[D. JIN]

—¡Rem, deja a Amie! ¡Porqué no sabes como soy cuando me enojo!—le grito casi llegando a mi nivel de temperamento más alto, estaba enfadada.

-¡Devuélvenos todo! ¡A Amie, el pueblo, nuestro dinero y márchate Rem!—le grita Elektra mientras saca su lanza.

—Chicas, chicas...aquí esta Amie, llamenme por mi nombre real Luffy. —dijo con una sonrisa malévola en su rostro.

—¡Tú no te llamas así! ¡Sólo usas ese nombre porqué me enamor-¡Gah! —gritó como pudo, parecía que la estaban lastimando, respiraba muy lento. Hace unos años cuando Rem la estaba por controlar, él vio sus recuerdos, al parecer este "Luffy" formó una buena parte de la vida de Amie así que él se aprovechó de esto y le hizo creer que él era Amie, sin embargo ella sabía que no era cierto. Sabemos esto pues el muy imbecil tenía anotado en una bitácora todas las memorias. Han pasado cinco años desde esto, imagínate que en cualquier momento te puedan matar, controlar y hacer algo que tú no quieras, o no poder sentir lo que tú quieras.

—Así que ya sabes que no soy ese "Luffy"—rió con gran fuerza, ese horrible sonido se escuchó en todo el lúgubre castillo. —Creo que tarde o temprano lo ibas a saber, pero mira te haré un trato. —le agarró de las mejillas y las apretó. —El trato sigue en pie, te casas conmigo y todos viven felices, o te niegas y estas chicas sufrirán el mismo destino que una cierta niña de cabello rubio en silla de ruedas.

Estaba algo lejos pero podía ver como Amie lo miraba con odio. Y no me iba a quedar quieta mientras el muy infeliz me amenazaba.

—¡Biggusandā: Amenace!—Dije mientras saltaba con un gran impulso, troné los dedos y de ahí se escucharon estruendos y se podía ver como unas luces aparecían cada cuánto. Gracias a mi poder de choques eléctricos.

--¡Shāpu no bara: Firohāto!—Elektra no se quedó atrás y se acercaba a Amie a gran velocidad para atacarla.

[ELEKTRA]

Nuestros ataques estaban dirigidos, no a Rem, sino a Amie. Ese es la única manera de librarla del hechizo, atacar a su corazón era la única manera. No es su corazón verdadero así que cuando se rompa saldrá el verdadero corazón de Amie, pero el desgraciado no dejaba que nos acercáramos.

—¿Rem-sama qué le haces a mi hija?—Una voz bastante conocida salió del pasillo, acercándose a nosotras, me puse en guardia.

—¿¡Ma-Marget!? —gritó Amie, se sacudía bastante y como Rem la seguía agarrando del cuello hacia una forma extraña.

—¡Marget! ¿¡Qué haces aquí?! —le grité apuntándole con mi lanza mientras estaba recuperando mi aliento, pude ver cómo sonreía, era una sonrisa fría y puso su dedo índice en su mejilla.

—Ah cierto ¿no les dije esto? —hizo una mueca sonriente, y rió burlona. —Rem-sama y yo trabajamos juntos. —ladeó la cabeza.

No puede ser cierto.

—Marget-san, quedamos que sería secreto. —Rem sonrió y dejó caer a Amie, la vi caer de rodillas y como se está se retorció, pero se intentó levantar.

—Esto Significa que queríamos a Amie-san desde el principio....-dijo Marget mientras se encaminaba hacia Amie, quien aún intenta levantarse. —Pero... ella era una princesa así que sería grave que la capturaramos antes de que naciera, una reina desaparecida no es recomendable.

-¿Antes de que naciera? ¿Qué significa eso?—pregunté, algo no andaba bien.

—Siempre quisimos cuidar a alguien de sangre azul, y bueno, cuando uno es un élite en el gobierno Mundial se hace de muy buena información. —Rem se acercó a Marget sin quitarnos la vista de encima.

—¿¡Qué demonios significa eso!?—pregunta D. algo asustada, aún tiene la forma de chasquido en su mano por si lo ocupa, estamos ambas caminando lentamente hacia Amie.

Rem se acerca a Amie, ella intenta alejarse, puedo observar que busca algo, infiero que busca su hacha, la intento buscar también, esta muy lejos de ella. Rem se agachó para estar a la altura de la acostada.

[Amie]

Mis codos duelen y mis rodillas también, me intento alejar, no quiero que se me acerque, estoy respirando muy fuerte.

—Yo fui el que escapo—me susurró, me quedo quieta por un segundo, asimilo lo que dijo pero no logro comprender lo que dijo.

—¿Qué?—dije confundida, "escapó", intenté recordar algún evento pero no logré comprender. —Rem se levanta de una manera victoriosa rápidamente.

—¡Hace años, un grupo de personas envenenaron a la reina Diamond! Escapé, me comí una fruta del diablo y pude hacerme de las mías cuando logré encontrarte. En el Grand Line hay unos aparatos que usan para controlar el clima, los utilicé para poder llevar cada uno de los desastres que te enfrentaste, tormentas, mini tornados, debo admitir que los terremotos fueron lo más difícil. Asesiné a tu madre y a todos en la isla. Claro que no pude hacerlo yo todo solo, pero de ese pequeño grupo que hicimos soy de los más grandes de su rango. —me tomó de las mejillas y apretó—Yo consigo lo que quiero.

Lo miré, lo miré con sorpresa, con enojo, con ansiedad, con terror. Con odio