Capítulo 18
Milán, Italia
Departamento de los Tassone
Padre e hija estaban desayunando mientras hablaban de sus cosas, el hombre le hablaba de su trabajo y ella de cómo le estaba yendo el boceto que le habían encargado.
—Me temo que no tendré vacaciones, así que sería bueno que te fijaras qué harás, trabajas por tu cuenta así que puedes aprovechar en salir a algún lado, pedirle a tu amiga que salgan de vacaciones, podrías arreglar algo con ella, ¿no?
—Pensé que te iban a dar algunos días de descanso.
—No Fiore, los motores tienen que estar probados al detalle, y no puedo salir de vacaciones. Ya han dicho que posiblemente no íbamos a tenerlas... Así que en vez de quedarte aquí conmigo y aburrida, puedes irte con tu amiga a otra parte.
—Tendré que preguntarle, si puede salir... Ella está trabajando en un estudio de diseño gráfico.
—Qué bueno, me alegro mucho por ella —dijo contento.
—La última carrera antes de las vacaciones es en Mónaco, ¿verdad?
—Sí. En Monte Carlo. ¿Por qué la curiosidad? ¿Quieres venir?
—No, sabes que soy curiosa —contestó y cambió de tema—, es posible que este sábado me reúna con algunos excompañeros de la carrera junto con Lorenza.
—Me parece bien. ¿Cómo sigues del brazo?
—Un poco mejor, ¿supiste que Luka arregló las cosas con su primo?
—Algo me contó por mensaje. Me dijo también que le dio la mitad de su fortuna. Una locura.
—Lo mismo pensé. En fin, es problema de él que haya decidido aceptar eso.
El padre entrecerró los ojos, y trató de encontrarle algo que fuese mentira en sus palabras, se sorprendió cuando no encontró nada de eso.
—Sí, es verdad —respondió y terminó su café—. Me iré, que tengas lindo día, hija.
—Gracias papá, tú también. —Le sonrió y el hombre le dio un beso en la frente.
Apenas su padre salió del departamento, ella aprovechó en enviarle un mensaje a Lorenza para arreglar mejor la salida del sábado.
Su amiga que la conocía bastante bien, le hizo una pregunta que la dejó descolocada.
¿Acaso no te sientes limitada con haber decidido que nadie tenía que saber que estaban juntos?
Un poco.
A mi criterio, es mucho y eres una tonta que hayas decidido eso, nadie vería mal que estén saliendo, son adultos y se están conociendo, no le hacen mal a nadie.
Puede que me lo piense pero no te aseguro nada. Él quiere que se lo diga a mi padre porque es lo más correcto. Incluso me dijo que si yo no se lo decía, se lo diría él.
Tiene lógica lo que dice. Con tu decisión no pueden hacer nada en público.
Qué insoportable te pones, Lorenza —escribió con un emoji de ojitos levantados.
Te digo la verdad. Es lo más sensato lo que él te dijo, con lo que le impusiste, el pobre tiene que hacer de cuentas que ni te conoce, incluso ni podría acercarse más de la cuenta a ti en público.
Ay bueeeenooooo... Qué pesada, para que lo sepas, estoy pensando en ir a Mónaco.
Decisión correcta amiga. ¿Y se quedan ahí después de la última carrera? —escribió y puso una carita con la sonrisa de lado mirando de reojo.
Fiorella no pudo evitar reírse y le mandó emojis partidos de risa.
Sabes bien que te encantaría irte con él de vacaciones.
Lo admito.
¿Entonces? No seas idiota —texteó poniendo otra vez el emoji con los ojos hacia arriba.
Me gustaría ir de vacaciones con él a cualquier parte.
Con él hasta pasar las vacaciones dentro de un departamento, ¿no Fiorella?
Ay sí —escribió y puso un monito tapándose los ojos.
Qué bueno que lo reconozcas. El sábado te paso a buscar, ¿quieres?
De acuerdo... Antes que me olvide, mi padre ya me aclaró que no tendrá vacaciones, y no quiere que me quede con él, hasta me dijo que si quería me iba contigo de vacaciones.
Más a nuestro favor, Fiore... Cuando tengas organizadas las cosas con Luka, me avisas y arreglo contigo, yo por ahora no podré salir de vacaciones porque hace poco tiempo comencé a trabajar en el estudio.
Entiendo. Pero supongo que cuando te necesitemos vas a estar, ¿verdad?
Sí, ustedes despreocúpense, oh... vaya, ¿así que piensas ir en verdad de vacaciones con él? Digo... por cómo te expresaste.
Qué idiota...
Vamos que te gusta. Eso ya lo sé, así que sí, vas con él y todavía no se lo dijiste.
Posiblemente.
Creo que me has dado una idea...
¿Idea de qué?
En un par de minutos te enteras.
Dejó su móvil sobre la mesada del desayuno, y decidió seguir con el boceto con la mano izquierda. El sonido de una gotita la alertó deque le había llegado un mensaje de Instagram. Cuando vio el mensaje y abrió el contenido de la historia, quedó con los ojos como platos. Era una encuesta.
¿Creen que Cassiragghi y Tassone están juntos?
Sí o No
Era para tirarle algo por la cabeza a Lorenza. Ella misma respondió que no y le envió un mensaje directamente desde el privado de Instagram.
Creo que te desubicaste un poco con la encuesta, ¿no te parece?
Te saqué un peso de encima. Tú no vas a decirlo, así que casi casi te ahorré el trabajo. De todas maneras es una encuesta, es de lo que yo me guío cuando lo veo con mis propios ojos.
Lorenza... lo haces porque ya lo sabes.
Obvio, pero me gusta saber qué opina la gente de esto.
Tonta...
Ay please! ¡Déjame ser! Quiero fangirlear con ustedes dos. Igual, no te hagas la que no quieres saber lo que opina la gente de esto, sé que no vas a dar el brazo a torcer y por eso mismo me gusta joderte. :D
Cambiando el tema, ¿dónde propones ir el sábado? ¿Avisaste a los demás?
Sí, ya les avisé ayer mismo, después de que ustedes se fueran. Algunos quieren ir a tomar algo solamente pero yo prefiero ir a comer, algo más tranquilo.
Lo que decidan va a estar bien.
Después te iré avisando.
De acuerdo.
¿Adivina quién me acaba de ver la historia y me está siguiendo?
Luka.
Sí.
Seguro que te dirá que saques la historia.
Error, él también opinó, puso un sí XD
Ustedes dos se pusieron en complot.
No seas tonta, sabes que no.
Bueno, seguiré con el boceto, hablamos más tarde y después me avisas sobre el sábado.
Está bien, estamos en contacto. Un beso.
Un beso, Loren.
Un buen rato más tarde, donde Fiorella creyó que al fin estaba tranquila y relajada para dibujar, otro sonido de su móvil la desconcentró, miró la pantalla y leyó el mensaje de Luka.
Tengo la tarde libre. ;)
Qué trabajo pesado haces. ;) :P
¿Tú cómo sigues del brazo y la mano?
Un poco mejor, gracias. Y bocetando o tratando de bocetar.
Perdón.
No pasa nada. Tranquilo :) ¿Tú cómo estás?
Bien. Aquí en el circuito probando los coches antes de viajar a Mónaco.
¿Cuándo se van?
Pasado mañana, ¿tú te quedas?
Es posible.
:(
Es posible que... vaya con ustedes, pero no en el mismo avión.
¿Cómo le harás para la reserva de la habitación?
Quiero suponer que la escudería le reservará a mi padre una habitación con dos camas...
No te preocupes, arreglaré con mi padre sobre eso.
Está bien, omite lo nuestro por favor.
¿Perdón? o.O... Ragazza con lo que acaba de hacer Lorenza, la gente va a sospechar.
No te sientas indignado porque tú también votaste con un sí.
Por supuesto. :D ¿Y tú qué votaste?
Un no. XD
:| :(
Te tengo una sorpresa.
¿Cuál? :D
Es sorpresa, así que por ahora no te la diré. XD ;) dime otra cosa, ¿ustedes después de la carrera qué harán?
Algunos se quedarán y otros volverán a Italia o a sus respectivos países, tenemos la semana libre y luego las vacaciones, o sea que ya este fin de semana que viene tenemos la última carrera de mitad de año. ¿Por qué lo preguntas?
Había pensado quedarme un par de días más después de la carrera, para visitar algún museo o recorrer la ciudad de Mónaco. Por las fotos que he visto, parece preciosa.
Es muy linda. Fiore, más tarde hablamos, debo volver a las pruebas.
Hasta luego.
Afueras del condominio
Ese mismo martes por la tarde se vieron. La joven le dijo a su padre que iría a dar una vuelta por los alrededores del condominio y cuando divisó el coche aparcado en la acera de la esquina de la siguiente calle, se dirigió hacia él, abrió la puerta del copiloto y entró.
Desde la ventana del departamento, Ernesto miró a su hija entrar al vehículo y supo bien de quien se trataba, por lo que él mismo comprendió que Luka y Fiorella tenían algo más estrecho.
Dentro del coche el piloto le tomó la mano a su acompañante y le depositó un beso, ella en respuesta le acarició la mejilla con el dorso. Pronto emprendieron el paseo para estar un rato tranquilos y solos. Decidieron bajar en una pequeña cafetería que se encontraba alejada de la ciudad y aunque pasaban inadvertidos para los demás, no podían evitar los ojos curiosos de otros tantos.
—Fiore, no vamos a poder evitar esto, estar a escondidas y sinceramente no creo estar haciendo nada malo en que quiera salir contigo.
—No han pasado ni siquiera días y me siento limitada a no poder salir como quiero.
—¿Entonces? —cuestionó él.
—Quizá sería mejor dar a conocer lo nuestro o que nos vean en los lugares públicos.
—La segunda opción me gusta más, ¿y a ti?
—También. —Le sonrió.
Luka le sujetó la mano que tenía sobre la mesa y se la acarició mientras le regalaba una sonrisa. Ella hacía lo mismo. Pidieron un menú para compartir que traía alimentos dulces y salados, y dos aguas minerales. Aunque quiso el hombre, no pudo negarse a dar algunos autógrafos y otros pedían una foto con él. Para las fotos, fue la joven quien se ofreció a sacarlas.
Minutos después, comieron con tranquilidad y tuvieron una conversación muy agradable hasta que ella le contó sobre la sorpresa.
—¿Quieres saber sobre la sorpresa?
—Me encantaría saberla. Cuéntame, soy todo oídos —sonrió de nuevo con una amplia sonrisa mostrándole sus dientes blancos.
—Me parece que aceptaré tu invitación —levantó las cejas al tiempo que lo miraba con suficiencia.
—¿Cuál invitación? —preguntó fingiendo no acordarse.
—Esa que me dijiste...
—¿La de las vacaciones?
—Sí, esa misma. Mi padre me dijo que me fuera con Lorenza, porque él no tendrá vacaciones, ya se lo dejaron saber con anticipación.
—¿Entonces aceptas la invitación solo porque tu padre te dijo que te fueras a alguna parte?
—No, claro que no... Tenía ganas de ir de vacaciones contigo, tengo ganas, pero siento que es demasiado apresurado también salir juntos, solos.
—¿Tienes miedo que pase algo entre nosotros?
—Supón que sí.
—¿No te parece que eso no se sabe? Digo... puedes dejar que todo fluya, a veces no pasa nada y otras veces sí pero no puedes plantearte algo así sin saberlo con certeza.
—Eres hombre, vas a querer.
—Soy hombre, sé ubicarme también —afirmó con algo de seriedad en su voz—, no supongas nada.
—De acuerdo. Dejaré que todo fluya. De todas maneras sé que eres respetuoso y no harás nada que yo no quiera.
—Gracias por considerarme un hombre respetuoso, Fiore —rió al escuchar sus palabras y ella no lo pudo evitar tampoco.
Cuando terminaron, él pagó la cuenta y le dejó propina a la chica que los había atendido. Pronto salieron de la cafetería y entraron al coche para regresar al condominio.
A las puertas de los departamentos de cada uno, la puerta de los Tassone se abrió dejándolos al descubierto en el momento en que se estaban dando un pequeño beso antes de despedirse por aquel día.
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