*Créditos de la imagen: hiwonoafu en Tumblr*

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POV: Tomura Shigaraki

Habíamos llegado a una especie de meseta donde se podía ver una ciudad bastante pacífica, justo como odio que se vean. Examiné el terreno, Giran seguía con la guardia alta pero ligeramente más calmado.

— Vean el paisaje, este lamentable lugar será testigo junto al resto de Japón de lo que soy capaz. Quiero destruirlo todo. -dije al aire mientras mi rostro andrajoso esbozaba una sonrisa que me tranquilizaba los nervios-.

Escuché unos pasos que venían hacia nosotros, se sentía una presencia extraña y un poco hostil. A medida que los segundos pasaban, a lo lejos se podía distinguir a dos sujetos. Un hombre alto, pelo negro recogido hacia atrás y con lentes junto a una mujer algo madura pero con piel azul, pelo morado y ojos verdes con escleróticas oscuras.

— Sean bienvenidos a nuestro humilde hogar, Liga de Villanos, ustedes son nuestros invitados de honor a la historia. Por favor sígannos. Seremos sus guías. -habló el hombre con un tono de voz desagradable a mis oídos, tratando de sonar "hospitalario"-.

— Vienen en nombre de Re-Destro, ¿verdad? -preguntó Spinner mientras tenía una mano cerca de la funda de su espada-.

— Así es, caballero. Por favor, permítannos ser sus anfitriones. Acompáñennos, se perderán la fiesta. -mencionó el hombre, sonaba como político con ese tono de voz molesto y falso-.

Bajamos de la meseta y nos introdujimos en los suburbios de Deika, parecía un lugar normal, aunque me sentía algo expuesto. Pero lo que empezó como una visita turística se iría convirtiendo en una especie de pelea de gladiadores en la cuna de los leones.

— Si quieren hablar con el gran comandante, tendrán que participar en nuestro festival. -habló la chica con un tono que trataba de "calentar" nuestras mentes-.

— ¿Para un festival de mierda nos hicieron venir? -Dabi se molestó pero con su tono displicente lo disimulaba-.

— Este será el Festival de Resurrección de Habilidades Especiales. -alzó la voz al cielo la tipa esa y mucha gente empezó a asomarse hacia nosotros-.

— SHINE TOMURA. -gritaron varios desconocidos hacia mí-.

Eran simple chusma palurda buscando pelea para saciar sus arcaicos deseos egocéntricos. No importó qué dones tenían, no les pregunté porque solo con golpearlos con la palma expuesta fue suficiente para deshacerme de ellos.

Se deshicieron como cenizas mientras sentían mi golpe más suave sobre sus cuerpos. Escucharlos gritar fue música para mis oídos, pero luego una explosión se escuchó tras de nosotros.

— Así que la niña cuyos antecedentes de homicidios hematofílicos era real y no solo una leyenda urbana. Me encantaría explorar tu mente, Himiko Toga. -dijo la mujer de piel azul-.

— Prefiero verte sangrar, maldita milf. -gritó Toga mientras trataba de ponerse de pie-.

— Supongo que así son los delincuentes sin recursos, solo son amedrentadores cuando no tienen el respaldo de All For One y de sus nomus. Nosotros como el Ejercito de Liberación de Superpoderes vivimos por la causa: que el ser humano sea libre de ejercer lo que se le dio por derecho de nacimiento. -respondió la tipa mientras se acercaba a Toga y un séquito la escoltaba-. Me presento querida niña, soy Kizuki Chitoze, periodista y directora ejecutiva de Shoowaysha y quiero escribir mi mejor obra para el mundo.

Kizuki Chitoze
Quirk: Mina de tierra

Nombre clave: Curious

Es una de las lideresas del Ejercito y su don consiste en crear minas en cualquier superficie que toca con sus palmas. Las explosiones individuales son de escasa fuerza, pero a medida que incrementa el número de minas, mayor es el impacto.

A medida que Toga se levantaba, la gente que la rodeaba la arrinconaba y ella se sentía presionada. Pero logró dar un salto considerablemente alto para evadir a sus oponentes. Ella se puso al lado mío, los demás estaban librando sus batallas a lo largo de los suburbios.

— Los miembros de nuestro ejercito se cuentan por miles y los entrenamos para despertarlos del letargo moral que esta sociedad les impone. Aquí estamos limpios de los héroes masivamente conocidos e incluso tenemos héroes en nuestras filas que sirven a la causa de la liberación. -relató el otro sujeto mientras estaba sobre un edificio observando la pelea-.

Otra explosión fue provocada y salimos volando hacia una especie de restaurante vacío. Himiko estaba furiosa, ella preparó su maquinaria y activó los resortes extensibles de sus jeringas como si fueran arpones. Asesinó a varios imbéciles que se acercaban.

— Maravilloso, con que así matabas a todo aquel que se interponía. Podías elegir candidatos y convertirte en cualquiera que desearas. Además de tu agilidad de movimiento, tiene una amplia vista de su entorno, ¿cómo lo hiciste? -preguntó la estúpida mujer azul con una sonrisa que me daba ganas de desintegrar-.

— Aunque envíes a miles de tus soldaditos, no van a detenerme. La sangre de ellos es deliciosa y sugestiva, voy a darme un banquete Tomura-chan. -decía la loca rubia mientras se engullía ese líquido rojo-.

— Ahora es momento de explotar. -se relamió los labios la tipa esa-.

La sangre que Toga estaba saboreando empezó a burbujear para después explotar dentro de su cuerpo. Parecía un pez globo haciendo reacción e inflándose.

— Ahora sabes porqué somos un grupo tan fuerte. Los soldados leales están dispuestos a dar la vida por la causa. -dijo Chitoze mientras reía de la impresión-.

— El Ejército de Liberación quiere hacer su mundo ideal, yo quiero un mundo en donde puedo estar con las cosas que me gustan, amar a quien yo quiera y verlo sangrar para sentirme satisfecha. -respondía Toga mientras una sonrisa psicópata llena de sangre se formaba-.

— Habla muñeca, dame lo que quiero, déjame conocer el porqué renunciaste a tu vida normal.

— ¿Quién dice que no tengo una vida normal? -respondió la rubia mientras se relamía la sangre que quedaba en su cabeza-.

— Fascinante encabezado para hablar de la niña que desapareció después de su graduación de la secundaria. Dime más. -seguía hablando Curious mientras se ponía de pie-.

— Yo solo quería amar aquello que me hacía feliz, tener algo importante de ellos dentro de mí. Mi don me permitía ser lo que quería tener de ellos. Beber la sangre de aquellos que me interesan era estimulante, mi admiración por algo tan natural como la sangre es gratificante para mí. Si el mundo no me comprende, pues que se acostumbren a mí. -decía Toga mientras seguíamos evadiendo los ataques en masa de las turbas-.

— Así que reprimías al mundo ese sentimiento para que explotara y te convirtieras en lo que eres hoy. Porque de ser de otro modo, serías diferente... -Curious dejó de hablar abruptamente-.

— Te equivocas maldita, yo siempre expresaba mis emociones. Sonrío cuando estoy feliz, cuando estoy molesta solo tomo mi cuchillo y mi jeringa, el resto es mi terapia. Hago lo que quiero para vivir como quiero. -escuché a Himiko decir esto pero con una voz que expresaba excitación mientras saltaba para zafarse de todo el mundo-.

— MARAVILLOSO, NI YO LO HUBIERA EXPLICADO TAN BIEN. -gritó la loca de Chitoze mientras se acercaba corriendo-.

— Yo solo quiero vivir en un lugar con quienes amo, Deku-chan, Ochako-chan, Yui-chan. -Toga se quedó parada en una intersección-.

Llegaba hacia ella Curious con una sonrisa bastante sádica mientras sostenía una grabadora. Yo la veía desde un extremo, Himiko me hizo una seña con el dedo índice y medio para indicarme que fuera con ella, entendí.

— ¿Sabes? No somos tan diferentes. Serás la mártir del Ejército de Liberación, tu historia demostrará que somos la legión mejor encaminada hacia la perfección de la sociedad. Tu obra de vida será nuestra Biblia. Viviste por la sangre, muere por nuestra causa. -decía Curious preparando un golpe para hacerla explotar-.

— Aquello que no me guste, Tomura-chan lo destruirá. Y tú no me gustas. -fue lo último que soltó Toga para que yo llegara a tomar el cuello de la mujer azul-.

— Ella será nuestra mártir, ustedes solos son principiantes con delirios de grandeza. -decía la maldita Chitoze mientras la sostenía con mis dos manos sin apoyar todos los dedos en su garganta-.

— Acordemos no estar de acuerdo. Tu sacrificio será nuestro próximo escaño a la grandeza. Shine. -le dije para poner mis 10 dedos y pronto su cuerpo se desintegraba a medida que los segundos pasaban-.

Como ceniza que nace del fuego, el viento se llevaba lo que quedaba de una "periodista" que buscaba la desgracia ajena para satisfacer su ego malogrado. Esa chica, a pesar de lo molesta que podía ser, tenía razón en algo: nosotros vivimos por una causa y destruimos aquello que aborrecemos.

Yo vivo porque el sensei me dio la mano y me prometió destruir aquello y aquellos que me dieron la espalda. Dicen que de la mano de alguien divino se creó el mundo. Y con mi mano puedo juzgar a aquellos que odio para llevarlos a ese estado final donde ya no son molestia. Mi mano estirada puede extinguir la mismísima creación.

Había tenido esta sensación antes, usar mi desintegración para matar. Me recuerda a casa.