Sentí escalofríos. Seguí bailando, cambiamos de pareja, Eunha se notaba algo celosa. «¡Ni quien quiera a esa rata!» grité en mi mente. Al finalizar Jackson me siguió hasta detrás del escenario. Tomé una botella de agua y la bebí completa, una de las chicas del staff me limpiaba el sudor con delicadeza, lo cual me hizo sentir como una princesa. 

- Estoy bien, gracias. –Sonreí quitando su toalla de sus manos. Acaricié su cabeza con ternura– Has trabajado duro. Toma un descanso. –Sonreí.
- Gracias, muchas gracias. –Se inclinó.

Jackson me observó impresionado. Me quitó la segunda botella de agua y la bebió.

- Ya, deberías de quitarte ese hábito. –Le di un liguero golpe en el brazo.
- Estuviste asombrosa, nunca te había visto tan... ¡wow! –Exclamó tratando de recuperar el aliento. Sonrió– Eres muy bonita, no entiendo porque no te gusta vestir así.
- No lo sé, creo que ser tierna esta plantado en mis venas.
- No solamente eres tierna. –Sonrió.
- Sí, claro. Termina de beber primero. –Señalé la botella.

Escuché la plática de Jungkook con Eunha. No estaba para nada interesada, simplemente escuché su conversación entre las demás.

- Lo hiciste bien, Jungkook. –Eunha levantó los pulgares.
- Creo que me equivoque algunas veces. –Sonrió.
- No~ estuviste genial. –Sonrió.
- Bueno, gracias, tu no lo hiciste tan mal. –Desacomodó su cabello.

Eunha se sonrojó cubriendo su rostro con las manos. Jungkook volteo a otro lado rodando los ojos, algo que odiaba que hiciera. Fingía ser alguien tierno, pero no lo era realmente. Rodé los ojos. Taehyung se llevó a Yerin dejándonos atrás, me daba ternura verlos juntos. Toqué mis mejillas.

- ¿Estás bien? –Preguntó Jackson confundido.
- Sí, es solo que me encanta ver a Taehyung con mi bebé.
- ¿Tu bebé?
- Yerin. –Lo observé seria.
- Ah, de acuerdo. –Sonrió– ¿Quieres salir a cenar? Claro, cuando acabe esto.
- No puedo. –Amarré mi cabello.
- Ah, no hagas eso. –Volteo a ver a otro lado.
- ¿Qué cosa? –Terminé de hacerme la coleta.
- Te ves realmente linda cuando amarras tu cabello. –Se sonrojó.

«Creo que necesita una operación de ojos, no entiendo que me ven, tampoco estoy tan bonita como otras» pensé confundida. Le arrojé mi toalla a la cara, la tomó rápidamente.

- ¿Puedo quedarme con esto? –Dijo señalando la toalla.
- ¿Qué?, ¿Para qué la quieres?
- Para... ¿olerla? Tiene tu colonia, huele a... –la olfateó– femenina.
- Que asco, bueno, haz lo que quieras. Podrías hacer un cubre bocas con ella. –Bromee.
- ¿En serio? –Preguntó después de reír.
- ¡Claro que no! –Le di un golpe en el brazo.

Jungkook se acercó. Sonrió mientras cruzaba los brazos. «Tenía que matar el chiste» pensé rodando los ojos. Jackson se alejó, sabía que quería que lo dejara solo conmigo, claro, yo estaba completamente en contra.

- Eun Bi, oficialmente estamos casados. –Me mostró el contrato de 'We Got Married'.
- Ah, sí. –Bebí de mi botella.
- Eso significa que debo cuidarte mientras estamos fuera y dentro del programa.
- Sí, sí, lo sé. –Voltee a ver a Eunha– Oye, ¿por qué no cambiamos de papeles y ya?, ambos sabemos que te odio, y odio más el hecho de tener que verte todos los días.
- No, no podemos.
- ¿Por qué lo dices?
- Simplemente no lo haré. –Sonrió picando mi mejilla. Detuve su mano. Lo acerqué.
- Sabes que Eunha estaría encantada, ¿cierto? –Susurré– Deja de hacer las cosas complicadas y ve con ella, es más linda y fácil que yo, ¿qué dices?
- No me gustan las fáciles, bebé. –Sonrió– No me importa que sea linda, me importa que sean como a mí me gustan, como tú. Y ella no es mi tipo. –Deslizó su dedo índice por mis labios.