✿ Capítulo 45: Pataditas y clases
♡Capítulo dedicado a: -vhopex♡
HoSeok
Los meses iban pasando y mi hijo se hacía notar con más frecuencias, al igual que el dolor de pies de Taehyung.
Al ir a la quinta consulta, la doctora nos aseguró que este mes sería un tanto difícil para TaeHyung, ya que sus dolores en el vientre aumentarían y sus carreras al baño, que por cierto eran muy seguidas, se darían con el doble de frecuencia. Pero también nos aseguró que este mes podríamos sentir con más claridad a nuestro hijo, pues al estar un poco más formado, comenzaría a dar sus primeras pataditas e incluso se movería con más agilidad dentro del vientre.
Sonreí involuntariamente, recordando el rostro de TaeHyung al escuchar todo aquello y al ver nuevamente a nuestro bebé, en la ecografía. Él se veía realmente feliz.
— Hobi — susurró mientras estaba acurrucado en mi pecho.
Muchas veces tenía que salir temprano de la empresa para complacer los antojos de mi prometido, y esta era una de esas veces, pues TaeHyung me había llamado pidiendo una de las tortas de la nueva pastelería del centro, y como el buen esposo que sería, cumplí sus gustos.
Bajé mi mirada y lo encontré jugando con los botones de mi camisa. Reí al ver lo tan inocente y tierno que se veía.
— ¿Qué quieres bebé? — susurré de la misma manera contra su sedoso cabello castaño.
— Quiero tener el cabello rubio — alzó su mirada y me dedicó aquella sonrisa rectangular, con la cual lograba convercerme en todo.
Negué de inmediato. Aunque no lo crean, había leído mucho sobre el embarazo y sus cuidados durante esta etapa, y uno de aquellos era evitar usar algún decolorante de cabello o algún químico en el cuerpo estando embarazado.
— Pero, Hobi — chilló.
Volví a negar.
— Aish... Está bien — hizo un puchero y esta vez arrugó mi camisa entre sus manos.
Fije mi vista en su gran vientre y comencé a contar los meses que quedaban para tener a mi hijo en brazos. Enserio estaba muy feliz.
— Tae — acaricié sus cabellos y él solo emitió un sonoro "mm" como respuesta. — Quiero saber el sexo del bebé para cuando vayamos a la siguiente cita.
Él negó de inmediato.
— Tae — esta vez chillé yo. — sería mas económico saberlo desde ahora, para así comprar todo lo necesario para su llegada, en vez de ir comprando ropa blanca.
Él levanto su mirada y volvió a negar.
— Yo quiero que sea sorpresa. — hizo un puchero y volvió a acurrucarse en mis brazos.
— Está bien — dije de mala gana, mientras desviaba mi mano de la cintura de Tae y la colocaba en su lindo y casi inexistente trasero.
Él volvió a levantar su mirada, pero esta vez me dedicó una linda sonrisa.
Aproveché la situación y dirigí mis labios a los suyos, iniciando un beso rápido y caliente. Él me correspondió de inmediato, mientras colocaba sus manos en mi cuello. Era jodidamente sexy.
No quería subirme encima de él, por el temor de hacerle daño, así que apreté ligeramente su trasero dándole a entender que lo quería encima de mí de inmediato, y así lo hizo. De un momento a otro, ya lo tenía en mi regazo y con sus labios pegados a los míos.
Iba a levantar su camisa, pero él se apartó de inmediato.
— ¿Qué suce...
— Shh — colocó uno de sus dedos en mis labios — Se está moviendo, HoSeok — dijo con algunas lágrimas en sus ojos.
— ¿Qué? ¿Quién se está moviendo? — mi confusión era tan grande al igual que sus lágrimas que ya estaban resbalando por sus mejillas.
Sin recibir respuesta alguna, TaeHyung guió mi mano hacia su gran vientre y solo en ese momento pude entenderlo. Nuestro bebé se estaba moviendo, mejor dicho estaba dando unas fuertes pataditas.
TaeHyung estaba llorando y miraba su vientre en todo momento.
— ¿T-te duele? — susurré.
— Esta vez sí... — sus lágrimas caían. — p-pero es asombroso.
Asentí y pasé mi mano alrededor de todo su barriga. Lo volví a sentir, pero esta vez fue en otro lugar.
— ¿Lo sentiste?
— Sí... Es muy lindo
Le sonreí y comencé a limpiar sus lágrimas con el dorso de mi mano.
— H-HoSeok, antes no pateaba muy fuerte. — rió y lloró al mismo tiempo.
Tenía ganas de llorar pero quería ser fuerte para TaeHyung y para mi hijo, por lo que solo lo abracé y besé su rostro hasta calmarlo.
[🐯]
Desde las primeras pataditas, en las cuales pude estar presente, pues Tae ya me había aclarado que esta era la segunda vez en la cual nuestros hijos se hacían notar, TaeHyung no había dejado de insistir para ir a unas clases de pre parto. Según él porque teníamos que prepararnos para el "gran día", pero al llegar a ese lugar, lo único que pude observar fue a mis amigos, a JungKook y a NamJoon.
— También te trajeron con el mismo cuento. — miré a JungKook y asentí de inmediato.
— Ya somos tres — habló esta vez NamJoon.
Suspiré y miré a los otros padres quienes acompañaban a sus esposas o esposos. Todos parecían igual de aburridos que nosotros.
La profesora, que por cierto estaba muy buena, se presentó y comenzó a hablar sobre la "linda etapa" que estábamos pasando todos los presentes, pues según ella, nosotros también estábamos involucrados en el embarazo de nuestras parejas.
Ví de reojo al orejón que estaba a mi lado. El muy idiota estaba apuntando todo lo que hablaba esa mujer.
Tenia ganas de reírme, pero en vez de hacer algo estúpido, golpeé ligeramente el hombro de JungKook para llamar su atención y al tenerla, le señalé al chico de mi lado. Él sí no aguantó la risa y soltó una sonora carcajada que llamó la atención de todos en el salón, incluso la de JiMin, quien parecía que quería matarlo con la mirada.
Iba a seguirle, pero al ver la expresión de TaeHyung, decidí callarme.
— Creo que es tiempo de que los padres acompañen a sus parejas. — habló la profesora, mientras no quitaba su vista de nosotros.
El primero en salir corriendo hacia su pareja, que por cierto se parecía mucho a TaeHyung, fue el orejón de al lado.
Rodeé los ojos y caminé hasta TaeHyung, quien me recibió con un leve golpe en el pecho.
Iba a quejarme y pedir una explicación pero él se adelantó...
— Eso es por andar burlándote de los demás papás que sí son atentos. — me miró mal antes de sentarse en un pelota grande.
Miré a NamJoon y al parecer él también había recibido una reprimenda de parte de su novio. Luego miré a JungKook y solo basta con decir que JiMin no le dirigía la mirada.
— Hoy será un largo día — susurré para mí mismo.
Las clases, aunque nadie lo crea, fueron divertidas. En especial porque podía ver como el trasero de TaeHyung rebotaba en aquella pelota grande. Era algo excitante. Aunque no fue tan bonito tener que ver vídeos de partos naturales o cesáreas. Eso sí que no le gustó a nadie, a excepción del orejón que por cierto se llamaba ChanYeol, este baboso no dejaba de apuntar y asombrarse con la maravilla de la vida.
TaeHyung estaba hablando con Baekhyun, quien era la pareja de ChanYeol, y con sus típicos amigos, mientras que NamJoon hablaba con JungKook sobre lo dificil que era lidiar con un embarazado de gemelos. Y yo solo los escuchaba mientras veía venir al orejón.
— Tú eres HoSeok ¿Cierto?
Me dieron una grandes ganas de golpearlo al escuchar aquello. Se suponía que todos nos habíamos presentado a principio de la clase y aquí estaba él, preguntando de nuevo por mi nombre. Solo me quedó asentír con mucho pesar.
— Tu esposo es TaeHyung ¿cierto?
Volví a asentir sin mucho ánimo.
— Ok. ¿No crees que la barriga de tu esposo es muy grande como para solo tener cinco meses? Mi novio Baekhyun — señaló al chico que se parecía a TaeHyung. — también tiene cinco meses y su barriga no es tan grande como la de tu esposo.
Desvíe mi mirada y observé el vientre del tal Baekhyun y luego lo comparé con el vientre de mi TaeHyung. Eran muy diferentes, en especial porque el novio del orejón tenía una barriga más pequeña.
— No has pensado que tal vez tu esposo esté esperando gemelos. — habló nuevamente el orejón. Negué de inmediato.
— En mi familia nunca nacieron gemelos o mellizos. — aseguré.
— Pero en la familia de tu esposo tal vez sí.
— No lo creo. TaeHyung se hizo muchas ecografías, las cuales nos muestran solo un niño.
El orejón iba abrir nuevamente la boca, pero su novio lo llamó, a lo que él salió casi corriendo.
Seguí observando el vientre de TaeHyung y esta vez lo comparé con el de Jin. Me sorprendí al observar que tenían casi el mismo tamaño, pero que el de Jin estaba un poco más grande.
Seguí en mis pensamientos, hasta que TaeHyung se despidió de sus amigos y del nuevo amigo que había hecho.
— ¡Hobi, me duelen los pies! ¡Vámonos ya! — medio gritó.
Asentí, aún pensando en todo lo que me había dicho el orejón ese.
— TaeHyung. — lo llamé una vez que estuvimos en el auto. Él me miró. — Alguna vez has visto mellizos o gemelos en tu familia.
Él parecía confundido. Apreté el volante y mis nervios aumentaron.
— ¿Alguno de tus parientes ha tenido mellizos o gemelos?
TaeHyung abrió la boca algo asombrado y luego asintió.
— Mi tía tuvo gemelos, pero luego me enteré que no era mi tía de sangre, por lo que no cuenta ¿O sí?
Suspiré con más tranquilidad y le sonreí.
— Eso no cuenta, TaeHyung.
— Y se puede saber a qué viene esa pregunta.
Volví a sonreír con un poco de nerviosismo, y negué.
— Solo era curiosidad.
Él también sonrió y volvió a mirar al frente.
Me llené de alivio al saber que no tendría ni mellizos, ni gemelos. Pero aquel alivio desapareció al ver a mi futura suegra al lado de Minjae en la puerta de mi casa. Y al parecer TaeHyung estaba sorprendido, pues su boca estaba ligeramente abierta.
Maratón 4/6
Nota actual:
Maratón 1/3
Sigo tardando demasiado en actualizar, pero estamos cerca del final y por tanto, me estoy dando un tiempo para editar todo, bebés •3•
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