—No voy a subirme a ese animal—negó rotundamente Gideon frente al caballo.

—Es una caballo y no te hará nada— le sonrió Serena arriba de un majestuoso caballo blanco.

—¿Sabes que ni manejar un moto se?— le pregunto Gideon y negó con la cabeza— Paso, hago lo que quieras menos subirme.

Serena se cruzo de brazos arriba del potro blanco, soltó un suspiro y bajo de el, tomó las riendas de ambos caballos y los regreso al establo

—No me veas asi— hablo Gideon cuando Serene lo miro— No hago cosas de ricos.

—Bueno, entonces ¿veremos la carrera?

—De acuerdo, pero no me preguntes a qué caballo le voy porque no se.

Serena soltó una risa y se sentaron en las gradas, la temperatura comenzó a disminuir considerablemente hasta los primeros copos de nieve comenzaron a caer sobre ellos, Serena estiro su mano observando como los copos reposaban en su palma, sus ojos verdes se dirigieron a unas risas.

—Ay no...

—¿Quienes son?

—A ese grupo les caigo mal— señalo a tres chicas rubias riendo cerca de uno de lo chicos de equitación.

—¿Y esos de allá?—señalo a una familia vestidos totalmente de negro, los Souza, una familia igual de rica que ellos pero siempre competitivos.

—Tampoco les caigo bien, le baje en novio a Alexandra.

Gideon asintió con la cabeza y volvió a señalar.

—De acuerdo, hay que aclarar que aquí a nadie le caigo bien.

Gideon abrió la boca para opinar pero luego la cerró y siguió viendo los caballos correr, no entendía nada del juego pero ya le había apostado mentalmente a uno de ellos.

Serena apartó la mirada de los caballos y se topo con la mirada de su hermana, la apartó lentamente y tomó la mano de Gideon quien seguía intrigado por cómo ganaban, no le encontraba la lógica.

—No entiendo, el caballo negro llego antes y están anunciando al ganador al blanco que llegó después...— miró a Serena— ¿Que clase de juego es este?

—Abrazame— pidió Serena.

Gideon fruncio el ceño

—Mi hermana y personas del club me están viendo, quiero que sepan que eres mi novio, ahora abrázame.

Gideon paso su brazo por el hombro de Serena y ella acercó su rostro al cuello del chico

—¿Asi?—pregunto con duda el chico.

—Así es perfecto. Ahora, regresando a los caballos, no gana el que llega primero sino el que tiene más puntos acumulados en carreras pasadas, es cierto que llegar a la meta primero es el objetivo pero llegar primero no significa que seas el ganador.

—Ajam, extraño juego, es como el fútbol y los mundiales, por puntos.

Serena lo miro atento al juego y paso su mano sobre su rostro, el la miró.

—¿Me besas?

Gideon abrió los ojos haciendo reír a Serena.

—Dios, Gideon, no estoy envenenada y vas a morir si lo haces.

Gideon miro a su alrededor.

—Pero esta tu familia cerca...— le murmuró.

—Dah, quiero que queden convencidos que eres mi novio...— parpadeo agitando con exageración sus pestañas— ¿Me ayudarías con eso?

Gideon asintió con la cabeza, nervioso y sin poder ocultarlo, Serena paso su mano por su cuello y lo jalo, el chico bajo sus manos a su cintura y acercó su rostro a Serena, sonrió la chica a mitad de beso.

Los gritos alrededor festejando al equipo ganador de equitación sobresalto a ambos y Gideon se giro hacia la cancha donde habían corrido los caballos.

—¿Gol?— pregunto y Serene alzó una ceja, regreso su vista a ella— ¿O como le dicen?

***

—Un tipo de chico muy diferente con los que sueles andar— hablo Sarah mientras terminaban de preparar la cena.

Serena sonrio un poco.

—Me gusta experimentar y el es el indicado.

Sarah la miro

—¿Como lo sabes?

—Porque yo lo sé.

Sarah soltó una sonrisa.

—¿Te enamoraste?

Serena parpadeo ante ello y regreso a su papel, sonrió con alegría.

—Tal vez.