Sam se preguntó por milésima vez por qué demonios tenía como mejores amigos a los sujetos más idiotas de toda la escuela, y lo peor de todo era que se hacía esa pregunta en las peores situaciones, como cuando estos ya habían metido la pata y lo habian arrastrado al fondo junto con ellos, se preguntó mentalmente una vez más si a todos los alfas les daban lapsus de imbecilidad mental o solo a esos dos.

-Los odio- murmuró

Bucky junto a Steve observando por las persianas de la oficina de Fury esperando a que este saliera, se voltearon a ver a Sam con una mueca de irritación como diciendo "dinos algo que no sepamos ya."

-¡Saben lo que hará Fury cuando se entere que...!- susurró molesto

-Shhh- le mandó a callar Bucky- si Fury nos escucha afuera de su oficina nos matará por no estar en clases, y además de eso tendremos que decirle lo que paso- habló bajo

-¿Por qué siempre me meto en problemas por su culpa?- cuestionó irritado el pobre beta, mirando el cielo, esperando que alguna divinidad le salve de los zoquetes frente a él

-Porque somos amigos y así es la amistad- respondió Bucky- y si te callaras y nos ayudarás a ver a Fury en lugar de estar reclamando todo sería mejor

Sam gruñó y girando sus ojos caminó hasta la ventana con cautela de no hacer mucho movimiento, inclinándose justo como Steve y Bucky, observando al igual que ellos por la ventana a Nick que estaba sentado muy tranquilamente leyendo unos documentos. Estaban en un silencio tenso, alerta, contemplando cada movimiento en la oficina, cualquier pequeño y nimio movimiento. Estaban tan ensimismados que no escucharon cuando alguien se acercó por el pasillo, parandose atras de ellos.

-¿Qué hacen?- preguntó Tony, mirando con curiosidad al trio, y al parecer no fue muy buena idea ya que todos saltaron del susto mirándole sorprendidos, casi espantados de verle ahí

Steve, se levantó rápidamente, mirandole con aire de nerviosismo, parecía que le fuese a dar un paro cardiaco en cualquier momento.

Tony alzó una ceja, cruzandose de brazos, aun esperando una respuesta.

-Yo... nada- habló Steve, rascando su nuca- estábamos... estábamos...- se mordió el labio sin dejar de ver al omega, se veía tan lindo, no podía pensar en algo coherente con esa imagen ante sus ojos- bu.. bueno es que solo salimos a dar un paseo como cualquier día normal y... nos pareció ver una mancha en el vidrio de la oficina del Director... solo nos acercamos para quitarla

Anthony frunció el ceño.

-Rogers, esa es la peor excusa que he escuchado, y he escuchado muchas, hasta hubiese creído que un fantasma los golpeó dejándoles pegados al vidrio- dijo mirándole irritado

-Está bien- suspiró Bucky con resignación- no fue por una mancha en el vidrio, no escuche las tonterías de este rubio idiota-apuntó a Steve molesto- eso realmente no fue del todo así, lo que pasó... -hizo una pausa, para luego hablar con una entera seguridad- fue culpa de un alien- y se escuchó en todo el pasillo la palma de la mano de Sam estrellar con su rostro, mientras el idiota seguía contando "lo que sucedió"- un alien con una tanga de unicornio vino y poseyó nuestras mentes y dijo que observáramos a Fury, si no lo haciamos iba hacer que Sam se casara con Maluma, y como es nuestro amigo, no podiamos hacerle eso

Sam le miró incrédulo y se repitió la pregunta ¿por qué demonios tenía como mejores amigos a los sujetos más idiotas de toda la escuela?

-Dios ¿por qué demonios tengo como mejores amigos a los sujetos más idiotas de toda la escuela?- cuestionó poniendo una mano en su rostro, matar era ilegal, se repitió

-Señor Wilson- le habló su profesor ya con un pequeño tic en su ojo izquerdo, se notaba que estaba controlando sus ganas de ahorcar a alguien- ¿puede usted contestar honestamente y sin teorías absurdas como las de sus amigos? Sigo pensando que a los alfas les dan lapsus de imbecilidad

Sam asintió, al fin alguien comprendía lo que era lidiar con esos estúpidos, por suerte no era él quien tenía que pasar el resto de su vida con uno de ellos como pareja.

Bucky dio un paso al frente, quedando poca distancia entre él y Tony.

-Yo le digo profesor pero debe prometer no decirle a Fury- dijo mirándole a los ojos, y tomando la mano del mayor, ignorando las miradas atónitas de Steve y Sam ante ese gesto

-Lo... lo prometo- murmuró Tony avergonzado y retirando inmediatamente su mano de las de Barnes, odiaba sentir esa calidez en la piel del otro, o eso quería pensar- solo diganme que pasó

-Se nos escapó la serpiente del laboratorio del profesor Banner en la oficina de Fury, y necesitamos sacarla de ahí antes de que este se dé cuenta y nos ganemos una detención, suspensión o la expulsión

Tony le miró atónito ¿Cómo alguien podía ser tan idiota para que eso pasara? En especial siendo tres personas juntas.

-¿¡Cómo demonios a tres personas se les puede escapar una serpiente inofensiva y justo en la oficina del director!?

Bucky suspiró, para luego voltear y observar a Steve como diciéndole "cuéntale lo que hiciste."

-Yo... esto... -volvió a hablar el rubio-le pedimos al profesor Banner las llaves del laboratorio para trabajar en un proyecto de ciencias sin que nos molestaran - hizo una pausa rascando su nuca sonrojándose por tener que decirle a su precioso profesor lo idiota de sus acciones- y estabamos listos para iniciar el proyecto y todo, pero entonces vi a la serpiente, la pobre se veía triste detrás del vidrio y... le dije a Bucky que la sacáramos a pasear, pero cuando la estábamos paseando...

-Cuando la liberaron de su jaula....- interrumpió Sam- yo les dije que iba por un cuaderno a mi casillero y que volvería enseguida, lo cual fue la peor idea que pude tener, ya que cuando volví, los idiotas alfas aquí presentes- les golpeó la nuca a cada uno- estaban discutiendo y la serpiente estaba de viaje por la escuela

Anthony les miraba con los ojos entrecerrados ¿realmente había gente en el mundo así de estúpida? Y lo peor de todo ¿se sentía tan atraído por uno de esos alfas tan imbéciles?

-Necesitamos su ayuda- dijo con suavidad Barnes tomando nuevamente la mano del omega, acercándose demasiado a este para su gusto, y para gusto de Steve, que gruñó irritado al ver eso

-¿Qué demonios quieres que haga?-comenzó a decir Tony- quiero decir además de no mandarlos a detención a los tres por faltar a clases, dejar libre una serpiente por la escuela y espiar al director Fury- inquirió intentando zafar su mano, pero le fue imposible ya que este la tenía con fuerza apretada, aunque no la suficiente para hacerle daño

-Necesito que distraiga a Fury, ya sabe, sáquelo de su oficina mientras yo, Sam y Steve buscamos a la serpiente

-¿Cómo sabes que está ahí?- cuestionó el omega ya resignado y dejando que el otro tuviera su mano entre las suyas por un minuto, ignoró la pequeña sonrisa de este ante eso

-Porque Sam la vio entrar por la ventana, pero Nick ya estaba adentro asique no pudimos entrar y llevárnosla- habló Steve ahora sonando más frío apretando sus puños mirando las manos de su amigo apresando las del omega, luego golpearía a Bucky por ello

-Bien, los ayudaré- murmuró Tony, ahora soltándose y dándole manotazos a Barnes, para que dejara de insistir- yo sacó a Fury de su oficina y ustedes entran

-Sí señor- murmuró Bucky con saludo militar

El profesor giró sus ojos, alejandose del grupito, para luego entrar en la oficina de Nick, sin molestarse en tocar la puerta.

-Fury esto...- habló, pensando en una excusa efectiva que lo sacara de su oficina inmediatamente- el alumno Peter Quill está entregando fotos de su trasero a las alumnas, en la cafetería

-¿¡Qué!?- gritó molesto y poniéndose de pie- ¡Ya le dije que no podía hacer eso!- gruñó entre dientes antes correr fuera de su oficina, perdiéndose por el pasillo

Bucky apresuradamente entró siendo seguido se Steve y Sam, que buscaban desesperados la serpiente por todas partes. Tony suspiró, y caminó hasta la puerta con la intención de irse para poder seguir en su clase pero el alfa castaño le detuvo tomándole de su muñeca, aprovechando que su rubio amigo no les estaba mirando, besó la mejilla del omega con suavidad.

-Gracias, Anthoshka- susurró sobre la piel que comenzaba a enrojecer de Tony

-No fue nada- susurró alejándose del otro casi al instante-yo...  tengo... tengo que ir a la clase-fue todo lo que dijo antes de darse media vuelta y correr por el pasillo en la misma dirección por donde se fue Fury

Bucky se quedó ahí parado un momento, con una pequeña sonrisa en sus labios.

-Si quieres nos ayudas a buscar la serpiente Barnes- le habló Sam, sarcástico, sacándolo de sus pensamientos, sin dejar de ver bajo el escritorio del director

-No, ya la encontré- habló Steve estirandose para tomar a la serpiente que estaba abajo atras de un mueble y colocándola alrededor de su cuello- de la que nos salvamos- suspiró aliviado, mientras los tres salían de la oficina- todo gracias a Tony- dijo con una sonrisa amplia en su rostro, parecía bastante feliz

-Sí, ahora devolvámosla antes de que Banner lo note- dijo Sam

-Claro sí- habló Bucky distraido, sin poner atención a lo que realmente decian sus amigos, ya que por su mente estaba demasiado ocupada pensando en la cercanía con su Anthoshka ¿eso se contaba como una pequeña traición a Steve?

(...)

Tony dejó cae su cabeza sobre la mesa, estrellando sin la más mínima delicadeza su frente contra la plana y dura superficie de esta. Una de las cosas que más le estresaba era corregir los exámenes de los alumnos, no porque fuera difícil, claro que no, sino porque eran muchos, y eran muchas preguntas en cada uno, aunque estaba bien con todo ello, no era tan horrible, o eso hasta que comenzó a equivocarse un poco en las correcciones porque a sus estúpidos pensamientos les gustaba incluir en cada uno de ellos al tonto alfa guapo que tenía por alumno, y que le quitaba la concentración, por amor de Dios, ya era la séptima vez que usaba el corrector en la misma prueba.

Odiaba que su instinto de omega hormonado lo llevara a imaginar el fuerte y musculoso cuerpo de James, sobre el suyo, cada vez luego que que compartían un pequeño contacto, queriendo más de esas grandes manos que le rodeaban la cintura con seguridad cuando estauvo por caer, o esos ojos posesivos que se le instalaban cada vez que Strange se le acercaba, porque él no era tonto, y cualquiera con ojos se daba cuenta de esas acciones del alfa. Era difícil no pensar en Barnes cuando hacía todas esas cosas, le ponía tan furioso cuando le lanzaba miradas burlonas, mientras comía en clases, o jugaba con su teléfono, ponía todos sus pelos de punta, lo provocaba, quería estrangularlo a veces, pero también quería otras cosas que no debería estar pensando, no, no con un alfa, no con su alumno y menos si lo atraía de esa forma, no gracias.

Porque ¿Cómo demonios era posible que se haya sonrojado y puesto tan nervioso por un simple beso en la mejilla? ¿Cómo era posible que su cuerpo se sintiera tan tembloroso con la cercanía de Bucky? Odiaba eso, odiaba sentirse así, el no era de esos que se sonrojaba.

Cerró los ojos nuevamente y volvió a apoyar su frente sobre el examen que estaba corrigiendo, maldiciendo mentalmente el haber hecho eso casi al segundo, ahora tenía rastros de corrector en su frente, con un pequeño gruñido cabreado comenzó a frotar la mancha de corrector usando los dedos con la intención de quitarla, se sentía como un tonto adolescente flechado, con la cabeza perdida.

Dio un salto al escucha su teléfono sonar interrumpiendo el silencio. Lo tomó y comprobó que era Rhodey el que lo llamaba.

-¿Qué?

-¿Qué?- repitió su amigo alfa al otro lado de la línea- ¿Cómo que "qué"?- Tony gruñó como respuesta- ¿sabes que  últimamente estas mucho más irritable que de costumbre? ¿Es algo hormonal?- cuestionó curioso- ¿es cosa de omegas? Pepper a veces también se pone así, pero creí que lo de ella era por su periodo...

-No, no es algo hormonal- suspiró Tony algo exasperado- es solo que tengo muchas cosas en la cabeza en este momento

-¿Por que el trabajo te mantiene ocupado, o es el alfa del que te niegas a hablarme y que te gusta pero no lo quieres admitir?

-¡No, tampoco! ¡No hay nadie de quien hablar! ¡No me gusta ningún tonto alfa!

-Entonces ¿Por qué te pones tan nervioso cuando saco el tema?- preguntó divertido

-Te odio, te odio demasiado, ojala si hay un apocalipsis zombie conozcas a Negan

Rhodey soltó una carcajada ante eso, ya tendría luego la oportunidad de conocer quién era el alfa que acaparó la atención de su hermano, y tendría que hacerles ciertas "advertencias" si llegaba a hacerle daño, porque él tenía un instinto de protección con Tones, él era parte de su manada, era toda su responsabilidad cuidarlo, se prometió hacerlo.

-¿Sabes por qué te llamo verdad?

-Si- rodó sus ojos el omega- pero aún faltan como tres días para mi... eso- terminó, no le gustaba decir la palabra

-La última vez eso se te adelantó, no deberías ir mañana a esa salida que tendrá tu curso en el museo de Historia Nacional, deberías quedarte en tu departamento, viendo una película de esas de terror que tanto odias, escuché que salió una nueva de...

-Rhodes- le interrumpió, sabiendo que su amigo tratada de persuadirlo- estoy perfectamente, y algo tan tonto no me va impedir ir al paseo, ¿crees que tengo tan mala suerte para que suceda algo así como que se adelante de nuevo? Solo tengo que evitar el alcohol, no es gran cosa

Rhodey suspiró con paciencia, sabía que si le insistía a su amigo que se quedara en casa este no lo escucharía, como siempre, ya que era la persona más tozuda de toda la faz de la tierra, solo conseguiría irritarlo y de pasada a él mismo.

-Prométeme que si tienes algún problema me llamarás-le dijo en un tono que no admitía réplica- estaré ahí en una hora como máximo

-Sí, sí, lo prometo, ya deja de preocuparte tanto por ello, pareces mi madre, o peor, te estas comenzando a parecer a Pepper

-Como sea- gruñó Rhodey molesto por la indiferencia del omega- te dejo para que sigas haciendo lo que sea que hacías, te iré a ver en dos días, cuidate

-Dos días- asintió Tony

-Y me presentas al alfa que tanto te gusta- comentó rápidamente, y antes de que  el castaño replicara colgó la llamada

Tony se quedó mirando el teléfono un momento con el ceño fruncido, antes de comentar para sí mismo.

-Que no me gusta- suspiró, volviendo a sus pensamientos sobre el tonto alfa que quería olvidar, tonto Rhodey que se lo tuvo que recordar

Después de un largo rato ya seguro de que no iba poder seguir corrigiendo los exámenes, los guardó todos en su bolso, los terminaría de corregir cuando tuviese su mente más despejada. Se levantó, colocando su bolso al hombro, salió del salón de clases y comenzó a caminar por los pasillos desiertos de la escuela, ya que todos se habían ido a esa hora, probablemente solo estaban las porristas entrenando o alguno que otro equipo.

-Antoshka- escuchó que alguien le llamaba y, maldición, esa voz, ese apodo, de todas las personas del mundo, sabía quién era, aun sin voltearse- Antoshka- le volvió a llamar y sin poder evitarlo, esta vez si se volteó

-¿Si, señor Barnes?- preguntó con los dientes apretados observando el cuerpo alto y fuerte del otro, estaba sudado, con el cabello mojado, y llevaba la camiseta del equipo de Lacrosse, supuso que se encontraba en el entrenamiento

Realmente intentó no seguir repasando su cuerpo con sus ojos, pero maldición la camiseta se le comenzaba a pegar en el torso por la humedad, dejando ver unos abdominales que realmente no sabía que el otro tenía, tan marcado, parecía que se ejercitaba mucho, esos brazos no serían tan musculosos de no ser así, pero maldición, no quería tener más fantasías de las que ya tenía con ese cuerpo, y sus ojos azules, y su cabello largo, el solo pensar en esos labios recorriendo su cuerpo le hacía estremecer, y sintió sus mejillas enrojecer, apartó la mirada rápidamente.

-Yo... yo no, enserio no puedo hablar ahora- iba correr hacía la salida de la escuela pero cuando comenzó a moverse con la intención de irse la mano de Barnes alcanzó su brazo, rodeandolo con firmeza, deteniéndolo

-¿Esta huyendo de mí?- preguntó el alfa, pero su tono no salió burlón como a veces hacía, parecía más bien curioso, casi siempre los omegas sentían atracción hacia él, no todo lo contrario, y él no quería que el único omega que realmente le gustaba comenzara a evitarlo sin explicación aparente

-No, ¿Qué demonios dices? ¿Por qué huiría de ti?- resopló, no quería mostrarse nervioso, no quería que el otro supiera que le afectaba de alguna forma

Su pregunta no fue contestada. Bucky le miró detenidamente, sus enormes ojos castaños, eran tan grandes y curiosos,  ¿por qué se tenía que comportar tan frío con él? Y maldición esa actitud le encantaba, pero a veces le desesperaba, era como un hielo, se suponía que en las manos correctas se derretiría, o algo así decía el dicho ¿no?

El alfa se moría tanto por probar esos labios, estaba bastante seguro de que eran suaves, sabrosos, y si se da el momento se volverían salvajes, como se imaginaba tantas veces al día, con gemidos y jadeos saliendo de entre ellos, joder, era el omega más hermoso del mundo, el más deseable, la atracción entre ellos era tan fuerte, esa tensión, no quería que la siguera ignorando o negando como si nunca hubiese estado. De todos los omegas del mundo se fijaba en el que menos atención le ponía, pero él iba a cambiar ello, iba a jugársela por su profesor, iba a jugársela por su Antoshka, estaba más que dispuesto a ello, le ganaría a Steve en esto, y también a Strange.

Tony frunció el ceño, cerrando los ojos algo temerosos cuando el otro se acercó con lentitud, y  los volvió  abrir cuando sintió unos dedos acariciando su frente.

-Tienes corrector en la frente- dijo el alfa con suavidad y sus ojos volviéndose cálidos junto a una pequeña sonrisa, antes de lamer su pulgar y pasarlo por la frente del omega para quitarle la mancha blanca

Mordió su labio inferior, al sentir el cariñoso tacto del otro, alzó la vista y se encontró con sus ojos azules, y en un abrir y cerrar de ojos este dio un paso adelante tomándole con sus manos de la cintura con fuerza, pegando la espalda del omega a los casilleros, Bucky se inclinó y hundió su nariz en el cuello del omega que estaba totalmente desprevenido, aspirando ese delicioso aroma, a café y almendras, no quería asustar a Tony, sabía que lo estaba haciendo con este gesto, pero su cuerpo como si se moviese no acorde a sus pensamientos  separó las piernas del omega y metió la suya entre estas, su nariz subiendo y bajando, acariciando la sensible piel del cuello.

Solo quería que el otro se dejara querer, que se dejara cuidar y mimar, porque era como un gatito que no se dejaba acariciar, y eso era algo extraño, porque normalmente los gatitos buscaban caricias, buscaban de alguien que les diera cariño, pero este rechazaba los mimos, era un gatito diferente al resto.

-Mi Kotenok- susurró con un pequeño gruñido sobre su piel sonando bastante posesivo- mío

Realmente se quedó sin habla ante eso, no entendía mucho el significado de esa palabra, pero la otra, ese "mío" jamás le había gustado, él no era un objeto, no era una propiedad, no era un pedazo de carne que le pertenecía a alguien, o eso creía que significaba esa palabra, hasta ahora, que por primera vez entendió algo.

Escuchó unas voces a distancia en el pasillo, lo que hizo que saliera de su trance, y con rapidez empujó a Barnes del pecho, apartándolo de su cuerpo con algo de brusquedad, joder ¿Acaso no se dio cuenta que estaban en medio del pasillo? Él era un profesor, y el otro su alumno, y aunque no fuese así, él no quería un alfa, nunca lo quiso, no podía ceder tan fácil, no cuando no tuvo una de las mejores experiencias precisamente con uno de ellos.

-Yo...- habló con dificultad, con la respiración pesada- ten... tengo que irme

Y antes de que a Barnes se le ocurriera detenerlo otra vez apresuró el paso hasta salir de la escuela, suspiró aliviado cuando al fin se subió en su auto, y ya más en calma, apoyó su nuca en el asiento, se colocó el cinturon de seguridad para luego acelerar rápidamente, saliendo lo antes posible de ahí.

(...)

-Eres la única persona que conozco en el mundo entero que se emociona por ir a un aburrido museo- comentó Bucky irritado a la vez que observaba  como Steve guardaba demasiado emocionado cosas en su mochila, un par de libros excesivamente gordos, unos lápices, un par de sándwiches y por último una caja de jugo

-Me encantan estos paseos escolares- admitió feliz- ¿enserio no quieres venir? No te pierdes de nada pero aun así

-Créeme, jamás he estado tan seguro en la vida- respondió sin levantar la vista el alfa castaño jugando GTA en un Play Station, mientras masticaba unos cheetos de queso extra de la bolsa que se encontraba a su lado- ya te lo dije los museos son aburridos- comentó con la boca llena, apenas entendiéndosele la mitad de lo que decía- solo se habla de gente muerta

-Muy bien- sonrió Steve sin ningún pesar de que el otro se negara, peinando bien su cabello y poniéndose algo de perfume, algo que no estaba acostumbrado a hacer, pero quería verse y oler bien, porque su profesor iba a estar ahí- si no quieres ir, no quieres ir- dijo sonando demasiado feliz, a lo que Bucky le miró curioso, normalmente Steve le insistía en que fuera a ese tipo de eventos con él, hasta que terminaba cediendo, no aceptaba negarivas sin más

Su rubio amigo se colocó su mochila en los hombros, tomando su casco y las llaves de su moto, se despidió con la mano y salió disparado.

Bucky escuchó su teléfono sonar y sin ver quien era atendió la llamada.

-¿Qué pasa?- respondió sin muchas ganas

-Hey- le saludó Sam al otro lado de la línea- amigo, necesito que le digas a Steve que no se le olvide mi libro de historia, él no responde su teléfono

-Creo que ya lo guardó mientras hacía la mochila lo vi guardar dos, esta de camino ahora

-¿Esta de camino? ¿Por qué no vienes tú con él?

-Los museos no son lo mío- comentó girando los ojos y metiendo otro puñado de frituras de queso en su boca- es mejor el GTA

-Eso lo sé, pero pensé que vendrías porque también va estar el profesor Stark- luego de decir eso Sam escuchó como Barnes al otro lado de la línea comenzaba a toser, supuso que se había atorado con las frituras- ¿Estas bien?

-¿Cómo que va ir Antoshka?-cuestionó restandole importancia a la pregunta- Pero yo creí que el profesor Banner era quien iba a guiar a nuestro curso

-Exacto, junto con Stark, siempre son dos profesores, y donde va Banner le acompaña siempre Stark

-Pero ¿Por qué demonios Steve no me dijo que...- hizo una pausa cayendo en cuenta de lo que planeaba su amigo, toda esa felicidad al irse sin él- ese traidor- susurró con los ojos entrecerrados levantándose y tirando el mando al piso- ¿Crees que llego a tiempo antes de que parta el bus?

-Espera, espera, espera -le detuvo Wilson- ¿Qué pasó con todo eso de "los museos no son lo mío"?

-Bueno... las cosas cambian.

N/A: Okey, a partir de la próxima actualizaré todos los Sábado, como actualizo todas las semanas, dejo un día claro.🙊

❤️Espero que les haya gustado, enserio, amo escribir esta historia y amo cuando a ustedes les gusta!
lo siento si esque hay errores o algo, leo el cap como tres veces antes de subirlo justo por ello, pero estoy intentando arreglarlo.

En fin, me despido y muchas gracias a todos los que leen, votan y comentan.