Chapter 8

-- pareces un tomate --Se burló HeeSeung viendo al rubio quien se quejó bajo mientras pasaba sus manos suavemente sobre la nota que le entregó JungWon ese día leyéndola.

-- ¿para que hablas si también te colocas así cada que estas con Kai? --Defendió a su amigo Jake.

-- Touché --Le señaló el coreano y miró al estadounidense-- ¿Y qué dice?, aun no perfecciono mi lectura Braille.

-- No te la pienso leer --Chilló completamente sonrojado.

-- Anda Jay! --Chilló Lee viendo al rubio negar-- Iré a tu casa y voy a mover los muebles si no lo haces --Amenazó viendo el rostro ofendido del de gafas.

-- No te atreverías --Le retó, la última vez que el mayor hizo aquello cuando no le quiso pasar las respuestas de un examen que ya había hecho terminó bien golpeado.

Conocía muchas cosas de memoria, entre esas, su casa, sabía donde estaba cada mueble, las cosas de la cocina como los vasos, platos, cubiertos, frutas, el agua, entre otro. Así en su hogar podía andar tan fácilmente que los visitantes que no conocían de su Miopía dudaban que este fuera casi ciego.

-- ¿Dudas de mi poder? --Alzó una ceja.

-- Te voy a acusar con Kai Hyung --Sonrió victorioso.

-- La maldad no te dejará crecer --Le sacó la lengua sabiendo que su amigo no lo notaría.

-- Dime algo que no me hayan dicho antes --Rodó los ojos el rubio y tomó sus cosas sabiendo que pronto sería hora de entrar a clases, aunque justo su clase extra había sido suspendida, él junto a SungHoon y Riki habían quedado en reunirse en el patio trasero mientras el resto estaba en clases.

-- ¿Te llevo? --preguntó Lee.

-- No, yo voy, conozco el camino --Respondió y tomó su bastón blanco para simplemente retirarse yendo por el camino que ya conocía de memoria recordando la bonita nota que JungWon le había dado.

''Sus sonrojos son una de las cosas que no me canso de ver y dudo que algún día lo haga, se ve tan adorable y tierno con ese tono rojizo en sus mejillitas que siempre me dan ganas de apachurrarlas y llenarlas de besos hasta cansarme, cosa que dudo que ocurra algún día. Simplemente, usted es perfecto.
-- Yang Wonnie''

Sonrió con un leve rubor en sus mejillas y tanteó hasta llegar al patio trasero, escuchado a lo lejos la voz de Riki hablándole a SungHoon

-- Hola Hyung --Sonrió Niki viendo a Jay sentarse con ellos dejando sus cosas y su bastón a su lado.

-- Hola, ¿Cómo están? --Sonrió tranquilo.

-- Bien, justo le decía a Hoonie Hyung que Jake me invitó a conocer a su familia --Soltó el menor y notó el tonó a nervios en su voz-- Creo que Jake no les ha mencionado que no camino, ya que quieren que demuestre mi baile junto a Jakey, al parecer adoran bailar salsa...

-- Oh... ¿Y no le haz preguntado si les ha mencionado o no ello?, a mi pensar, creo que sería lo mejor, así se evitan sorpresas y momentos incómodos --Mencionó y sintió a SungHoon palmear su espalda de acuerdo.

-- No lo sé, parece tan ilusionado con que conozca a su familia... --Dijo bajo-- No quiero bajarle la emoción.

-- pero también tu comodidad es importante Riki --Dijo a lo que escuchó al menor suspirar, así que decidió desviar el tema charlando de alguna otra cosa.

Estuvieron un rato así, dialogando sobre temas triviales junto al ambiente tranquilo.

O eso fue la primer hora.

En cierto punto Jay comenzó a sentirse incomodo, intentando ver hacía los lados con la mínima esperanza de ver alguna mancha acercarse o escuchar algo que le dijera que porqué estaba tan inquieto.

-- Siento que algo va a pasar --Soltó.

-- Esos presentimiento a veces me dan miedo --Mencionó Niki.

-- ¿Y si mejor vamos a la cafetería?

-- Es lo mejor, ya esto por acá esta totalmente solo --El menor vio a SungHoon asentir y acomodar sus cosas-- Sung también está de acuerdo, vamos.

El Estadounidense asintió y tomó sus cosas junto a su bastón para levantarse, no dio ni tres pasos cuando sintió que le arrebataron su bastón y le empujaron al suelo.

-- ¡Hey! --Se quejó.

-- ¡Déjenme! --Escucho los quejidos de Niki y un golpe en seco con un leve estruendo; Habían tirado al menor de su silla.

Escuchó varios jadeos y forcejeos a lo que supo que SungHoon intentó dar pelea más una risas y escuchar los quejidos lastimeros del pelinegro le confirmó que no logró su cometido.

-- Uy, miren esto, tres errores en un lugar, nos ahorramos la caminata chicos --Rió una voz que conoció como uno de los chicos que solían hacerle Bullying desde hacía mucho tiempo-- Y dime Jay, ¿Enserio crees que JungWon se interesaría en tí?, se nota demasiado que es lastima por un ciego, a igual que tú otaku, ¿Enserio crees que Shim Jake, el líder el equipo de fútbol, va a estar con un invalido como tú? --Soltó con repudio-- Oh, vamos marica de hielo, grita y pide ayuda --Tanto él como sus amigos rieron ante ello.

-- Al menos si nos dan atención, no como tu intento de novia que se tiró ya a medio instituto y aun así ni la hora te da --Escupió y se arrepintió por completo al sentir una patada en su estomago sacandole todo el aire.

-- Encargense de ellos, no puedo estar en un mismo lugar con errores tanto tiempo --El rubio se sintió tan pisoteado y humillado cuando sintió como le escupió en la mejilla, asqueandolo completamente.

-- ¡D-déjenme p-por f-favor! --Escuchó los ruego de Nishimura junto a su sollozos mientras escuchaba como a la vez este era pateado.

-- p-paren... --El de gafas intentó cubrir su rostro mientras sentía el ardor de cada golpe en su cuerpo, incluso una bofetada que le partió un poco su labio.

Escuchaba a lo lejos los quejidos y sollozos de SungHoon siendo golpeado de igual modo sin poder pedir ayuda, además de que nadie debería estar fuera de clases.

Sintió cuando los chicos que los golpeaban corrieron al escuchar voces acercarse, aun así no se podía mover del dolor que sentía en su cuerpo.

-- ¡¿Qué les pasó?! --La voz inconfundible de HeeSeung apareció junto a varios pasos, escuchó un bullicio, reconociendo las voces de Sunoo, Jake y HueningKai quien corrió a llamar a los directivos.

-- Vamos a la enfermería --Soltó Jake cargando a su pareja quien sollozaba en silencio adolorido.

-- Sung, tranquilízate, ya pasó --Sunoo intentó calmar a su novio quien respiraba errático y temblaba cual gelatina a pesar del ardor en su cuerpo-- Vamos a que te chequeen cielo.

-- ¿puedes caminar? --Lee le preguntó a lo que negó, sentía que si se levantaba caería-- Esos malditos... Jay rompieron tu bastón... --Dijo mientras le cargaba estilo nupcial con cuidado y junto a resto corrieron hacía la enfermería donde ya la enfermera y la doctora de la universidad les esperaban para atenderlos.

Jamás se había saltado una clase, jamás en su vida, pero ese día perdió tres por andar en la enfermería siendo atendido y contando lo que pasó o todo lo que escuchó, Riki fue quien había logrado ver un poco la cara de los atacantes.

-- ¿No recuerdan algo más? --Escuchó a la directora.

-- Yo no logré ver nada más... --Ese fue Niki.

-- p-puedo reconocerlos por sus voces, llevan años en lo mismo, no me puedo equivocar... --Soltó el de gafas a lo que escuchó una afirmación de la directora antes de avisarle que llamarían a sus padres para que vinieran por ellos y retirarse.

-- ¡¿Chicos están bien?! --Los tres se sobresaltaron al escuchar la voz preocupada de JungWon al enterarse de todo-- Oh dios, parecen como si los hubieran usado de bolsa de boxeo --Soltó preocupado.

-- En realidad bolsa de patadas --Intentó aligerar el ambiente el japonés aunque su risa sin gracia no ayudó mucho.

-- Igual, ¿Les duele mucho? --Les miró negar a los tres-- Ya los chicos traen sus cosas, dicen que van a saldar cuentas en la salida...

-- No se vayan a meter en problemas, ya la directora está en eso y sé que mi mamá colocará la denuncia, no es la primera vez que llego así de golpeado a casa --Dijo Jay preocupado de que se pelearan.

-- para mí no es problema, estudie Taekwando desde niño y no pienso dejar que no lleven unos buenos golpes --Gruñó bajo aun enfadado por lo ocurrido.

park negó suspirando y escuchó como una mujer y un hombre entraron a la sala.

-- ¡Nini! ¡Dios mío! --Ese fue el hombre que de seguro y era el padre de Riki-- ¿Cómo te sientes príncipe?, ay dios, mira como te dejaron.

-- Solo me duelen las costillas Appa, pero me quiero ir a casa --puchereó el menor a lo que el hombre asintió y le cargó estilo nupcial con cuidado.

-- Dígale a la directora que mañana mismo vengo a colocar la denuncia, no puedo creer que desde hace años fuera lo mimo y aun no detengan a esos malnacidos --Se dirigió a la enfermera quien asintió.

Logró escuchar como se encontraban a Jake quien de seguro traía la silla del japonés mientras maldecía en Ingles a los bravucones.

A su lado, logró escuchar roces de los movimientos de las manos de SungHoon y su madre hablando en lenguaje de señas antes de levantarse.

-- Siempre es lo mismo, esperan a que alguien salga lastimado para que actúen --Gruñó la mujer llevándose de la mano a su hijo quien buscaba a Sunoo con sus cosas con la mirada.

-- ¿Cómo se siente Hyung? --Sintió a JungWon sentarse a su lado.

-- Adolorido y humillado --hizo una mueca-- Me escupieron en la cara, en toda mi vida jamás me sentí tan humillado que en este momento...

-- Dios, le juro que en cuanto los vea y los agarre, les rompo dos costillas --Yang alborotó sus cabello rabioso.

-- No valen la pena, ya veras que el karma les caerá en algún momento --Mencionó y tanteó a su lado sintiendo sus cuadernos y cosas que cargaba cuando ocurrió todo.

JungWon iba a decir algo más se vio interrumpido por una mujer que entró cual bala y miró al rubio de pies a cabeza preocupada.

-- Jayjay, ¿Estás bien bebé? --El mujer le tomó de las mejillas sacandole una queja al menor del dolor por los golpes allí-- Dios mío, mira no más como te dejaron --Acarició con cuidado sus mejillas y besó su frente-- Mañana mismo vengo a quemar la universidad, no puedo creer que ya son más de tres veces que pasa lo mismo --Gruñó y le ayudó a levantarse-- ¿Donde está tu bastón cielo?

-- Lo rompieron...

-- ¿Qué? --Yang abrió sus ojos sorprendido-- Ahora si les voy a volar los dientes --Soltó bajándose de la camilla decidido a ir a buscar quien sea que hubiera golpeado a su mayor.

-- Cálmate fiera, no vaya a ser que te metas en problemas, deja que los adultos nos encarguemos de esto, ¿Va? --Rió la señora park-- No dejaré que nuevamente esto pase --Dijo seria y vio al joven asentir-- Vamos bebé, tu padre estará furioso en cuanto te vea, ese de seguro me busca la gasolina para que incendie la universidad --Soltó logrando su cometido de sacarle una risa a su hijo quien se sostuvo de su brazo para que le guiara.

Se despidieron de Yang y salieron rumbo a la camioneta de la mujer, Yang mientras salió a reunirse con Jake, HeeSeung y Sunoo quienes estaban que botaban fuego por los ojos.

Quizás, solo quizás, les darían una muy pequeña lección a esos chicos.

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