Al parecer hoy no grabarían. Luego de la discusión con Jungkook no pude dormir, a veces me aterraba el hecho de que adivinara lo que estaba pensando, más cuando se trataba de cosas difíciles que nadie pensaría que pienso. Es confuso. Los comentarios hacían que me dieran menos ganas de grabar.

"x= Se comporta como si fuera la única chica en el mundo"
"x= ¿Por qué le preocupa tanto su pasado? Es patético."
"x= ¿Es el Benji que pienso? Respecto a SinB, la verdad es que yo tampoco estaría contenta si me pusieran con alguien a la fuerza."
"x= Se enfada en minutos, cae mal, solo quiere llamar la atención como todas"

Me hundí más en el sofá, eran las 8 de la mañana, arrojé el celular al otro sofá en señal que no lo quería cerca, obviamente terminaría peleando con ellas. Jungkook me entregó una taza de café, agradecí con una sonrisa. Cuando terminé de darle un sorbo vi que leía los comentarios, rápidamente arrojé un cojín a su mano, haciendo que el celular se impactara en el piso. Puse atención al ver que vibró, creía que era una ilusión óptica. De hecho, solo quería evitar la mirada de Jungkook, ni siquiera recordaba que era una ilusión óptica. O creo que sí.

- ¿Qué es eso? –Cuidó que su café no se derramara.
- Nada, solo haters. No hay nada que ver.
- Los demandaré a todos. –Casi me quemo.
- No es nada, es lo típico...
- No voy a dejar que alguien hable así de ti. –Se levantó.

No contesté, era demasiado temprano para comenzar una discusión. El reloj marcaba las 8 con 15 minutos, caminé a mi habitación con la cobija envuelta debajo de mi cintura, me gusta estar en ropa interior en mi habitación cuando no hay cámaras, solo que no iba a estar así cuando estaba él, lo había olvidado. Jeans negros y blusa de botones hasta el ombligo, finalmente zapatillas deportivas. Tomé mi mochila, algo extraño en el fondo. Un libro de webtoon. Lo tomé tratando de recordar cuando lo había puesto ahí. Nada.

- Eun Bi, llegó el mánager. –Dijo Jungkook desde la cocina. Después de todo tener a ese niño en casa no era del todo malo, comida 24/7.

Salí de mi habitación con el libro en la mano, Jungkook me dio un tóper en color rosa, lo metí en mi mochila sin tomarle importancia, recordé mis días de instituto. Dejé el libro en la mesa, besé la mejilla de Jungkook y salí como si Big Bang estuviera abajo. En el camino estuve pensando en mi actividad matutina, hasta que me topé con el beso en la mejilla de Jungkook, lancé un grito recordando con más claridad. El mánager frenó de golpe haciendo que me estampara en el asiento de adelante.

- ¿Pasa algo? –Volteó a verme por el retrovisor.
- No, nada, estoy bien. –Levanté mi pulgar.

Rodó los ojos, comencé a "limpiar" mi boca con las manos. ¡Estás demente! Imaginé a Jun diciendo eso mientras reía. Creo que tenía un mensaje de ella, había vibrado cuando estaba en el piso. ¡Yoongi! Había mandado un mensaje de lo que habíamos hablado hace días sobre su confesión. Cubrí mi boca...

- Jungkook. –Se escuchó en casi un susurro.

Le pedí el celular al mánager. Rápidamente marqué el número de Jungkook, era sencillo, hasta una fan podría aprendérselo de memoria.

- ¡Jeon Jungkook! –Grité en cuando escuché su voz.
- ¿Pasa algo?
- No toques mi teléfono, probablemente llame mi madre y no quiero contestar porque me llenará de preguntas extrañas y confusas sobre el programa o sobre otra cosa. –Dije rápidamente, más rápido que el rap de TOP.
- De acuerdo. –Dijo confundido. Suspiré aliviada- Pero, ¿quién es Jun?, ¿es un hombre? 

Cuando actualizo NMP llueven las notificaciones ☔

Buenas noches~ 🌙