Capitulo 5



Luego de estar con los hongos andantes, Alicia nos dió un recorrido por el mundo mágico.

Me estoy dando cuenta que este lugar está dividido. Todavía no lo conozco bien, pero hay una parte donde es muy verde y muchos árboles, y otro donde hay hongos y flores grandes como árboles, y justo ahora estamos enfrente de un lago con agua cristalina, la luz del sol hace que el lago se vea muy brillante, peces grandes con escamas muy brillantes se pueden apreciar en el lago, junto con las flores de loto🪷. El lugar también lo adorna los árboles de sauce llorón de colores pasteles y mariposas de distintos colores que vuelan por el lugar.

—Me voy a quedar siega con tanto brillo—se queja mi hermana.

—Yo también—dice Coraline.

Alicia ríe ligeramente.

—Lo sé, pero una vez que te acostumbras ya no encandila tanto—admite Alicia.—por la noche no encandila. Brilla como fosforescente, es mejor en la noche.

Burbujas nos pasan enfrente de nosotros haciendo sonreír a las niñas.

Luego pasa algo brillante volando aun lado de nosotros.

«Hadas»

Alicia empieza a caminar con un poco de rapidez y la seguimos.

Ella se agacha al suelo donde hay un par de plantas y toma algo, se da la vuelta y tiene una hada en si dedo índice.
Nos quedamos perplejos al verla.

La hada es de piel clara, cabello rubio brillante, orejas puntiagudas, pequeñas alas de color amarillento, ojos grandes azules y viste con un vestido amarillo.

Es pequeña pero se puede ver sus rasgos.

—¡Que linda!—chilla de emoción Coraline.

La hada le sonríe.

Volteo a ver a mi hermana ya que no a dicho nada sobre la hada. Por lo que veo se quedó sin palabras.

Mi hermana ama las hadas, desde muy pequeña. Ama los cuentos, películas e historias de hadas. Cuando ella estaba más pequeña usaba todos los días unas alas de hada de juguete y las dejo de usar hasta que ya no les quedaron.

Mi hermana voltea a verme y le sonrió y ella todavía con su cara que no se lo puede creer. Regresa su vista a la hada.

De repente empieza a oscurecer y la hada empieza a brillar más y se va volando.

Volteamos a ver nuestro alrededor y todo empieza a brillar fosforescente. Los árboles, las hadas, las flores de loto y las mariposas.

«Tiene razón Alicia, se ve mejor en la noche»

Dicho la palabra noche volteo a ver mi reloj que tengo en la muñeca y veo que las manecillas no se mueven. Frunzo el ceño confundido, doy ligeros golpes al reloj.

—Mmm, eso no funciona aquí— dice Alicia refiriéndose al reloj.

—¿Qué?, ¿por qué?—pregunto aun más confundido.

—No lo sé, es unos de los misterios de este lugar.—dice encogiendo los hombros.

—¡¡Miren!!— grita mi hermana apuntando a las hadas que están volando. Parecen luciérnagas con el brillo que dan, pero en este caso son de diferentes colores.

—¡Ooh, por allá!— exclama Coraline apuntado al lago.

Peses brillantes color naranja y amarillo fosforescente salen del lago.
Los peses se mueven como si estuvieran nadando, pero estaban flotando en el aire.

Nos quedamos boca abierta admirando el lugar y sus bellezas.

🦋

Después de ver el espectáculo de los peces brillantes, Alicia nos dijo que tenia que mostrarnos la tercera parte del mundo mágico.

Ahora estamos en la parte de los hongos y las flores grandes. Lo raro de aquí es que es de día. Volteo a ver el cielo y las nubes están teñidas de color rosado.

Pongo mi vista al suelo. Me encanta el césped con el patrón de verde oscuro y verde claro.
Caminamos entre las flores y hongos, unos mas altos que otros, pero aun así no cambia el hecho de que son grandes como árboles. Los tallos de algunas flores están enrolladas como espiral, y tiene hojas muy grandes.

Caminando entre las flores y hongos gigantes me hace sentir muy pequeño en este mundo.

—No sé ustedes, pero yo pienso que las nubes parecen algodón de azúcar—comenta Coraline riendo con la vista clavada en el cielo.

Cassie levanta la vista hacia arriba—¡es verdad!—dice riendo.

Los cuatro volteamos hacia arriba y admiramos el cielo de algodón de azúcar y en eso pasa la mariposa más grande que he visto en mi vida.

—¿Eso era una mariposa?— pregunta mi hermana sorprendida.

Alicia no le pudo responder a mi hermana porque en eso nos pasan mini elefantes y jirafas aun lado de nuestros tobillos.

—¿Pero que..?—no tenia palabras, estaba sorprendido.

«son unos de los misterios de este lugar»

Recordé las palabras que dijo Alicia hace rato.

Escucho un ligero sonido, «música» me detengo.

—¿Qué pasa?—me pregunta Cassie.

—Escucho música—murmuro como respuesta.

La música empieza a sonar más fuerte eso quiere decir que esta cerca. No sé porque pero empiezo a caminar para buscar de donde proviene. Me agacho un poco y muevo un par de hojas y veo que unos osos de colores están formados en fila bailando y cada uno tocando un instrumento.

Cassie llega a mi lado, abre la boca y sus ojos le brillan—¡¡No puede ser!!, ¡ositos!—chilla de alegría, estaba apunto de correr hacia ellos, pero la detengo, la cargo impidiéndoselo.

No confío mucho en este lugar, me da mala vibra.

Con el ruido que hizo Cassie, los osos se detiene en seco y paran de tocar. Voltean la cabeza lentamente hacia nosotros.

Me quedo helado al ver los rostros de los osos; ojos de botones, algunos tienen la boca cocida y otros con sierres.

(Los osos con sierres son los osos que están tocando la trompeta y la flauta).

Cassie me abraza asustada escondiendo su cabeza en mi cuello, por un segundo no puedo dejar de ver a los osos, pero de pronto siento una mano en mi hombro eso me hace voltear y miro a Alicia.

Aun helado por lo que acabo de ver, eso no me lo esperaba.

—¿Qué pasa?—pregunta Alicia preocupada.

Quita su mano de mi hombro y la pone en la espalda de Cassie.

—Tranquila, lo siento. El próximo lugar será más divertido.

Volteo otra vez hacia los osos y ahora tiene la cara tierna y empiezan a tocar los instrumentos.

—Vamos—nos anima Alicia.

—No—niego acariciando la cabeza de Cassie.

—Prometo que el siguiente lugar será más divertido—dice ella un poco apenada—se que este lugar puede resultar espeluznante y raro, pero también es hermoso y divertido.

Lo pienso. No quiero encontrar nada más aterrador para mi hermana. Pero la curiosidad me gana.

—Esta bien—contesto serio.

Ella sonríe de boca cerrada—Gracias, por darle una oportunidad—dice refiriéndose al lugar mágico.

🦋

Seguimos caminando entre flores, hongos y ramas, Alicia se detiene y nosotros también, ella tiene la vista clavada hacia enfrente, sigo el trayecto de sus ojos y miro una casita de color rosa y naranja, tiene el techo de forma de hongo, tres ventanas y una mini puerta.

—Parece una casa de juguetes— dice mi hermana.

—Si, Alicia ¿podemos ir a jugar en ella?— pregunta Coraline.

—No pueden, porque ahí vive alguien—contesta Alicia.

—Pero, ¿quien puede vivir ahí?—pregunto.—Es tan pequeña la casa—señalo la casita.

—Gnomos—contesta Alicia antes de caminar hacia la casita.

Cassie y Coraline la siguen, mientras yo me quede parado con el ceño fruncido.

«¿gnomos?»

Bueno, ya era de esperarse, por todo lo que he visto hoy.

Sacudo la cabeza volviendo a la "realidad" y camino hacia la casita también.

Llegando a la casita Alicia se agacha a tocar la puerta con ligueros golpes, al pasar los segundos la puerta se abre y sale un gnomo; pequeño (obviamente), grandes ojos, barba blanca, un sombrero puntiagudo (cono) de color rojo y vestido con un overol azul marino, con una camisa naranja y zapatos negros.

El gnomo sonríe hacia Alicia enseñando sus dientes puntiagudos.

—Hola, tienes visitas—dijo Alicia con dulzura.

El gnomo aún sonriendo, nos voltea a ver y su expresión cambia a serio.

Alicia voltea hacia nosotros.

—Son amigos, descuida, ellos son buenas personas—Aclara Alicia, dirigiéndose hacia el gnomo.

El gnomo se nos queda viendo con los ojos entre cerrados, pasan unos segundos y se hace aun lado para que podamos pasar hacia adentro de la casita.

—Pacen—nos indica Alicia.

Cassie y Coraline son las primeras en pasar y saludan al gnomo, él les sonríe.

—¿No quieres pasar?—me pregunta Alicia.

—Amm, no sé si quepa ahí adentro—digo viendo el tamaño de la casa.

—Inténtalo, te vas a sorprender— dice Alicia alzando ambas cejas.

Alicia antes de entrar totalmente a la casita, en el umbral de la puerta se detiene y hace un saludo con la manos ella y el gnomo. Eso me hace reír.

Alicia entra a la casa. Esta obvio que ella si entra allí, ella es mas bajita que yo. La casa me llega a la mitad del estómago.

Pienso en meterme a la casa y por lo que veo el gnomo se esta cansando de sostener la puerta para mi.

«Inténtalo, te vas a sorprender»

Las palabras de Alicia suenan en mi cabeza.

Así que accedo a entrar.

Al principio tengo dificultad en entrar, levanto hacia enfrente cuando entro y me quedo sin palabras.

La casita por dentro no es casita es ¡casota!. Por fuera se mira pequeña, pero al entrar es como estar en un hotel de lujo.(por lo grande que esta, no por el lujo).

Okey, la apariencia de esta casita engaña.

Me incorporo y veo que hay más gnomos.—cientos de gnomos—. Por lo que veo se todos se viste igual con el overol, camisa naranja y el gorro puntiagudo de color rojo, pero algunos tienen barba blanca y otros cafés.

—Te dije que te sorprenderías— dice Alicia atrás de mi.

volteo a verla y le sonrió.

Hada:


Algo así es la casita de los gnomos:

Las flores del lugar:

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top