000 revoluciones por minuto y estas iban directo a las cabezas de cada nomu-.

La escena era cuando menos digna de una película de Quentin Tarantino, las cabezas de dos nomus eran decapitadas y otras dos solo recibían rasguños. La chica se hizo bolita para utilizar su cuerpo como bala ¿humana? para así aprovechar el lanzamiento de su amigo.

Gevaudan, tras lanzar a Rokketi, corrió dando zancadas de considerable longitud para terminar con los nomus tras el primer ataque.

— GAON REIJI. -atacó Shishida a los nomus que eran decapitados-.

Estos recibían un puñetazo para que sus cabezas cercenadas explotaran, bañando de sangre el concreto. Los otros dos que quedaban eran tomados con una llave Twistter para arrancarles la cabeza, pero lo más perturbador fue que el último nomu se regeneró de su daño.

Al no ser un daño tan considerable, la regeneración permitió tener efecto. Así que la pelea se hizo más ligera, pero no menos difícil.

El héroe peludo estaba tratando de no moverse más de lo necesario debido a sus heridas. Así que apostó a ir por lo seguro, saltar en parábola para después ir en caída libre a hacer el daño a la cabeza.

El plan era simple pero sin demasiadas fallas. Así que Gevaudan saltó con su pierna, ganó bastante altura y en caída libre preparó su mejor golpe. Aunque el nomu tenía otros planes.

Este se puso en pose defensiva, brazos en X hacia su cabeza, su sonrisa más tétrica para intimidar. El golpe, aparentemente no presagiaba un resultado de mayor trascendencia, pero el nomu no sintió cuando empezó a bajar los brazos. Habían dos cuernos que cortaron ambas extremidades.

Esto extrañó al fenómeno, ese segundo que perdió sirvió para que Shishida conectara su golpe bestial a su cabeza, pero lo curioso es que la cabeza se quedó como pegada al puño porque el resto del cuerpo se quedó de pie.

— Siempre debes vigilar a tu entorno. -fue lo último que dijo el chico bestia de la 1-B-.

La cabeza de ese último nomu cayó el suelo y el mismo puño lo pulverizó para dejar el reguero sangriento.

— Rokketi-san, ¿estás bien? -preguntó preocupado Shishida mientras evitaba que Pony cayera fuerte contra el suelo-.

— Arigato, Shishida-san. -la señorita sonreía con esfuerzo-.

Los dos estudiantes fueron al área médica que estaban protegiendo para ser atendidos ya que les costaba movilizarse. Necesitaban atenderse rápido porque lo que se vendría sería el Apocalipsis andante.

Cerca de la ubicación de estos chicos, el héroe Death Arms se encontraba conteniendo a algunos nomus mientras Earphone Jack recorría junto a Comicman las calles buscando heridos a quienes ayudar.

— Manga-kun, en estos negocios hay nomus cerca. Debes crear barricadas para encerrarlos. -indicó Jirou mientras conectaba al concreto sus jacks- En prácticamente todos no hay rehenes.

— Hai. SHHHHHH. -Manga se posicionó frente a las estructuras donde habían presencia de nomus y creó una onomatopeya de silencio-.

Cuando esto pasaba, una nube de pensamiento gigante aparecía para después materializar una barrera transparente que insonorizaba todas las entradas frontales de cada lugar. Por afuera no podía escucharse; sin embargo Jirou podía escuchar por dentro al conectar sus jacks.

En cuanto a Sugarman e Invisible Girl, ambos trabajaban en equipo distrayendo a los nomus mientras otros estudiantes de otras academias ayudaban en tareas de rescate. Cabe mencionar que Toru tenía un labor complicado ya que debía usar su Refracción de Luz para ayudarle a Sato.

— Esto se hace cada vez más imposible. Aunque los golpee hasta romperles el cuello, no puedo perforar la cabeza. -se quejó Rikido mientras intercambiaba golpes con un nomu high-end-.

Durante varios minutos había sido un intercambio de golpes en donde la criatura iba ganando. Los golpes y patadas que recibió, aunque eran de gravedad en una persona ordinaria, la regeneración ayudaba mucho. Sato, por su parte, tenía sus nudillos sangrantes, su tabique casi desviado, parte del esternón fracturado y dolores cercanos a la fractura en ambas rodillas.

— Había guardado esto para una emergencia, pero tendré que improvisar. -pensó Sugarman para tragar los últimos tres cubos de azúcar que guardaba en el cinturón de su traje-.

El castaño de labios carnosos se infló y comenzó a correr en círculos alrededor del nomu. El estudiante soltaba pequeñas ráfagas de puñetazos, las cuales empezaba defendiéndose el monstruo, pero a medida que avanzaban los segundos ya no podía seguir el ritmo del chico de la UA.

Una pequeña cortina de humo se generó, el nomu estaba desorientado y con la guardia alta pero no esperó que el siguiente golpe sería el último que recibiría.

— FRUCTOSE BANG. -exclamó mientras iba en caída libre con ambos puños por delante-.

Lo siguiente fue un golpe mortal hacia la cabeza del nomu que no pudo defenderse, la desorientación le impidió notar que lo atacarían por el único lugar donde nunca pudieron impactarle. Los puños de Sugarman se hundieron en la masa gelatinosa del cerebro del bicho.

Se formó un cráter en medio de la calle, el nomu fue pulverizado hasta quedar una masa deforme sin cerebro. Sato había quedado inconsciente porque usó toda la fuerza que le quedaba tras ingerir fructosa, uno de los azúcares que producen mayores cantidades de glucosa.

Jirou, Manga y Toru fueron a ayudar al castaño, quien había caído fuerte y su estado físico indicaba que necesitaba asistencia médica. Los tres buscaron un lugar medianamente tranquilo para revisar al joven, Hagakure lo llevaba en sus hombros para sacarlo del cráter.

— Tiene pulso, pero a juzgar por sus heridas y sangrado, puede que esté más lastimado de lo que parece. -Hagakure puso su dedo en su cuello y palpó sus extremidades buscando indicios de heridas graves-.

— Y el área médica debe encontrarse algo lejos, porque no veo ninguna. Yo iré a por ayuda. Ustedes sigan rastreando nomus y evacuando personas. -indicó Manga para cargarlo en su espalda y correr-.

Las dos chicas asintieron y con la mano se despidieron de su compañero. Hagakure estaba sentada mientras comenzaba a suspirar de cansancio.

— Kyouka-chan, ¿crees que salgamos bien de esto? -preguntó la chica invisible preocupada-.

— Quiero creer que sí. La verdad es que me esperaba que la vida de héroe sería caótica y te jugarías el pellejo, pero no pensé que sería tan pronto en nuestro primer año. -explicó la pelimorada mientras pensaba en cómo se imaginaba el futuro-.

El momento fue interrumpido cuando un temblor de considerable magnitud comenzó a agitar el lugar. Jirou conectó uno de sus auriculares en el pavimento y tras dos segundos, su expresión de sorpresa cambió a preocupación y miedo absoluto.

— HAGAKURE-SAN. ES TIEMPO DE CORRER. -gritó la chica mientras tomaba de la mano a su amiga-.

— ¿Pero qué pasó Jirou-chan? -preguntó mientras trataba de correr la invisible-.

— MONSTRUO GIGANTE VIENE HACIA ACÁ. AVISA A LOS HÉROES. -gritó mientras corría desesperada, el miedo fue demasiado grande que sus impulsos dominaron su cuerpo-.

Toru se extrañó de tal comentario, pero volteó a ver y varios edificios a lo lejos empezaban a caerse como castillos de naipes a la distancia. Entonces, sin cuestionárselo mucho escribió en la HN.

— ALGO GIGANTE SE APROXIMA HACIA EL OESTE DE TOKYO. ESTÁ DESTRUYÉNDOLO TODO. SOS. -escribió Hagakure rápidamente e inmediatamente recibió respuesta-.

— TOMURA SHIGARAKI HA DESPERTADO. -fue el mensaje que leyó y esto le heló la sangre-.