ya no ahí vuelta atras y fin de temporada

Riot, sintiendo la ventaja bajo su control, continuó sometiendo a Lincoln con golpes implacables. Cada movimiento de su cuerpo estaba lleno de fuerza y precisión, como un depredador acechando a su presa. Lincoln intentaba resistir, pero su cuerpo, agotado por la lucha y la experiencia de enfrentarse a un ser con tanta destreza, ya no respondía como antes.

Riot: "Vamos, ¿es todo lo que tienes? Pensé que ibas a darme una pelea, pero solo eres una sombra de lo que los verdaderos héroes deberían ser."

Las palabras de Riot resonaban en la mente de Lincoln, perforando su determinación mientras sentía la presión física y psicológica del combate. Su cuerpo se sentía lento, sus movimientos más torpes a medida que el simbionte lo dominaba. La lucha parecía perdida, hasta que, de repente, una sensación extraña recorrió el suelo.

Un crujido helado recorrió la habitación, y Riot miró hacia abajo, apenas dándose cuenta de que sus piernas comenzaban a entumecerse. Un frío helado se extendía desde el suelo hasta sus rodillas, una capa de hielo cubriéndole las extremidades con una velocidad vertiginosa. Miró hacia atrás y vio a Frozono, quien había aprovechado un momento de descuido para atacarlo por la espalda.

Riot: "¡Maldito! ¡Qué te crees!"

Frozono, con su presencia imponente, se mantuvo firme, mientras la temperatura a su alrededor descendía drásticamente. El frío emanaba de él como un viento helado, y el aire se volvía espeso, cortante. Las piernas de Riot ya estaban completamente congeladas en el hielo, impidiendo su movimiento.

Frozono: "No tan rápido, amigo. Es hora de que te enfrentes a algo que no puedes controlar."

Riot intentó liberarse, pero el hielo era implacable. En un último esfuerzo por retomar el control de la situación, intentó usar sus tentáculos para liberarse, pero los movimientos ya no tenían la misma velocidad ni eficacia.

Fue en ese momento cuando Lynn Sr., observando la oportunidad que Frozono le había dado, no dudó ni un segundo. Se lanzó hacia Riot con una rapidez sorprendente, moviéndose con una agilidad que desmentía su apariencia robusta. Sin previo aviso, Lynn Sr. alcanzó al simbionte, y con una precisión calculada, atacó directamente a los ojos de Riot.

Lynn Sr.: "Es hora de que aprendas a no subestimarnos."

La ofensiva de Lynn Sr. fue brutal. Con su experiencia y fuerza, utilizó su puño como un proyectil dirigido, apuntando a los ojos de Riot con toda la fuerza que pudo reunir. El golpe fue certero, el impacto resonó en todo el espacio. Riot, desconcertado por la rapidez del ataque y el dolor agudo que sentía, soltó un gruñido gutural de furia.

Riot: "¡Arghh! ¡Malditos humanos, no saben cuándo rendirse!"

Lynn Sr.: "Nosotros no rendimos, no importa lo que hagas."

El simbionte, ya debilitado por la combinación de los ataques de Frozono y Lynn Sr., comenzó a perder su capacidad de mantener la forma. Los ojos, que habían sido su punto fuerte y su ventaja en el combate, ahora estaban seriamente dañados. Esto lo hizo tambalear, su cuerpo empezando a perder cohesión, la conexión con su huésped humano comenzando a fallar bajo la presión de los ataques.

Riot (jadeando): "Esto… no ha terminado… no me detendrás."

Pero el miedo en su voz no pasó desapercibido. El semblante de Lynn Sr. se endureció mientras observaba a Riot, sabiendo que, aunque el simbionte aún intentaba resistir, su lucha ya estaba condenada al fracaso.

Frozono (con tono burlón): "Creo que el espectáculo está por terminar."

A medida que el hielo rodeaba más y más al simbionte, y el daño en sus ojos le impedía atacar con la misma precisión, Riot se dio cuenta de que su tiempo estaba agotado. Sin embargo, no podía evitar dejar escapar una última amenaza.

Riot: "Esto no ha sido lo último que habéis visto…"

Pero, antes de que pudiera terminar su amenaza, Lynn Sr. se adelantó y con un último golpe, lo dejó fuera de combate. Un golpe tan preciso y fatal, dirigido a la cabeza de Riot, acabó con la resistencia del simbionte, dejándolo inmóvil.

Lynn Sr. (respirando con pesadez): "Eso es, chico. Terminado."

Frozono observó el cadáver del simbionte congelado y luego miró a Lynn Sr., asintiendo con aprobación. Sabían que, por ahora, la batalla estaba ganada, pero sabían también que no sería la última. El peligro no se había ido; simplemente había sido contenido por un momento.

Los Vengadores finalmente llegaron al lugar donde la batalla había tenido lugar, pero al ver la escena frente a ellos, la mayoría de ellos se detuvieron en seco, sorprendidos por lo que veían. Los tres simbiontes – Riot, Agony y Phage – yacían derrotados en el suelo, inactivos y completamente sometidos, como si nunca hubieran sido una amenaza. En pie, aún respirando pesadamente, estaban tres figuras. Lynn Sr., Frozono y Lincoln, cada uno con la mirada de alguien que acaba de pasar por una dura prueba, pero con una ligera sonrisa de victoria.

Hulk se acercó primero, mirando con atención a los tres héroes, pero sin apartar la vista de los simbiontes caídos. Su mirada era la de alguien que había visto muchas batallas, pero algo en este enfrentamiento le causaba curiosidad. De alguna manera, no había esperado que fuera tan rápido ni tan contundente.

Hulk: "Eso… no lo esperaba. ¿Cómo los derribaron tan rápido?"

Clint: "Vaya, chicos, hicieron un buen trabajo. Pero no me esperaba que todo hubiera terminado tan pronto." (Mirando los tres simbiontes inactivos, con asombro). "Pensé que esos tipos duraban más."

Iron Man aterrizó un poco más lejos, observando la escena. A través de su visor, realizó un escaneo rápido, asegurándose de que no quedara ningún peligro. Fue entonces cuando sus ojos se detuvieron en Lincoln, visiblemente exhausto pero de pie, junto a su padre y Frozono.

Iron Man: "Lincoln… ¿te encuentras bien?"

Lincoln (respirando con dificultad y tocándose el costado): "Sí, estoy bien… Solo un poco agotado." (Sonríe débilmente).

Fue en ese momento cuando Avispa, quien había estado volando por encima de ellos, descendió de repente con rapidez y se acercó a Lincoln, quien apenas lograba mantenerse en pie. Se detuvo frente a él, su expresión de preocupación no pasó desapercibida para nadie.

Avispa (con voz llena de preocupación): "Lincoln, ¿estás bien? ¿Te lastimaron? ¿Qué hiciste? ¡Esto fue increíble!"

Antes de que Lincoln pudiera responder, Avispa lo abrazó de golpe, envolviendo sus brazos alrededor de él de forma repentina y casi aplastante. El gesto, aunque lleno de cariño y agradecimiento, sorprendió a Lincoln, quien se quedó estático por un momento.

Avispa (en un tono ligeramente exagerado): "¡No sabes lo que me preocupaste! ¡Pensé que habías muerto en esa pelea, maldito! ¡¿Por qué no me lo dijiste?!"

Lincoln, completamente desconcertado y con una expresión de vergüenza, trató de zafarse ligeramente del abrazo, pero la fuerza con la que Avispa lo rodeó era tal que le resultó difícil moverse.

Lincoln (sonrojado y algo confundido): "Eh, eh, Avispa… estoy bien, en serio. Solo… solo estaba luchando. No… no es para tanto."

Pero la heroína no lo dejó ir. De hecho, apretó un poco más, como si estuviera intentando hacerle entender cuánto lo había apreciado en ese momento. Sin embargo, la sorpresa de Lincoln no tardó en transformarse en una ligera risa nerviosa, ya que no podía hacer mucho para evitar que la diminuta heroína lo aplastara en su abrazo.

Avispa (con una sonrisa a medias, entre divertida y preocupada): "¡Ah, calla! ¡No me vas a decir que no te preocupaste de que me destruyeran en ese combate! ¡Parece que salvaste el día, chico!"

Lincoln (tartamudeando ligeramente): "Bueno, ya sabes, lo hice porque… eh, tú sabes, estaba cerca… y bueno, no podía dejar que te lastimaran. Solo… estaba haciendo mi parte."

Al ver esta escena, el Capitán América no pudo evitar sonreír ante la evidente incomodidad de Lincoln. Aunque era una situación algo seria, la reacción de Avispa le daba un toque humano y ligero a la situación.

Capitán América (sonriendo con algo de humor): "Parece que el chico tiene mucho que aprender, ¿eh?"

Clint (en tono burlón, observando a Lincoln y Avispa): "¿Así que Lincoln tiene una fan número uno, eh? No me había dado cuenta de que esto se había vuelto un juego de abrazos."

Frozono, que se había quedado observando con una expresión seria pero claramente orgullosa, se acercó al grupo mientras Lynn Sr. también caminaba hacia ellos. Sin embargo, ambos sabían que, a pesar de la ligera tensión, Lincoln había demostrado algo más importante: valor.

Frozono (con una sonrisa tímida, observando a Avispa y Lincoln): "Parece que Lincoln tiene su propia manera de lidiar con las cosas."

Lynn Sr. (colocándose una mano en el hombro de Lincoln, mirando a los Vengadores con una mezcla de cansancio y satisfacción): "Hizo lo que tenía que hacer. A veces, no es solo la fuerza lo que cuenta, sino la determinación. Lincoln se levantó cuando más se necesitaba."

Avispa finalmente soltó a Lincoln, aunque su rostro aún reflejaba la preocupación que sentía por él.

Avispa: "De acuerdo, de acuerdo, ya está bien… Pero no lo hagas de nuevo, ¿sí? Me vas a dar un infarto."

Lincoln, aún sonrojado pero ahora algo más aliviado, se frotó la cabeza, tratando de disimular su incomodidad.

Lincoln (en tono de broma, tratando de relajarse): "Si lo digo, lo prometo. Pero no creo que sea necesario. No te preocupes, Avispa."

El Capitán América observó la escena con un poco más de interés, notando cómo la relación entre los miembros del equipo era más humana y cercana de lo que inicialmente había pensado. Lincoln, un chico joven que había demostrado valentía, había dejado su huella en el campo de batalla, y también entre los Vengadores.

Capitán América: "Está claro que tenemos mucho que aprender de ustedes, chicos. Fue una batalla dura, pero lograste algo grande, Lincoln."

Lincoln (sonriendo, pero algo incómodo): "Gracias, Capitán… aunque definitivamente fue más trabajo en equipo que solo mío."

Iron Man, aún observando la escena con su estilo característico, finalmente habló con tono ligero.

Iron Man: "De acuerdo, bueno, si la situación va a ser así… creo que todos podríamos usar una bebida fría para relajarnos. ¿Alguien quiere un refresco? Yo invito."

La tranquilidad del momento se rompió con un fuerte estallido a lo lejos. La tierra tembló ligeramente, y una onda expansiva se levantó, seguida por un estruendo que resonó por todo el lugar.

Capitán América (apretando el puño y mirando hacia el horizonte): "¡Eso no suena nada bien!"

Avispa (poniéndose en posición, lista para volar): "¡Tenemos que movernos ahora!"

Hulk (en tono grave, sin perder tiempo): "¡Hulk aplastar!"

Clint (con una flecha lista, observando en silencio): "Vamos allá."

El grupo de Vengadores, preparados y enfocados, se dirigió rápidamente hacia el lugar de la explosión, sabiendo que algo peligroso estaba ocurriendo.

Sin embargo, Tony Stark, que había estado un paso detrás de todos, no pareció tan apresurado. Miró en dirección a donde los demás se dirigían, luego miró a su alrededor, y con una sonrisa irónica, habló para sí mismo:

Tony Stark (sin prisa, como si estuviera en su propio mundo): "Bueno, las bebidas pueden esperar."

Aunque la situación era grave, Tony no pudo evitar dejar escapar su clásico humor. Se quedó observando a sus compañeros irse, antes de girar su muñeca y activar la armadura de Iron Man, que se desplegó alrededor de él con una precisión impecable.

Iron Man (mientras la armadura lo cubría por completo, volando hacia el lugar de la explosión): "A veces, realmente soy el único que se toma las cosas con calma..."

Con un último comentario mordaz, Iron Man aceleró hacia el lugar del estallido, listo para enfrentar lo que fuera necesario, aunque no dejaba de sentir que las sorpresas nunca cesaban.

Los Vengadores llegaron rápidamente al área, donde una explosión reciente había dejado un rastro de destrucción a su paso. El paisaje estaba devastado: edificios colapsados, calles partidas y restos de vehículos dispersos por todo el lugar. Pero lo que más destacaba era la figura que se alzaba en medio del caos.

Era Carnage, el simbionte, cuyo cuerpo de carne y masa negra parecía ondular y moverse como si estuviera vivo. Su forma fluctuaba, distorsionándose a medida que se acercaba a sus oponentes. Sus ojos brillaban con una intensidad peligrosa, y su risa sádica resonaba en el aire, como una presencia que se regocijaba en la destrucción que había causado.

Carnage (con tono burlón, mirando a los Vengadores): "¡Ah, los grandes héroes finalmente hacen acto de presencia! Estaba esperando que él viniera solo. ¡Pero no! Aquí están todos ustedes, un pequeño ejército de vaqueros del bien. ¿Qué pasa, Lincoln? ¿No confías en tu propio poder? ¿O será que estás demasiado asustado para enfrentarte a algo más grande que tú?"

La voz de Carnage estaba impregnada de desdén, como si disfrutara de cada palabra que salía de su boca, buscando socavar la moral de Lincoln y sus compañeros. El simbionte dio un paso hacia ellos, su figura fluctuando, y sus ojos brillando con una maldad palpable.

Carnage (con una sonrisa torcida): "Pensé que los héroes nunca pedían ayuda, pero aquí estamos. Un ejército de tontos. ¿Qué pasa Lincoln, tienes miedo de enfrentarte a un verdadero desafío? ¡Qué patético! ¡No eres más que un niño jugando a ser héroe!"

Lincoln, que estaba al frente de los Vengadores, sintió que esas palabras lo atravesaban, golpeando sus inseguridades. Sin embargo, no podía permitirse dudar. Sabía que no iba a dejarse vencer por las palabras de Carnage.

Lincoln (respirando profundo, aunque con determinación): "No se trata de miedo, Carnage. No tengo miedo de ti ni de nadie. Estoy aquí porque sé que no puedo hacerlo solo. Y eso no me hace menos héroe, me hace más fuerte. Si necesito ayuda, la pediré. Porque el trabajo en equipo es lo que nos hace invencibles."

Carnage se echó a reír, su risa retumbando en el aire. No era una risa de diversión, sino una llena de desprecio y burlas.

Carnage (riendo, acercándose lentamente): "¡Qué adorable! Pensabas que con tus palabras podrías cambiar el curso de esta pelea. No te equivoques, Lincoln, eres solo un niño que no tiene idea de lo que está enfrentando. Yo soy el caos, soy el final de todo lo que has conocido. Y tú... eres solo un niño que está en la primera fila de la destrucción."

La atmósfera se cargó con una tensión palpable. Los Vengadores sabían que este no iba a ser un enemigo fácil. Carnage no era como cualquier otro villano que hubieran enfrentado antes. Su capacidad para sembrar el caos era casi ilimitada, y su odio hacia Lincoln parecía solo avivarlo más.

Iron Man (mirando a Lincoln y luego a Carnage): "Sabes, Carnage, estás en un mundo muy equivocado si crees que eso va a detenernos. Los héroes no solo somos lo que ves en el exterior, tenemos algo más. Algo que tú nunca podrás comprender."

Hulk (apretando sus puños con furia): "¡Hulk aplasta! ¡Carnage no se mete con los Vengadores!"

Lincoln, al escuchar el apoyo de sus compañeros, sintió que algo despertaba dentro de él. Carnage había tratado de atacarlo psicológicamente, pero sabía que su fortaleza no solo venía de su poder. Estaba rodeado de amigos, de personas que creían en él, y eso lo hacía más fuerte que cualquier simbionte.

Lincoln (mirando a Carnage con más firmeza): "No importa lo que digas, lo que importa es lo que hacemos. Y eso, Carnage, es lo que te va a derrotar."

Carnage (despreciando la respuesta, con una risa burlona): "¡Lo veremos, Lincoln! ¡Lo veremos pronto!"

La batalla comenzó con una explosión de energía, y Carnage, con su forma de simbionte, se lanzó al ataque contra los Vengadores, demostrando que no solo era un enemigo impredecible, sino también letal. Su cuerpo de masa líquida y negra se transformaba constantemente, estirándose y retorciéndose como una forma de arma viva, con cuchillas afiladas emergiendo de sus extremidades. Cada movimiento que hacía era rápido, mortal, y completamente errático, lo que dificultaba que los Vengadores pudieran anticiparlo.

Carnage (riendo mientras se abalanzaba sobre ellos): "¡Vamos, héroes! ¡¿Eso es todo?! ¡Pensaba que los Vengadores eran lo mejor que este mundo tiene para ofrecer!"

Iron Man (con su armadura brillando mientras lanzaba un disparo hacia Carnage): "¡Aguanta, Lincoln! ¡Mantente en pie, esto va a ser largo!"

Pero Carnage estaba lejos de ser un oponente fácil. Con un rápido movimiento, esquivó el disparo de Iron Man y lanzó una explosión de tentáculos hacia el cielo, agarrando la estructura de un edificio cercano y usándola para lanzarla como si fuera un proyectil masivo. Hulk, que estaba a la vanguardia, se lanzó a la ofensiva.

Hulk (gruñendo, mientras daba un salto hacia Carnage): "¡Hulk aplasta!"

Carnage, sin embargo, fue más rápido de lo que Hulk anticipaba. Con un giro del cuerpo, se deslizó hacia un lado, esquivando el ataque de Hulk con una facilidad desconcertante. En un parpadeo, sus tentáculos se extendieron para envolver a Hulk, pero el gigante verde contraatacó, rompiendo los tentáculos con una fuerza inhumana.

Carnage (mientras se retorcía hacia atrás): "¡Eso es más como lo que esperaba! ¡Vamos, si vas a hacer algo, hazlo rápido!"

Thor, con su martillo Mjolnir en mano, avanzó hacia Carnage, con el rayo de la tormenta chisporroteando alrededor de su cuerpo. Sabía que el simbionte era peligroso, pero también sabía que tenía el poder para detenerlo.

Thor (rugiendo mientras invocaba el trueno): "¡Por Asgard y por la Tierra, te detendré, monstruo!"

El martillo de Thor se descargó con toda la furia del rayo, pero Carnage, una vez más, se movió con una rapidez sorprendente, esquivando el golpe que hizo temblar el aire a su alrededor. Sin embargo, el dios del trueno no se rindió. Con un rápido giro, lanzó Mjolnir en un movimiento vertical que impactó directamente sobre el simbionte, dejándolo momentáneamente aturdido.

Carnage (sacudiéndose, claramente molesto pero aún burlón): "¡Eso fue un buen golpe! Pero no es suficiente, ¡no lo es!"

Mientras tanto, Iron Man y Viuda Negra atacaban desde diferentes ángulos. Las explosiones de energía de la armadura de Tony y las precisas maniobras de Natasha ayudaban a mantener a Carnage a raya, pero este parecía disfrutar de la pelea tanto como cualquier villano podría disfrutarla. Su cuerpo parecía adaptarse, moviéndose como si estuviera hecho para desmoronar y reformarse a su antojo.

Viuda Negra (saltando hacia Carnage con sus armas listas): "¡Muévete rápido, Tony, está aprendiendo nuestra estrategia!"

Carnage (riendo, mientras esquivaba un ataque de Natasha): "¿Estrategia? ¿Qué estrategia? No necesito de eso. Solo necesito causar el caos, y ustedes me están haciendo un excelente trabajo, solo que lo están haciendo muy lento."

El simbionte giró hacia Lincoln, quien había estado esperando su oportunidad para intervenir. Con un rápido zarpazo, Carnage intentó agarrarlo, pero Lincoln, con agilidad, se desvió y respondió con un golpe directo, usando su fuerza aumentada. A pesar de eso, Carnage lo esquivó y se giró, su rostro de simbionte tomando una forma más grotesca.

Carnage (con una sonrisa macabra): "¡Vaya, el niño tiene agallas! Pero, ¿qué vas a hacer cuando el caos se apodere de todo, Lincoln? No puedes ganarme solo."

Lincoln, respirando pesado, se preparaba para su próximo movimiento, pero antes de que pudiera actuar, una figura se movió rápidamente hacia Carnage.

Frozono, que había estado usando su habilidad de control de hielo para crear barreras defensivas y atacar desde la distancia, aprovechó el momento de distracción de Carnage para lanzar una ráfaga de hielo directo hacia su oponente. Aunque Carnage trató de esquivarlo, una parte de su cuerpo fue atrapada por el hielo, congelándolo temporalmente.

Frozono (con voz decidida): "¡Te tengo ahora, monstruo!"

Pero incluso con una parte de su cuerpo atrapada en el hielo, Carnage no se rindió. Con una explosión de poder, rompió el hielo y atacó con más fuerza que antes, lanzando esquirlas de carne y sangre del simbionte por todas partes, mientras sus tentáculos trataban de inmovilizar a sus atacantes.

Carnage (gritando mientras se deshacía del hielo): "¡Esto es demasiado fácil! ¡Nadie puede detenerme! ¡Nadie!"

A pesar de sus ataques feroces, los Vengadores continuaron presionando. Thor y Hulk se mantuvieron cerca, cada uno buscando un punto débil en el caos que Carnage había traído. Iron Man, desde el aire, buscaba ataques de precisión, y Viuda Negra aprovechaba cada espacio para atacar con agilidad.

Finalmente, Lincoln (con determinación) se lanzó hacia Carnage, sabiendo que debía aprovechar cualquier oportunidad para terminar con esto.

Lincoln (gritando mientras se acercaba): "¡Este es el fin, Carnage!"

En ese instante, todos los Vengadores se concentraron en Carnage, uniendo sus fuerzas para desmantelar al simbionte que, a pesar de su poder, comenzaba a sentirse abrumado por la presión de tantos héroes luchando como uno solo. Pero, como siempre con Carnage, no había garantía de victoria. La batalla apenas estaba comenzando, y la voluntad de los héroes sería puesta a prueba como nunca antes.

Carnage, con una sonrisa retorcida y su cuerpo tomando una forma más monstruosa, se abalanzó rápidamente hacia Avispa. La heroína no se dio cuenta de inmediato, ya que estaba demasiado concentrada en tratar de coordinar un ataque con Iron Man y Viuda Negra. El simbionte aprovechó la oportunidad, sus tentáculos retorciéndose para atacar por sorpresa.

Carnage (susurrando, burlándose): "No me hagas perder el tiempo, pequeña… será rápido."

En un abrir y cerrar de ojos, Carnage se movió detrás de Avispa y la alcanzó con sus tentáculos, intentando envolverla en su forma letal. Pero antes de que pudiera impactarla, una figura más rápida que el mismo simbionte apareció de la nada.

Lincoln, con su fuerza descomunal, se interpuso entre Carnage y Avispa. A pesar de estar exhausto y con la batalla ya bastante desgastante, Lincoln no dudó ni un segundo en protegerla. Su puño derecho se extendió rápidamente, con toda la energía que aún podía reunir, y golpeó a Carnage directamente en el pecho. El impacto resonó por todo el campo de batalla, y Carnage fue lanzado hacia atrás, cayendo al suelo con un gruñido de frustración.

Lincoln (jadeando, mientras protegía a Avispa): "¡No te atrevas a tocarla!"

Avispa (sorprendida, mirando a Lincoln): "¡Lincoln! ¡Cuidado!"

Carnage, aturdido por el golpe, se levantó rápidamente, sacudiéndose la masa viscosa que lo cubría. Aunque herido, la furia y el odio en su mirada no disminuyeron ni un ápice. Su risa sádica resonó por el campo de batalla, mientras comenzaba a reconstruir su forma.

Carnage (con una sonrisa macabra): "Vaya, vaya, el chico tiene agallas. Pero no creas que me detendrás con un simple golpe."

Lincoln (confiado, aunque exhausto, tratando de mantenerse firme): "¡Esto no ha terminado, Carnage! ¡Te voy a detener!"

Avispa, viendo la valentía de Lincoln, se recuperó rápidamente de su sorpresa y se puso en una posición defensiva. Ella sabía que Carnage no era un enemigo común y que cada segundo contaba. Lincoln, con su fuerza bruta, era su única ventaja real en esa pelea.

Avispa (mirando a Lincoln, agradecida): "Gracias, Lincoln, pero no estás solo en esto."

Carnage, ahora completamente recuperado, se lanzó hacia ellos nuevamente, pero esta vez, Hulk y Thor ya estaban listos para unirse a la pelea. Mientras el gigante verde cargaba con toda su furia, Thor levantaba su martillo, listo para invocar el poder del rayo. Pero Carnage, siempre impredecible, esquivó el primer golpe, girando su cuerpo como una serpiente y lanzándose en un ataque contra Lincoln.

Carnage (desafiando, mientras avanzaba con sus tentáculos hacia él): "¡Vamos, chico! ¡Vamos a ver si puedes soportar más de lo que ya has recibido!"

Pero Lincoln no retrocedió. Se preparó, con su cuerpo extenuado, pero su determinación intacta. En ese momento, sabía que no podía dejar que el simbionte causara más destrucción. Aunque su combate no era perfecto y sus movimientos aún estaban lejos de los de un experto, tenía algo que Carnage no parecía comprender: su corazón y su deseo de proteger a los demás.

Lincoln (con voz firme): "¡No dejaré que lastimes a nadie más, Carnage!"

En un último esfuerzo, Lincoln se lanzó hacia adelante, chocando contra Carnage con una fuerza que, aunque no tan refinada como la de los héroes más experimentados, tenía la determinación suficiente para dejarlo atónito. Aunque la pelea continuaba, la presencia de Lincoln, su impulso para proteger a sus amigos y su capacidad para seguir luchando lo hacían un oponente mucho más formidable de lo que Carnage había esperado.

La batalla no había terminado, pero Lincoln había demostrado que no importaba cuán agotado estuviera: lucharía hasta el final por aquellos a los que amaba.

Carnage rugió de dolor al recibir el golpe brutal de Thor, quien con su martillo Mjolnir lo impactó de lleno en el pecho. La onda de choque fue tan potente que el simbionte fue lanzado varios metros hacia atrás, chocando contra el suelo con un estruendoso retumbido. Su forma se distorsionó por un momento, pero rápidamente comenzó a recomponerse, aunque claramente afectado.

Carnage (jadeando, dándose cuenta de la magnitud del daño): "¿Qué… qué ha sido eso?"

El dolor que sentía era indescriptible. El poder de Thor, combinado con el misticismo de Mjolnir, era algo que incluso Carnage, con toda su fuerza destructiva, no estaba acostumbrado a soportar. Pero lo peor aún estaba por venir.

Antes de que pudiera recomponerse por completo, Hulk apareció de repente, saltando desde una distancia considerable y aterrizando justo frente a él con un estruendo que hizo temblar el suelo. El gigante verde, sin ninguna hesitación, levantó su enorme mano y descargó un golpe directo hacia el simbionte.

Hulk (gruñendo, mientras lanza su puño hacia Carnage): "¡HULK… SMASH!"

El golpe fue como una avalancha, un impacto tan devastador que Carnage apenas tuvo tiempo de reaccionar antes de ser golpeado de lleno. Su cuerpo fue lanzado por los aires, y el simbionte cayó pesadamente contra el suelo, derrapando y dejando un rastro de destrucción detrás de él.

Carnage (con voz entrecortada, sintiendo la magnitud de los golpes): "Esto... esto no puede ser…"

Mientras Carnage se levantaba, claramente debilitado, pudo sentir cómo su forma se debilitaba ante el nivel de poder de los dos héroes. El combate contra Thor y Hulk estaba resultando ser mucho más de lo que había anticipado. Thor, con su poder divino y su martillo mágico, y Hulk, con su fuerza bruta inmensa, eran rivales a los que Carnage no podía derrotar solo. Ambos eran casi invencibles.

Carnage (pensando para sí mismo, sintiendo la presión de la situación): "¡Maldita sea! ¡Esto es una locura! ¿Por qué me enfrento a esto?"

El simbionte se dio cuenta de algo que nunca había considerado antes: si no cambiaba su estrategia, Thor y Hulk lo matarían. La diferencia de poder entre ellos era abismal. Carnage había luchado contra muchos héroes poderosos, pero nunca contra dos seres de este nivel. La furia de Hulk y el control absoluto de Thor sobre sus poderes lo dejaban completamente superado.

Carnage (mirando a sus oponentes con una mezcla de frustración y respeto): "No puedo seguir así… no soy tonto. Si sigo enfrentándolos, me matarán."

Era claro que enfrentar a Thor y Hulk era una completa estupidez. El simbionte había sido formidable contra otros enemigos, pero la combinación de los dos héroes lo estaba arrinconando. Los ataques de Thor, con el poder de los rayos y la magia de Mjolnir, y la fuerza arrolladora de Hulk, estaban llevando a Carnage al límite. Enfrentar a estos dos colosos en combate directo solo lo llevaría a la derrota.

Carnage (con voz más calmada, en un intento de reorganizarse): "¿De verdad voy a seguir desperdiciando mi tiempo aquí? Si sigo luchando, solo empeoraré las cosas."

Consciente de que no podía ganar con un enfrentamiento directo, Carnage decidió retroceder, tomando distancia y buscando una oportunidad para recuperar sus fuerzas. Aunque su ego estaba herido, sabía que no podía permitirse caer ahora. Su supervivencia dependía de una estrategia diferente.

Carnage (gruñendo mientras se aleja, mirando a Thor y Hulk con ojos desafiantes): "Esto no ha terminado, malditos… ¡Volveré por ustedes!"

Justo cuando Carnage intentaba reagruparse para escapar, Lincoln, completamente centrado y con el poder de su vínculo con Antivenom, avanzó rápidamente hacia él. Usó toda su fuerza y habilidad, tomando a Carnage por sorpresa. El simbionte, acostumbrado a ser el dominante en cualquier lucha, sintió que algo era diferente esta vez. No solo era Lincoln el que lo enfrentaba, sino que la fuerza y astucia de Antivenom lo apoyaban, creando una simbiosis que sorprendía incluso a un enemigo tan formidable.

Carnage, aún furioso, gruñó mientras se preparaba para un ataque devastador, pero Lincoln no le dio oportunidad. Usó su destreza y el poder que le otorgaba Antivenom para someter al simbionte, aferrándose a él con una fuerza sobrehumana. La presión que ejerció fue tal que Carnage comenzó a perder el control, sintiendo cómo su conexión con su huésped humano se desmoronaba poco a poco.

Carnage (gritando furioso): "¡No! ¡Esto no es posible! ¡Soy el más fuerte, no puedes..."

Antes de que pudiera terminar su amenaza, Lincoln, con un esfuerzo impresionante, separó a Carnage de su huésped humano. La simbiosis entre Carnage y su huésped se rompió, y el simbionte, ahora flotando en el aire sin cuerpo, se retorció intentando escapar, pero Lincoln lo tenía atrapado. Antivenom, que cubría el cuerpo de Lincoln, comenzó a manifestarse más intensamente, sus rizos de veneno y energía negra y blanca se entrelazaron con la de Lincoln, uniendo fuerzas de manera perfecta.

Antivenom (con tono burlón): "¿No decías que eras el más poderoso, Carnage? ¿Qué pasó con tu invencibilidad?"

Carnage, debilitado y sin control, lanzó un grito de frustración mientras intentaba nuevamente tomar el control, pero Lincoln no lo dejó. Con un último empuje, usó toda su fuerza para inmovilizar al simbionte y evitar que volviera a fusionarse con su huésped.

Frozono, que había estado observando todo el tiempo, aprovechó el momento y, con un movimiento rápido, extendió su mano hacia Carnage, creando un contenedor de hielo alrededor de él. El simbionte, atrapado en el hielo, quedó inmovilizado temporalmente, incapaz de moverse o escapar.

Frozono (con una sonrisa): "Eso lo mantendrá ocupado. No va a escapar de ahí tan fácilmente."

Carnage (gruñendo, desde dentro del hielo): "¡Esto no se acaba aquí! ¡Volveré y los destruiré a todos!"

Antivenom, aún cubriendo a Lincoln, dejó escapar una risa siniestra al ver al simbionte atrapado en el hielo.

Antivenom: "¿Volverás? Si tienes suerte, te olvidaremos antes de que puedas intentarlo."

Lincoln, agotado pero satisfecho, se dio un paso atrás, aún sintiendo la energía de Antivenom fluir a través de él. No podía negar que había sido una pelea dura, pero con la ayuda de su aliado y su propia determinación, había logrado lo impensable: derrotar a Carnage y evitar que causara más destrucción.

Lincoln (respirando profundamente, mirando el contenedor de hielo): "Esto no es el final, pero... por ahora, la ciudad está a salvo."

Antivenom, siempre con su tono arrogante, asintió.

Antivenom: "Sí, y no te preocupes, chico. Esta vez, lo lograste."

Lincoln, sonriendo cansadamente, se giró hacia sus aliados que se acercaban.

Sabía que, aunque la victoria de hoy era importante, en un mundo como el suyo, la paz nunca duraba mucho. Pero por ahora, podía relajarse. Carnage estaba contenido, y por primera vez, sentía que su fuerza, junto a Antivenom, realmente hacía la diferencia.

Tras el enfrentamiento con Carnage, el simbionte fue trasladado rápidamente a una celda de contención especialmente diseñada por SHIELD, una instalación de máxima seguridad en la que el simbionte no tendría ninguna posibilidad de escapar. Las paredes de la celda eran de un material especial, resistente a los ataques de cualquier simbionte, y las barreras energéticas garantizaban que Carnage no pudiera usar su capacidad para manipular su forma y escapar.

El tiempo pasó mientras los Vengadores y el equipo de SHIELD se tomaban un respiro, evaluando el caos que había dejado Carnage en su camino. En la sala de conferencias de SHIELD, Nick Fury y Maria Hill estaban en una reunión con los Vengadores, quienes discutían los últimos eventos y el trabajo bien hecho.

Nick Fury, con su típica seriedad, observó a los presentes y habló primero.

Nick Fury: "Buen trabajo, todos. No fue fácil, pero lograron detener a ese maldito simbionte. Carnage está encerrado en su celda, y no tendrá ninguna oportunidad de escapar. Esto fue un buen golpe para los villanos."

Maria Hill, siempre pragmática, asintió con la cabeza.

Maria Hill: "El trabajo en equipo fue clave. No todos los días enfrentamos a un enemigo tan impredecible y destructivo. Pero, sin duda, hubo tres personas que hicieron la diferencia."

Tony Stark, que había estado escuchando mientras revisaba sus dispositivos, levantó la cabeza y se inclinó hacia adelante, sonriendo ligeramente. Sabía que esta victoria no solo era el resultado de la fuerza bruta de los Vengadores, sino también del trabajo excepcional de algunos aliados inesperados.

Tony Stark: "Sí, exactamente. Este éxito fue gracias a tres personas en particular. Uno de ellos, Whiter King, demostró ser un verdadero líder en el campo de batalla. Y, por supuesto, Frozono, que jugó un papel crucial al contener a Carnage con su habilidad de crear hielo. Pero el verdadero as de esta pelea fue un chico, uno que logró hacer algo que nadie pensaba posible: separar a Carnage de su huésped."

Los demás miembros de los Vengadores miraron a Tony Stark, sorprendidos por lo que acababa de decir. Tony continuó, su tono ahora más serio, sabiendo que lo que había presenciado esa noche era algo realmente impresionante.

Tony Stark: "Este chico, Lincoln, tiene una habilidad que no habíamos visto antes. Logró separarlo. Usó una especie de... habilidad especial para romper la simbiosis entre Carnage y su huésped, algo que, sinceramente, ni siquiera Venom podría haber hecho tan rápido. Y lo hizo con una destreza increíble. Pero eso no es todo... este chico tiene una relación con un simbionte. Parece ser una especie de... simbiosis controlada."

Nick Fury, siempre observador, frunció el ceño al escuchar eso. Su experiencia en situaciones como estas le dijo que esto requeriría más atención.

Nick Fury: "¿Un simbionte controlado? Eso suena... peligroso. Necesitamos saber más de este chico, Lincoln. No podemos permitir que algo como eso se salga de control."

Maria Hill asintió, mirando las notas que había tomado durante la operación.

Maria Hill: "Eso es cierto. Si Carnage pudo ser detenido por él, no podemos ignorar que este chico tiene un poder significativo. ¿Sabemos algo más sobre él?"

Tony Stark: "No mucho. Pero su habilidad para separar a Carnage fue lo más impresionante que he visto en mucho tiempo. Y, por lo que pude percatarme, este chico tiene control sobre su vínculo con el simbionte, lo cual es... aún más raro. Lo vi en acción, y sé que no es solo una cuestión de fuerza bruta. El chico tiene algo especial, algo que no se puede subestimar."

Clint Barton (Hawkeye), siempre con su estilo directo, se cruzó de brazos y habló.

Clint Barton: "Entonces, ¿qué? ¿Lo vamos a reclutar? ¿O es un aliado temporal? Porque, si puede hacer lo que hizo con Carnage, ese chico podría ser un gran activo."

Nick Fury se mantuvo pensativo por un momento, sopesando las palabras de Barton.

Nick Fury: "No estoy seguro. Primero necesitamos más información sobre él y sobre cómo se conecta con ese simbionte. Pero sin duda, ha demostrado ser útil, y si tiene control sobre su poder, podría ser una gran adición. Sin embargo, tenemos que asegurarnos de que podamos confiar en él, especialmente con algo tan volátil como un simbionte."

Maria Hill miró a Tony Stark, quien parecía pensativo.

Maria Hill: "Tony, ¿qué piensas? Eres el que lo vio en acción."

Tony Stark: "Lo vi en el campo de batalla. El chico tiene agallas. Eso no se puede negar. Pero también vi el riesgo. Los simbiontes son impredecibles. Lincoln podría ser una gran ayuda... o una gran amenaza, dependiendo de cómo maneje esa relación. Creo que lo mejor será observarlo más de cerca antes de tomar cualquier decisión."

Nick Fury asintió, ya sabiendo lo que tenía que hacer.

Nick Fury: "De acuerdo, vamos a mantenerlo bajo observación. Pero asegúrense de mantenerlo a raya si algo sale mal. La última cosa que necesitamos es un aliado con poderes incontrolables."

Cuando la reunión se estaba calmando después de la intensa discusión sobre el nuevo aliado de SHIELD y los Vengadores, Clint Barton (Hawkeye), con su característico sentido del humor y su estilo directo, decidió romper un poco el ambiente tenso y dar un respiro a todos.

Mirando a Janet Van Dyne (la Avispa), quien había estado sentada pensativa, observando la pantalla con un brillo de preocupación por la seguridad de Lincoln, Clint se levantó y, con una sonrisa traviesa, hizo un comentario en voz alta, sabiendo exactamente cómo mover las piezas para aligerar el ambiente.

Clint Barton: "Oye, Janet... no pude evitar notar cómo estabas bastante preocupada por ese chico, Lincoln. Casi parecía que lo estabas tratando como si fuera... ¿tu novio?"

Las palabras de Clint resonaron en la sala, y el ambiente de tensión inmediatamente cambió a una mezcla de confusión y diversión. Janet, que hasta ese momento había permanecido tranquila, de repente se sonrojó, mirando rápidamente a Clint con los ojos bien abiertos. Su rostro pasó de ser serio a un tono rojizo por la vergüenza.

Janet Van Dyne: "¡¿Qué?! ¡No, no es eso! ¡Yo solo... estaba asegurándome de que estuviera bien, eso es todo! No es como si... no sé... ¡No es lo que piensan!"

Pero su esfuerzo por explicarse solo hizo que se viera aún más avergonzada, y las risas contenidas de Iron Man y Capitán América se hicieron cada vez más evidentes. Tony Stark levantó una ceja, mirando a Janet con una sonrisa burlona.

Tony Stark: "Oh, claro, Janet. No te preocupes, entendemos perfectamente. Después de todo, es solo un chico que acabas de conocer y... te preocupas mucho por él, ¿eh?"

Capitán América, quien a pesar de su seriedad no pudo evitar un pequeño tono de diversión en su voz, añadió:

Capitán América: "Parece que el chico se hizo un buen lugar en tu corazón. Ojalá todos tuviéramos esa clase de cuidado, ¿verdad?"

Las miradas de los Vengadores se dirigieron hacia Janet, quien intentaba esconder su rostro detrás de sus manos, claramente avergonzada por la situación. La situación había cambiado drásticamente de una charla seria sobre un enemigo peligroso a un momento de camaradería, y todos parecían disfrutar de la broma.

Clint Barton sonrió de manera satisfecha, sabiendo que había logrado aliviar el ambiente.

Clint Barton: "No te preocupes, Janet. Nadie está juzgando. Es bueno ver que alguien tan fuerte como tú también tiene un lado protector. Pero… si algún día decides salir en una cita con Lincoln, solo asegúrate de que sea en un lugar sin simbiontes, ¿de acuerdo?"

La risa en la sala fue casi instantánea, y Janet, aunque aún roja de vergüenza, no pudo evitar reírse ligeramente.

Janet Van Dyne: "¡De acuerdo! ¡Pero, por favor, que nadie más hable de esto, por favor!"

Tony Stark aprovechó el momento para añadir, con una sonrisa pícara:

Tony Stark: "No te preocupes, Janet. Lo guardaremos entre nosotros... por ahora."

La conversación se desvió a otros temas mientras los Vengadores continuaban sus discusiones, pero todos tenían una sonrisa en el rostro, relajados por el toque de humor que Clint había traído al momento.

Janet finalmente respiró aliviada, y aunque sabía que esa pequeña broma seguiría dando de qué hablar por un tiempo, estaba agradecida por la ligereza que trajo en medio de tanta tensión.

Tras el momento de distensión en la sala, el ambiente cambió rápidamente cuando Nick Fury comenzó a hablar, su tono habitual serio y calculador, como si la situación de Lincoln fuera solo una pieza más en un gran rompecabezas. Mientras los Vengadores seguían intercambiando bromas y comentarios, Fury aprovechó el momento para centrar la atención de todos en lo que consideraba más importante: la seguridad y el futuro de Lincoln.

Nick Fury: "Escuchen, esto no termina aquí. Tenemos un chico con habilidades que no hemos visto en años y una conexión directa con un simbionte. Si algo nos ha enseñado todo esto, es que Lincoln no es alguien que podamos dejar solo. Por ahora está seguro, pero debemos asegurarnos de que no nos sorprenda cuando menos lo esperemos."

Los Vengadores lo miraron con atención, sabiendo que Fury siempre tenía una perspectiva pragmática. Tony Stark frunció el ceño, mirando a Fury mientras terminaba de analizar la situación.

Tony Stark: "¿Y qué tienes en mente, Fury? Porque no creo que simplemente ponerlo en una de tus 'celdas de seguridad' sea la mejor opción. El chico necesita entrenamiento, no vigilancia constante."

Nick Fury asintió, su rostro imperturbable, pero claramente contemplando cada posibilidad. De alguna manera, siempre estaba un paso adelante.

Nick Fury: "Lo sé. Y es por eso que he pensado en algo más... productivo. Estoy hablando de un programa de entrenamiento. No solo para Lincoln, sino para otros nuevos reclutas potenciales. Hemos visto cómo la amenaza de los simbiontes crece cada vez más. No podemos seguir esperando a que la próxima invasión se nos caiga encima. Necesitamos nuevos Vengadores, nuevos miembros que puedan lidiar con amenazas como esta."

Fury se giró hacia Capitán América, quien escuchaba atentamente.

Nick Fury: "Es tiempo de empezar una nueva iniciativa, Steve. Una que prepare a nuestros futuros héroes. Y Lincoln sería un candidato ideal para iniciar este proceso. Necesitamos que aprenda a controlar sus poderes y, sobre todo, que sepa lo que significa ser un héroe en este mundo lleno de amenazas."

Capitán América reflexionó unos momentos antes de asentir, sabiendo que Fury tenía razón. Si Lincoln iba a seguir siendo una pieza clave en el futuro, era mejor que estuviera bien preparado.

Capitán América: "Tiene sentido. Además, podríamos hacerlo de una manera más práctica. El entrenamiento en equipo es lo que más puede beneficiarlo, y al mismo tiempo, le daría la oportunidad de adaptarse a las realidades del combate real."

Tony Stark, siempre buscando una ventaja tecnológica, levantó una ceja.

Tony Stark: "Y si necesita algún tipo de ayuda tecnológica... podría crearle algunos dispositivos de entrenamiento. Sabes, para simular combates, ponerlo a prueba de diferentes situaciones. O incluso un traje con algunas actualizaciones."

Nick Fury: "Eso es lo que quiero, Stark. Estoy hablando de algo más grande que solo entrenarlo físicamente. Necesitamos una estructura, un lugar donde pueda mejorar, entender sus capacidades, sus límites... y, por supuesto, su responsabilidad."

Clint Barton (Hawkeye) se inclinó hacia adelante, con su característico tono sarcástico, pero con un toque de seriedad en su voz.

Clint Barton: "¿Y qué pasa con los demás? Si vamos a entrenar a Lincoln, ¿por qué no hacer lo mismo con otros posibles reclutas? Hay más personas por ahí con habilidades inusuales."

Nick Fury asintió, como si ya lo hubiera considerado.

Nick Fury: "Exactamente, Clint. Este entrenamiento no será solo para Lincoln. Queremos formar un equipo de Vengadores nuevos, personas que puedan manejar lo que viene. Necesitamos tenerlos listos para lo que sea. No solo lo físico, sino también la estrategia, el liderazgo, y sobre todo, el control sobre sus poderes. Sabemos que hay más amenazas por ahí, y no podemos dejarlas pasar."

Janet Van Dyne (Avispa) miró con cierto interés, aún un poco sonrojada por la broma de Clint, pero entendiendo lo que Fury estaba proponiendo.

Janet Van Dyne: "Entonces, ¿cómo será este entrenamiento? ¿Y cuál será el papel de Lincoln en todo esto?"

Nick Fury miró a Janet con seriedad, como si ya hubiera anticipado sus preguntas.

Nick Fury: "Lincoln comenzará con una serie de pruebas de resistencia, tanto físicas como mentales. Lo pondremos en situaciones de combate, pero también con pruebas de equipo. Lo importante es que no lo dejaremos solo. En todo momento, estará acompañado por alguien experimentado... ya sea uno de nosotros, o algún experto en la materia. Además, dudo mucho que alguien pueda manejar a ese simbionte de forma eficiente sin primero entenderlo a fondo."

Tony Stark: "Así que, en pocas palabras, será una especie de programa de iniciación, pero con todo lo que implica ser parte de los Vengadores. No suena mal, y podría ayudar a varios de esos chicos con habilidades raras que se andan paseando por ahí."

Nick Fury: "Exactamente. Queremos que estén listos para el futuro. Y si todo sale bien, Lincoln será uno de los primeros en graduarse... y quizás el que guíe a los demás."

Todos en la sala asintieron, conscientes de que este nuevo enfoque traería cambios significativos no solo para Lincoln, sino para todo el equipo de Vengadores. Aunque parecía que su rol de protector de la Tierra había comenzado, ahora su camino hacia convertirse en un verdadero héroe estaba oficialmente en marcha.

Nick Fury, mirando a todos, concluyó con una mirada fija.

Nick Fury: "Este es solo el comienzo. Vamos a prepararnos para lo que viene. No habrá más sorpresas. Vamos a tomar la iniciativa antes de que la próxima amenaza nos caiga encima."

Y con esas palabras, los Vengadores y SHIELD se pusieron en marcha para asegurar que los futuros héroes, incluido Lincoln, estuvieran listos para lo que el destino les deparara.

En la celda de Carnage, el ambiente era denso y tenso. El simbionte, incapaz de moverse libremente debido a la prisión de hielo, estaba furioso. Su mente se retorcía con pensamientos de venganza, sus ojos brillando con odio mientras se golpeaba contra las paredes invisibles de su confinamiento. A pesar de estar atrapado, su mente seguía trabajando, analizando la situación con una calma perturbadora.

Carnage (pensando para sí mismo): No necesito destruirlos ahora... Es solo cuestión de esperar. El momento perfecto llegará. Y cuando lo haga, ninguno de estos héroes podrá detenerme. Este... este será mi mundo. No habrá quien me pare. Mi carnicería será eterna.

Con una risa silenciosa, Carnage se recostó en el fondo de su celda, esperando pacientemente, sabiendo que su tiempo para vengarse no había llegado aún, pero que lo haría con una furia incomparable. Mientras tanto, en algún lugar fuera de esa celda, su destino ya estaba sellado por aquellos que habían tomado el control de la situación.

En Royal Woods, Lincoln y su padre, Lynn Sr., regresaban a casa después de una jornada llena de acción. Lincoln, aunque cansado, parecía aliviado de que la amenaza de Carnage finalmente hubiera sido controlada. Después de haber sido parte de una lucha tan intensa, no podía evitar sentirse algo abrumado por todo lo que había sucedido. Mientras se acercaban a la puerta de su hogar, Lincoln, sin pensarlo demasiado, volvió su mirada hacia la cámara, rompiendo la cuarta pared una vez más.

Lincoln (mirando directamente al espectador): "Bueno, parece que este asunto de los simbiontes ya está más o menos controlado. SHIELD se encargó de todo eso, y los Vengadores también. Ahora podemos respirar tranquilos por un rato... aunque, siendo sinceros, ¿quién sabe qué más podría pasar? Pero por ahora, la amenaza de Carnage ha terminado, y eso es lo que importa."

Lynn Sr. (sin entender completamente la situación, pero relajado): "¡Ay, hijo! No me hagas hablar de todo lo que pasó. Mi corazón todavía no se recupera de la tensión de esa batalla. Al menos ahora podemos disfrutar de una buena comida en casa."

Lincoln asintió mientras abría la puerta de su casa. A pesar del alivio de que todo había terminado, algo en su interior le decía que lo que había vivido no sería el último desafío al que se enfrentaría. Pero, por ahora, al menos podía descansar y disfrutar de un poco de normalidad.

Antes de entrar por completo, Lincoln miró una última vez a la cámara, con una sonrisa en el rostro.(También porque debía de dar una larga explicación y recibir regaños por parte de sus padres)

Lincoln: "Ahora, si me disculpan, creo que es hora de un descanso... ¡y de una cena decente! Y también estar castigado jeje"

Y con eso, cerró la puerta detrás de él, dejando atrás una jornada de lucha, pero con la certeza de que más aventuras estaban por venir. Mientras tanto, en los rincones más oscuros del mundo, el peligro nunca dejaba de acechar... pero por ahora, los héroes habían ganado.

Fin del capítulo.
Aquí sus sugerencias para agregar en la segunda temporada

No sé canceló y no a terminado la historia

Ya sin más que decir que tengan bonita tarde

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top