—Y luego llegamos a casa, —Yerin nos contaba por décima vez con había conocido a Taehyung— estaba muy nerviosa porque no estaba ninguna de ustedes aquí, de hecho, fue cuando estuve ausente porque estaba en reposo.
—Espera, encontraste a Taehyung-ssi, ¿y lo trajiste a casa? —Eunha seguía sin entender esa parte.
—No, —respondió Yerin— recuerda que él caminaba frente a la tienda de convivencia cuando comenzó a llover y él se ofreció a prestarme su paraguas, es por eso que había ido al día siguiente para recogerlo.
—Pero, —Ye Won sonrió— él pudo haberla dejado, digo, tiene demasiado dinero para comprarse una nueva.
— ¿Y tú dices eso? —Todas reímos ante mi comentario.
—Entonces lo invité a pasar mientras iba por la sombrilla... —Sonrió jugando con sus pulgares.—Aún no puedo creer que lo hayas dejado pasar. —So Jung dejó caer el empaque de galletas a la mesa— ¿No pensaste en que te pudo haber hecho algo?
—No. —Yu Na rió— Estamos hablando de Yerin.
—Unnie, eres demasiado confiada, —Ye Won demostró su preocupación— no siempre Hyung oppa nos va a cuidar. También debemos ser cuidadosas.
—El punto es que gracias al descuido de Yerin, ahora está felizmente casada con Taehyung-ssi. —Yu Na limpió una lágrima falsa.
—Nunca me dejan terminar. —Yerin hundió su rostro en la mesa— Por eso nunca saben el final.
— ¿Ese no es el final? —Eunha cubrió su boca con asombro— Digo, ahí quedo una amistad y con el tiempo te confesaste a él, ¿no?
—Creí que él te había dado su número y se habían hecho amigos por chat. —So Jung tenía su versión.

Todas comenzamos a discutir acerca de que versión era la correcta. Cada una defendía su versión con pruebas de que era cierto lo que decían. Yerin gritó con uno de esos altos agudos que nos agujeraba hasta el cerebro.

—No nos hicimos amigos por chat, tampoco fui yo la que se confesó, Eun Woo oppa no nos presentó, ni fue en los vestidores en donde hablamos después de eso, no pasó "eso" ese día y tampoco nos besamos ese día. Que mente tan puerca de veras.
—Yerin negó todas nuestras teorías por más bien pensadas que estuvieran.— ¿Entonces que pasó? —Ye Won preguntó inocente.

...

—Aquí está tu... —¡AHH! TAEHYUNG NO ESTÁ, ¿AHORA QUE HAGO?, vamos contrólate, debes actuar normal. 

Bastó una pequeña cachetada para reaccionar. Busqué en el pasillo de la casa, el baño, y finalmente las recámaras, no estaba. Estaba nerviosa, ¿y si la empresa me busca porque desapareció?, ¿estará bien el mundo sin él?, ¿sus fans me tendrán compasión si les digo que no vi nada...?

—No, no lo haré. —Su voz venía de la ventana de mi habitación— Digo, no por ahora...

Caminé lentamente con el paraguas en mi mano. Temía que estuviera en peligro, es un ídolo internacional, es un chico realmente importante para todos. Casi me desmayaba al ver que estaba en las escaleras de emergencia. Tuve que esperar a que terminara.

—Está en su habitación, creo. No vendrá aún, digo, tiene más de 10 minutos buscando el paraguas, solo espero que no piense que me he ido, sería una buena excusa el baño. Jimin, no es momento aún, ella aún no nota nada de lo que hago, y estoy muy nervioso que ni siquiera he dicho más de 5 palabras. Quiero decirle pero... —Los ojos de Taehyung se abrieron a más no poder, estaba tan sorprendido y sonrojado— Amm, yo...

—Ah, amm, —sonreí— tengo tu paraguas, perdona que haya tardado mucho... ¿Cómo subiste ahí?

—Ah, eh... —Su rostro avergonzado hizo que me arrepintiera de haberle preguntado— Yo-yo, lo lamento, eh, ahora bajo.

—Ten cuidado, déjame ayudarte. —Extendí mi mano.

La tomó, pero, creo que se apoyó demasiado en mí. En menos de 3 segundos ya estaba encima de mi, y, digamos que no está tan ligero. Se arrodilló aún estando sobre mí. Solté el aire de mi pecho.

—Oh, lo-lo siento. —Tartamudeó nervioso. Cubrió su rostro sonrojado, se removió de mí. Me arrodillé frente a él al ver que estaba llorando.

— ¿Te hiciste daño? —Lo revisé sin respetar su espacio personal— ¿Te duele algo? Perdona, es mi culpa, no debí haber tardado tanto en buscar el paraguas.

—Yo...

—Debemos ir al hospital, —me levanté— es malo que no atiendas una herida de inmediato...

—Estoy enamorado de ti. —Soltó al aire interrumpiendo mi "información que cura".

Mi mente comenzó a crear teorías en un segundo. Es una apuesta, él no se enamoraría de alguien como tú. Lo dijo solo porque estaba nervioso. No creo que le gusten las planas, (sí, mi mente es muy dura conmigo). Big Hit lo obligó a hacer esto. Él es un artista internacional, obvio no se enamoraría de ti, una novata...

— ¿Eh? —Hice una expresión confusa— A ver, déjame ver si entendí; tu eres un chico muy guapo, adinerado, gentil y bastante popular. Yo soy Yerin, ¿entiendes? Una nadie.

— ¿Crees que si estuviera bromeando me humillaría de esta manera? Pues no, en realidad no lo considero una humillación, creo que es algo realmente difícil de hacer, pero aún así lo quería intentar.

—Escucha, sunbae, ¿tienes idea de lo que dices? —Cubrí mi boca sorprendida— Oh por Dios, acabo de usar el tono informal, lo siento.

—No me importa, —se arrodilló completamente— por favor, Jung Yerin. 

—Dame 1 semana para pensarlo. —Lo levanté, verlo en el suelo arrodillado me abochornaba— Mi madre me enseñó a no tomar decisiones a la ligera.

—Seré paciente, lo prometo. —Sonrió.