CAPÍTULO 18

Reunión.

Olivia.

Miro la hora en mi celular, pronto serían las seis de las seis de la tarde, mamá y papá estaban en casa, me había olvidado por completo de ellos cuando había aceptado la invitación Jordan, miro mi vestido rosa palo y mis botines cafés, no había entendido muy bien a lo que se refería Lina con pequeña reunión, solo esperaba no estuviera usando un atuendo fuera de lugar, Susan ya estaba en casa, de hecho habíamos almorzado juntas.

—¿Vas a salir?—pregunta Susan entrando a la habitación, asiento, ella camina hacía mi cama y se acuesta de espaldas a mí, tiene puesto un short color crema y una camiseta blanca básica, se ve bastante cómoda con su caballo suelto y sin nada de maquillaje en su rostro.

—¿Quieres venir?—le pregunto, aunque seguramente dirá que no, mañana teníamos clases y ni siquiera sabía a dónde iría o con quienes.

—¿Por qué no? Aunque no quiero que tus padres piensen mal de mi, he salido prácticamente todo el fin de semana.—comenta, yo paso un poco de brillo labial sobre mis labios y sonrió, ya estoy lista. Me giro para ver a Susan, ya no me está dando la espalda y está sentada.

—No seas boba, mis padres jamás pensarían así. ¿Te puedo contar un secreto? ¿Prometes no decir nada?—Camino hacía ella, agarro la cartera que tengo sobre la cama, reviso mi celular, Lina aún no me ha contestado.

—Claro, lo prometo.

—Tengo unos nuevos amigos, ¿Te acuerdas de Lina?—asiente.—Pues ella es amiga de unos amigos de mi hermano y los conocí, me invitaron a una reunión o algo así.

—Creí que tu hermano era algo asocial.—dice, sonríe.—Si te caen bien, deben ser personas geniales.

Lina: Nosotros pasaremos por ahí dentro de media hora. ¿Está bien?

Olivia: ¿Puedo llevar a Susan?

Lina: Sí, no hay problema.

—Entonces. ¿Vienes?—le pregunto, Susan asiente, dice que se pondrá unos zapatos y que ya vuelve.

Olivia: ¿Pueden parar tres casas antes? No quiero que mamá o papá se enteren de lo de Marcus, ya sabes.

Lina: Ya lo sé, ya le dije a los chicos.

Salgo de la habitación con mi cartera y celular en una de mis manos, Susan ya está en el pasillo con sus zapatos puestos, ambas bajamos las escaleras en silencio, papá y mamá están en la sala.

—¿Van a salir?—nos pregunta mamá.

—Sí, iremos...—interrumpo a Susan antes de que diga algo indebido.

—Iremos a la biblioteca y a comer a un restaurante al que queríamos ir hace ratos, solo chicas.—miento.

—Oh, que la pasen bien.—Nos desea mamá, ambas nos despedimos y salimos de casa.

—¿Qué fue todo eso?—pregunta mientras caminamos por la acera.

—¿Qué? Oh, te dije que era un secreto.—Después de llegar a la tercera casa, me detengo y me siento en la acera, Susan se sienta a mi lado.

—¿Un secreto que no saben tus padres? Algo no me estás contando.—Dice, saca su celular y se pone a contestar algunas mensajes mientras espera mi respuesta.

—Tranquila, no es nada de otro mundo.

                                                                                                      (...)

—¿Qué? ¿Marcus está en una banda? ¿Escribe canciones?—es lo primero que me dice Susan después de dejarla apenas cinco minutos con Harold o mejor dicho el chismoso que incluso me había delatado frente a todos hablando sobre mi salida con Lina y mi robo.

—Te dije que era mala idea dejarla con Harold.—dice Jordan en voz alta, Harold lo mira indignado, como si fuera inocente.

—Trajimos helado, ¿Quién quiere?—Joshua y Lina entran a la casa con bolsas en sus manos, ellos habían ido al super a comprar unas cosas, Jordan y yo habíamos ido a la cocina por vasos y hielo.

—¿Compraron de vainilla? Es mi favorito.—dice Susan rápidamente, Joshua sonríe.

—Al fin alguien me entiende, el helado de vainilla es el mejor.—comenta él, Susan ríe y asiente, ella se levanta del sofá en el que estaba junto a Harold. Lina le quita las bolsas a Joshua y camina a la cocina con ellas en sus manos.

—Siendo sincero prefiero el de limón o fresa.—dice Harold.

—Opino lo mismo.—digo, Harold y yo chocamos nuestras manos y me siento en el lugar en el que estaba Susan.—Mi hermano tiene razón, a ti no se te puede contar nada, eres un chimoso.

—No, solo soy hablador.

Lina regresa con una botella de Coca Cola en sus manos, Joshua y Susan van en busca de los vasos que Jordan y yo habíamos dejado en una bandeja y los traen, Jordan le quita la botella a Lina y sirve un poco de Coca Cola en los vasos, todo eso sucede mientras no dejan de hablar de cualquier tontería que se les ocurra, extrañamente no me siento fuera de lugar o incomoda a pesar de mi vestido, ellos parecen estar vestidos con ropa de casa, totalmente relajadas, luego tal vez me quejaría con Lina por no decirme que usar, lo que más me gustaba era que Susan tampoco se veía incómoda, se notaba tranquila y parecía que se divertía.

Siendo sincera los había juzgado un poco mal, esperaba ver alcohol o cigarrillos, incluso algún tipo de droga, muchos desconocidos, pero solo eran ellos, realmente parecía una reunión de amigos totalmente pacífica, parecía una pijamada llena de dulces y comida chatarra.

 —Te ves pensativa. ¿Estás bien?—me pregunta Lina después de sentarse a mi lado, me da un vaso con Coca Cola, lo acepto y tomo un sorbo.—¿Sigues siendo una homofóbica?—Susurra para que yo solo escuche su pregunta.

—Yo no soy eso.—niego con mi cabeza, solo había dicho lo que pensaba, era cierto mi religión decía que estaba mal y yo creía en esas palabras, fueron dichas por Dios.

—Sí lo fuiste, pero por mi bien mental voy a tratar de no pensar en eso.—comenta, toma un sorbo de su Coca Cola y se une a la conversación del grupo, yo hago lo mismo.

—Entonces por culpa de Lina termine en una propiedad privada y casi termino preso.—nos termina de contar Jordan.

—Solo fue un reto, tenías que cumplirlo.—se encoje de hombros ella.

—Eso tuvo que ser una locura, creo que Oli y yo nunca hemos hecho algo así en toda nuestra vida.—dice Susan, asiento hacía ella, tiene toda la razón.

—Somos jóvenes, tenemos que vivir al máximo mientras podemos.—Harold habla mientras tiene picaritas en su boca, siento envidia porque incluso haciendo algo tan asqueroso se veía muy bien.—Deberíamos ir a esas piscinas privadas, es una locura, tienen un perro que supuestamente las cuida pero es un amor.

—¿Cuáles?—pregunta Susan extrañamente interesada.

—De ninguna manera, imagina si llegan a enterarse, nuestros padres estarían demasiado enfadados.—digo rápidamente.

—Ese es el punto, la adrenalina por no ser descubiertos, Olivia.—Jordan me contesta, niego con mi cabeza.—Eres demasiado miedosa, si supieras que Marcus ha hecho locuras peores, te sorprenderías.

—¿En serio? Pero Marcus prácticamente pasa estudiando todo el tiempo, no lo entiendo.—dice Susan.

—Voy por el helado. ¿Alguien quiere?—pregunta Lina, prácticamente todos dicen yo, por lo que me levanto y decido ayudarle a Lina a servir el helado, de todos modos necesitaba lavarme mis manos, había comido de las picaritas de Harold y ahora tenía mis manos sucias.

La sigo hasta la cocina, allí ella abre la refrigeradora y agarra los dos botes de helado, uno grande de vainilla y otro de fresa, los coloca sobre la mesa de madera que está allí, sobre ella hay barquillos y un tarro de frutas, definitivamente quería helado.

—¿Puedes sacar los platos que están allá? Los pequeños.—Lina me señala la alacena, la abro y saco los platos pequeños y hondos color blanco, son bastante simples y lindos, llevo seis platos y los coloco sobre la mesa.

—Listo.—Lina me agradece, agarra una cuchara, y empieza echar grandes porciones de helado en los platos, yo abro el tarro de frutas y coloco algo de fruta a un lado del helado en los platos, cuando le voy a poner al último Lina me detiene.

—No, no me gusta la fruta.—dice,coloco el tarro sobre la mesa y lo cierro, Lina camina por la cocina como si fuera su casa, encuentra una bandeja bastante grande y me la muestra con una sonrisa.—La encontré, pongamos los platos acá y los llevamos a la sala.

—¿Y las cucharas?—pregunto, ya que no le hemos puesto cucharas a los platos, Lina lo nota, saca cucharas plásticas de la alacena y rápidamente las coloca, luego abre el paquete de los barquillos y hace el mismo procedimiento.

—En tu religión se dice que está mal mentir, que eso también es pecado, pero estás aquí, les mentintiste a tus padres y incluso convives con un gay una bisexual.—comenta como si fuera una conversación totalmente normal, como si no pareciera que me está reprochando o molestando.—Solo digo.

—La diferencia es que yo pido perdón, voy a la iglesia, me confieso y recibo mi perdón, Dios nos perdona.—digo lo que pienso, después de todo es Lina, ella está siendo sincera, yo también estoy siéndolo.

—Yo no tengo que pedir perdón por amar, Jordan tampoco, no hacemos nada malo. ¿Les has preguntado a tu hermano si pide perdón por mentirle a sus padres? Por ser feliz.—Lina toma un lado de la bandeja y señala el otro extremo, yo lo tomo y ambas alzamos la bandeja saliendo de la cocina, los chicos festejan al vernos, pronto cada quien tiene su lado y estamos comiendo mientras vemos una película de suspenso.

Esta vez como en silencio, finjo que le presto atención a la película cuando en realidad estoy pensando en las palabras de Lina, me asusto cuando empiezo a dudar de mi, de mis creencias, de la educación de mis padres. ¿Realmente estoy pensando lo correcto? ¿Por qué siento que no es así? Pero recuerdo las palabras del padre, lo que me dijeron mis padres, la biblia, yo crecí escuchándolos, estoy bien, no hay nada malo en mi, creo en lo que debo creer y no debo cambiar solo por algo que dicen los demás. Miro a Lina a mi lado, dijo que es Bisexual, pero no estoy familiarizada con esa palabra, no se que significa y también temo saberlo porque seguramente tiene que ver con la homosexualidad, quizás Lina esté pecando, pero por ahora prefiero ignorarlo, ella es mi amiga y Susan se está llevando bien con todos ellos, son un grupo excelente de amigos y yo me estoy perdiendo este momento solo por estar pensando en cosas que debería ignorar.

Noto que Joshua se levanta y luego regresa con una guitarra en sus manos, parece que recibiré un concierto gratis esta noche, así que sonrió y todos empezamos a aplaudir y gritar haciendo que las mejillas de Joshua se tornen rosáceas, es demasiado tierno para este mundo.

WENAS.

¿Cómo va todo?

Estos días no han sido muy fáciles para mi, pero escribí un poco hoy, así que decidí actualizar. <3

Recuerden que los quiero, tomen agua y no sean vagos. 🧚🏻‍♀️✨

Chau.