113.
Había sido el peor momento. Cuando decidió tomar una siesta con su hijo, quedándose solo en casa mientras Australia iba por provisiones y su padre acudió a una reunión
Pero no podían culparlo.
Faltaba casi 3 semanas para la fecha prevista de parto
—Papi tiene dolor justo ahora, cariño
—Si te tomas una pastilla? —CIA señaló a lo lejos donde recordaba estaba el botiquín
—Así no funciona esto —USA intentó reírse, pero el dolor no lo dejó y solo hizo una mueca
—Tal vez comer pastel te ayude
—Tal vez sí
—Ya se me antojó
—Cici, mi niño, necesito que ayudes a papi y te quedes conmigo mientras vienen por nosostros, está bien?
—Y si te preparo un sándwich? Ya puedo
USA soportó otra contracción con una sonrisa torcida y nerviosa. No quería asustar a su hijito.
—Papi no puede pararse justo ahora, cariño. Así que quédate cerca
—Pero...
—Y si me ayudas llamando al tío Austry para que se apure en venir?
Le dió el teléfono con las manos temblorosas. No era su primer bebé y las cosas se podían apresurar de la nada. Así que estaba un poco asustado
—Sí. Yo lo llamo! Le diré que traiga una pastilla para ti
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top