- Entonces vamos a la casa de terror el resto, –dijo Jungkook señalando la casa de terror. Su diadema de orejas de conejito se le veía adorable.
- Yo iré con Jun. –Jimin señaló a Jun, él tenía una corona de rey, quería que Jun se comprara la de reina pero ella no quiso.
- Lo que sea. –Dijo Jun mientras abrazaba su vientre, ella tenía una gorra de policía, igual al que tenía Yoongi en un BTS Run, creo que así se llaman.
- Yo iré con ella. –Dijo Yoongi con una sonrisa malvada para Jimin, Yoongi tenía un gorro de policía también.

La idea de ir al parque de diversiones fue de Yerin, según ella, se sentía mejor cuando se divertía estando en sus días, y creía que a Jun se le pasarían los dolores si distraía su mente y se divertía. Jungkook y yo teníamos la diadema de pareja con orejas de conejito, a pesar de que sólo le quedaba bien a él. Taehyung y Yerin tenían diademas de Mickey y Minnie Mouse, y Yoongi junto a Jun de gorro de policía. Jin una diadema de Koya y Namjoon de RJ, finalmente Hoseok, pero el no tenía ninguna por haber llegado tarde. Parecíamos niños con las diademas, pero a nadie le parecía molesto o ridículo.

- Vamos~ Tengo que probarlo, –Jungkook me llevó de la mano sonriente– si te asusta algo me abrazas.
- No creo que lo haga, pero trataré. –Sonreí.
- Vamos a tomarnos una foto. –Sacó su celular abriendo la cámara, lo abracé haciendo un corazón con mis dedos. Tomó varias– Hay que revisar que salgas bien, yo siempre salgo bien.
- Sí, claro. –Dije sarcástica. Voltee a ver a Jun, quien se tomaba una foto con Yoongi, después Jimin se acercó para tomarse una foto con ella.

Recorrimos casi todo el parque para llegar a la casa de terror, la cual lucía como una casa bonita de color rosa, era extraño porque la mayoría de las casas de terror eran descuidadas y sucias. Pero esa estaba cuidada y bonita. Una anciana linda nos atendió en la taquilla, nos entregó una pulsera con la cual nos podríamos comunicar con los demás. ¿Para qué querrías comunicarte con los demás si estaríamos todos juntos?

- Habrá 3 caminos distintos, –nos explicó la anciana con una sonrisa– pueden separarse o quedarse juntos, espero puedan salir bien.
- Gracias, –Jungkook hizo una reverencia.

Decidimos separarnos para hacerlo más emocionante, según los tips de Jungkook. Para ser sincera, la mayoría de las cosas no me daban miedo, sólo algunas, mientras que Jungkook reía nervioso. Jun gritaba cada rato, y a la mitad del recorrido comenzó a llorar, así que Yoongi tuvo que llevársela afuera. Entramos a una habitación completamente oscura, solté por unos instantes a Jungkook para amarrar mi cabello, volví a tomar su mano. Estaba aterrada por los ruidos extraños que ponían en aquella habitación.

- Jungkook, si me sueltas te asesinaré. –Lo amenacé estrechando su mano con fuerza.
- No lo haré. –Su voz sonaba diferente.
- ¿Qué le pasó a tu voz? Suena extraña.
- Creo que es por el aire acondicionado, me empezó a doler de repente. Creo que no tengo mi celular, ¿podrías encender la linterna del tuyo?
- ¿No lo tienes? –Busqué en mi bolsillo– Tomaste una foto antes de entrar a la casa, seguro que uno de los chicos te lo quitó.

La pulsera de comunicación no funcionaba, Namjoon ya no se escuchaba gritando, ni Jimin. Algo que era extraño y confuso, creí que era parte del juego. Encendí la linterna iluminando el contorno, la puerta estaba a centímetros de mí.

- Oh, encontré la puerta. –Dije emocionada mientras iluminaba la puerta– Jungkook, vamos~

Iluminé su rostro, solté su mano cubriendo mi boca, Benji sonrió mientras se acercaba, estaba muerta de miedo, tanto que ni siquiera podía moverme.

- Mi nombre es Benji no Jungkook, pero, vamos. –Tomó mi mano para después arrebatarme el celular.