010
diez
fantasías
ahora
kakashi se acomodaba el pantalón, mientras narumi subía su ropa interior.
— deberíamos hacer esto a diario —sin dejar que su chica terminara de arreglarse, la pegó del escritorio y rodeándola con sus brazos, dejó un beso en sus labios.
— no se acostumbre, hokage-sama —murmuró ella, rozando el cuello de él con sus dedos. le había dejado unas cuantas marcas y estaba orgullosa de ello—. solo deseaba marcar y reclamar mi territorio.
el hombre de cabellos plateados sonrió e inhaló el delicioso aroma que desprendía el cuello de la kunoichi.
— soy tuyo. aunque me gustas posesiva. es bastante estimulante, honestamente.
antes
— ¿nunca has tenido fantasías con algún superior? —le preguntó sakura a su compañera de equipo, narumi.
— ¿fantasías? ¿qué tipo de fantasías? —la contraria frunció el ceño ante la pregunta de la chica a su lado.
— fantasías sexuales, idiota.
— ah... —se contuvo de responder—. ¿tú sí?
sakura asintió, muy animada.
— ¿y de quién se trata? —preguntó narumi.
— ¡kakashi-sama! —chilló.
— sakura, ¿estás hablando de que tienes fantasía sexuales con el hokage?
— ¿y quién no las tendría? por dios, ¡está buenísimo!
— tienes razón —asintió narumi, indiferente.
— es tan... malditamente caliente.
— pensé que te gustaba sasuke.
— así era, pero... tengo una nueva meta.
— ¿cuál?
— ¡seducir a kakashi! ya no soy su alumna y creo que ahora soy lo suficientemente mujer como para gustarle.
— bien, sakura-chan —narumi se puso de pie—. mucha suerte en tu plan de seducir a kakashi-sama —afincó el honorífico.
— ¡gracias! debo irme.
— adiós... ilusa.
narumi tomó rumbo a la torre hokage. entró a la oficina sin al menos tocar y caminó hacia el peliplata, quien leía desinteresadamente unos documentos.
— ¡hol... —la kunoichi no le dejó completar el saludo. ésta le bajó la mascara y se lanzó a sus labios, adueñándose de ellos sin aviso alguno. cosa que al hombre no le molestó en absoluto.
la rodeó con sus brazos y sentó por completo en sus piernas.
ella comenzó a despojarle de su vestimenta, tirando las telas al suelo. dejó besos en su cuello ahora desnudo y subió hasta sus labios, una vez más.
— me gusta esta forma de romper la rutina —confesó él, esbozando una media sonrisa—. aunque, admito que estoy confundido.
— tu entrepierna no parece estarlo —imitó su sonrisa y sintió las ágiles manos de kakashi, subir en forma de caricias hasta sus costillas.
— no es mi culpa que lo incites, moviéndote sobre él de esta manera —se flexionó dócilmente contra ella. en este punto, ya estaba bastante caliente.
— eres bastante fácil para la edad que tienes —dijo ella, burlona.
— eso también es tu culpa—le quitó la camisa, para besarle el pecho y bajar a sus senos, aún cubiertos.
— solo quiero follar al hokage —ella le abrió la bragueta y metió su mano entre las telas.
— ¿solo follar? lastimas mis sentimientos.
— ¿estás en modo sensible? pues, yo estoy muy cabreada —se afincó en los hombros del sujeto y hundió aquella hombría en su estrecho y deseoso interior.
— trataré de molestarte más seguido —aún dentro de ella, se puso de pie y la acostó en el escritorio, mandando a la mierda todo el trabajo pendiente y reclamando a esa mujer como suya.
lo lamento, sakura. tus fantasías no podrán hacerse realidad.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top