-----Martes 2 de Marzo de 1937 8:38 AM Restos de Cantina BOHEMIA-----

Los bomberos intentaban ahogar las llamas de ese fuego que se propagaba de manera rápida.

Campbell tenía algunos moretones junto con su ropa llena de ceniza, había estado respirando ese humo algún tiempo. Sus pulmones estaban resentidos. Pero, nada que no tuviese solución.

Carter estaba siendo vendado de la cabeza pues el si se había dado un golpe duro, que le hizo sangrar. Sin embargo todo indicaba que nada de lo cual peligrara su vida.

En cuanto terminaron de apagar por completo las llamas se acercó un bombero a hablar con ambos.

— ¡Encontramos un cuerpo!

 Al decir eso Campbell se levantó lo mas rápido que le permitían sus posibilidades, quitándose la manta. Carter la cogió del brazo para detener sus acciones impulsivas.

—Deja que el caballero nos termine de explicar. — Pidió a Mía. — Merece nuestro respeto.

—Todo indica que fue por fuga de gas. — Menciono a ambos. — Posiblemente una fuga o un descuido.

— Clark no comete esos descuidos... Ni de olvidar apagar la estufa...mucho menos de fugas. — Firme en sus palabras Mía argumento. — Con su permiso. — Se retiró del lugar adentrándose a los escombros para ver ese cuerpo.

—Discúlpela caballero — Pidió Carter juntando las manos como haciendo un gesto de rezo. — Clark era alguien importante para ella y ha tenido días complicados.

—Descuide inspector. — Relajado el hombre sin generarle problemas. —Sé que tiene un caso difícil... No me lo tomo personal.

Carter agradeció y dejo ir al hombre adentrándose igual que Mía a lo que quedaba de la cantina.

— Campbell. — Carter la busco por unos segundos y no le costó encontrarla. — Aquí estas...— Intento poner su mejor actitud porque sabía que ella estaba agachada viendo el cuerpo. — No tienes que ver eso...

— ¡No es Clark!— Respondió soltando un suspiro.

—Mía.— La cogió del hombro asomándose a ver el cuerpo que estaba literalmente calcinado.— El cuerpo esta irreconocible... el fuego pudo haber dejado solo esos rastros.

—No es Clark...Créeme. — Miro Carter. — Se lo que te digo.

— Ok te creo...pero explícame para entenderlo ¿Por qué llegas a esa conclusión?— Se acercó viendo que no había mucho más que huesos y poca carne.

— Mira la pelvis. — Carter le paso unos guantes para que se acercara a poder tocar. — No es el...es ella.

— ¡Oye!...Tienes razón. — Miro impresionado a Campbell. — Cada día me sorprendes más. — Le regalo una sonrisa coqueta. — Por eso te amo.

—E-enfoquémonos en los restos. — Pidió nerviosa y ruborizada. 

En público no estaba acostumbrada a esas muestras de afecto. Giro su rostro hacia atrás y observo como los demás bomberos estaban boquiabiertos con lo que Carter acababa de decir.

 — ¡¿No tienen trabajo que hacer?!

— ¿Por qué te apena tanto que sepan las personas?—Estaba como niño pequeño preguntando para indagar. — ¿Acaso te apena que sepan que estás conmigo? ¿Te doy vergüenza?

— ¡No!...— Intento alejar a Carter aún más nerviosa. — Lo de pareja es de dos... No somos un circo para entretener.

— Te guste o no... lo somos. — Explico Carter un tanto tranquilo. — Todo el pueblo habla de ti por los periódicos y la radio. Eres una figura pública Mía.  

Le dio ligeras palmadas en la espalda. 

— Y por favor mírame a los ojos...de lo contrario la gente llegara a la conclusión de que dormimos juntos sin decirlo 

Esto último se lo dijo en voz baja para respetar su privacidad. No pensaba exhibir como un trofeo que se había acostado con ella.

— La gente no puede adivinar eso. — Aun más ruborizada y nerviosa intentaba desviar la atención del tema que Carter tenía en la mesa.

—Yo te lo advertí.  

Carter siguió indagando por el cuerpo con sus respectivos guantes observo que tenía algo en la boca ese cráneo, al parecer llegaba hasta la laringe, había unos pedazos de carne aun intactos.

 — Campbell. 

Al hablarle a la inspectora él ya estaba abriendo la boca del cráneo observando que aún quedaba la lengua y trozos de musculo. Pudo sacar un envuelto que les hizo estremecerse. 

— No fue Hunt. — Revelando la pluma y el chelín que distinguían la marca del asesino.

—Pero ¿Por qué atacar el lugar de trabajo de Clark?

—Posiblemente Clark descubrió algo. — Pensó Carter sin tener idea de que sucedía y solo lanzando meras especulaciones lógicas. — Si tenía evidencia aquí y no la encontró...quemar el lugar es lo mejor que se puede hacer.

—Pero entonces ¿Dónde está Clark?

—No has pensado en que...—Se rasco la nuca un poco dudoso.

—Clark no es el asesino Jack. — Como si leyera el pensamiento del agente, espetó algo molesta. — Ni su altura, ni su complexión, la edad de la cual ronda el sujeto y la singular marca que le vi en su pie no lo tenía Clark.

— ¿Desde cuándo le ves los pies a Clark?— Se agarró la cabeza asustado. — Eres demasiado perfecta...lo sabía. Tienes esos extraños gustos raros.

— ¡Quieres dejar de hacer el idiota! — Intento aguantarse la risa por respeto a la difunta.— Recuerdas que viví algunas semanas con los Barnes.

Carter  asintió con la cabeza. Pasado unos segundos Mía prosiguio.

— Pues algunas veces Clark me llevaba comida o le ayudaba a Iveth llevándome cosas.— Explico recordando a la perfección.— Más de una vez fue descalzo y no tenía esa cicatriz en los pies.

— ¿Era una cicatriz de algún arma blanca?

— Más bien como de quemaduras. — Se agarró el cuello en su marca descubriendo de la bufanda. — Como la mía.

— Entiendo... Bueno ya sabemos una característica de él. — Saco su libreta para apuntar.

En minutos dejaron el lugar y mandaron a llevar ese cuerpo a la morgue. Con Hoffman al mando ya no tenían que esconderse.

Salieron a una velocidad fugaz a dirigirse al hospital para ver a Scarlett y Walker.

----- Hospital de Norwich 11:48 AM.-----

Scarlett comenzó a tener movimientos involuntarios. Todo indicaba que estaba siendo víctima de sus propias pesadillas. Abrió los ojos asustada, intentando quitarse la imagen de su cabeza.

—Scarlett.  

Campbell y Carter la sostuvieron rápido para evitar que se le reabriera la herida. 

— Tranquila...estas a salvo. — Carter intento tranquilizarla y al encontrar su mirada con ambos ella se calmó en cuestión de segundos.

— ¿Dónde está Walker?— Insistió  intentando levantarse y las vendas comenzaron a mancharse de sangre por el esfuerzo que implicaba. — ¡Carajo!— Sin importarle mucho eso pregunto de nuevo. — ¡¿Dónde está Walker?!

— Sigue en cirugía. — Mía respondió. — Tú perdiste mucha sangre pero no te dio en algún lugar vital. — La recostó de nuevo presionando un botón para pedir asistencia médica. — Las radiografías indican que Walker tenía una bala en las lumbares.

— ¿Qué significa eso?— Asustada sin saber muy bien a lo que se referían.

—Que si no tienen cuidado con él... — Espetó Carter. — Puede quedar parapléjico. — Se acercó a Scarlett. — ¿Quién fue? ¿Quién les hizo esto?

—Señor Carter...Deje de indagar en las cosas que solo nos pondrán en peligro a nosotros. Ya le ha causado muchos problemas a Walker.

—Si sabes que Walker se le puede acabar su carrera por ese puto infeliz que los ataco. — Perdiendo un poco la paciencia con ella Carter se molestó. — Nunca quieres cooperar...¡Maldita sea Scarlett! ¿Le tendiste una trampa tú ?—Levanto una ceja mientras ella estaba en silencio. — ¡RESPONDE!— Golpeo una puerta con fuerzas.

—Jack...— Campbell se le acerco a su compañero. — Tranquilo. Ella no es cómplice de nadie. — Le cogió de la mano entrelazando con sus dedos. — Sé que estas molesto por lo de Walker...pero Scarlett no es la enemiga.

Jack sintió el tierno toque de su compañera y besando sus manos comenzó a tranquilizarse.

—Déjame a mí 

Pidió Campbell.  Jack se quedó sentado agarrándose la cabeza desesperado. 

— Scarlett. — Campbell centro su atención en la chica y se acercó a ella. — Necesitamos de tu ayuda y de lo que sabes.

— Inspectora Campbell— Lanzo un quejido de dolor al moverse de esa cama un poco. —Por más que quiera...no arriesgare a Walker a que vengan a rematarlo. Diré que tengo amnesia y hágame el favor de decirle a la prensa que él está en coma. Le dará seguridad que tenga un perfil bajo.

—Sé que no fue el asesino...— Respondió sin titubear. —Él pudo desollar a Walker ese día y no le causo ni un corte. Solo un golpe en la cabeza para desarmarlo. — Se acercó a Scarlett poniéndola nerviosa. — Fue Hunt ¿Verdad?

— No sé de qué me estás hablando. — Movió los hombros, los brazos y la cabeza en forma de negación.

—Le dijiste a Carter que no metiera a Walker en más problemas Scarlett. —Armo sus propias conclusiones. — Walker ha ayudado a Carter a escapar de Logan y King.  

Le explico haciendo que Scarlatt se molestara un poco por las conclusiones que ella solía sacar de todo lo que su memoria lograba archivar. 

— Y conforme a la bala que te extrajeron todo indica que es de une Enfield Mk1 ...solo los policías, agentes y soldados portan esa arma menos Carter que trae su Colt 45 y el señor Hoffman me dejo a mí su Luger P08.

— ¿A qué quieres llegar con esto? Que sabes de Armas. — Un poco irritada intento quitarse de encima a Campbell. — Déjenme descansar.

— A donde quiero llegar es que King...No usa Enfielad... King usa una Webley Mk VI.

—Tsk. — Hizo ese chasqueo con su lengua molesta.— No le den más problemas a Walker.

— Tu jamás nos dijiste nada Scarlett... Los agentes de Hoffman estarán escoltándolos tanto a ti como a Walker.— Sintió como los brazos de Carter rodearon su cintura y ella evito mirarlo a los ojos. Levanto sus cejas sorprendida.

—Eso es interesante. — Rio Scarlett aprovechando a pasar de plática.

— ¡¿Qué?!— Pregunto  Mía viendo como el estado de ánimo de la mujer cambiaba. —¿Qué es interesante?

— ¿Enserió ya se acostaron?— Pícara río esta mujer  siendo de lo más natural para ella.

— ¡No!— Hablo Mía

— ¡Sí!— Afirmo Carter.

Mencionaron al mismo tiempo los dos. Mía apenada miro a Carter con las cejas levantadas y los ojos enormes.

— ¡Jack!— Campbell se puso completamente ruborizada. Tapándose su rostro con ambas manos.

— Dile ¿Cómo lo supiste? Scarlett. — Se burló de su compañera. — No me quiere creer.

— Para empezar la inspectora tiene cara de que tuvo una noche llena de pasión.

—Scarlett... ¡Cállate! — Se fue a cerrar la puerta para que nadie más escuchara.

—Te dijo que tenías cara de amargada. — Comenzó a alborotar su cabello una vez ella se acercó a ambos. — y yo te la quite. — Alardeo entre las dos estando en más confianza.

— ¡Eso no es posible!— Recrimino Campbell. — Eso no existe es una tontería de ustedes.

—Véase al espejo inspectora. — Ella le apunto hacia el espejo y continúo. —Sin mencionar que no quiere ver a los ojos a Carter...

Suficiente de molestar a Mía era el turno de revelar verdades de Carter. 

— Y que el susodicho también tiene cara  de que dejo de ser virgen...Mis respetos inspectora...se ha robado la preciada inocencia de Carter.

— ¡¿Cómo?!— Se le borro la sonrisa a Carter.— No...no...no señorita usted...

—Entonces...— Campbell se relajó un poco y se cruzó de brazos. — Él me quito la cara de amargada y yo quite la virginidad.  

Miro a Carter con un rostro burlón y esta vez ella fue quien comenzó a jugar con su cabello alborotándolo. 

— Pequeño Carter ...¡Abuse de ti!¡Con tretas te engañe para que la soltaras y caíste rendido!

—¡Están mal! —Se defendió. — De virgen nada... estaba nervioso...

— ¿Cuántos intentos le tomo desabrocharte el sostén inspectora?— Pregunto Scarlett en tono de burla.

— ¡Cuatro! — Ambas estaban fastidiando bastante bien a Carter cuando Mía se acercó a agarrar una de sus mejillas como si fuera un bebe y estrujarlas. — Mi vida...eras tan inocente e inexperto...

—Eso no decías anoche. — Intento retomar la confianza haciendo que ella nuevamente se ruborizara. —El inexperto hizo un buen trabajo...sacando esos jadeos  Campbell.

—Y yo al introducirte a la lujuria...Carter... ¡Ve a la iglesia! Que de una vez te advierto...esto sera de ¡Todas las noches!

Carter fue esta vez quien abrió los ojos como plato viendo como Campbell y Scarlett reían de al parecer el rostro que tenia en ese momento.

« ¡Señor!» Carter   miro al cielo.

« ¡Esta mujer que me has puesto en el camino!   ¡La carne es débil! »

Su pequeño momento de relajación llego a su fin cuando llego uno de los escoltas de Hoffman y les pidió toda su total atención.

—Inspectores Campbell y Carter. —Haciendo un saludo con la mano en la frente en muestra de respeto. — Se encontró una pertenencia de Elizabeth Gray en el bosque junto con sangre fresca.

Campbell sintió un escalofrió de solo pensar que podía encontrase de nuevo con ese sujeto. Pero su trabajo era encontrar a Elizabeth.

Con todo el miedo que tenía encima, trago saliva y se acomodó esa corbata.

— Llévanos.

----- Bosque de Norwich 3:58 PM.-----

Andrew había sacado a Elizabeth al bosque. Había envuelto sus pies en un trozo de tela el cual impedía que su piel tocase la tierra. Ella podía ser muchas cosas... pero no era idiota. Le había vestido de nuevo con el único vestido que ella tenia

Fue dejando rastros como podía de sangre. A pesar de tener un fuerte dolor en sus dedos que comenzaban a soldar de manera deforme, Gray los mordía para gotear sangrado.

Dejaba rastros leves de su vestido sin que Andrew pudiera notar. Parece ser que algo le molestaba y no tenía su atención completa en Gray. Sino que su mente la tenía en otro lado.

Se metía el dedo a la boca para vomitar. Haciéndole pensar a Andrew que la última comida de intestinos no le había sentado bien.

Andrew por muy calculador que fuera, parecía que no notaba que el vómito servía para dejar pistas y como último recurso, alguien la ayudara.

— ¡Camina Gray! — Intento empujarla para que avanzara más rápido.

— ¿Por qué me has sacado de ese lugar?— Indagó escupiendo lo más que podía para quitarse el sabor de vomito de la boca.

— Necesito que veas algo.

Siguieron avanzando bosque dentro y Elizabeth se detuvo cuando vio un tronco no tan robusto pero tenía un círculo de sal en el piso.

—Le dije a Cambpell que tenía ciertos días para encontrarte. — La comenzó a amarrar a ese tronco de un modo que ella pudiera dar vueltas alrededor de el sin poderse escapar.— Pero se ha portado como una grandísima idiota. — Molesto comenzó a jalonear a Gray hasta que de su cinturón saco un cuchillo. — El simple hecho de recordar cómo se revolcaba con ese sujeto me dan nauseas.

-----Bosque de Norwich grupos de búsqueda.-----

Campbell y Carter llegaron al lugar donde encontraron la sangre fresca y tela del vestido de la señorita Gray.

—Es de ella. — Campbell tenía un ligero toque de esperanza. — Es la misma tela del vestido de esa noche. 

No sabían para donde tenían que ir el siguiente rastro no lo lograban encontrar aun. 

— ¡Muy bien! Nos dividiremos en grupos de tres. Somos quince, así que seremos cinco grupos.

—Si nos dividimos en grupos de dos y uno va solo abarcaríamos más terreno. — Sugirió un agente de Hoffman.

—Pero si hacemos eso podría cazarnos más fácil. —Ordeno Carter. — Este sujeto es peligroso. Todos con sus armas en mano y en cuanto vean alguien que trae mascar que sea masculino den dos advertencias. Si no obedece. —Dictó con autoridad — Abran fuego A matar...si es una mujer... la de la máscara es probable que sea Gray...con precaución

— ¡Si señor!— Al unísono dijeron todos.

—No lo olviden si lo encuentran usen el silbato con fuerzas para todos ir a apoyar. —Campbell estaba ahora dando órdenes. —La prioridad es que este viva Elizabeth Gray... Así que no hagan ruido. Si nos detecta, puede matarla.

— ¿Por qué tan segura de que sigue viva?— Brown estaba teniendo que someterse a las autoridades gracias a los nuevos cambios.

— Porque la mayoría de sus víctimas. — Miro todos sus compañeros. — Les quita la ropa. No le veo sentido cargar a alguien por el bosque con un vestido tan pesado. — Además...el no dejaría caer trozos de tela.

Cuando termino estas últimas frases se comenzaron a dividir a abarcar zonas donde posiblemente pudo llevar a Gray.

Campbell se adentró un poco más al bosque estando un tanto más familiarizada con él. Lo que no se esperaba era que Andrew sin duda estaba preparado para la mayoría de los escenarios. Y ese bosque era un campo minado con diversas trampas para cazar. Y no precisamente bestias salvajes.

----- Bosque de Norwich -----

Andrew miraba a Elizabeth como es que esta chica se veía ya cansada. Tenía sudor por todo el cuerpo y un color pálido.

—Te estas muriendo. — Se sentó Andrew observando a Gray y le dio un ligero toque en donde sabía que tenía su vendaje. — Apreté bastante fuerte ese corset.

Al toque ella aun amordazada hizo un quejido de dolor.

— Los antiguos Vikingos tenían una tortura llamado el paseo fatal. — Le comenzó a contar una historia curiosa. — En fin para no aburrirte porque sé que estas en agonía y posiblemente la herida este llena de pus. Necesito que camines hasta completar tu castigo.

—No voy a ser tu puto teatro Andrew.

—Te voy a abrir el abdomen...lo justo para que pueda sacar parte de tus intestinos poco a poco. — Comenzó a acercar el cuchillo al abdomen de ella. — Yo detendré tus intestinos mientras tú te encargas de darle vueltas al roble. Eventualmente se acabaran por enrollar en este.

—Moriría al instante. — Comenzando a mostrar más señales débiles dando a entender que la infección estaba aumentando.

—Un dato curioso. — Resonó su garganta. — Si solo se extraen los intestinos, tu vida puede prolongarse horriblemente durante horas.

— ¡Vete a la mierda Andrew! ¡No soy tu bufona!

Andrew cansado de la rebeldía de Elizabeth pensaba ponerle fin a la insolente joven Gray.

Cuando un disparo lo pone alerta seguido del sonido de tres hombres soplando el silbato.

Un segundo disparo se escuchó y justo logro rozar el hombro de Andrew quien al ver su propia sangre comenzó a entrar en estado de pánico.

— ¿Qué te pasa perra?—Elizabeth Gray se dirigía a Andrew aun en las condiciones que estaba. — ¿Cuándo te toca sangrar a ti no te gusta? ¡Vas a ser la puta de estos sujetos! Y antes de que me mates podre tener la satisfacción de verte morir.

Andrew sin más salió corriendo de ese lugar. Necesitaba perderse y reposicionarse para tener ventaja sobre de ellos. No le sería tan fácil pues para la dirección que se dirigía estaba por encontrarse cara a cara con Carter, Campbell y un oficial de Hoffman.

Escucho pisadas desesperadas y decidió ocultarse en los arbustos para controlar sus nervios.

Se comenzó a hacer un torniquete en el hombro para evitar sangrar más y dejar rastro. Guardo silencio y pudo ver claramente como pasaba ceras de él Carter,  Campbell y el otro oficial el cual el desconocía.

— ¡ES ELIZABETH GRAY!— Brown corrió lo más rápido posible y pudo notar como ella seguía moviéndose. — ¡ESTA VIVA!

Se apresuró a correr con más fuerzas cuando uno de sus pies cayó de lleno en la trampa para osos. Esos dientes metálicos se aferraron a su piel tocando el hueso.

—¡Aaaah! ¡HIJO DE PERRA!— Ese grito retumbo por toda la zona del bosque haciendo que los demás se quedaran en su lugar.

Quienes lo acompañaban se dividieron. Rápido fueron a asistirlo a él y a ayudar a Gray.

Del lado de Carter lograron escuchar a Brown y esto los puso nerviosos.

—¿Nos está cazando? — Campbell comenzó a entrar en pánico y sintió como su corazón estaba por salirse del pecho. — ¡Ese hijo de puta! Nos está cazando

—Calma...— Carter se le acerco y la recargo en un árbol. — No te despegues de este tronco. — Verifico que ella tuviese su pistola cargada y todo. — Me encantaría hacerte compañía pero tengo que avanzar.

Dio unos pasos hacia atrás, tropezándose con una raíz cayó al piso atrapándolo en una nueva trampa para osos que se afianzo a su hombro.

— ¡AaaaaH!.. ¡BASTARDO DE MIERDA!

— ¡JACK!—Campbell rápido dejo su lugar sin importar el miedo y fue a asistir a Carter. — ¡Aguanta!  

Con todas sus fuerzas intento abrir esa trampa, los dientes estaban cediendo y liberando la carne atrapada de Carter.

Al ella escuchar un nuevo grito a escasos metros de ella observo como es que había una trampa de piso cubierto con hojas secas para disimular esta muerte por empalamiento con pichos en el piso. El cual callo el agente que los acompañaba. 

Campbell de la impresión y el susto, soltó esta trampa de la cual estaba liberando a Carter y una vez más los dientes se afianzaron en su hombro penetrando más profundo la carne y los músculos.

— ¡AaaaaH! 

Si la herida seguía abriéndose penetraría hasta el hueso.

— ¡LO SIENTO!

A lo lejos escucharon las suplicas de ayuda de Elizabeth Gray... Sabían que estaban cercas

— ¡Vete! ¡Ayuda a Gray!— Pidió Carter. — Coge un palo y asegúrate de que por donde vas puedas caminar.

— Pero Jack... Tu.

—Dijimos que la prioridad era Elizabeth. — Intento empujar a su compañera a cumplir su misión. — A mí esto no me va a matar. 

Miro hacia donde la trampa lo tenía bien enganchado y gruño de dolor; Campbell Camino pocos centímetros a tomar una rama que Carter le ordeno y viéndolo por última vez se comenzó a alejar de él.

Andrew salió de su escondite y se asomó a esa trampa de pichos viendo al sujeto completamente empalado. Uno de esos picos atravesaba su garganta por lo que le causaba un dolor infernal el respirar.

El oficial al verlo intentaba estirarse para agarrar el arma que soltó pero le resultaba una tortura moverse. Andrew Lo dejo hay morir a su suerte sin siquiera mostrar una pizca de arrepentimiento. Directamente, él no los estaba matando.

Camino unos metros más hasta encontrarse a Carter. El inspector al verlo, se estiro para agarrar su arma. Le faltaba unos centímetros para poder llegar a ella. Miro que unas manos con guantes tomaron su arma y la guardo.

— No pienso dejártela... ¡Perro asqueroso!... Si te escapas me matarías. —Río divertido al ver a Carter en el piso luchando con esa trampa para soltarse. — ¡Eres estúpido!... La has dejado sola.

—Si la tocas.... Yo...— Una patada en la barbilla lo dejaron aturdido

— Me encantaría matarte.  

Piso la trampa que mordía su hombro encajando más esos dientes mientras le tapaba la boca para no alarmar a Campbell.

— Pero tú me arrebataste algo que quería...Matarte y que no veas como te lo arrebato yo a ti seria mostrarte misericordia.— Apunto con su dedo hacia donde había ido Campbell. — Observar... Es lo único que podrás hacer ¡Pedazo de mierda!

Por todo el bosque se escuchaban más gritos ahogados. Sabían que estaban cayendo uno a uno.

Campbell estaba a escasos metros de donde estaba Gray. Se encontraban las dos, cara a cara. Un silencio entre ambas se hizo presente unos segundos cuando, Mía se regresó a la realidad.

— ¡Elizabeth!— Campbell se estremeció al verla...Tenia sentimientos encontrados.

— ¡Campbell!— Una pequeña risa de alivio salió de sus labios. — De todos...tenías que encontrarme tú. 

Mía ignorado esto se acercó a ella y comenzó a desatar a la chica como podía. Al igual que la vez que le toco ver como mataban a alguien frente a sus ojos los nudos estaban bastante fuertes.

— ¿Le has visto el Rostro?

Elizabeth a punto de pasar a perder el conocimiento reconoció quien se acercaba a ella.

— Maldita pobre. — Tomando aire advirtió a Campbell. — ¡Detrás de ti!

Campbell reacciono  a lo que Gray le advirtió  y al darse la vuelta esquivo ese hachazo que estaba por abrirle toda la espalda.

—Campbell. 

Mía miro que tenía la pistola de Carter guardada. 

— ¿Qué tanta suerte tendrás hoy?— Una vez más, lanzo un nuevo hachazo hacia ella para intentar derribarla y poderla cargarla con facilidad  para llevársela. 

— Una herida así no te mataría...pero si te haría agonizar bastante.

El corazón de Campbell estaba a mil por hora. Su pesadilla estaba frente a ella y el miedo no le permitía contraatacar.

https://youtu.be/6Ez9QQYReWs

Próximo capitulo titulado "El cazador del bosque" ¿Ideas?